Re: [Libre] ¡Feliz Navidad 2013!
Publicado: Mar Ene 14, 2014 2:41 am
Imaginaba cualquier cosa proveniente de aquel regalo, desde una simple carta a una poción u otro objeto ordinario, mas fue tal mi sorpresa cuando de pronto... ¡Un puño salió de la caja, golpeando mi rostro y dándome un fuerte susto!
—¡Aaah! ¡¿Pero qué mi-?! —Me llevé las manos al rostro, dolorida
Solté mil y unas palabrotas, maldije a Ronin con toda mi alma y cansada de aquel sinsentido, le di una fuerte patada a la caja del regalo con toda mi rabia, deseando que se perdiese en el vacío para siempre. Rodeé mi puño de las sombras que eclipsaban mi corazón con odio, y la disparé al regalo que se encontraba en pleno vuelo, pero falló.
—¡Qué te den, Ronin! ¡Pero bien fuerte!
Harta y desquiciada me fui de las Terrazas con el perfume que había aparecido de la nada (o eso pensaba yo), deseando que Ronin no se encontrara conmigo durante una temporada si no quería saber lo que era bueno.
* * *
Gengar por su parte emergió del suelo, agarró la caja y con una sonrisita siniestra, se la llevó; quién sabe lo que tenía pensado hacer aquel diablillo con un regalo de tales características, sólo él lo sabía.
Y con aquel regalo sorpresa, esas Navidades en Bastión Hueco daban a su fin.
—¡Aaah! ¡¿Pero qué mi-?! —Me llevé las manos al rostro, dolorida
Solté mil y unas palabrotas, maldije a Ronin con toda mi alma y cansada de aquel sinsentido, le di una fuerte patada a la caja del regalo con toda mi rabia, deseando que se perdiese en el vacío para siempre. Rodeé mi puño de las sombras que eclipsaban mi corazón con odio, y la disparé al regalo que se encontraba en pleno vuelo, pero falló.
—¡Qué te den, Ronin! ¡Pero bien fuerte!
Harta y desquiciada me fui de las Terrazas con el perfume que había aparecido de la nada (o eso pensaba yo), deseando que Ronin no se encontrara conmigo durante una temporada si no quería saber lo que era bueno.
Gengar por su parte emergió del suelo, agarró la caja y con una sonrisita siniestra, se la llevó; quién sabe lo que tenía pensado hacer aquel diablillo con un regalo de tales características, sólo él lo sabía.
Y con aquel regalo sorpresa, esas Navidades en Bastión Hueco daban a su fin.