Ragun y Fátima libraban su guerra personal ajena al resto de batallones. El primero no dudó en utilizar su peligrosísimo jamón ibérico para castigar a la muchacha con todo un mar de golpes, y ella contestó con una terrible lluvia de flanes y roscones gracias a Pegaso, que mancharon al aprendiz hasta dejarle más dulce que un cachorrito mono. Hubo una seria afectada más: Nicoxa, que había traumatizado a un pobre molusco mostrándole la espectacular comilona de mariscos en la mesa. Fue peor cuando Pegaso empujó la mesa y dejó que todo un plato de langostinos cocidos y deliciosos cayeran sobre la invocación, la cual se desmayó y desapareció al ser sepultado por cadáveres de sus viejos colegas. Y encima un roscón cayó sobre la cabeza de Nicoxa y se quedó atrapado en su cuello cual collarín.
Watson tampoco quedó ileso de ataques: Light cogió una deliciosa tarta de queso y cometió el mayor de los crímenes posibles clavándola en el rostro de su adversario para después huir como un cobarde con un hechizo de invisibilidad. Cosa que le fue inútil cuando un langostino vivo se lanzó a por él y clavó sus pinzas en el ojo derecho, dejándole casi tuerto. ¡El maldito Tristan, fuera quien fuese, estaba atacando a todo cristo! Daba igual que fueran de su bando o no, porque incluso Ragun se llevó un cangrejo vivo a sus partes nobles, el cual hizo de todo por intentar arrancárselo. Fátima y Alec también recibieron ataques gratuitos de los mariscos zombis, uno intentando picar los pechos de la mujer y el otro tomándola con el sombrero del mago. Nikolai probablemente intentara detenerle, pero el ataque que recibió él acabó dentro de su boca atacando a su lengua: ¡y no hablemos de la pobre Maya, que en su caso intentó estrangularla!
La venganza de la brujita no tardó en llegar. En cuanto pudo librarse del mal que la enajenaba tomó un rácimo de plátanos y se lanzó contra su agresor mientras le lanzaba los frutos y explotaban en su pecho al impactar con él. Sólo logró esquivar una de las pieles, la cual cayó al suelo y se encontró en soledad hasta que la defensa perfecta de Malik pasó por encima de él. El muchacho del desierto, que estaba atacando desde la distancia a Ragun, cayó de espaldas al suelo y el puré que llevaba aterrizó en su cara. Dolió menos que cuando su escudo impactó en su pecho con gran peso, casi partiéndole en dos.
En otra zona todo fue venganzas y revenganzas. Saito apoyó a Ragun en sus ataques contra Fátima, Saeko se vengó a su vez de Saito y un pringado y ya no invisible Alec atacó sin piedad al pobre e inocente Neru. Nikolai, para vengar a la pobre Fátima, pegó de tortas a Ragun por su lado. ¿Y Hana la ladrona? Inteligente muchacha: se largó sin atacar a nadie para ponerse a salvo en caso de que Higashizawa apareciese.
Entre todo aquel caos algo de orden se podía encontrar. Un pelotón de Bastión Hueco se había reunido para machacar a los impuros de Tierra de Partida, además de cubrirse las espaldas ellos mismos: Enok, Simbad, Freya y Renata eran el peligrosísimo Escuadrón Dónut. Maya, Neru y Light se llevaron terribles ataques por su parte, como un pollo que sirvió de nuevo sombrero a la brujita al encajarse en su cabeza; también una Nadhia que se pasaba para saludar se llevó una buena tortilla y se fue llorando de inmediato por culpa de Simbad. Tal crimen no podía quedar sin castigo, por lo que Neru tomó un látigo de chorizos en salsa de vino para atacar al escuadrón y provocó serias quemaduras en ellos... ¡Pero la paliza que le metieron después a tortas era otra historia!
Saxor encontró su propio lugar también. Mandó a un pequeño pelotón de niños a por Celeste y se encargó en persona de combatir contra Makoto y su rábano gigante, que como narrador me disculpó, no tenía un enemigo invisible sino uno gafapastas. Los niños perdidos y Guilmon no llegaron a tocar a Celeste más que con unos choricitos: la lluvia de flanes de Fátima se cruzó en su camino y retrocedieron con gritos de miedo mientras eran sepultados por la comida, devolviendo los chorizos a la nuca del pobre Saxor. Después desaparecieron ante tal cruel ataque.
—
¡¡Por la concha de María, basta ya, &X!#!!La batalla se detuvo de golpe. Las puertas del comedor se habían abierto de par en par para dar lugar a un enorme hombre gordo con una metralleta en la mano y dos duendes verdes con armas semejantes a modo de guardaespaldas. El viejo barbudo disparó contra el Pegaso de Fátima y la invocación desapareció mientras caía dolorido al suelo: sus gafas de sol y su puro cubano hablaban de lo cabreado que estaba el tipo.
—
¡Pero qué os pensáis, mentecatos! ¿Alguien me ha preguntado lo que pasa? ¿¡Alguien sabe qué &X!# es la Navidad!? ¡Bah! —Cogió el puro y lo lanzó hasta los pies de los aprendices—
. ¡No tenéis ni idea de lo que es el espíritu navideño!El gran hombre avanzó por la sala con su arma en alto y una bolsa llena de regalos a su espalda. Una vez se situó en el centro dejó caer esta y la pisó con su enorme pie, como si de una montañita se tratase.
—
¡A ver si os enteráis, inútiles! Yo invité a Tierra de Partida a Bastión Hueco. Yo no os dejé regalos porque sólo deseáis guerra aunque tengáis los &X!# de decir que de ninguna manera, hipócritas. ¡Si os lo pasáis en grande pegando a otros! ¡Y que lance la primera piedra el listillo que no haya participado en esta guerra ahora mismo! —Apuntó con la metralleta a la Hana invisible antes de que dijera nada por inocente—
. ¡¡Tú estate calladita!!Santa Claus apretó los dientes y gruñó, furioso. Tomó un regalo de la bolsa y se acercó a ti, aprendiz barra Maestra. Te observó de arriba abajo y te empujó el ombligo con su metralleta, animándote a hablar.
—
A ver, tú. Tú pareces tener la clave de esto. Contéstame: ¿cuál es el propósito de la Navidad?¿Era de los discursitos que tanto amaban los miembros de la Orden?
Fecha límite: sábado, 16 de enero.
¡Última ronda "obligatoria"! ¡Los regalos se reparten en el siguiente post! Y la pregunta os la hace a todos, no al primero que conteste.