[Villa Crepúsculo] Viene de familia

Prólogo II de Bond

Si ya has creado tu ficha, pásate por aquí para escribir la primera página de ese gran libro que va a ser tu vida. O échale un vistazo a los amigos y rivales con los que te encontrarás en un futuro.

Moderadores: Suzume Mizuno, Denna, Astro

Re: [Villa Crepúsculo] Viene de familia

Notapor Zee » Sab Sep 27, 2014 6:05 pm

Keiko se estaba muriendo desangrada; no había manera de ponerse de pie y lanzarse contra su oponente, por más fuerza de voluntad que pusiera en ello. Los anteriores ataques de Hikaru la habían dejado destrozada: tendría suerte si era capaz de arrastrarse lejos de allí. Incluso conociendo la naturaleza de aquel mundo, una ilusión, una pesadilla, no pudo deshacerse de las heridas ni ignorar la incapacidad que le provocaban.

Así que puso todo su empeño en lanzarle la Llave a su hermano, directamente hacia la cabeza, esperando dejarlo inconsciente. Débil como se encontraba, le costó trabajo alzar su brazo, pero descubrió que el arma ya no le pesaba tanto. Lo llevó hacia atrás, preparando el golpe y acumulando su fuerza en sus débiles y cansados músculos... y sintió una extraña calidez recorriendo sus venas, una tibieza que ascendió por su brazo y llegó hasta su pecho.

De pronto, se sintió esperanzada.

La chica no tenía puntería suficiente como para arrojarle un arma a la cabeza. Y sin embargo... lo hizo. Aquella extraña arma en forma de Llave brilló como si estuviese hecha de polvo de estrellas, dejando una estela detrás de sí mientras surcaba el aire en cámara lenta. Hikaru vino el ataque venir y, poseído por una nueva fuerza producto de la nueva amenaza, logró sacar su garra de la tierra.

Bloqueó la Llave sin esfuerzo. Ésta rebotó hacia arriba, giró en las alturas por unos segundos y luego se precipitó hacia una de las esculturas, en la cual se quedó enganchada.

Keiko había fallado.

Los ojos de Hikaru brillaron con más intensidad que nunca. Adoptaron un tinte un poco más anaranjado, como el del Crepúsculo, como si su amarillo se hubiera mezclado con el rojo de la sangre. Su ceño no estaba fruncido ni sus labios apretados en una mueca, pero no necesitaba ninguna expresión humana para denotar su ira.

Furioso.

Se acercó a la chica y la volvió a levantar con brusquedad, usando la misma garra con la que había bloqueado el ataque. Llevó la otra hacia atrás, que ya había adoptado la misma forma esquelética y se preparó para atravesarla de lado a lado una vez más. Y esta vez de manera definitiva, en el pecho.

¿No mencioné lo más divertido de las ilusiones?

Hikaru se detuvo por unos instantes, dejando a la niña de la mansión hablar. ¿Se había Keiko olvidado de que ella estaba allí, observando la pelea, sentada encima de uno de los adornos del jardín? Tal vez si se hubiera concentrado en ella en lugar de su hermano, las cosas habrían sido diferentes...

Todo en el universo se trata de fe, niña. Si tu mente lo cree con suficiente fuerza, puede hacerlo realidad.

La muchacha rió; una risa clara y con un timbre brillante, agradable... A Keiko le sonaría sádica y espeluznante, debido al contexto en el que se hallaban. ¿Cómo podía reír cuando ella estaba a punto de ser asesinada por un monstruo que asimilaba a su hermano?

Puedes morir en sueños.

Como si le hubiera dado una orden inaudible, Hikaru asestó el golpe final.

...pero la garra nunca atravesó la carne de Keiko. En su lugar, se quedó enganchada en una empuñadura dorada.

La muchacha tenía, inexplicablemente, el arma de vuelta en su mano. La sostenía al revés, por la punta, lo cual le había permitido obstaculizar el golpe de su hermano. E incluso con su debilidad, fue capaz de detener toda la fuerza que el monstruo le había puesto a su ataque. A su alrededor, volaban puntitos de luz, diminutas estrellas. El brazo de Hikaru comenzó a llenarse de grietas de color violeta y pequeños trozos de "tinta" negra empezaron a caer al suelo. Su garra amenazaba con resquebrajarse.

Los ojos de la copia se abrieron, mostrando finalmente un atisbo de emoción.

¿Asombro?

No. Miedo.

Keiko escuchó a lo lejos un "¡Qué!" pronunciado por la voz chillona de la chica.

Nadie se lo esperaba. Tenía el factor sorpresa. Aquella era su última oportunidad.
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Re: [Villa Crepúsculo] Viene de familia

Notapor James Bond » Sab Oct 04, 2014 5:43 pm

Keiko no logró ponerse en pie, las fuerzas le fallaban y tampoco estaba en su mejor momento físico para hacer un esfuerzo semejante. Parecía que su plan iba a fallar hiciera lo que hiciera.

Aún así, y de algún modo, logró lanzar su arma a la cabeza de la copia barata de su hermano pequeño. Aunque antes había sentido algo extraño. ¿Era ella, o aquella gran llave no pesaba tanto como antes? Y no solo eso, notó una extraña calidez recorriendo su cuerpo y llenándola de esperanza. Se sentía como si pudiera lograr su objetivo...

Pero no lo hizo, el arma giraba muy lentamente en el aire y su trayectoria fue predecible para su enemigo, el cual bloqueó la llave sin el más mínimo esfuerzo ocasionando que esta rebotara y se quedara clavada en una de las esculturas que había en el patio de entrada de la mansión. Su última oportunidad y la había desperdiciado...

Lágrimas salieron de los ojos de la chica, la cual aceptó que aquel era su final. Iba a morir rápidamente, aunque no sabía si sería con sufrimiento o no. Se sintió estúpida por seguir a aquella extraña chica de blanca piel. Si lo hubiera sabido la hubiera ignorado... Pero no. Tenía que seguirla, tenía que averiguar quien era esa desconocida a la que nunca había visto por la Villa. Ahí tenía el resultado de su acción.

"Soy una idiota... Papá... Mamá... Hermanito... Lo siento..."

¿No te mencioné lo más divertido de las ilusiones?— Interrumpió de pronto la desconocida.

"¿Y qué importa eso ahora?." Se preguntó Keiko, iba a morirse, ¿qué sentido tenía decir algo así en un momento como aquel?

Todo en el universo se trata de fe, niña. SI tu mente lo cree con suficiente fuerza, puede hacerse realidad.

La de pelo moreno empezó a reír de forma cruel tras decir eso. ¿Estaba tratando de decirle que se encontraba como estaba, por que era débil de fe? Sin embargo, añadió algo más.

Puedes morir en sueños.

Cuando se dio cuenta de que era lo que aquella extraña quería decir, ya era demasiado tarde. La copia de su hermano se dispuso a asestarle el golpe final. Ahora que sabía lo que tenía que hacer... No iba a poder contra-atacar siquiera...

Y como si la hubieran escuchado, se le concedió una segunda oportunidad. Comprobó que aún seguía y que aquel ser que imitaba la figura de Hikaru parecía tener miedo de algo. Keiko, no sabía ni como ni por que, pero el arma que hasta hace un rato había estado clavada en una de las esculturas del jardín, había ido a parar a su mano, solo que la sostenía del revés.

Así que había sido el mango de la Llave el que había detenido el ataque que sin duda alguna hubiera sido letal para la estudiante de Villa Crepúsculo, y esta pudo observar como el brazo de aquel farsante empezaba a resquebrajarse. Tenía que mentalizarse...

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Si lo que aquella tipa había dicho era verdad, tenía que creer en que tenía la fuerza suficiente como para acabar con aquel impostor de un único y definitivo ataque. No solo eso, además tenía que ignorar el dolor y el cansancio de su cuerpo, como si no existieran. Miró fijamente a los ojos dorados de su adversario, lanzándole una mirada desafiante y combativa.

¿Sabes? ¡Puedes parecerte físicamente a mi hermano! ¡Pero te diré algo!

Keiko usó toda su determinación, sentía confianza en sí misma, estaba segura de que podía acabar de una vez por todas aquella batalla. Usó toda la fuerza que pudo acumular para dirigir la hoja de la llave hacia el corazón de la criatura.

¡No eres, ni por asomo, mi hermano pequeño Hikaru!

Keiko empujaría hacia el corazón la hoja de la llave, con claras intenciones de atravesarlo. De ninguna manera, ni tan siquiera por la más baja de todas las probabilidades, iba a perder ante un impostor.

¡Muérete de una vez!
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Re: [Villa Crepúsculo] Viene de familia

Notapor Zee » Lun Oct 20, 2014 10:55 pm

El arma que Keiko empuñaba fue incapaz de atravesar el pecho del Hikaru Sombrío. La pobre chica, herida, agonizante y débil, simplemente no tenía la fuerza suficiente como para acabar con su enemigo de una manera tan... drástica. El punta de la espada, el extremo romo, simplemente tocó el tórxa de Hikaru, pero apenas cargaba con energía suficiente como para empujarlo media pulgada.

Las circunstancias no eran las adecuadas para hacer esa clase de decisiones.

Y sin embargo, Keiko aun así ganó.

Seguro, la espada no tenía ningún filo en su punta y Kei no había tenido energía suficiente para atravesar a Hikaru, pero había visto ya que el contacto con el arma había tenido desastrosas consecuencias en la envoltura de oscuridad que cubría las extremidades de Hikaru. El extraño fluido, que todavía no quedaba claro si era tinta o algo más (porque se retorcía y latía como si estuviera vivo pese a que mantenía una rigidez y forma constantes), parecía emanar justo del corazón del muchacho...

...y fue justo allí donde Kei apuntó. Ahora, si hubiera usado su espada común, o el tonto paraguas con el que había cargado, seguramente no se habría salido con la suya. Pero el arma con la cual su hermano la había retado parecía tener algo especial... en cuanto hizo contacto con la piel ennegrecida del joven, la punta empezó a despedir un cálido brillo y algunos leves destellos, incluso chispas. La envoltura de tinta empezó a sisear, como algo que se achicharra bajo un contacto caliente, y empezó a retroceder como unas raices creciendo a la inversa: pequeños tentáculos se destejieron y se deslizaron hasta el pecho de Hikaru, donde confluyeron en un pequeño orbe negro.

Entonces los dos gritaron. Tanto el chico, que en ese momento soltó finalmente a su hermana, como el ser de tinta, que seguía pegado al pecho de su anfitrión, mas ahora malherido. La voz del primero se vio acompañada por un alarido agudo y envolvente, casi como un rechinido metálico.

Mientras, el arma de Hikaru seguía en la mano de Keiko, todavía despidiendo luz, como si estuviese respondiendo a aquella oscuridad.

Y luego, simplemente... desaparecieron. Los gritos se detuvieron en un instante y la copia se derrumbó al suelo en un charco negro de tinta. No se movió. No volvió a hacer ningún ruido. Ni una pequeña onda se levantó en su superficie. Se había terminado.

Una fuerza invisible tiró de la mano de Keiko. La llave que todavía empuñaba se levantó en el aire, como si tuviera consciencia propia, y apuntó en dirección a los remanentes de tinta.

Keiko se levantaría tarde o temprano, pues no había nada más que hacer (la otra chica no la encontraría por ningún sitio, por más que buscara) y el arma seguiría tirando de su brazo en todo momento, impidiéndole moverse a algún otro sitio e incluso soltarla.

Cuando se acercara a la superficie del charco, vería que había algo escrito en ella, pequeños trazos que despedían la misma luz blanca que su arma contrastaban la tinta negra:

Demuéstranos que eres digna.

Las letras se movieron en cuanto terminó de leerlas.

Un momento, ¿podía leerlas? ¿Pero no era imposible leer en sueños...?

Si pudieras luchar contra la oscuridad, ¿lo harías?

Si pudieras defender el equilibrio, ¿lo harías?

Si pudieras salvar las almas de la luz, ¿lo harías?

Si pudieses blandirla... ¿lo harías?


Esta vez las no se movieron. Esperaban una respuesta.
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Re: [Villa Crepúsculo] Viene de familia

Notapor James Bond » Mar Oct 21, 2014 12:18 pm

Parecía que aquel día, todos los astros se habían conjurado para que todo le saliera mal a Keiko. Su plan de atravesar el pecho del Hikaru oscuro no dio resultado, básicamente, por que no disponía de la fuerza suficiente. Lo más que pudo hacer fue que la punta del arma tocara el tórax de su enemigo.

Pero de algún modo, logró que el arma simplemente hiciera contacto con el corazón de su rival. Aunque no sabía a ciencia cierta si aquella cosa tenía corazón. Lo que era seguro, es que aquella extraña arma parecía tener efectos dolorosos contra él.

Y como si estuviera viva, aquella especie de tinta negra gritó junto al ser que imitaba a su hermano pequeño. Gritaba de dolor, como si le hubiera hecho mucho daño. A su vez, aquella llave seguía desprendiendo luz hasta que finalmente desaparecieron sus rivales.

¡Lo había logrado! Había logrado ganar a aquel ser después de tanto esfuerzo. Había quedado agotada, pero Keiko pensó que había merecido la pena. No pudo evitar soltar un grito, después de todo, la joven sufrió para lograr su objetivo.

Luego miró alrededor. No había absolutamente nadie a su alrededor. Ni siquiera aquella extraña chica de piel blanca a la que había estado siguiendo. Era algo realmente extraño, pero más extraño fue aún cuando el arma que empuñaba empezó a elevarse por sí sola, arrastrando el brazo de Keiko también.

Torpemente, la muchacha se levantó. Esperaba que no hubiera ningún ataque por sorpresa, puesto que no estaba en condiciones de pelear, necesitaba descansar.

Entonces, algo apareció escrito en la hoja de la espada. Le decía que le demostrara que era digna. ¿Digna de qué? ¿A qué podía referirse? Más letras siguieron apareciendo.

Primero, le preguntaron que si aprovecharía, de tenerla, la oportunidad para luchar contra la oscuridad. ¿Acaso no acababa de enfrentarse a la propia oscuridad?

Luego vio algo de defender el equilibrio. Equilibrio... ¿Podía referirse al famoso equilibrio de Luz y Oscuridad que tan tópico era en las películas de ciencia ficción y de fantasía?

Lo siguiente fue algo de salvar las almas de la luz, no sabía a que se refería, pero parecía ser algo importante si lo preguntaba.

Por último, le preguntaron si de poder blandirla, lo haría. ¿Blandir el qué? ¿La Luz? ¿El arma que llevaba? Si era eso último ya lo estaba haciendo.

La muchacha no se lo pensó dos veces. Asintió a todas aquellas preguntas, preparada para lo que viniera a continuación...
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Re: [Villa Crepúsculo] Viene de familia

Notapor Zee » Mié Oct 22, 2014 9:27 pm

En tu mano esta Llave tomarás... —Las palabras cambiaron en cuanto la joven asintió con la cabeza. Esta vez se transformaron, de una tipografía de molde, a un manuscrito apretado y elegante, entintado por un ligero color violeta.

Y así, mientras tu corazón pueda empuñarla, por el noble acto de aceptarla, su Portador algún día serás.

La espada tiró de Keiko sin previo aviso, jalándola hasta el borde del charco, donde perdió irremediablemente el equilibrio.

Cayó dentro y se hundió en una profunda oscuridad.

***


Despertó en el mismo lugar donde había caído: en la entrada de la mansión, allí donde se había encontrado con la extraña chica que también la había molestado en sueños. La escena era casi la misma que la que había abandonado, excepto que esta vez se encontraba fuera de los jardines, en la entrada, y no había rastro alguno de que una pelea se hubiera llevado a cabo.

Estaba en el suelo, sobre el sendero que marcaba el inicio del bosque de la villa. El sol ya se había puesto, por lo que debía llevar allí al menos unas horas, y la atmósfera comenzaba a enfriar. Justo como en su sueño, había llovido, por lo que la joven se encontraba empapada hasta los huesos. Ya no caía más agua, sin embargo.

Eso lo notó posteriormente, puesto que lo primero que vio al despertar fue un rostro desconocido. Una joven se encontraba hincada a su lado, contemplándola con atención, como si hubiera sabido el momento preciso en el que habría de despertar.

Ho- Hola... Me llamo Rebecca y, esto... hablé contigo hace un momento.

La joven le ofreció apoyo para incorporarse.

¿Te encuentras bien...? Esa chica, um- Shinju, a veces sus juegos se pasan de la raya... mucho...
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Re: [Villa Crepúsculo] Viene de familia

Notapor James Bond » Mié Oct 22, 2014 10:52 pm

En tu mano esta Llave tomarás... Y así, mientras tu corazón pueda empuñarla, por el noble acto de aceptarla, su Portador algún día serás...

Aquellas enigmáticas palabras fue lo último que escuchó Keiko justo antes de ser arrastrada por una misteriosa fuerza hasta el charco de tinta que había dejado su rival. Como en su sueño, la muchacha cayó dentro de aquella cosa y se sumió en la oscuridad...



No supo cuanto tiempo había pasado, pero a la joven le parecieron horas. El caso, es que cuando abrió los ojos, se hallaba de nuevo frente a la entrada de la mansión. Sin embargo, no había ninguna estatua rota. Entonces, notó algo en su ropa. La encontraba muy pesada. Cuando le dio por mirar, comprobó con horror que estaba empapada. Iba a pillar un buen resfriado.

Entonces, fue cuando la vio: una chica de pelo largo moreno que cubría parte de su rostro, estaba ante ella. Llevaba lo que parecía ser un uniforme escolar, sin embargo, Keiko no recordaba haberlo visto en ninguna tienda de uniformes. ¿Sería acaso un disfraz?

Ho-Hola... Me llamo Rebecca y, esto... hablé contigo hace un momento.

Vale, por lo menos ya sabía el nombre de aquella desconocida, bueno, ya no era una desconocida en absoluto. Sin embargo, le dejó desconcertada eso de que había hablado con ella hace unos instantes, puesto que no tenía recuerdo alguno de dicha acción...

¿Te encuentras bien...?— le preguntó mientras le ofrecía ayuda para incorporarse, cosa que Keiko aceptó—. Esa chica, um- Shinju, a veces sus juegos se pasan de la raya... mucho...

¿Shinju? ¿Ese era el nombre de aquella chica de tan blanca piel y con un pájaro enorme a su lado? Pero la pregunta más importante de todas era: ¿de qué se conocían Rebecca y esa tal Shinju? Keiko tenía muchas preguntas que hacer, pero primero decidió de presentarte.

Encantada de conocerte, Rebecca. Soy Keiko Akarui... Y sí, estoy... bien, supongo...— no sabía si realmente estaba bien puesto que hasta hace poco estaba desangrándose—. Mmm... Me gustaría hacerte unas preguntas si no te importa... Esto... ¿De qué conoces a esa tal Shinju? ¿A qué te refieres con lo de que se pasa con sus juegos a veces? ¿Y cómo has hablado conmigo antes? No recuerdo de haberte visto antes... A todo esto... ¿De qué parte de la Villa eres?
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Re: [Villa Crepúsculo] Viene de familia

Notapor Zee » Dom Oct 26, 2014 7:42 pm

Lo primero que Keiko notó fue que la joven tenía cicatrices en la mitad derecha de su rostro. Su peinado las cubría parcialmente, pues como su oscuro cabello era largo y especialmente liso, se dejaba un amplio flequillo en ese lado. De tal manera que, gran parte del tiempo, sólo su ojo izquierdo era visible: un iris de color violeta grisáceo, algo que no se veía de forma frecuente ni en la Villa ni en ningún otro sitio.

Cuando la ayudó a levantarse al tomarla de sus manos, Keiko sintió dos texturas diferentes: la diestra de Rebecca también tenía quemaduras, por lo que la superficie se sentía irregular e impredecible, algo que no existía en la otra. No obstante, ambas se sentían suaves e hidratadas, como si la chica tuviera especial atención en cuidar de su piel.

Y sin embargo, su agarre no era el de una chica interesada sólo en hidratarse y ponerse mascarillas. Keiko lo reconocería, pues ella misma lo poseía también: era el de alguien que está acostumbrado a blandir un arma.

No llevaba puesto un uniforme escolar como Keiko pensaba; después de todo, el clima no era el indicado para ello. En cambio la joven portaba un amplio abrigo de color, entre café, entre gris, con todos los botones cerrados. Llevaba puestas gruesas medias de color negro y unas altas botas de color marrón, que por poco y le llegaban hasta la rodilla; además, se había cubierto el cuello con una bufanda roja.

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El interrogatorio de Keiko pareció confundir un poco a Rebecca, que de pronto se encontró con demasiadas preguntas alzadas de súbito. Apartó su mirada mientras se pensaba un poco las cosas, insegura de qué responder primero y qué responder después.

Intenté enviarte un mensaje en tu sueño... n-no sé cómo se haya manifestado. No tengo la misma afinidad que Shinju, pero... la mía me ayudó un poco a contactarte y... Bueno, tiene un talento para toquetear las mentes de los demás. Ella te metió en tu propia cabeza, sin considerar que... podrías haber muerto.

Hubo un silencio incómodo; y aquello sólo hizo aquellas palabras más pesadas.

¡Pero abriste un hueco por ti misma! Llevaba topándome con muros durante un buen rato hasta que... no lo sé, sólo Shinju y tú saben qué pasó allí —Su voz era tan suave y calmada que, de haber estado lloviendo todavía, Keiko habría tenido problemas para escucharla. La joven echó una mirada hacia la mansión que tenían al frente y luego al bosque—. No estaba aquí cuando llegué, pero... pero ella es... se supone que umm... los suyos son...

>>No quiero obligarla a luchar... E-Es... complicado.


Rebecca se cubrió la boca y la nariz con las manos para atrapar el amplio suspiro que dejó escapar después, a la par que cerraba sus ojos y parecía darse el lujo de relajarse un poco. Luego de unos segundos, la joven continuó:

Lo que importa aquí es que has aceptado mi... obsequio. Y eso te pone en contra de ella, eso nos hace... nos haría... sus enemigos.

Rebecca entendió que seguramente Keiko seguía sin entender lo que estaba sucediendo, por lo que aclaró:

La viste en sueños, es lo único que sé. La Llave-Espada. Es un arma de poder increíble y... yo soy una Maestra, yo enseño a nuevos portadores. No soy de la Villa, pero, um... vengo con frecuencia a buscar gente como tú. Hay una... guerra —Rebecca tragó saliva; parecía que esa palabra le había costado pronunciarla—. Tu Villa y muchos otros mundos —"Sí, mundos", aclaró con una sonrisa— no deben involucrarse, pero podrían sufrir... daños colaterales.

La joven miró hacia el cielo, como imaginándose aquellos incontables escenarios ajenos a la pequeña Villa de Keiko.

Porque los dos bandos tenemos un enemigo en común. La Oscuridad.
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Re: [Villa Crepúsculo] Viene de familia

Notapor James Bond » Dom Oct 26, 2014 11:09 pm

Aunque desde su posición en el suelo no podía ver bien el rostro de Rebecca, Keiko no tardó mucho en descubrir que aquella chica tenía cicatrices en su cara, pero hasta que no se levantó gracias a su ayuda no pudo verlas. Eso le recordó a su desaparecido hermano, el cual también tenía cicatrices.

Pero en el momento que tocó las manos de Rebecca, Kei notó como cada una tenía una textura distinta. En una parecía tener... ¿una quemadura? De nuevo, eso le recordó a Hikaru, quien también tenía una quemadura, pero en su mejilla. No pudo evitar preocuparse al notar aquello.

Otra cosa que también le llamó la atención a Keiko, era que aquella chica tenía las manos suaves. No sería raro, de no ser por que una chica normal no pondría tanto mimo en cuidar su piel. Sin duda alguna, Rebecca tenía algún tipo de experiencia con armas. Aunque también podía no serlo. En cualquier caso, no podía descartar esa posibilidad.

También, al verla mejor, se dio cuenta de que no llevaba uniforme escolar alguno. Quizá se le ocurrió que lo llevaba puesto por ser una chica joven, pero se equivocó por completo. Pero al menos, Rebecca contestó a sus preguntas.

Resultaba que Shinju poseía un extraño poder con el cual, metió a Keiko dentro de su propia mente, en la cual podía morir. Después de haberlo vivido en sus propias carnes, no podía hacer otra cosa que creerlo. Luego, oyó como decía que no quería obligarla a luchar, eso llamó mucho la atención de Kei, había despertado su curiosidad. ¿Luchar? ¿Contra qué? ¿Contra quién? También mencionó algo de un obsequio, que en un principio la joven no supo a que se refería, pero Rebecca se lo explicó.

La viste en sueños, es lo único que sé. La Llave-Espada.

¿Llave-Espada? ¿Aquella extraña llave gigante a que la copia barata de su hermano parecía temer? ¿Qué la hacía tan especial?

Es un arma de poder increíble y... yo soy una Maestra, yo enseño a nuevos portadores.— ¿Maestra? No parecía una Maestra en absoluto, o al menos, esa era la impresión que a Keiko le daba por el aspecto de Rebecca—. No soy de la Villa, pero, um... vengo con frecuencia a buscar gente como tú. Hay una... guerra. Tu Villa y muchos otros mundos no deben involucrarse, pero podrían sufrir... daños colaterales.

Espera un momento. Si según Rebecca, se pasaba viniendo a la Villa muy a menudo para reclutar a la gente... ¿Y si quizás...?

¡Un momento! Dices que sueles venir a buscar gente de la Villa para tu... grupo... o lo que quiera que seáis— Keiko dedujo que sería un grupo por que sino, no mandarían a nadie a buscar gente en otros sitios—. Por casualidad... ¿No te habrás llevado a mi hermano pequeño? ¿Hikaru Akarui?

Keiko escucharía la respuesta que Rebecca tuviera que darle, y una vez obtenida, tomó la decisión. Tanto si habían tenido algo que ver como si no con la desaparición de su hermano, aceptaría unirse a aquel grupo tan extraño y quizás acabase encontrándose con su hermanito.

Ya veo... Si este... "mundo", está en peligro... Yo no quiero quedarme al margen, quiero luchar, quiero protegerlo, aunque me cueste la vida, la daré con mucho gusto si con ello protejo mi hogar.

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Desconozco si es meta-game que Keiko le pregunte a Rebecca por su hermano desaparecido, pero creo que no debería haber ningún problema, puesto que la propia Rebecca le dice que frecuenta la Villa y que enseña a nuevos portadores, de ahí deduce que los recluta.
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Re: [Villa Crepúsculo] Viene de familia

Notapor Zee » Jue Nov 06, 2014 8:30 pm

Por casualidad... ¿No te habrás llevado a mi hermano pequeño? ¿Hikaru Akarui?

No necesitó mayor respuesta que la forma en la que Rebecca abrió sus ojos y se llevó la mano a la boca para intentar enmudecer un "Eres tú" que se le escapó de entre los labios. Se apresuró a darse la media vuelta, buscando alejarse de la mirada de Keiko para pensar lo que iba a decirle. Pero no era como si necesitara hacerlo, ¿no? Después de todo, aquellos gestos casi universales, el pesado silencio que cayó entre las dos, y esa sensación de incomodidad... eran suficiente.

Algo le había pasado a su hermano. Algo malo. Y Rebecca lo sabía, mas no encontraba la forma correcta de decirlo.

Y-yo... ah... lo siento muchísimo —la joven extranjera tomó una gran bocanada de aire y se volvió a girar en dirección a Keiko. Intentó clavar su mirada en ella, pero algo no la dejaba: siempre terminaba por caer al suelo antes de que volviera a intentarlo de nuevo—. Tu hermano sí era uno de los nuestros... Estuvo a mi cargo... y...

Una vez más, la joven tuvo que cubrirse la boca con las manos para que su respiración no destacara tanto.

Lo siento mucho. Tu hermano está perdido.

La frase fue concisa, tal vez demasiado. Pero si Keiko era lo suficientemente empática, sabría que había sido de aquella manera porque a la "maestra" también le dolía. O se sentía culpable, alguna de las dos. Y a veces es mejor acabar con las cosas dolorosas tan pronto como sea posible.

No ha regresado y... uno de sus compañeros cree que le vio...

Rebecca se agitó en su sitio. Todo lo que había dicho le había costado horrores pronunciarlo... mas incluso así, nunca fue capaz de terminar esa frase. Esa palabra en particular ya era demasiado.

Pero... no nos rendimos. Viajamos de mundo en mundo y... y aunque desgraciadamente no podemos dedicar un grupo de rescate... todos estamos siempre atentos por si... aparece.

Y una vez más, el silencio cayó entre las dos. Ya no había más que decir. A menos, claro, que Keiko quisiera preguntar. Parecía que ni siquiera Rebecca sabía con claridad en qué situación se encontraba el hermano de la chica, pero su desaparición definitivamente significaba algo para ella. ¿Era la única que se preocupaba, sin embargo? ¿Y cómo era eso de que no podían dedicarse a buscarlo de forma activa? ¿Les faltaba gente o era que Hikaru no era valioso?

Ya veo... Si este... "mundo", está en peligro... Yo no quiero quedarme al margen, quiero luchar, quiero protegerlo, aunque me cueste la vida, la daré con mucho gusto si con ello protejo mi hogar.

Rebecca sonrió, pero de forma sombría y melancólica. Se acercó a la chica y le puso una mano en el hombro, aunque no fue capaz de sostenerle la mirada (otra vez).

Con Shinju y con... —tragó saliva— lo que acabo de decirte, tienes mucho en la cabeza... Así que, Keiko, ¿por qué... por qué no vas a casa? No quiero que tomes una decisión... apresurada.

>>Discútelo con tus padres o con la almohada. ¡A-ah, pero...! Tiene que ser un secreto, por eso Hikaru no pudo decir nada al respecto. S-Sólo... piénsalo.

>>Estaré frente a la estación mañana a las diez... esperando...


Rebecca le sonrió por última vez antes de despedirla con la mano. La joven Maestra no se movió de su sitio, por lo que era Keiko la que debía irse primero en caso de que así quisiera hacerlo. Todavía quedaban cosas por discutir, pero tal vez era una mejor idea que las aplazaran para el día siguiente.
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Re: [Villa Crepúsculo] Viene de familia

Notapor James Bond » Dom Nov 09, 2014 4:16 pm

El silencio de Rebecca fue toda la respuesta que obtuvo Keiko por parte de esta. Y fue lo que le bastó para comprender que ella y su hermano tenían algún tipo de relación, puesto que Rebecca trató de evitar responderle, pero al final no le quedó más remedio que hablar.

Y-Yo… ah… lo siento muchísimo...— Rebecca trató de mirar a la joven Keiko a los ojos, pero le era imposible, antes de llegar siquiera a coincidir, su mirada se dirigía automáticamente al suelo—. Tu hermano sí era uno de los nuestros… Estuvo a mi cargo… y…

Cuando Rebecca se llevó las manos a la boca, Keiko se preparó para lo peor.

Lo siento mucho. Tu hermano está perdido.

¿Perdido? ¿Cómo que perdido? ¿Qué quería decir con eso? ¿Se había extraviado en algún sitio? ¿O se refería a que…? No, no podía ser. Su hermano no podía estar muerto, de ninguna forma. Vale que era muy impulsivo y se lanzaba a hacer algo sin pensárselo dos veces, pero no podía haber actuado de ninguna forma que le costase la vida.

No puede… No puede ser, por favor…
No ha regresado y… uno de sus compañeros cree que le vio…

Keiko sintió que se le apretaba la garganta. Lágrimas empezaron a brotarle de sus ojos y su respiración se hizo más lenta, como la de alguien a punto de morir.

Pero… no nos rendimos. Viajamos de mundo en mundo y… aunque desgraciadamente no podemos dedicar un grupo de rescate… todos estamos atentos por si… aparece.

Keiko rompió a llorar. Lloró durante un buen rato. Aquello era peor de lo que podía haber imaginado. Su hermano desaparecido en algún lugar, y ni siquiera su propio grupo iba a buscarlo. ¿Es que acaso Hikaru no era importante para ellos? Vale que a veces resultara un poco idiota, tonto y demás, pero aún así seguía siendo una persona. ¿Por qué ni siquiera hacían un grupo de tres personas para ir a buscarlo y traerlo de vuelta?

Cuando Keiko notó que dejaron de salirle lágrimas, se recompuso y se limpió la cara con la manga del uniforme, para a continuación dirigirse a Rebecca. Había tomado una decisión. Si ellos no se iban a molestar en buscar a su hermano, ella se encargaría.

Ya veo… Si este… “mundo”, está en peligro… Yo no quiero quedarme al margen, quiero luchar, quiero protegerlo, aunque me cueste la vida, la daré con mucho gusto si con ello protejo mi hogar“y encuentro a Hikaru ya de paso…”

Rebecca se acercó a Keiko y posó una mano sobre el hombro de la la estudiante, aunque al igual que la vez anterior, no fue capaz de dirigirle la mirada.

Con Shinju y con… lo que acabo de decirte, tienes mucho en la cabeza… Así que, Keiko, ¿por qué... no vas a casa? No quiero que tomes una decisión… apresurada.

>>Discútelo con tus padres, o con la almohada. ¡A-Ah, pero…! Tiene que ser un secreto, por eso Hikaru no pudo decir nada al respecto. S-Sólo piénsalo.

>>Estaré frente a la estación mañana a las diez… esperando…

Eso fue lo último que dijo Rebecca, pero lejos de irse se quedó en el mismo sitio. Como invitando a Keiko a que se fuera. La joven suspiró, y no le quedó más remedio que irse de donde estaba. Mientras pensaba que hacer, recordó el día en el que su hermano se fue. Entró por la puerta diciendo que le habían dado una beca en un colegio extranjero, aunque su madre no se lo creyó obviamente, puesto que Hikaru no era ningún cerebrito en los estudios.

Tampoco quería dormirse, ya que seguramente tendría de nuevo aquel sueño extraño que llevaba tiempo teniendo. O a lo mejor ya no lo tenía, puesto que sabía que Hikaru estaba en paradero desconocido y eso era lo que su sueño trataba de decirle cuando la oscuridad se lo tragaba. Cuando se dió cuenta, estaba pasando al lado del dojo donde practicaba y entrenaba la esgrima. Quizá podía confiárselo a su sensei, puesto que mencionó en una ocasión que venía de muy lejos. Pero eso no le aseguraba de que él viniera de otro “mundo” como dijo Rebecca. ¿Qué podía hacer?

Akarui-san, ¿por qué no has acudido hoy a clase?— preguntó en ese momento una voz de hombre adulto.

Keiko se giró hacia el origen de la voz, y era ni más ni menos que Tatsumi-sensei, su profesor de esgrima, el cual estaba a punto de cerrar el dojo con llave.

Lo siento, Tatsumi-sensei pero… me entretuve en el camino y cuando me di cuenta… ya era muy tarde.
Akarui-san, entra por favor.

Keiko siguió a Tatsumi al interior del dojo. Era una gran habitación rectangular de madera, ocupada en su mayoría por un tatami blanco, y a lo largo de las paredes habían varias estanterías pequeñas en las cuales reposaban desde espadas de bambú hasta katanas de práctica, cuya única diferencia con las reales era la ausencia de filo.

Ambos se sentaron el centro del tatami, y tras estar un rato pensativo, Tatsumi volvió a hablar.

Akarui-san, será mejor que me digas la verdad— Keiko puso los ojos como platos, de algún modo, había captado la mentira que le había dicho.
Pues la verdad es que…

Keiko le comentó a Tatsumi todo lo que le había pasado, omitiendo nombres, desde su encuentro con aquella chica extraña (Shinju) hasta el enfrentamiento con la copia de su hermano y posterior diálogo con la extranjera (Rebecca). Tatsumi escuchó atentamente la historia que le contó la joven, asintiendo con la cabeza, sin interrumpirla en ningún momento. Una vez que Keiko le terminó de contar, él le respondió.

Eso lo simplifica todo, Akarui-san. Y comprendo que no quieras decírselo a tus padres. Como creo que ya comenté una vez, yo vengo de muy lejos. Pero no de la Villa, sino de otro mundo— Tatsumi sonrió al ver la cara de sorpresa que puso Keiko al escuchar esa revelación—. Cuando era algo más pequeño que tú, también vinieron a mi mundo a buscar adeptos, sin embargo, yo no tuve el potencial requerido. Así que me alegro de que uno de mis alumnos sea elegido para esta tarea. Tienes todo mi apoyo, y no te preocupes, yo me encargaré de mantener a raya a tus padres.
>De momento, lo único que puedo ofrecerte es mi espada, sé que no es mucho, pero me gustaría que la blandieras en tu lucha, y espero que con ella, logres encontrar a tu hermano perdido.

Tatsumi le ofreció a Keiko en ese momento una espada cuyo mango era azul marino con detalles dorados y cuya vaina era azul marina con detalles en dorado.

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Esta espada perteneció a mis antepasados, y fue portada en numerosas batallas. Dicen que tiene un increíble poder oculto, pero hasta la fecha no he sido capaz de descubrirlo.
Gracias, Tatsumi-sensei. Acepto con mucho gusto este regalo, y tu ayuda. Si logro encontrar a mi hermano, te lo haré saber.

Tatsumi sonrió y decidió de acompañar a Keiko hasta su casa. Una vez allí, habló con los padres de la muchacha. Les contó que iba a mandar a su hija a entrenar a otro dojo que tenía abierto lejos de la Villa. Aunque en un principio se opusieron, la dejaron marchar cuando Tatsumi les dijo que él se encargaría de que no le faltara lo básico. Así pues, Keiko pasó la última noche en su habitación sin que aquel extraño le asaltara. Por lo menos, pudo dormir perfectamente en esa ocasión.

Cuando despertó al día siguiente, hizo rápidamente la maleta. No iba a necesitar más su uniforme escolar, de modo que cogió unos simples pantalones vaqueros y una camiseta blanca, además de varias piezas de ropa interior, desodorante, algo de maquillaje… y la espada que le otorgó Tatsumi. Con todo eso en la maleta, se dirigió hacia la estación de tren lo más rápido que pudo. No quería que Rebecca pensara que era una chica impuntual.
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Re: [Villa Crepúsculo] Viene de familia

Notapor Zee » Mar Nov 11, 2014 10:29 pm

¡O-oh, estás aquí! Menudo alivio...

Rebecca la esperaba en la plaza frente a la estación. No en la puerta, sino en un rincón al lado de ésta, parcialmente oculto detrás de las escaleras y las columnas que sostenían la entrada. Llevaba puesta la misma ropa del día anterior, tal vez porque no era su intención pasar la noche allí, y no cargaba nada con ella salvo un sobre transparente que parecía ir medio lleno con documentos. Había estado recargada contra la pared, pero no había manera alguna de que Keiko pudiera saber cuánto tiempo llevaba allí esperando. Parecía que, si Kei era una chica puntual, Rebecca lo era todavía un poco más.

No estaba segura de si vendrías. ¿Lo... lo pensaste?

La respuesta era obvia. Kei llevaba consigo una maleta y una espada. Claramente era afirmativa.

Entonces... —la joven miró a su alrededor, como buscando a alguien. Cuando estuvo segura de que no había nadie observándolas, extendió su mano izquierda al frente, donde curvó los dedos como si estuviera sosteniendo algo invisible. Le dedicó una sonrisa cómplice a Keiko y luego, sin señal aparente por parte de la joven, hubo un potente destello de luz en sus manos. También hubo un retroceso, una fuerza salida de la nada que empujó la mano de la chica, como si hubiera disparado un arma.

Y luego la luz se disipó. Sin explicación alguna, ahora Rebecca sostenía entre sus dedos una espada.

Una espada en forma de Llave.

Era diferente a la que Kei había visto en sueños, pero la forma era inconfundible. La de Rebecca tenía un diseño más delgado y ligero, además de trazos curvos que terminaban en ángulos agudos y afilados a lo largo de toda el arma. Era violeta y rosada de aquí a allá, y brillaba mucho más que la que el Hikaru falso había utilizado.

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Por favor, sostén esto.

Eso fue lo único que Rebecca dijo antes de sostener su arma del revés y ofrecerle la empuñadura a Keiko.
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Re: [Villa Crepúsculo] Viene de familia

Notapor James Bond » Mié Nov 12, 2014 11:12 pm

Cuando Keiko llegó a la estación de tren, cargando con la maleta y la espada de Tatsumi-sensei, comprobó que Rebecca había llegado mucho antes que ella, o eso presuponía, pues ya estaba alli.

¡O-Oh, estás aquí! Menudo alivio…

Rebecca seguía igual que el día anterior, con la excepción de que esta vez tenía un sobre entre sus manos. Keiko no pudo evitar sentir curiosidad por dicho objeto, pero una vez más, suponía que no obtendría respuesta de Rebecca si le preguntaba por ello.

No estaba segura de si vendrías. ¿Lo… lo pensaste?

A la joven de pelo moreno le bastó ver como Keiko cargaba con su equipaje y un arma para comprobar que había tomado una decisión.

Por supuesto, lo he decidido, y no pienso echarme atrás.
Entonces…

Como si estuvieran cometiendo un acto delictivo, Rebecca miró por los alrededores, comprobándolo todo. Keiko se preguntó si todos los Maestros hacían eso cada vez que reclutaban a sus alumnos, o era algo de Rebecca. De cualquier forma, una vez la chica terminó de comprobar que todo estaba según como ella quería, le dirigió una sonrisa a Keiko, cosa que dejo a la muchacha sorprendida, pues recordaba que ni siquiera había sido capaz de mirarla a los ojos cuando habló el día anterior con ella.

De pronto, un rayo de luz surgió en la mano de la Maestra, provocando un retroceso como si hubiera disparado con un arma de fuego de gran calibre, como estaba acostumbrada a ver en sus videojuegos de guerra en el ordenador.

Y lo que acabó apareciendo como por arte de magia entre las manos de Rebecca, fue una gran llave con forma de espada. Pero era muy diferente a la que Keiko había usado en el enfrentamiento con su falso hermano y a la vista en su sueño.

Por favor, sostén esto— le pidió Rebecca ofreciéndole la empuñadura del arma.
No se parece en nada… digo, esta llave y la que vi en mi sueño. ¿Significa eso que hay distintos tipos de llaves? De ser así, ¿cómo se consiguen?— preguntó con curiosidad la joven mientras alargaba su mano izquierda para empuñar la llave de Rebecca.
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Re: [Villa Crepúsculo] Viene de familia

Notapor Zee » Lun Nov 17, 2014 10:41 pm

¿Significa eso que hay distintos tipos de llaves? De ser así, ¿cómo se consiguen?

Rebecca volvió a sonreírle gentilmente y, tendiendo su mano al frente para apuntar a la Llave, dijo con una pizca traviesa:

Ya verás.

Sin ninguna razón aparente, el arma en la mano de Keiko desapareció en un destello tan potente que hizo que su muñeca reculara un poco. Reapareció entre los dedos de Rebecca en sólo un instante, y la joven Maestra la sujetó como si lo estuviera esperando. Parecía, incluso, que el arma hubiera huido de la chica.

No te preocupes. Intenta llamarla de nuevo —explicó Rebecca, posando su mano libre sobre la que Kei todavía extendía. La acarició amistosamente, intentando animarla. Cuando la apartó, asintió con la cabeza, apremiando a que intentara lo que ella le decía—. La tuya propia acudirá cuando se lo pidas.

Dicho esto, retrocedió medio paso. Keiko tuvo que hacer lo que la Maestra le indicaba, así lo sentía. Su corazón de pronto se había llenado con una calidez indescriptible; con una chispa de esperanza que, creía, nunca se le terminaría. Si se concentraba, sentiría aquella misteriosa energía fluir desde su pecho, por sus venas, en dirección a su brazo... y sus dedos...

Cuando estuvo lista, un arma en forma de Llave, su arma, apareció con un destello. El mismo proceso que Rebecca había llevado a cabo se repitió en ella misma, aunque, como había predicho, hubo unas cuantas diferencias. Su arma no era igual a la de Rebecca; de hecho, se parecía a la que había visto en sueños. Tenía una silueta de llave todavía más pronunciada y era mucho menos ornamentada.

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Aunque... no había sido lo único diferente, ¿no?

Se llama Llave-Espada. Y es lo único que puede derrotar a la Oscuridad de los mundos. —Mientras la Maestra hablaba, iba rebuscando en los bolsillos internos de su abrigo—. Se les llama... Sincorazón y vienen- vienen en muchas formas. Pero sabrás cuando veas uno que... —la joven sacó una pequeña placa de metal de su abrigo— son la Oscuridad hecha bestia. Viva.

Le tendió el trozo de metal, con la completa intención de que lo tomara.

La Orden de Caballeros de la Llave-Espada lucha contra ellos. Y defiende la Luz. Por favor, colócate esto. Donde desees —pidió—. Es... lo que nos permite viajar entre los mundos. U-Una Armadura. La golpeas y...

Para ilustrarse, Rebecca se llevó una mano a una gargantilla que llevaba debajo de su bufanda. Le dio un suave golpecito con dos dedos y casi al instante hubo una chispa como respuesta. Pronto ésta se extendió como un velo de luz que la cubrió toda, idéntico al que aparecía junto con la Llave-Espada. La silueta empezó a crecer un poco, como cubriendo una nueva figura que a su vez cubría a la de Rebecca.

El espectáculo terminó con una explosión de luz. Cuando todo se disipó, quien quedaba allí, en realidad de una joven ataviada en un abrigo largo y cubierta por una bufanda, era una guerrera cubierta por una armadura brillante. Violeta, adornada por gemas, anillos dorados, y pequeñas alas en los tobillos... Keiko no sabría decir si era para protección o para exhibición.

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Lo siento, pero... te recuerdo que... —la voz de la chica se escuchaba algo distorsionada por el visor que cubría su rostro, pero aún así era perfectamente audible— estamos algo expuestas. ¡A-Así que hagamos esto rápido!

>>Tienes que llamar tu Glider, también. Tu arma también es tu tranporte.


Apresurándose un poco más, la Maestra sujetó su Llave-Espada con fuerza y echó el brazo hacia atrás. Sin explicarle muy bien a su nueva alumna lo que estaba haciendo, lanzó el arma al aire, donde giró varias veces debido al impulso que la joven le había impuesto. Llegó a la cima de su trayectoria y se quedó allí por unos instantes, todavía, girando... y luego hubo un nuevo destello.

Cuando la Llave cayó al suelo, ya no era más una Llave. Era, como la Maestra había dicho, un vehículo. En su caso, una pequeña motocicleta que parecía levitar un poco sobre el suelo, echando una leve corriente de aire y una apenas perceptible niebla de color violeta por debajo de sus ruedas, las cuales giraban un poco por cuenta propia.

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Hay mucho por hacer, ¿no...? —expresó la Maestra, cuando la chica hubiera hecho lo suyo propio—. ¿Tienes... alguna pregunta?
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Re: [Villa Crepúsculo] Viene de familia

Notapor James Bond » Mar Nov 18, 2014 11:20 pm

Ya verás— respondió Rebecca a la pregunta de Keiko con una sonrisita.

Tras eso, el arma de la Maestra desapareció de las manos de la joven y volvió a su dueña. Keiko se quedó un poco sorprendida, pues no había visto nunca hacer algo así. Ella también quería hacerlo, aunque le molestó un poco que le quitara el arma que supuestamente iba a usar.

Pensé que esa sería mi arma...— comentó una decepcionada Keiko.
No te preocupes. Intenta llamarla de nuevo— comentó Rebecca, acercándose a la estudiante para acariciarla, provocando que la chica se sonrojara un poco y se sintiera incómoda—. La tuya propia acudirá cuando se lo pidas.

Keiko asintió, y trató de imitar el mismo movimiento que hizo Rebecca para invocar esa llave tan bonita que tenía. Sin embargo, no apareció. Trató de hacerlo varias veces más, pero no lograba invocar nada, y empezó a ponerse nerviosa. ¿Qué pensaría la Maestra de ella? No era capaz de invocar siquiera su propia arma, seguro que en el colegio donde ella trabajaba, el resto de alumnos se reirían de ella.

Pero al séptimo intento, algo hizo acto de aparición en su mano izquierda. Unos rayitos dorados hicieron acto de presencia junto al destello dorado, los cuales se desvanecieron unos segundos después, para acabar comprobando, que tenía algo muy familiar entre sus dedos. Ese algo algo lo había visto en sus sueños, y lo había utilizado en el combate contra la copia de su hermano. Era una gran llave, pero lejos de tener el mismo color que en su lucha contra Hikaru, esta era de un color dorado, tirando a eléctrico. Casi podía sentir el poder.

Mola, pero… es muy fea— comentó la chiquilla.
Se llama Llave-Espada. Y es lo único que puede derrotar a la Oscuridad de los mundos. Se les llama Sincorazón y vienen- vienen en muchas formas. Pero sabrás cuando veas uno que… son la Oscuridad hecha bestia. Viva.

Rebecca le ofreció un trozo de metal a Keiko, mientras le continuó explicando el cometido principal de su grupo: los Caballeros de la Llave-Espada. Según ella, aquel trozo de metal era una Armadura, que le permitía viajar entre los mundos.

Entonces la Maestra le enseñó a Keiko cómo invocar su armadura. Tras un pequeño espectáculo de luces, Rebecca lucía una armadura de color violeta muy brillante, con gemas, toques dorados y hasta un par de alas en los tobillos. Aquello parecía sacado de una serie de chicas mágicas.

¡Impresionante!— dijo una muy impresionada Keiko, mirando a la Maestra con ojos brillantes—. ¡Yo también quiero una como esa! ¡Bien! Así que solo tengo que ponerme esto, ¿no?

Keiko se colocó el trozo de armadura en la muñeca de su brazo derecho y lo alzó hacia arriba.

Siento mucho esto… pero llevo mucho tiempo queriéndolo hacer— advirtió Keiko a Rebecca antes de sonreír como una niña que estrenaba juguetes nuevos—. ¡Transformación!

Notó como una cálida luz envolvía todo su cuerpo mientras el metal empezaba a extenderse y tomar forma por el cuerpo de la joven. Tras unos segundos, su cuerpo quedó cubierto por una armadura dorada con toques azules y una capa roja, además de un casco dorado a juego.

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Tienes que llamar tu Glider, también. Tu arma también es tu transporte.

Rebecca lanzó su Llave-Espada al aire la cual se quedó durante unos segundos alli arriba y cuando descendió, una moto morada apareció en su lugar.

¡Wow, sí que hace cosas la Llave-Espada!

Keiko se había quedado muy asombrada. Si la Llave-Espada podía transformarse en un vehículo… ¿qué más cosas podía hacer? Se preguntó si sería capaz de hacerle un pastelito de chocolate. Pero no había tiempo que perder. La muchacha lanzó su arma al aire, expectante.

Cuando su arma descendió del cielo volvió con una forma muy distinta al vehículo de Rebecca. Si bien el de Rebecca era una moto violeta, este parecía ser una especie de aeroplano dorado con un trono en medio de este.

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¡Genial! ¡Me encanta!
Hay mucho por hacer, ¿no…? ¿Tienes… alguna pregunta?— Keiko negó con la cabeza.
Creo que es mejor que dejemos eso para después, ¿no, Maestra?— respondió Kei sin dejar de mirar asombrada a su Glider.

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Ya sé que debe de ser una armadura completa con su casco, pero no encuentro en Google imágenes una imagen del casco que vaya a juego con la armadura, así que solo lo describo. Espero que no importe, puesto que no se suelen relatar mucho los viajes entre el inserticio.
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Re: [Villa Crepúsculo] Viene de familia

Notapor Zee » Sab Nov 29, 2014 3:30 am

El sol brilló con fuerza por primera vez aquel día. Las noches de tormenta se habían disipado, lo cual era bastante apropiado: Keiko no volvería a ver el mismo cielo en muchísimo tiempo. La Maestra Rebecca le dio algunas indicaciones simples y pronto las dos se levantaron en el aire sobre sus vehículos. Al cabo de unos segundos sobrevolaban la ciudad; tan alto que apenas distinguían a las personas en la lejanía.

Era la primera vez que veía la Torre de Reloj desde arriba. Desde abajo, todo era demasiado grande como para realmente poder prestarle atención; pero desde el cielo uno podía contemplar la villa entera en sólo un instante. Y entonces no tardaba más de un segundo en pensar:

Que la vista era simplemente hermosa.

Pero no podían quedarse a admirarla por mucho más. Tenían que partir. Keiko estaba a punto de iniciar su nueva vida, cargando con un legado que su hermano había dejado, aunque sin saberlo, para ella. Ahora ella también cargaba con un don que al parecer venía de familia.

Así que Rebecca y ella despegaron, lejos de Villa Crepúsculo, y desaparecieron en la infinidad.

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¡Prólogo terminado! Keiko está lista para iniciar sus aventuras como Portadora de la Llave-Espada.

Recibes 16 PX de los 20 posibles.

Tienes más problemas con la interpretación y con la toma de decisiones que con lo escrito. Al contrario que mucha gente, te falla más el aspecto de jugador que de escritor, y eso me parece bastante curioso. Al menos así lo he notado yo en este tema en particular; me parece que tienes problemas para desenvolver de manera apropiada a tu personaje y hacerla interactuar con las situaciones que se le presentan. ¿Tal vez tengas problemas para ponerte en los zapatos de tu personaje? Porque pasaba con Hikaru también, y eso a veces te lleva a tomar decisiones que chocan mucho y que pueden llegar a dificultar tu progreso en el tema (por ejemplo, intentar levantarte para rematar a tu oponente cuando bien podrías tener algunos huesos rotos y has perdido dos litros de sangre).

Pero también te voy a resaltar un fallo en particular que te veo al escribir. Las frases no conectan de la forma indicada. A veces es porque te limitas a describir lo que ocurre tal y como es ("Keiko hizo esto. Pero Hikaru no la dejó. Entonces hizo esto. Shinju rio. Eso le resultó molesto a Keiko") sin realmente darles una perspectiva que corresponda los pensamientos y sentimientos de tu personaje; que puede ser difícil en tercera persona, pero no imposible. Otras veces simplemente no existe un hilo entre las frases; y aunque tengan sentido en cuanto a lo que está ocurriendo, no hay armonía entre ellas. A veces ocurren las dos.

Creo que no debo decir nada más, aunque ello no te excusa de las usuales comas perdidas, tildes comidas y palabras repetidas. Pero nada que no sea perdonable.

Kei sube a Nivel 2 y recibe su Llave-Espada, Glider y Armadura.
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