[Evento Global] El Principio del Fin

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Moderadores: Suzume Mizuno, Denna, Astro

Re: [Evento Global] El Principio del Fin

Notapor Zodiark » Mié May 10, 2017 12:59 am

¡Dejadme!

Furiosa, empecé a agitar las piernas para patear a los monstruos y zafarme de ellos. Estaban intentando llevarse a Ukki, pero el mono gruñía y les golpeaba como podía para librarse también de ellos.

¡Simbad, no llegaremos muy lejos así! —exclamé al ver que el chico estaba perdiendo fuerzas y estabilidad en el vuelo.

Finalmente, acabó por aterrizar para recuperarse. No obstante, los malditos Sincorazón y Umbríos no cesaron su ataque, y ahora que estábamos en el suelo era incluso peor. Invoqué mi Pétalo de Hada y empecé a atacar a todos aquellos que se nos acercaban mientras agarraba a Ukki.

De nuevo en el aire, seguí combatiéndolos como pude. Pero, en cierto momento, un sonoro estruendo resonó por toda la oficina de correos, sobresaltándome y casi haciéndome caer de los brazos de Simbad.

¿Q-Qué demonios ha…? —miré a mi alrededor, confusa, y solo iluminada por la pequeña luz del caso de Ukki. En ese momento, me di cuenta de que las estructuras a nuestro alrededor se habían visto afectadas por el ruido—. ¡Cuidado, hay que salir de aquí!

Por suerte, Simbad logró alzar el vuelo lo suficiente como para llevarnos a los tres a un lugar seguro. Las cajas llenas de cartas comenzaron a caer, y los monstruos se vieron aplastados por ellas, al menos una gran mayoría. Eso me ayudó a respirar un poco más aliviada, aunque aquel ruido me seguía preocupando.

Para colmo, la sensación de incomodidad se fue incrementando. Ya no era solo el hecho de que se hubiera oído aquel estruendo, sino que además empezó a hacer frío, y la poca luz que teníamos me permitía ver algunas cosas extrañas: manchas, oscuras pero también de diversos colores. Me froté los ojos un par de veces, pero aquellas visiones seguían allí.

Simbad, ¿qué pasa? ¿Ves… eso?

Estaba cansada, veía cosas y hacía mucho frío. Y aquella sensación tan rara me oprimía el pecho. Me sentía realmente insegura allí, y Ukki parecía estar algo incómodo también.

Por suerte, alcanzamos una puerta que nos permitió librarnos un rato de aquellos molestos seres de oscuridad durante un rato. Allí dentro, sobre una mesa, vislumbré un papel.

¡Creo que es el plano de Verdín!

Eché a correr hacia allí, y en cierto momento noté que el suelo se hundía a mis pies, haciendo un clic. Acto seguido, oí un ruido sobre mi cabeza, y al mirar hacia arriba vi una enorme masa de líquido verde cayendo a toda velocidad sobre mí. Sobresaltada, agarré a Ukki con fuerza y di un salto hacia atrás, pero por desgracia no pude librarme de aquel asqueroso pringue y me salpicó igual. Al volver a mirar hacia arriba, vi que en el techo había quedado dibujada la cara de Verdín. Nos había tendido una trampa, y por el modus operandi era muy obvio que solo había podido ser él.

Qué gracioso… —me quejé limpiando mi cara con las mangas.

Simbad se adelantó, agarró el plano y dijo:

Registremos la oficina y vayámonos de aquí. No tengo muchas ganas de entrar en el Distrito Dos, pero tampoco tenemos más elección.

Sí, de todas formas ese crío no parece estar por aquí ya, y esos bichos del demonio no van a dejar que nos movamos con libertad.

Apreté los puños, imaginando la estúpida cara de aquel niñato y ardiendo de ira.

Pero ya te pillaré, ya.

Sigue buscando, yo apartaré esto.

Junto a Ukki, eché un vistazo a la oficina, en busca de alguna otra pista u objeto útil. Además, aproveché ese rato para limpiarnos tanto a él como a mí.

Finalmente, me acercaría con Simbad a la puerta que se encontraba ante nosotros tras apartar el mueble. Aquello nos llevaría al Distrito 2, si Verdín y el plano no mentían. Y, por consiguiente, directamente a Aaron…

Mis músculos se tensaron. Tenía un muy mal presentimiento.
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Re: [Evento Global] El Principio del Fin

Notapor Drazham » Mié May 10, 2017 1:00 am

Nikolai empezaba a desquiciarse. Ragun seguía sin responder, daba igual lo que le dijese para hacerle entrar en razón o cualquier otra orden sencilla. No le venía ninguna otra idea de que hacer, ni tampoco disponía del tiempo para ponerse a pensar. Ni de lejos se hubiese imaginado que la magia ilusoria de alguien que era todo músculo y fuerza bruta fuese tan potente. Era frustrante…

¡¡IDIOTA, la próxima vez no grites antes de atacar!!

Y Zande no parecía querer darse por vencido. Nikolai vio como el Villano agarró a Saito cual muñeco de trapo y se encaró hacia su próxima víctima: a él.

No me jodas… —siseó entre dientes.

Zande salió disparado con la velocidad de un obús, prometiendo mucho dolor como le pillase. Nikolai tuvo que dejar a Ragun de inmediato y saltar delante de él, enarbolando su arma. Rugió y desató una Rotura Planar… Solo para llevarse un tremendo fiasco en cuanto el muy cretino usó a Saito como escudo para protegerse del ataque.

Aunque parte de este llegó a alcanzarle. Todo gracias a una plancha de metal redonda, salida de la nada, que le golpeó por un costado. Entonces vio al hombre que acababa de salir por el mismo callejón que tomaron ellos.

¡¿Malik?!

Para ser francos, no se había fijado si vino con ellos desde Tierra de Partida, o se les unió más tarde y vino por su cuenta. Con tantas desapariciones en sus filas, se esperaba cualquier cosa.

Pero nada más llegar él, lo siguiente que vino a continuación fue una sacudida brutal en toda la plaza. Nikolai ahogó un grito y se tambaleó, logrando recuperar el equilibrio antes de caerse de culo.

Y luego vino aquel estruendo que sonó como una bomba. Sus ojos se clavaron con temor en el lugar del que vino la explosión: la barrera que rodeaba el Distrito refulgía intensamente, además de que se vislumbraban miles de motas oscuras que se escapaban desde el interior. Algo estaba pasando dentro de la barrera, y le daba miedo saber el qué para desatar semejante terremoto.

¡Zorra... zorra NO puedes... ah… quitármelo…!

Fuera lo que fuese, lo que si era cierto es que estaba afectando a Zande de una forma anormal. El mastodonte ya estaba fuera de sus cabales y se sacudía, histérico.

Tenemos que… matarlo. Ahora.

Cloud alzó la voz como pudo y se incorporó a duras penas. Nikolai abrió los ojos de par en par. Para su sorpresa, el rubio estaba lúcido, más o menos. ¿Cómo demonios le habían sacado del hechizo? Él ni siquiera logró que Ragun reaccionase lo más mínimo…

Sin embargo, eso no era lo que más le preocupó. Las palabras de Cloud se le quedaron grabadas en la mente. Él mismo fue el primero en gritar a viva voz que tenían que detenerlo para quitárselo de encima, pero… matarlo…

Maldito fuese el momento, justo en ese lugar, justo ahora, en el que tuvo que cuestionarse sus intenciones, aunque fuese por uno de ellos. Después de lo que le habían hecho a su mundo, seguía guardándoles un agrio rencor; odiaba a los Villanos Finales. Odiaba al puñetero Mateus Palamecia. Y al que tenían delante suya no era mucho mejor, un fanático que no atendía a razones y que sería un peligro de dejarlo suelto.

Pero… ¿eso justificaba el tomarse la justicia por su mano y quitarle la vida a alguien?

Tenía que actuar ya. Sus compañeros ya se estaban lanzando a por él, tuvieran las intenciones que tuviesen. Nikolai apretó los dientes, frustrado y, tras vacilar unos segundos, se lanzó junto a los demás. Lanzando grito seco, cargó con todas sus fuerzas para asestarle un último golpe a zande.

O tal vez no con “todas”. Quizás, de no haber dudado tanto en un intento de preguntarse qué hubiese sido lo más correcto, podría haberse esmerado más que con un simple Aturdidor.

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Ronda #5 - El Principio del Fin

Notapor Astro » Vie May 12, 2017 12:57 am

Light, Dos y Keiko


Ni cortos ni perezosos, el trío de portadores entraron a lo burro en la casa de Merlín, asaltando a Hojo antes incluso de que éste se diese cuenta de lo que estaba pasando.

¡¿Pero cómo osáis...?! —exclamó el científico, echándose hacia atrás según la llave espada de Light se iba acercando a su cuello—. ¡¿Cómo habéis encontrado este lugar?!

Un lugar que, para aquellos que lo hubieran visitado con anterioridad, estaba totalmente cambiado. La que fuese casa de Merlín ahora parecía más bien un laboratorio improvisado, lleno de máquinas y con la mayoría de muebles rotos o llenos de cables. Destacaba, sobre todo, un aparato en el centro del lugar: redondo y aplanado, ocupaba el sitio donde antes estaba la mesa favorita de Merlín, y proyectaba un fino rayo de luz que ascendía hacia arriba hasta perderse por un conducto que llevaba a la superficie. ¿La fuente de la barrera, tal vez?

Hojo escuchó las preguntas de Light y las exigencias de Dos con una mueca de desagrado y confusión, pero fue lo último que la droide dijo lo que acabó provocando que soltase una gran carcajada.

¡VOSOTROS sois los que os habéis metido donde nadie os llamaba! ¿O acaso habéis olvidado a quién eligieron alcalde de Ciudad de Paso? Y nosotros somos los criminales, por supuesto. —Se acercó a un ordenador cercano y empezó a teclear con velocidad, ignorando la llave espada de Light, como si no creyese que de verdad fuese a utilizarla—. Jugáis con fuerzas que no comprendéis y encima sois idiotas. ¿Dónde va a estar el corazón del mundo? Oh, ya sé, puede que dentro de una gran y enorme BARRERA.

Los distintos ordenadores no dejaban de pitar y algunos incluso echaban, literalmente, chispas. Parecía que el laboratorio improvisado de Hojo se caía a pedazos, y el científico iba de un lado a otro como bien podía, arreglándolo todo. Lo único que, a simple vista, se mantenía estable era el aparato del centro, la posible fuente de la barrera.

El corazón del mundo está a salvo. El Alcalde lo protege en persona. En cuanto a ese monstruo al que llamáis Aaron, no tengo ni idea de dónde se encuentra y prefiero no saberlo. Así que marchaos, y dejadme trabajar tranquilo.

Tosco y desagradable, pero ocupado. Hojo no parecía que fuera a ayudarles mucho por las buenas y estaba claro que no creía que de verdad fuesen a atacarle. Si querían más colaboración, tal vez deberían probar una estrategia diferente.

Pero antes de que pudiesen decidir nada, algo extraño ocurrió. En la máquina redonda del centro, seis esferas que parecían formar parte del diseño del aparato (repartidas en círculo en pequeños huecos en las que encajaban a la perfección) empezaron a brillar con intensidad. Cada una de un color diferente: rojo, naranja, azul, blanco, violeta, y negro.

¿Qué están haciendo...? —musitó Hojo, desconcertado. Pero estaba demasiado ocupado como para acercarse.

Las luces parpadeaban, como si intentasen mandarles un mensaje a los portadores. Pero ¿cuál?

Clío miró a los muchachos, a las esferas y luego a Hojo. Y entonces dijo:

¿Por qué se está viniendo abajo el mundo, doctor? Y ¿no deberíais estar con Mateus? Los subordinados de Aaron están aquí y… Parecían muy interesados en hacernos entrar dentro de la barrera.

Hojo la miró con los ojos entrecerrados, profundamente desconfiado. Se colocó bien las gafas sobre la nariz y esbozó una sonrisa desagradable antes de darle la espalda.

Eso se lo tenéis que preguntar a ese monstruo. Todavía no sé qué clase de… oscuridad ha introducido en el Corazón, pero parece que ha estado jugando con el tiempo dimensional. El Alcalde está más que bien protegido, para vuestro… interés. ¡Dejad de resistiros, maldita sea!

Pulsó un botón y una especie de fuerza, o corriente eléctrica, sacudió las esferas. Los caballeros y Clío se quedarían espantados al escuchar un murmullo, un sonido que no era una voz pero se le parecía mucho, y que sonó a desgarramiento y a dolor. Hojo resopló y siguió trabajando. De pronto, la máquina que atrapaba esas esferas empezó a extraer… Energía. No, no es que la estuviera extrayendo, es que ahora sacaba más.

¿Qué podían ser esas cosas? ¿Y qué estaban intentando decir?

Light
VIT: 76/76
PH: 49/72


Gaomon
VIT: 20/36
PH: 17/20


Dos
VIT: 11/20
PH: 9/16


Keiko
VIT: 32/32
PH: 12/26




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Simbad & Maya


La búsqueda por la oficina no dio resultados. Todo lo que encontraron eran papeles y objetos normales de la propia oficina de correos, nada relacionado con Verdín o con la barrera. Así pues, no les quedó otra que salir volando en busca del pasadizo.

Con la ayuda del plano, encontrarlo fue fácil, aunque tuvieron que seguir esquivando a los sincorazón. Simbad pudo mover un pequeño contenedor sin problemas, y con un golpe de cualquiera descubrieron una vieja puerta que no debía de haberse usado en mucho tiempo. Entraron, cerraron la puerta tras de si, y lo que encontraron fue oscuridad. Ya fuese con sus móviles o con el gorro de Ukki, tuvieron que apañárselas para conseguir alguna fuente de luz que les sirviese para guiarse, aunque el camino en principio solo seguía hacia delante.

Entre polvo y telarañas, el trío avanzó por aquel estrecho pasadizo durante unos cinco minutos, a ritmo ligero, hasta dar con la luz al final del túnel. Primero tuvieron que romper una reja que bloqueaba la entrada, y después dar un pequeño salto que acabó mojándoles los pies. Habían llegado, sin duda alguna, a una alcantarilla. Pero había algo raro, muy raro, en el lugar. Según andaban, se iban encontrando con que en algunas zonas el agua flotaba como si no hubiera gravedad, y en otras partes había trozos de agua totalmente congelada. Además, ambos notarían una sensación de pesadez en el ambiente. Algo no iba del todo bien.

Guiados por el último trozo del plano, pudieron salir de las alcantarillas a tierra firme. Se encontraban detrás del hotel del Distrito 2, en el callejón trasero. ¡La plaza del distrito 2 estaba muy cerca! Pero antes de que ellos pudieran alcanzar la puerta que daba a la plaza, ésta se abrió y alguien la cruzó antes que ellos, cortándoles el paso.

Gabranth.

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Sé por qué estáis aquí, pero no puedo dejar que paséis. Marchaos, Caballeros de la Llave Espada.

El Villano Final con reputación de ser más honorable, también conocido como El Juez. Clavó su espada en el suelo, adoptando una pose solemne pero amenazadora. Aunque no pasarían por alto que partes de su armadura estaban rotas, y que había manchas de sangre seca en otras. Heridas. Gabranth había estado luchando hasta hacía poco, contra alguien o contra algo.

El Emperador se encuentra tras estas puertas. No debe ser molestado…. por el bien de todos. El poder que está acumulando no es algo que deba tratarse a la ligera. Tal vez ni siquiera por él... ―Vaciló, bajando levemente la cabeza, pero se recompuso con rapidez. Se notaba que tenía dudas sobre lo que estaba ocurriendo―. Salvad a todos los que podáis. Llevaoslos de este mundo. Pero… no dejaré que crucéis estas puertas.

Podían optar por la opción del diálogo, sobre todo si le conocían de antes, pero la firmeza de sus palabras hacían indicar que tal vez la única forma de llegar hasta la cerradura del mundo fuese a través de la fuerza.

Maya
VIT: 40/40
PH: 34/46


Ukki
VIT: 10/10
PH: 6/6


Simbad
VIT: 48/48
PH: 33/48
Turnos restantes de Alas: 1



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Saito, Nicoxa, Ragun, Kairi & Nikolai


Las opiniones fueron dispares. Mientras unos querían acabar con el villano, Kairi y Nicoxa se opusieron a la idea. La segunda llegó incluso hasta a hacerle frente a Zande, instándole a que les escuchara. Pero el resultado...

No... quiero... VUESTRA ESTÚPIDA COMPASIÓN.

Todo fue muy rápido. Zande agarró su lanza con una fuerza brutal y se lanzó hacia delante, rompiendo la habilidad de Nicoxa y abalanzándose sobre la chica. Por suerte para ella, Malik pudo apartarla a tiempo, a costa de recibir él el golpe de la lanza en todo el costado.
Sin perder tiempo, Cloud, Saito y Nikolai respondieron al instante con un ataque al mismo tiempo. Las espadas de los tres atravesaron el pecho del villano, poniendo fin de una vez por todas al combate. Y a su vida.

El cuerpo de Zande se disolvió entre motas de oscuridad, mientras el que fuese un temible Villano Final sonreía. Había dado su vida por su causa. No tenía remordimientos.

Un tenso silencio se instauró en la plaza después de aquello, que solo fue interrumpido por la vuelta de Ragun a la realidad. Sin Zande, ya no había ilusión que valiera.

No tengáis remordimientos. Era él, o nosotros. No se hubiera detenido por mucho que lo hubierais intentado —dijo Cloud, refiriéndose sobre todo a Nicoxa y Kairi.

Debemos de llevarle a una zona segura, la herida es muy fea y aquí no pudo tratarla —interrumpió Aeris, que había estado tratando a Malik desde que sufrió el ataque.

Cloud preguntaría por una zona segura al grupo, y cualquier pudo decirles que el Distrito 1 estaba protegido por los maestros y contaba con un portal para salir del mundo. Él y Aeris se encargarían de llevarse allí a Malik y ponerlo a salvo, además de ayudar con la evacuación como bien pudieran.

¿Qué haréis vosotros?

Buena pregunta. La Plaza estaba tranquila: si aparecía algún sincorazón o incorpóreo sería fácil de derrotar, así que el grupo debía decidir su siguiente acción. La barrera seguía intacta, pero aquel trueno de antes no presagiaba nada bueno. ¿Pero por dónde ir? Tal vez sus compañeros hubieran tenido más suerte, o que incluso les hubieran enviado mensajes a los móviles con información. Además, la visita al Ayuntamiento seguía pendiente, aunque puede que no encontrasen nada interesante allí, visto que los Villanos Finales estaban desperdigados... o quizás sí.

Ragun
VIT: 109/144
PH: 36/72


Nikolai
VIT: 44/44
PH: 15/36


Saic
VIT: 22/22
PH: 12/12


Nicoxa
VIT: 35/46
PH: 17/32


Kairi
VIT: 22/30
PH: 38/38


Awa-chan
VIT: 14/14
PH: 7/10


Saito
VIT: 40/80
PH: 0/42



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Hiro


Yuffie refunfuñó ante la insistencia de Hiro por seguir peleando en lugar de hacerle caso a la barrera, pero se negó a dejarle solo, así que accedió a su plan.

¡El perrito quiere jugar, el perrito quiere jugar! ¡Ji,ji,ji! —Kefka estalló en carcajadas, tronchándose él solo con las provocaciones de Hiro. Aunque su expresión cambió cuando le dijo que había dejado escapar a los vecinos—. ¡¿Qué?!

Fue el momento que Hiro aprovechó para disparar. El payaso esquivó las balas, pero entonces Yuffie apareció, siguiendo el plan, y consiguió acertarle en la espalda con el filo alargado de su shuriken. Chillando de dolor, el payaso se revolvió para atacar a la ninja. Hiro intentó evitarlo, con su disparo Kansai, pero la potencia del ataque era demasiado baja como para hacer un daño serio al Villano Final, que acertó a Yuffie de lleno con un Electro+.

¡Se acabaron los juegos, chucho, VOY A DESTRUIRLO TODO!

Cargó una enorme bola de fuego en la mano que disparó al instante contra Hiro, quien utilizó su Disparo impulsor para esquivarlo por los pelos, ya que una parte de su pierna acabó quemada. Por suerte, nada serio, pero dolía.

Una nueva bola de fuego le hubiera impactado de lleno de no ser por León, que apareció en el momento exacto para bloquearla y contraatacar.

¡Nosotros solos no podemos contra él! —advirtió, mientras intercambiaba disparos contra las bolas de fuego de Kefka.

¡Es lo que he dicho yo, pero nadie me hace caso! —protestó Yuffie, reuniéndose con Hiro. Estaba herida, pero todavía podía seguir—. ¡Eh, mirad, la puerta a la casa de Merlín se ha abierto! Ha debido de ser la bola de fuego del payaso...

En efecto. La llamarada había eliminado la protección mágica de la puerta del callejón, creando una vía de escape para el grupo. Por otra parte, si León estaba con ellos era que los vecinos ya habían sido evacuados, así que sería un tres contra uno con Kefka ya debilitado, pero su magia seguía siendo temible... Por otra parte, lo importante era la barrera y salvar el corazón del mundo. ¿Qué decidiría Hiro?


Hiro
VIT: 13/28
PH: 15/38


Goei
VIT: 18/18
PH: 5/10



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Fecha límite: lunes 15 de mayo a las 23:59

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Faltas:
RedXIII: 1
James Bond: 1
Tanis: 3. Expulsada del global.
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Re: [Evento Global] El Principio del Fin

Notapor Light » Dom May 14, 2017 1:25 pm

Es la casa de Merlín —respondió a Dos.

Y su interior había cambiado radicalmente: la mesa, los libros y otros cachivaches habían sido sustituidos por máquinas y cables. Más que la morada de un brujo parecía un laboratorio.

Tras escuchar a Dos, el científico soltó una carcajada.

¡VOSOTROS sois los que os habéis metido donde nadie os llamaba! ¿O acaso habéis olvidado a quién eligieron alcalde de Ciudad de Paso? Y nosotros somos los criminales, por supuesto.

Por supuesto que lo sois —reafirmó sin ápice de duda, aproximando más la llave a su cuello—. Te recuerdo que muchas vidas están en juego y que si no cooperas la vamos a palmar todos. Toda ayuda es poca. Así que dejad vuestro estúpido orgullo y dejad que ayudemos, por el bien de la ciudad.

Hojo ignoró que el arma prácticamente le rozaba el cuello y siguió a lo suyo: se aproximó a un ordenador y empezó a teclear a gran velocidad. Parecía que su maniobra de intimidación no había servido de nada. Light chasqueó la lengua y ni se molestó en seguir apuntándole. Le entraron ganas de patear alguno de sus ordenadores (o la cara de Hojo mismamente).

Jugáis con fuerzas que no comprendéis y encima sois idiotas. ¿Dónde va a estar el corazón del mundo? Oh, ya sé, puede que dentro de una gran y enorme BARRERA.

Evidentemente eso se podía intuir —musitó, fulminándole con la mirada—. Preguntaba por su localización exacta dentro de la barrera.

Dedicó unos segundos a echarle un vistazo a los ordenadores. Algunos incluso echaban chispas.

En cambio, el aparato del centro se mostraba estable. Alzó la vista, contemplando el rayo luminoso que escapaba por un conducto, hacia la superficie. Sospechaba que habían dado con el origen de la barrera.

El corazón del mundo está a salvo. —«SEGURO QUE SÍ»—. El Alcalde lo protege en persona. En cuanto a ese monstruo al que llamáis Aaron, no tengo ni idea de dónde se encuentra y prefiero no saberlo. Así que marchaos, y dejadme trabajar tranquilo.

Como que tenían motivos para pensar que estaba a salvo. Al contrario. El propio Merlín les había dicho que algo le ocurría al Corazón. Y además ellos podían sentirlo, en el ambiente.

«Espera… ¿El Alcalde?», Merlín les había confirmado que había muerto, aunque… puede que se estuviera refiriendo a otro Mateus. Por un lado, estaba el hombre despiadado que conocieron en el Inframundo; y por otro… aquel monstruo de Villain's Vale que devoró el corazón de Ban. Definitivamente eran dos seres diferentes.

Justo cuando se disponía a contestarle, desvió la vista hacia la máquina del centro. Algo había llamado su atención. Específicamente, unas esferas de colores que le resultaron muy familiares comenzaron a brillar.

¿Qué están haciendo...?

Magicitas… —susurró mientras se aproximaba a éstas para observarlas mejor. ¿Qué demonios hacían allí? No tardaría en descubrirlo.

¿Por qué se está viniendo abajo el mundo, doctor? Y ¿no deberíais estar con Mateus? Los subordinados de Aaron están aquí y… Parecían muy interesados en hacernos entrar dentro de la barrera. —Hecho que resultaba bastante sospechoso.

Eso se lo tenéis que preguntar a ese monstruo. Todavía no sé qué clase de… oscuridad ha introducido en el Corazón, pero parece que ha estado jugando con el tiempo dimensional. —«¿Tiempo?», Chihiro le vino a la cabeza inmediatamente.—. El Alcalde está más que bien protegido, para vuestro… interés. ¡Dejad de resistiros, maldita sea!

Una tremenda corriente eléctrica impactó contra las esferas en ese momento y Light retrocedió del susto. Puso una mueca de desagrado y… permaneció atento. Era capaz de escuchar unos ruidos horribles. En el interior de aquellas magicitas había algo sufriendo.

Se volteó hacia Hojo, muy serio.

No me digas que… ¿Estás usando a Ifrit y los demás esper como fuente de energía para la barrera? —preguntó para que se lo confirmara, aunque resultaba más que evidente. Y a la vez espeluznante. Aunque algunos fueran seres peligrosos y aterradores no se merecían sufrir de esa forma—. Es horrible —lamentó, agachando la cabeza.

Pero lo comprendía, ya que si era cierto que protegía el Corazón, aquella barrera resultaba necesaria para frenar a las multitudes de Sincorazón e Incorpóreos. Si la echaban abajo… el mundo estaría aún más en peligro.

«Lo siento», ¿era un miserable por sacrificar la vida de aquellas criaturas por las suyas propias? Sin duda, y se sentía fatal por ello, pero como Portador y Maestro tenía claras sus prioridades.

Le gustaría liberar a los esper de su dolor, pero las consecuencias podían ser nefastas para el mundo. Así que él, al menos, no lo haría.

Tras comprobar el mensaje que había llegado a su móvil, siguió hablando con Hojo. Tenía que convencerle para que cooperara.

De acuerdo, entonces la barrera es para proteger el Corazón. ¿Pero crees que esto bastará? Míralo tú mismo. Los esper se quedarán sin energía tarde o temprano —al menos así lo creía—, o tu laboratorio improvisado se irá a la porra, solo vas a ganar un poco de tiempo. Y cuando la barrera caiga, será tarde y Aaron mandará a los Sincorazón e Incorpóreos al Corazón. O lo destruirá él mismo mientras estamos aquí sin hacer nada.

»Necesitamos actuar ya y acabar con Aaron directamente, tenemos que ir al Distrito 2 —sentenció—. Mis compañeros me acaban de comunicar que parece haber un enfrentamiento tras la barrera, Aaron debe estar allí —les informó a todos, mostrándoles la imagen que le habían enviado—. Dinos, ¿hay alguna forma de poder acceder al Distrito 2 sin quitar la barrera, algún camino oculto? ¿O podrías desactivarla un momento para que podamos pasar? Estás flipando si crees que vamos a dejarlo todo en manos de ese Emperador. ¡No vamos a quedarnos de brazos cruzados mientras el mundo se está muriendo, maldita sea! —exclamó, alterado.

Si el científico por un casual les ayudaba y les daba la clave para acceder al Distrito 2, le haría caso y se pondría en marcha cuanto antes. Si seguía sin cooperar y no había nada que hacer allí, soltaría un improperio y saldría —muy enfadado— al Distrito 3 para buscar alguna forma de llegar al segundo distrito (¿a través de alguna alcantarilla u otra vía que pasara por debajo de la barrera?), a ser posible. ¿Qué más podía hacer? Si no podía sacar nada de Hojo no iba a quedarse en aquella casa mientras el mundo llegaba a su fin.

En cambio, si la barrera se disipaba por cualquier motivo, se ahorraría las preguntas: saldría escopetado de la cueva de Merlín y volaría hacia el Distrito 2, empleando sus alas para llegar cuanto antes. ¡Había que proteger el Corazón si se encontraba allí!

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Pues eso, en la última opción, si como sospecho Dos (o cualquiera) la lía y echa abajo la barrera, se ahorrará lo de convencer a Hojo (ignorad todo el diálogo o la parte que no quede bien) y volará a toda leche hacia el Distrito 2 (antes de que Hojo pueda volver a activar la barrera si puede (?)) xDU con esto:

▪ Alas de Nefilim (HM) [Nivel 14] [Requiere Raza Nefilim] Utiliza sus innatas alas heredadas de los ángeles (previamente invocadas) para planear a gran velocidad o volar durante un máximo de tres post.

Y lo de la foto y el mensaje está pactado con Draz.

Y para todos mis compañeros en el rol: en el caso de que la barrera caiga en este turno es posible que todos podamos acceder al Distrito 2, no solo yo, así que tenedlo en cuenta para vuestros posts!
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Re: [Evento Global] El Principio del Fin

Notapor H.S Sora » Lun May 15, 2017 7:10 pm

Todo fue demasiado deprisa. No había imaginado que algo así sucediera mientras me reabastecía, Nicoxa y Kairi aprovecharon para… ¿intentar salvar a Zande? La reacción del Villano Final no se hizo esperar.

No... quiero... VUESTRA ESTÚPIDA COMPASIÓN.

Pero entonces hizo algo que ninguno pudo prever: aferró su arma con fuerza y se lanzó contra la chica, ahogué un grito mientras sentía como todo mi alrededor se ralentizaba. Salí corriendo, no iba a llegar a tiempo. Ninguno iba a hacerlo. Estiré mi mano, no podría desviar tampoco la trayectoria de Zande con un hechizo.

Fue entonces cuando Malik consiguió interponerse entre ella y el ataque, a costa de recibirlo de lleno en el costado y siendo derribado en el acto. Me encontré a mi mismo utilizando la Llave Espada sin pensar, atravesando con éxito al Villano Final. Pero no estaba solo. Mi espada se encontró con la de Nikolai y el desconocido.

El sonido de mi arma cayendo al suelo resonó con fuerza.

Un ataque a tres bandas que puso fin a la existencia de Zande, y mientras éste se esfumaba en pequeñas volutas de oscuridad no pude evitar fijarme en la sonrisa del enemigo. De un modo u otro se había salido con la suya, y no nos había contado nada sobre lo que estaba sucediendo.

Había muerto, sí, pero había hecho lo que había considerado mejor para los suyos. Y había estado cerca de llevarse a uno de los nuestros por delante. Entonces, ¿por qué seguía temblando?

Quizá fuera porque, después de todo, había sido capaz de hacerlo. Más monstruoso o no, había matado a un hombre. En defensa propia, sí, pero lo había hecho. Y la diferencia con Gárland era que no había ahí ningún Maestro al que poder atribuirle el «mérito».

Después de todo, en la Cité había sido Lyn la que había golpeado mi guadaña con la fuerza suficiente como para atravesar el cráneo del otro Villano Final. Yo lo había intentado, pero nunca hubiera sido capaz de conseguirlo sin su ayuda.

Mis manos ya se habían manchado de sangre en aquella ocasión, pero ahora estaban completamente bañadas en ella. No había vuelta atrás.

Mi Caballero...

No tengáis remordimientos. Era él, o nosotros. No se hubiera detenido por mucho que lo hubierais intentado.

Asentí, con aire distraído.

Debemos de llevarle a una zona segura, la herida es muy fea y aquí no pudo tratarla.

Hice memoria antes de hablar, todavía me costaba orientarme en aquel mundo.

En el Distrito 1 están nuestros Maestros y un portal a Tierra de Partida, es a donde estamos dirigiendo a los civiles para que evacuen lo más rápido posible.

»Gracias por cuidar de él.

¿Qué haréis vosotros?

Intentar averiguar como entrar en la maldita barrera.

Me acerqué a Ragun quién, después de la muerte de Zande, había vuelto en si. No estaba muy seguro de lo que pretendería hacer, pero esperaba que fuera seguir con nuestro plan original. Y esperaba poder encontrar algo cuanto antes, algo que nos permitiera saber que diablos estaba pasando ahí dentro.

Me alegra que estés de vuelta, Maestro —le pondría una mano en el hombro—. Aunque Simbad se haya ido, ¿vamos al ayuntamiento? Quizá alguien se nos quiera unir.

Asentí a su respuesta, y me prepararía para partir. No sin antes preguntarle al resto:

¿Alguno ha tenido noticias de los demás?

Por mi parte no había recibido nada, pero quizá ellos hubieran tenido más suerte recaudando información. Atendería a lo que dijeran y, a menos que la barrera reventara como por arte de magia, iría junto a Ragun hacia la sede del ahora ex alcalde de Ciudad de Paso.

En el caso de que viéramos la barrera estallar, no habría tiempo que perder, y pondría rumbo al Distrito que había quedado encerrado, en busca de respuestas.

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Recuerdo que en la ronda anterior me tomé una Poción y un Éter, para que se tenga en cuenta en la siguiente pelea xD
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Muchas grácias por el avatar Mepi ^^
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Re: Ronda #5 - El Principio del Fin

Notapor Zodiark » Lun May 15, 2017 10:15 pm

¿Qué es todo esto, Simbad?

Acerqué la mano a un ¿trozo de agua? que flotaba en el aire, extrañada. Ukki, por su parte, tocó uno de los trozos de hielo que había en el agua. El agua se había congelado de una forma no uniforme, no tenía sentido. ¿Qué demonios estaba pasando en aquel mundo? Esperaba que las respuestas no estuvieran muy lejos…

Salgamos cuanto antes de esta apestosa cloaca.

Por el camino, saqué mi teléfono del bolsillo. No había tenido tiempo de mirarlo con tanto ajetreo, y quizá alguien lo había usado para mandar algún mensaje. Y efectivamente así fue.

¿El otro Light…? —Me mordí el labio—. El mensaje es de hace un rato… Me pregunto si estará yendo bien…

Decidí no darle más vueltas. Unos contra Dark Light, otros contra Zande… Pero Ukki, Simbad y yo también estábamos en problemas. Eché un vistazo al plano. Al final de aquella alcantarilla saldríamos al Distrito 2. El interior de la barrera estaba muy cerca, y empecé a preguntarme si allí estaban las respuestas que necesitábamos.

Ah, por fin fuera —dije tomando una buena bocanada de aire al salir de las alcantarillas y mirando alrededor—. Sí, esto es el Distrito 2, sin duda.

No obstante, no sentí como si volviera a respirar aire fresco. El ambiente seguía siendo pesado, extraño y cargante. Me empezaba a preocupar, ya que saqué una conclusión precipitada: ¿y si todo aquello estaba ocurriendo porque el corazón del mundo se había visto afectado? ¿Era lo que estaba indicando el principio del fin de Ciudad de Paso?

Señalé la puerta que llevaba a la plaza, e hice una señal a Simbad para que fuéramos a toda prisa hacia allí. Estaba convencida de que aquel era el lugar donde estaban las respuestas, y quedaba muy poco. El corazón me iba a mil.

Pero más fuerte me latió cuando, de improviso, la puerta se abrió ante nosotros, antes de que tuviéramos tiempo de abrirla nosotros mismos. Di un paso hacia atrás y clavé la mirada en la figura que surgió de ella, imponente.

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Era él. Ni más ni menos.

Gabranth… —mascullé.

Ukki gruñó. Me puse en guardia, y apreté puños y dientes. Le observé de arriba abajo, y al ver su aspecto enarqué una ceja. Estaba malherido, con la armadura rota en algunas zonas. ¿Habría luchado contra Aaron para proteger o vengar a su emperador, quizá?

Algo dentro de mí se alegró. Estaba segura de que lo encontraría allí, en el epicentro de todo el conflicto. Y, además, Aaron no había acabado con él también, lo que me daba miedo. Si alguien tenía que vencerle, esa era yo, y acto seguido llevarlo ante la justicia.

Pero seguía siendo Gabranth. Un Villano Final que, a pesar de todo lo que intenté comprenderle y ayudarle, no dudó en darme la espalda y volver con ese repugnante hombre llamado Seymour. Uno de nuestros más temibles enemigos.

Si conseguís sobrevivir lo suficiente tened por seguro que nos volveremos a encontrar, y no tendré piedad con ninguno de vosotros. La Orden pagará por sus pecados.

Tú incluida, Maya Zawrid.


Sus palabras resonaron en mi cabeza, y me estremecí al pensar que aquel momento podría haber llegado ya. Aunque, sinceramente, no era el momento de eso. Mis enemigos, en aquel momento, eran Verdín, Aaron y los suyos.

Sé por qué estáis aquí, pero no puedo dejar que paséis. Marchaos, Caballeros de la Llave Espada.

Suspiré y negué con la cabeza. No empezábamos bien.

En cualquier caso, me extrañó su actitud. Después de todo lo que había dicho en Nunca Jamás, esperaba que lo primero que hiciera al vernos, especialmente a mí, fuera pasar directamente a la acción, pero no. Quizá, después de todo, no éramos tan diferentes, y él sentía como yo que teníamos algo más importante entre manos que nuestra pelea.

El Emperador se encuentra tras estas puertas. No debe ser molestado…. por el bien de todos. El poder que está acumulando no es algo que deba tratarse a la ligera. Tal vez ni siquiera por él... ―El Juez vaciló, dudó. Yo, por mi parte, le miré boquiabierta y confusa―. Salvad a todos los que podáis. Llevaoslos de este mundo. Pero… no dejaré que crucéis estas puertas.

¿Pero de qué estás hablando? —dije agitando la cabeza, recuperándome de mi asombro—. ¡¿Palamecia está vivo?! Nos habían dicho que Aaron... había acabado con él y se lo había… ugh…

En cualquier caso, volví a mirar a Gabranth con extrañeza. Estaba tan cambiado… Acababa de mostrar debilidad, pero no una debilidad como la que vi en él en Nunca Jamás. Esta vez parecía menos altivo y soberbio. Algo le rondaba la cabeza, sin duda. Después de todo, ¿dónde había quedado aquello de que mi compasión le causaba arcadas y que la próxima vez no tendría piedad?

No podemos irnos sin más —respondí tajante, mirándole seria, más que nunca. Quería que viera que aquella ocasión no era como la anterior. Me había hecho más fuerte desde entonces, e iba totalmente en serio—. Está muy bien eso de ir a salvar a la gente, ¿pero de qué vale si vuelven a perder su hogar? Tú lo sabes mejor que yo. Ciudad de Paso es el lugar al que vienen los que han perdido su mundo a causa de la oscuridad, y no pienso dejar que pasen por ese mismo trago de nuevo, tú incluido. Por eso voy a ir ahí, descubrir qué está pasando y arreglarlo. Aunque tenga que aliarme con Palamecia. Es mi deber, quiero proteger este lugar y a su gente tanto como tú.

Callé durante unos segundos y lo volví a mirar de arriba abajo.

¿Qué haces aquí? ¿Solo has venido a detenernos? La vida de tu Emperador está en peligro, ¿no es verdad? Lo he notado en tu voz. Sé que le adoras, que le debes todo. ¿No piensas hacer nada al respecto? ¿Te quedarás aquí, de brazos cruzados?

Torcí la boca, y mi expresión seria cambió a una algo más condescendiente al tiempo que me cruzaba de brazos.

Te conozco, sé que quieres salvar a la gente de este mundo y a Palamecia. Dime, ¿has luchado contra Aaron?

Mientras las palabras salían de mi boca, algo en mi interior me estaba diciendo “Maya, eres tonta, después de todo, sigues tratando a este hombre como si fuera tu aliado”. Él me había decepcionado, me había sentido dolida con sus palabras y su actitud. Nunca le perdonaría lo que me hizo. Me hizo creer que había tocado su fibra sensible, que a pesar de todo yo podría ayudarle de alguna forma a librarse de aquella oscuridad y aquella carga de su corazón. “Tienes honor, eres noble”, me decía. Pero después, no dudó en decirme que él mismo acabaría conmigo si hacía falta, que solo buscaba venganza.

Pero no podía evitarlo. Aquel hombre era mi debilidad. Habían pasado muchas cosas, y no todas malas. Y, a pesar de que yo había asegurado que no era diferente al resto de Villanos, seguía sintiendo que sí lo era. Era único, diferente y de alguna manera especial. Sentía que con el diálogo quizá podía convencerle, a diferencia de otros Villanos Finales.

«Lo siento, Hana. Al final, no aprendí nada ese día. Estoy volviendo a hacer lo mismo… Y quizá esta vez sí pagaré por ello…»
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Re: [Evento Global] El Principio del Fin

Notapor Kairi » Lun May 15, 2017 10:34 pm

No... quiero... VUESTRA ESTÚPIDA COMPASIÓN.

Esa fue la única contestación de Zande, que se abalanzó sobre Nicoxa, pero Malik apareció a tiempo para recibir el golpe. De inmediato Cloud, Saito y Nikolai se unieron para dar el golpe de gracia a Zande. Lo habían matado.

Kairi vio su cuerpo desvanecerse entre motas de oscuridad. Apreció una sonrisa en su cara antes de desaparecer por completo. La joven estaba apenada por no haberse podido hacer de otra forma.

No tengáis remordimientos. Era él, o nosotros. No se hubiera detenido por mucho que lo hubierais intentado—dijo Cloud. Kairi suspiró.

Debemos de llevarle a una zona segura, la herida es muy fea y aquí no pudo tratarla—advirtió Aeris ante el estado de Malik.

¿Qué haréis vosotros?

En ese momento el móvil de Kairi emitió un sonido de un mensaje entrante. Lo abrió y leyó:

Entrada al Distrito Dos por Correos. Id con precaución: grandes masas de umbríos y Sincorazón en su interior.


¿Alguno ha tenido noticias de los demás?—preguntó Saito muy oportuno.

El que había enviado el mensaje era Simbad. Kairi se apresuró a compartir la información.

Me avisan de que se puede entrar al Distrito Dos por Correos, pero hay muchos Umbríos y Sincorazón allí dentro. Iré para allá. ¿Alguien viene?

Esperaría alguna respuesta y después se iría hacia Correos con Awa-chan, después de preguntar su ubicación a Cloud y Aeris.


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Kairi y Awa-chan van hacia Correos.
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Re: [Evento Global] El Principio del Fin

Notapor xXOrbOOkXx » Lun May 15, 2017 11:01 pm

¿Qué es todo esto, Simbad?

«Ojalá lo supiera» Pensé. Y es que Maya había notado lo mismo que yo: habían tramos en los que el agua flotaba, otros en los que estaban congelados y la pesadez en el ambiente no se disipaba. Bajar a las alcantarillas había sido fácil. Lo difícil era salir de ellas.

No pasó mucho rato cuando a Maya le llegó un mensaje a su Dispositivo de Comunicación. Pude mirarlo por encima de su hombro, y las noticias no fueron halagüeñas: Dark Light había aparecido, y estaba en combate contra el verdadero Light y Clío. Con un escalofrío recordé a las répliques, pero no me animé a decir nada.

Al fin llegamos a la superficie. Dio gusto tomar algo de aire fresco después del ambiente claustrofóbico que me habían provocado las alcantarillas, pero nuestros problemas no habían acabado allí. Sin decir nada, enrollé el plano y me lo guardé. No sabía cuando lo podíamos necesitar.

Los portones del Distrito se alzaron ante nosotros. Noté el nerviosismo de Maya, que iba acorde con el mío. Ya lo llevaba sintiendo un rato, pero desde aquella distancia notaba la magia tras esas puertas. Un gran cúmulo de poder salvaje reunido en un lugar minúsculo. Fruncí el ceño con el estómago comprimido y comenzamos a andar hacia su dirección. Pero no pudimos andar más.


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Gabranth… —masculló Maya entre dientes. Sudé frío. Sabía que era uno de los Villanos Finales, pero verlo allí, plantado frente a nuestro objetivo me causó una fuerte opresión en el pecho. Su armadura estaba ajada por algunas partes, y no parecía estar en sus cinco sentidos, pero sabía el poder de los Villanos. No íbamos a poder con él si decidía atacar.

Me puse en guardia. ¿Habría estado luchando contra Aaron? ¿Podría ser cierto? La muchacha hizo lo propio, pero en sus ojos había aparecido una ligera duda. Me percaté de que la chica parecía conocer de primera mano al Villano.

Sé por qué estáis aquí, pero no puedo dejar que paséis. Marchaos, Caballeros de la Llave Espada.El Emperador se encuentra tras estas puertas. No debe ser molestado…. por el bien de todos. El poder que está acumulando no es algo que deba tratarse a la ligera. Tal vez ni siquiera por él...

¿Cómo? ¿Qué me estaba perdiendo? Parpadeé confuso. ¿No iba a atacarnos directamente? ¿Qué clase de Villano Final era?

Salvad a todos los que podáis. Llevaoslos de este mundo. Pero… no dejaré que crucéis estas puertas.

¿Pero de qué estás hablando? —intervino Maya a grito pelado. Abrí los ojos con espanto—. ¡¿Palamecia está vivo?! Nos habían dicho que Aaron... había acabado con él y se lo había… ugh…

¿¡Cómo?! ¿Qué? Algo había oído, pero no creí que esos rumores sin fundamentos fueran verdad. Y algo no iba bien. No me había topado con muchos Villanos a lo largo de mi vida, pero este parecía tener... Dudas. Respiré profundamente e intenté relajarme. Bueno, Maya parecía conocerle, y igual si abría la boca lo echaba todo a perder. Total, ya no podíamos estar en peor situación.

No podemos irnos sin más —sentenció decidida—. Está muy bien eso de ir a salvar a la gente, ¿pero de qué vale si vuelven a perder su hogar? Tú lo sabes mejor que yo. Ciudad de Paso es el lugar al que vienen los que han perdido su mundo a causa de la oscuridad, y no pienso dejar que pasen por ese mismo trago de nuevo, tú incluido. Por eso voy a ir ahí, descubrir qué está pasando y arreglarlo. Aunque tenga que aliarme con Palamecia. Es mi deber, quiero proteger este lugar y a su gente tanto como tú.

Mantuve un gesto neutro, pero de haber podido, hubiera arqueado una ceja. ¿Era una estratagema o puro honor? Suspiré, sin sentirme para nada cómodo con la situación. Maya podía decir misa y todo lo que quisiera, pero podíamos salir muy heridos si no medíamos nuestras palabras.

¿Qué haces aquí? ¿Solo has venido a detenernos? La vida de tu Emperador está en peligro, ¿no es verdad? Lo he notado en tu voz. Sé que le adoras, que le debes todo. ¿No piensas hacer nada al respecto? ¿Te quedarás aquí, de brazos cruzados?

Ahí es cuando había metido la pata. Rodé los ojos por un momento y volví a ponerme en tensión. Apelar al orgullo de una persona con poder nunca era buena idea.

Te conozco, sé que quieres salvar a la gente de este mundo y a Palamecia. Dime, ¿has luchado contra Aaron?

No iba a colar. Puede que las intenciones de la chica fueran las mejores del mundo, pero era imposible que su discurso hiciera mella en el Villano. Sin embargo no dije nada, porque en parte tenía razón y entendía sus motivos. Necesitábamos entrar allí dentro como fuera, y si eso implicaba aliarnos con un Villano por mucho que desconfiara tendríamos que hacerlo.

Me preparé. Todo dependía de cómo reaccionara el llamado Gabranth.
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"Bastión Hueco" Choque de culturas (Encuentro)
"Bastión Hueco" Novatos bajo la lluvia (Primer encuentro - Saga Novatos)
"Tierras del Reino" El nacimiento de un príncipe (Trama)
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"Castillo de Bestia" Solos entre lobos (Primer encuentro - Saga Délaissé)
"La Cité des Cloches" Los miserables (Encuentro)
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"Tierra de Dragones" Linda Flor (Misión)
"Bastión Hueco" Novatos bajo el amanecer (Segundo encuentro - Saga Novatos)
"Ciudad de Paso" Lo que vale la pena (Encuentro)
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"Torre de los Misterios" Orden en la Biblioteca (Misión)
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"Especial libre" El laberinto de los corazones
"Especial libre" San Valentín III
"Islas del Destino" Yincana veraniega
"Evento libre" La Mansión Encantada II: La Venganza

Cuarta Saga:


"Ciudad Inexistente" Dos velas para el diablo (Encuentro)
"Port Royal" De copas con la muerte (Encuentro)
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"La Cité des Cloches" Somnia (Segundo encuentro - Saga La musique du Silence)
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"Tierras del Reino" Donde duermen los gigantes (Trama)
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"Ciudad de Paso" Un nuevo Crepúsculo (Trama)
"Ciudad de Halloween" El ataque de Boogieman (Trama)
"La Cité des Clochés" Fuego Infernal (Trama)
"Espacio Profundo" Planta 313 (Encuentro)
"Mundo Inexistente" Pasajes Oscuros (Trama)
"Tierra de Partida" Penúltima Parada (Encuentro)
"Evento Global" El principio del fin
"Atlántica" Perdona pero quiero casarme contigo (Encuentro)

"Especial libre" El laberinto de los corazones II: Escape
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"Especial libre" El San Valentín está aquí
"Especial libre" ¡Exámenes finales
"Especial libre" La inocencia perdida
"Especial libre" Misión: Salvar la Navidad

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Re: [Evento Global] El Principio del Fin

Notapor Drazham » Lun May 15, 2017 11:24 pm

Era dolorosamente irónico. ¿Cómo algo de lo que estaba aterrado de hacer podía ser tan… fácil?

Tampoco es que fuese el resultado que Nikolai esperaba. Ya estaba saltando al ataque, cargado de adrenalina, cuando fue demasiado tarde: el arma de Cloud, la de Saito y la suya se hundieron al unísono en el pecho de Zande. Fue en ese mismo instante en el que se dio cuenta de lo que acaba de hacer, y el cuerpo entero se le heló.

Pero lo que más le espeluznó fue ver los labios de Zande torcerse en una grotesca sonrisa de no arrepentirse de nada.

Y entre zarcillos de oscuridad, su cuerpo desapareció. Nikolai, todavía con la mirada clavada en el punto en el que antes se hallaba su enemigo, bajó su arma lentamente. Notaba que el nudo en su garganta se hacía más pesado según pensaba en lo que acababa de cometer. Por mucho que fuese su enemigo. Por mucho que se hubiese interpuesto en su misión de salvar su mundo.

No tengáis remordimientos. Era él, o nosotros. No se hubiera detenido por mucho que lo hubierais intentado.

Eso ni se lo iba a discutir. Fue consciente desde el primer momento que no tendrían opción de detenerle de forma pacífica. Otra cosa fue cómo acabaron. Joder, entonces esa sensación de angustia que le corroía y mataba por dentro era el resultado de mancharse las manos de sangre…

«Al menos da gracias a que se trataba de un enemigo. ¿O acaso no decías qué harías todo lo que estuviese en tus manos por salvar tu hogar?».

Le debía una disculpa muy gorda a Nanashi después de haber cuestionado sus métodos durante la guerra como un ignorante.

Mientras, Saito se acercó a Ragun, quien ya estaba despertando de su letargo tras cortar de raíz el problema. Por su parte, Nikolai ladeó la vista hacia la imponente barrera y las diminutas motas que se filtraban. Frunció el ceño. Empezaba a dudar del motivo de los Villanos por levantarla y lo que se suponía que debía contener. El temblor de antes fue lo bastante monstruoso como para que en el resto de la ciudad se notase, sin lugar a dudas.

Ya puestos, no estaría de más tener informados a los demás de la causa. Sacó el móvil y le sacó una foto al estado de la barrera para adjuntarlo con el siguiente mensaje dirigido a todos los contactos de la misión que tuviese en su lista:

Explosión muy potente dentro de la barrera hace unos escasos minutos. Algo ha empezado a escaparse de esta justo después y extenderse por el cielo.


Debemos de llevarle a una zona segura, la herida es muy fea y aquí no pudo tratarla.

Aeris se refirió a Malik, que se había llevado un corte bastante grave protegiendo a las chicas. Saito la informó en el momento de la zona segura en el Distrito 1. Sí, sería lo mejor llevarlo junto a los Maestros, aunque Fátima se iba a llevar en buen susto en cuanto lo viese.

¿Qué haréis vosotros?

Intentar averiguar como entrar en la maldita barrera.

Y enterarnos de que está pasando ahí dentro para sacudir la ciudad entera —añadió, llevándose la mano al mentón y mirando a Ragun de reojo—. Habéis dicho que ibais hacia el ayuntamiento, ¿verdad? No me extrañaría que Palamecia se guardase algún as bajo la manga en caso de que les atacasen. —Y tal vez tuviese la misma costumbre que su maestra por tener sus hechizos y artefactos mágicos cerca—. Iré con vosotros.

Tampoco tenían otra opción mejor. Kairi mencionó algo de que un grupo dio con un supuesto punto flaco en la barrera por el que colarse. Sería buena idea tenerlo en cuenta, pero tenían el tiempo justo para arriesgarse y lanzarse sin conocer a lo que se enfrentaban. Vivo o muerto, no se fiaba ni un pelo de Mateus; siempre alardeaba de ir un paso por delante y tenía la corazonada de que debía de tener algo preparado.

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Nikolai irá para el ayuntamiento, pero seguirá a sus compañeros en caso de que la barrera caiga y salgán escopetadas para allá. No me pienso quedar forever alone, cabrones.

El mensaje les llegaría a todas las personas de la misión con las que ha llegado a tener contacto Nikolai, obviamente.
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Re: Ronda #5 - El Principio del Fin

Notapor Sombra » Mar May 16, 2017 12:18 am

Todo empezó a disolverse mientras veía como El Imperio era destruído por el antiguo dios. En lo alto de la ciudad, donde estaba el palacio se veían varias naves saliendo del mundo seguidas por la nave nodriza de los Cat´s.

Sin saber que llegaríamos a un lugar tan importante del Reino de la Luz.

***

Abrí los ojos de forma súbita y tragué una gran cantidad de aire, como si hubiese estado a punto de ahogarme. Intenté, desorientado ver lo que estaba pasando y reponerme para continuar la pelea, pero solo me encontré unas volutas oscuras desvaneciéndose.

No tengáis remordimientos. Era él, o nosotros. No se hubiera detenido por mucho que lo hubierais intentado —dijo Cloud.

Viendo la situación, no era difícil adivinar que Zande había muerto. No me sentí mal, como con la muerte de Rubicante... Aunque tampoco me sentí bien. Zande era cruel y despiadado, incluso aunque intenté calmarle exponiendo algo lógico no hizo resultado. Una metedura de pata por mi parte, pero no me arrepentía por haberlo intentado.

Sin embargo, me sentía como un inútil... Había estado casi todo el combate dentro de una pesadilla ilusoria.

Debemos de llevarle a una zona segura, la herida es muy fea y aquí no pudo tratarla —interrumpió Aeris.

En aquel momento reparé en Malik, estaba muy mal herido. Dios, si Fátima se enterase... Tan solo esperaba que se recuperase pronto. Malik era un buen compañero y temía que si caía él, viendo lo unidos que estaban la Maestra pudiese verse afectada.

En el Distrito 1 están nuestros Maestros y un portal a Tierra de Partida, es a donde estamos dirigiendo a los civiles para que evacuen lo más rápido posible.

»Gracias por cuidar de él.

¿Qué haréis vosotros?

Intentar averiguar como entrar en la maldita barrera.

Saito se aproximó a junta mía. Me levanté del suelo, todavía mareado y me llevé la mano a la cabeza. Me dolía bastante después de salir de la ilusión.

Me alegra que estés de vuelta, Maestro —Saito me hizo un gesto amistoso—. Aunque Simbad se haya ido, ¿vamos al ayuntamiento? Quizá alguien se nos quiera unir.

Será lo mejor, debemos descubrir más sobre esa cosa que nos impide llegar al Distrito 2 —asentí conforme.

¿Alguno ha tenido noticias de los demás?

Me avisan de que se puede entrar al Distrito Dos por Correos, pero hay muchos Umbríos y Sincorazón allí dentro. Iré para allá. ¿Alguien viene?

Me mordí el labio, no quería dejar a Kairi sola... Pero quería investigar el ayuntamiento.

Yo iré al ayuntamiento para intentar descubrir más sobre la barrera, tal vez incluso algo que la desactive —respondí a Kairi—. Cloud, ¿podrías acompañarla por favor?

Aunque viendo la situación, tal vez lo mejor para Cloud era acompañar a Aeris y poner a Malik a salvo.

Y enterarnos de que está pasando ahí dentro para sacudir la ciudad entera —dijo Niko mientras me miraba de reojo—. Habéis dicho que ibais hacia el ayuntamiento, ¿verdad? No me extrañaría que Palamecia se guardase algún as bajo la manga en caso de que les atacasen. Iré con vosotros.

Te lo agradezco, Niko.

En aquel momento, vi como Niko escribía algo en su teléfono. Noté como unos segundos después, mi móvil vibraba levemente. Encendí la pantalla y lo desbloqueé para leer el mensaje.

Explosión muy potente dentro de la barrera hace unos escasos minutos. Algo ha empezado a escaparse de esta justo después y extenderse por el cielo.


Veo que me he perdido bastante, ¿cuánto tiempo he estado fuera de juego?

Era una pregunta un tanto retórica, así que en realidad no importaba mucho si alguien respondía. Invoqué mi Llave Espada y me dirigí junto a mis compañeros hacia el Ayuntamiento.

Si llegábamos allí sin contratiempos haría una indicación al resto de introducirnos dentro tratando de no hacer ruido y evitar en la medida de lo posible ser descubiertos por nadie. Era mejor que nosotros supiésemos primero si había alguien dentro que viceversa.

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Ragun al ayuntamiento.
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Re: [Evento Global] El Principio del Fin

Notapor LightHelco » Mar May 16, 2017 12:20 am

Hojo se río de ellos, principalmente de la pobre droide que solo intentaba hacer su trabajo. La nariz de Dos parpadeó al intentar comprender al hombre, ya que no entendía como alguien en su estado podía ignorar de tal forma las amenazas y alertas.

Creo que su mente inferior ha tenido que confundir nuestras palabras, ya que estamos intentando salvar a cuantas más vidas posibles, incluyendo la suya y la de sus posibles aliados —apoyó a la respuesta que había dado segundos antes su Maestro —. ¿Y el alcalde de esta ciudad es un conocido criminal? Vaya, debería actualizar mi archivo de datos cuanto antes, aun voy por los sucesos ocurridos hace quince años en Ciudad de Halloween.

El científico les ignoró completamente, cansando a Light que finalmente dejó de apuntarle con su arma. Siguiéndole, la robot hizo lo propio con la suya y se centró en echarle un vistazo a todas aquellas maquinas y computadoras que habían en el edificio. Su cola se desenganchó y empezó a alargarse a la par que se movía de un lado a otro, mostrando lo inquieta que estaba Dos ante la posibilidad de acceder a tantas fuentes de información.

Al acercarse a uno, pudo sentir como saltaban chispas. Dio varios pasos hacia atrás por temor a que le ocurriera algo parecido a su última escapada a la nave de la Federación, por muy beneficioso que resultara al final aquella desafortunada descarga. Pero entonces se fijó en la maquina del centro, la única que no parecía a punto de estallar. Un enorme haz de luz salía de ella, indicando que podía ser la que mantenía la barrera en activo.

¿Qué están haciendo...?

La voz de Hojo atrajo la atención de la droide hacia un punto de la enorme maquina. Seis esferas de diferentes colores brillaron en ella, como intentando llamar la atención de los portadores. Dos nunca había visto algo igual y eso aumentaba su curiosidad. ¿Serían un nuevo tipo de baterías? Tenía que saberlo, porque eran brillantes y coloridas e… ¿irradiaban vida? Su nariz parpadeo y de seguido se iluminó casi al máximo.

Dos fue avanzando hacia la maquina, aprovechando la discusión que tenían los humanos para intentar llegar hasta ella. Su cola se meneaba como si fuera la de un perrito al que van a darle una golosina y las cámaras de sus ojos brillaban con tanta luz como su nariz. Estaba ante algo nuevo y tan desconocido para ella que no podía apartar la mirada, tampoco ayudaba el que fueran como luces de colores que atraerían a cualquier niño.

Especímenes de gran energía e indicios de tener tanto vida como razonamiento —empezó a balbucear Dos alargando sus manos hacia la maquina, a la par que su cola buscaba una ranura en donde clavarse —. Por el bien de las generaciones futuras y posibles avances tecnológicos en creación de energía, es necesario realizar un análisis ¡de inmediato!

Y antes de que alguien pudiera regañarla, Dos enganchó su cola a la máquina para poder hacerse con su control y obtener toda la información posible sobre ella y las esferas que usaba.

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▪ Descarga de Datos (HC) [Nivel 4][Requiere Raza Droide, Afinidad Electro] Haciendo uso de algún sistema USB o similar con el que cuenta en su cuerpo, el usuario accede a los datos de cualquier enemigo u objeto electrónico o informatico y se hace con información de este, pudiendo robarle estados alterados beneficiosos (Mejoras de Estadísticas, Inmunidades temporales, etc). En caso de ordenadores u otros objetos, ayudará al acceso de datos y obtención de estos.
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Re: [Evento Global] El Principio del Fin

Notapor RedXIII » Mar May 16, 2017 12:45 am

Intenso


El fuego abrasó la pierna de Hiro, quien perdió parte del bajo del pantalón.

¡Ah, otra quemadura! — Exclamó al sentir el calor de esta, no era nada grabe,pero aun así era molesto sentir la leve quemadura en su piel.


León apareció, interponiéndose entre el mestizo y una bola de fuego la cual no había visto. Aquel fuerte y grande guerrero no solo paró aquella temible bola de fuego, sino que además contraatacó. Una a una las bolas de fuego que invocaba el payaso eran repelidas por los disparos de León.

¡Nosotros solos no podemos contra él!

¡Es lo que he dicho yo, pero nadie me hace caso! — se reagrupó con Hiro—. ¡Eh, mirad, la puerta a la casa de Merlín se ha abierto! Ha debido de ser la bola de fuego del payaso...

De nada — Dijo Hiro, ya que el motivo por el cual provocó antes a Kefka era para que abriera la puerta con uno de sus hechizos —Aun así... no podemos dejar que Kefka escape, si secuestró a los ciudadanos antes, podría ir al otro distrito y luego a... — No quería marcharse, pero todos estaban algo malheridos y no se encontraban en una posición ventajosa.

Retrocedamos lentamente hacia la puerta — Susurró a León y Yuffie —Con un poco de suerte podremos atacarle cuando nos siga — Preparó sus puños y lentamente empezó a retroceder de espaldas a la puerta mientras disparaba constantemente al payaso: uno, dos, tres, cuatro, cinco, seis... los disparos no cesaban mientras el pelirrojo retrocedía. Si Yuffie y León no podían parar los ataques de Kefka, los esquivaría con otro Disparo Impulsor.

No sabía que encontrarían al otro lado de aquella puerta, solo rezaba porqué no fueran más problemas.


***


Me...han dejado tirado — Proclamó Goei, quien se había quedado atrás y no podía pasar entre los Sincorazón y Kefka... ¿O sí? Hiro, al percatarse de la ausencia de su compañero, usó su silbato, el pequeño Moguri, gracias dicho objeto, pudo aparecer al lado del mestizo sin dificultad, sanando con su Cura al miembro del equipo que estuviera en el peor estado.

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▪ Disparo impulsor (HC) [Nivel 5] Recarga el arma de fuego con una bala inofensiva que propulsa a Hiro unos metros en dirección contraria a donde apunta.
▪ Cura (HM) [Nivel 5] [Requiere Poder Mágico: 7]. Cura las heridas más leves y alivia un poco la fatiga.
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Awards chupis:

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No hagas click aquí, despertarás a la conejita.

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Oh, no, hiciste, click, has despertado a la conejita.

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Re: [Evento Global] El Principio del Fin

Notapor Sito » Mar May 16, 2017 12:52 am

No... quiero... VUESTRA ESTÚPIDA COMPASIÓN.

No tuvo tiempo de contestar o de insistir. Zande destrozó la lanza de Nicoxa rápidamente y procedió a atacarla con fiereza. Sin poder defenderse, cerró los ojos por instinto esperando el golpe que se avecinaba cuando alguien la empujó antes de que el ataque impactara en la chica.

Sorprendida, abrió los ojos: Malik la había salvado en el último momento, pero fue herido en el proceso.

¡Malik! —gritó la bella joven mientras sostenía a su compañero. Iba a agradecerle lo que había hecho cuando recordó lo que sus compañeros se proponían hacer y se giró para comprobar cómo se desenvolvía la batalla.

Cloud, Nikolai y Saito unieron fuerzas para atacar al villano. Atacaron a matar, tal y como se habían propuesto, y el resultado fue el esperado en esas circunstancias.

Zande comenzó a desvanecerse para siempre, aunque con una sonrisa en la cara que hizo entristecer a Nicoxa. Se pasó el brazo de Malik por detrás de su cuello y puso una mano sobre su trasero para ayudarle a desplazarse hasta una pared, donde le dejaría tras asegurarse de que estuviera bien y después de darle un beso en la frente por haber sido tan valiente y poner su vida en peligro por salvar la suya.

Siento haberme puesto en peligro así —le dijo antes de despedirse y acercarse a donde estaba Cloud.

No tengáis remordimientos. Era él, o nosotros. No se hubiera detenido por mucho que lo hubierais intentado

Nicoxa apretó el puño con fuerza y dio un paso firme hacia él. No podía contenerse a pesar de que estuviera herido y hubiera contribuido a sacarla viva de esa situación.

¿Cómo lo sabes? ¿Acaso puedes ponerte en su lugar, acaso sabes lo que se le pasaba por la cabeza, por lo que podía estar pasando? Podríais haberle noqueado, hacerle perder el conocimiento o qué se yo. Siempre hay una manera...

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»Pero le habéis matado.

No estaba cabreada con ellos. Podía entender lo que habían hecho ya que la situación en general había propiciado ese desenlace. Ni Zande estaba por la labor de ponerles las cosas fácil ni sus compañeros iban a arriesgarse a que uno de ellos fuera el que perdiera la vida.

Debería estarles agradecida por lo que habían hecho, y en el fondo lo estaba. Pero sentía una angustia por dentro que no podía describir con palabras. Había sentido la desesperación que emanaba de su enemigo durante el combate y, a pesar de las cosas que decía o lo terco que demostró ser, Nicoxa tenía la necesidad de consolarse pensando que en el fondo quería ser salvado.

Lo siento. Estoy siendo injusta con vosotros, pero la situación ha podido conmigo —les sonrió y una lágrima cayó por su ojo sin poder contenerla. Traía de casa otras preocupaciones relacionadas con Alec y Colibritany. Se le estaba juntando todo y al final se le había desbordado—. Supongo que he pecado de ingenua por creer que todos tenemos algo bueno en lo más profundo de nosotros... algo que merece ser salvado.

Qué dramática se había puesto de repente, pero no podía evitar sentirse así. Se limpió la cara con una toallita desmaquillante y se sonó los mocos. Decidió callarse a partir de ahí para escuchar lo que tenían que decir los demás.

Me avisan de que se puede entrar al Distrito Dos por Correos, pero hay muchos Umbríos y Sincorazón allí dentro. Iré para allá. ¿Alguien viene?

Nicoxa pensaba sobre qué hacer a continuación, y decidió finalmente acompañar a Kairi hacia Correos. Había sido la única que también intentó hacer las cosas de la misma manera que ella y le parecía muy peligroso dejar que fuera sola por ese lugar.

Ven, dame la mano y no nos separemos —le tendió el brazo y le guiñó el ojo a su compañera—. ¿Vamos?
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v. Ficha de Nicoxa .v
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El Principio del Fin - Ronda #6

Notapor Denna » Vie May 19, 2017 11:44 pm

Light, Dos, Keiko y Hiro


No me digas que… ¿Estás usando a Ifrit y los demás esper como fuente de energía para la barrera? Es horrible.

Ifrit. ¿Así se llaman? —murmuró Hojo con indiferencia, sin apenas levantar la mirada de las máquinas—. Qué bien.

Tan enfrascado estaba en lo que hacía que no se percató de que Dos avanzaba hacia las magicitas. Tanto mejor; el espectáculo de luces y cola en movimiento no era demasiado sutil. Clío le dirigió una mirada de censura y se colocó entre ella y Hojo, tapándola con su cuerpo. Keiko permaneció extrañamente quieta y silenciosa.

A su vez, Light interpeló al científico:

Tonterías, ¡mi laboratorio funciona a la perfección! —ladró—. Y los esper me darán todo el tiempo que necesito. ¿Con quién te crees que estás hablando?

Desechó sus palabras con un gesto desdeñoso.

Si tantas ganas tenéis de ir a jugar a los héroes, bajad y seguid el túnel. —Hojo tiró de una palanca y las paredes retumbaron. Cerca de Light, el suelo giró y se abrió, revelando un pasadizo secreto que desaparecía bajo el suelo—. Va directo a la plaza del Distrito 2. Vosotros mismos. —Una extraña sonrisa apareció en sus labios—. Por supuesto que no dejaréis la situación en manos del Emperador. Seguro que él... agradecerá vuestra ayuda. ¡Qué ganas tengo de ver...!

Nunca sabrían qué quería ver Hojo. Los gritos de los esper se intensificaron y todos se giraron hacia las esferas. Hacia Dos. La droide acababa de conectarse a la máquina y descargaba sus datos, consiguiendo un informe detallado del funcionamiento de ésta y del de las magicitas: cada una contenía un esper, una criatura legendaria de gran poder mágico, suficiente como para poder crear un arma de destrucción masiva... o una barrera gigantesca e indestructible, como la que cubría todo el Distrito 2. Los esper luchaban por escapar, pero los rayos extraían su fuerza vital a un ritmo elevado, canalizándolo sobre la barrera. Las lecturas sobre la extracción rozaban los límites de capacidad, y la descarga de Dos no hacía más que calentar más y más la máquina...

Quizás su intrusión fue un golpe de suerte; el empujoncito necesario para que todo se desencadenara.

La puerta se abrió con un golpe seco. Las llamas devoraron el interior de la casa.

Y luego, oscuridad.

* * *


Kefka saltó al suelo en vista de que retrocedían y, con la sonrisa victoriosa de un cazador que acorralaba a su presa, echó a reír:

Pero ¿qué creéis, QUE NO PUEDO SEGUIROS HASTA AHÍ O QUÉ?

León disparó una bola de fuego que se sumó a los disparos de Hiro, pero Kefka los esquivaba prácticamente bailando. Un muro de hielo intentó cerrarles el paso, pero el Aprendiz lo atravesó sin demasiada dificultad con el retroceso de su Disparo impulsor mientras el payaso les lanzaba toda clase de proyectiles elementales.

¡Entrad! ¡Deprisa! —exclamó Yuffie, empujando a los chicos hacia la puerta. Kefka permanecía atrás mientras una colosal bola de fuego salía disparada hacia ellos—. ¡Esto se va a poner feo!

* * *


El hechizo de Kefka había impactado contra la casa de Merlín con tanta potencia que había reducido el edificio a escombros. Había arrasado con el improvisado laboratorio, y Hojo había desaparecido; a juzgar por el estado del lugar podían llegar a la conclusión de que, al igual que el túnel, había quedado sepultado bajo la casa.

Pero no había sucedido eso con Light, Keiko, Dos y Clío, que se encontraban en medio de un círculo de tierra intacto, protegidos por una pequeña barrera que se deshizo al momento.

La máquina que extraía la energía de los esper ya no existía. Las esferas levitaban a su alrededor. Brillaban con la fuerza de estrellas y habían pagado con creces su liberación.

De las seis que había, cinco se elevaron hacia el cielo con un sonido pletórico. Todas menos una. Lentamente, la magicita de color rojo se consumió a sí misma, dejando paso a la criatura que antaño había contenido:

Spoiler: Mostrar
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Ifrit clavó sus ojos en Kefka, cuya sonrisita se había esfumado por completo. Ahora en su expresión había algo muy nuevo: miedo. El mayor de los horrores. Ifrit sonrió enseñando todos sus enormes dientes y dijo con un rugido que helaba la sangre:

Te recuerdo. Tú fuiste quien me encerró.

N-no, no... Un momento... ¡ESPERA!

El esper se abalanzó sobre Kefka. El payaso ni siquiera tuvo la oportunidad de correr o defenderse, ni mucho menos de que alguien interviniera por él. Por suerte, Ifrit no le dedicó mucho tiempo. Enseguida siguió a los demás hacia el cielo, aunque no antes de inclinar con ¿respeto? la cabeza hacia Dos. Podían llegar a preguntarle algo si se atrevían, pero tenían que considerar que una criatura como él no prestaba especial atención a los mortales. Y una vez, como Light seguro que recordaría, habían sido enemigos. Sin embargo, parecía dispuesto a olvidarlo por esta ocasión.

La barrera había desaparecido y ya nada les impedía ir hacia el Distrito 2. No tenían mucho tiempo para ponerse al corriente, pero Squall y Yuffie optarían por acompañarles, al menos de momento. Su prioridad, como ya habían demostrado, era la protección y evacuación de los ciudadanos que pudieran seguir con vida. Hiro podía elegir unirse a ellos, si quería.

Encontrarían un camino despejado, los Sincorazón e Incorpóreos que había eran atraídos por el corazón del mundo como polillas hacia la luz, y apenas presentaban batalla cuando intentaban eliminarlos.

Puede que pensaran que trataba de un golpe de suerte. Nada más lejos de la realidad. Pues lo que presenciaban era ni más ni menos que el principio del fin.

Light
VIT: 76/76
PH: 35/72
Alas de Nefilim: 3 turnos restantes


Gaomon
VIT: 20/36
PH: 17/20


Dos
VIT: 11/20
PH: 5/16


Keiko
VIT: 32/32
PH: 12/26


Hiro
VIT: 17/28
PH: 10/38


Goei
VIT: 18/18
PH: 0/10


Spoiler: Mostrar
Vuestra trama continúa abajo a menos que no vayáis al Distrito 2. En ese caso, elegid nuevo destino en esta ronda.


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Maya, Simbad, Nikolai y Saito


Gabranth apretó la empuñadura de su espada. Se hizo un silencio tenso, pero más allá de ese gesto, puede que involuntario, el Villano no hizo ademán de atacarles.

El Emperador... Aaron lo asesinó, sí. Pero sólo a uno de ellos. Su otra mitad sigue presentando batalla.

No dio más explicaciones al respecto. Puede que no las tuviera, o eso indicaba la levísima inseguridad en su voz.

Este mundo no aguantará mucho tiempo —añadió—. Marchaos ahora que podéis. Hay honor en la retirada, y más si podéis salvar vidas inocentes. Desistid o sufriréis las consecuencias.

No podemos irnos sin más. Está muy bien eso de ir a salvar a la gente, ¿pero de qué vale si vuelven a perder su hogar? —Gabranth no contestó ni se movió—. Tú lo sabes mejor que yo. Ciudad de Paso es el lugar al que vienen los que han perdido su mundo a causa de la oscuridad, y no pienso dejar que pasen por ese mismo trago de nuevo, tú incluido. Por eso voy a ir ahí, descubrir qué está pasando y arreglarlo. Aunque tenga que aliarme con Palamecia. Es mi deber, quiero proteger este lugar y a su gente tanto como tú.

Las palabras «aliarse con el Emperador» rompieron la postura regia de Gabranth. Sobresaltado, el Villano miró a Maya. Su casco dejaba entrever sus ojos, abiertos como platos.

No lo harías. —Se volvió hacia Simbad—. No lo haríais.

Pero incluso de eso parecía dudar.

¿Qué haces aquí?

El Juez escuchó a la niña con renovada serenidad, pero su máscara era visible. Sólo cuando ésta terminó de hablar volvió a moverse, y les confirmó:

Sí. He luchado contra esa criatura a la que llamáis Aaron. El Emperador está en peligro por su culpa, se ha convertido en esa... cosa con tal de derrotarle. Pero no os confundáis: este sitio no sólo es peligroso por Aaron. El poder de Mateus... Nunca había visto nada igual. Jamás. Si entrarais, si os viera... Os destruiría en un instante.

Gabranth vaciló.

Ha matado a Seymour —terminó por confesar. Una nota de pánico tañó su voz por un instante—. Ha perdido el control, o lo va a perder muy pronto. Por eso no puedo dejaros pasar.

Saito y Nikolai llegaron en ese momento, a tiempo de escuchar el último diálogo. La barrera había desaparecido con un estallido de luz, desvaneciéndose como si jamás hubiera existido. Fue la señal que habían estado buscando, y Nikolai y Saito se separaron de Ragun para ir al Distrito 2.

Llegar no les había sido difícil a pesar de la cantidad de enemigos que había por toda Ciudad de Paso, pero la situación que encontraron al llegar desde luego no fue la que imaginaron.

Gabranth se puso en tensión al verles llegar, pero enseguida notaron que no había una pelea. No de momento, al menos, lo cual lo hacía todo más extraño.

Una alianza con un Villano Final... ¿Era posible? La seguridad de Gabranth se resquebrajaba por momentos y, con todo lo que estaban viviendo, quizá fuera la mejor opción. Porque si Mateus estaba perdiendo el control, tal y como aseguraba Gabranth, intervenir cuanto antes podía ser decisivo para el destino de Ciudad de Paso.

Pero iban a necesitar mucho cuidado a la hora de elegir sus siguientes palabras. El Juez valoraba por encima de todo la seguridad de Mateus, loco de poder o no, y una acusación desafortunada podría tener resultados catastróficos.

Maya
VIT: 40/40
PH: 34/46


Ukki
VIT: 10/10
PH: 6/6


Simbad
VIT: 48/48
PH: 33/48


Nikolai
VIT: 44/44
PH: 15/36


Saic
VIT: 22/22
PH: 12/12


Saito
VIT: 60/80
PH: 20/42

Poción y éter retirados.


Spoiler: Mostrar
Light ha sido el único en indicar que iba al Distrito 2 y llega al final de esta parte, después de Saito y Nikolai, junto a Clío, León y Yuffie. Los demás podéis engancharos sin problema o bien elegir otro destino y especificad más la próxima vez, que ninguno es novato ya.



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Ragun


Ragun no hizo ademán de seguir a sus compañeros hacia la barrera, de modo que se encaminó solo en dirección al ayuntamiento.

Con la barrera desaparecida, Sincorazón e Incorpóreos no se metieron en su camino. Todos se dirigían al Distrito 2, dándole vía libre, pues ni siquiera intentaron atacarle. En cuanto a los Villanos Finales, si quedaba alguno en Ciudad de Paso ya habría huido, como Kuja y Ultimecia, pues ninguna barrera ni defensa trató de impedirle llegar al ayuntamiento. El edificio parecía vacío, muerto, como si esperara al fin del mundo.

Entrar no le supuso ningún problema. La puerta cedió con facilidad ante la Llave Espada y tenía total libertad de movimiento. La pregunta era, ¿a dónde ir? Puede que Mateus, como alcalde, tuviera su despacho en alguna parte, pero el piso en el que se encontraba —la recepción— no había nada que indicara su localización. Podía mirar los ordenadores, arriesgarse a subir al piso de arriba, o...

Huelo la oscuridad en ti, criatura.

Ragun apenas tuvo tiempo de darse la vuelta cuando unas manos invisibles lo sujetaron, anclándolo ahí donde estaba. Forcejear era inútil, cuanto más se resistía más parecían apretarle sus ataduras, y sus captores no tenían intención alguna de querer liberarle. ¿O sí? Desde luego, una de las caras se le haría muy familiar.

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Chihiro. Habían sabido de ella por última vez en el Mundo Inexistente, donde se les había aparecido como una extraña aliada. ¿Qué ocurría ahora? ¿Y quién era la persona que la acompañaba?

La mujer rió entre dientes, sin dejar de observar a Ragun.

Nada de esto es necesario, Karel —dijo con suavidad—. Ni siquiera en estos primeros momentos, mientras me acostumbro a mi nueva forma, los Caballeros suponen una amenaza.

Señora...

No importa. Suéltale en cuanto nos vayamos. Mi paciencia tiene un límite, y no tengo intención de matarlo... todavía. —La sonrisa de Chihiro se ensanchó. Un aura de oscuridad nacía de su corazón, se arremolinaba entorno a su cuerpo. Oscuridad absoluta—. En realidad, me viene bastante bien. Que sirva para darles el mensaje a los demás.

El tal Karel hizo un gesto, y Ragun se vio empujado hacia ellos. Chihiro extendió los dedos y rodeó su cuello con la mano. Tenía mucha fuerza. Muchísima. No dudó de que, si se lo propusiera, podría matarle ahí mismo, sólo con ese simple gesto.

Avisa a Ronin y a todos tus Maestros. Avisa a todo el mundo. Chihiro está muerta y yo, Aaron, Xihn, soy más fuerte que nunca. —Le clavó las uñas—. Si sobrevivís a esta noche —y, oh, no me cabe la menor duda de que así será—, tendréis noticias mías pronto, muy pronto. Esto sólo acaba de empezar.

El cuerpo de Chihiro soltó a Ragun cuando una mueca de dolor cruzó su rostro y se tambaleó hacia atrás, pero Karel la sujetó a tiempo de evitar que cayera. Quizá Ragun pensara que aquel momento de debilidad inesperada sería una buena idea para intentar huir. Después de todo no podía fiarse de la palabra de Aaron.

En ese momento, un torrente de Oscuridad surgió de dentro de Chihiro e impactó contra el cuerpo del joven Maestro. Dolió más de lo que cabía esperar aunque, por suerte, le liberó de sus ataduras. Chocó contra las estanterías de recepción; el golpe lo aturdió, pero aún estaría a tiempo de escuchar la despedida de Aaron, que había palidecido un tanto y se había zafado de Karel.

Nunca llegáis a tiempo, ¿no es así? —preguntó con una mirada cargada de odio. Ya no quedaba ni rastro de la sonrisa burlona, de la sorna de antes—Me pregunto qué habría ocurrido si hubierais pensado. Chihiro, por ejemplo. Esa traidora podría continuar viva.

»No sobreviviréis mucho tiempo de seguir así. Vete ahora, criatura, y lleva mi mensaje a todo el mundo.


Un portal se tragó a los dos personajes, dejando a Ragun solo, medio aturdido y, con toda probabilidad, muy confundido. Tenía muchas cosas en las que pensar, demasiadas teniendo en cuenta la situación en la que se encontraba.

Aaron era Chihiro ahora. Y estaba reclutando gente, por lo visto. ¿Para qué? A juzgar por sus palabras... para una guerra abierta contra las Órdenes. Y Ciudad de Paso caía lentamente en la oscuridad, igual que Villa Crepúsculo en su día.

Ragun
VIT: 87/144
PH: 36/72


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Kairi y Nicoxa


Mientras el grupo se separaba de nuevo, Cloud y Aeris cargaron con Malik, cada uno apoyándolo sobre sus hombros mientras la chica seguía con su magia curativa. Antes de encaminarse hacia el Distrito 1, pero, Aeris se volvió hacia Nicoxa.

Personalmente, creo que eres muy noble —le dijo con una débil sonrisa—. Creer en la bondad requiere mucho valor y no siempre es fácil.

Cloud miró en su dirección y negó con la cabeza. Entre dientes, murmuró algo que sonó a «ingenuidad», pero Aeris no le hizo ni caso. Aplicó un hechizo curativo sobre Nicoxa y Kairi, que sintieron cómo recuperaban las fuerzas de inmediato.

Sin embargo, a veces no hay otra opción. No hay hechizos que cambien a las personas ni arreglen cualquier problema. Hay que aprender a tomar decisiones duras y seguir adelante como mejor podamos. Id con cuidado, ¡y buena suerte!

* * *


La barrera cayó justo antes de que entraran en la oficina de correos. Junto con ella, seis luces se elevaron en el firmamento. Resultó un contraste, correos seguía sumido en la oscuridad a excepción de los ojos de los Sincorazón e Incorpóreos que seguían ahí, a punto de caer sobre ambas Aprendizas. Encontrar el pasadizo del que Simbad les había hablado iba a ser complicado si no empezaban a moverse. Y, sobre todo, a defenderse.

Nicoxa
VIT: 46/46
PH: 32/32


Kairi
VIT: 30/30
PH: 38/38


Awa-chan
VIT: 14/14
PH: 10/10


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Re: El Principio del Fin - Ronda #6

Notapor Sombra » Lun May 22, 2017 12:51 am

La barrera estalló en aquel momento. Niko y Saito se dispusieron a ir en dirección al Distrito 2, por lo que no haría faltar ir al ayuntamiento... Sin embargo, sentía algo allí dentro, atrayéndome como un imán. Algo se revolvía en mi interior, un instinto más primario de lo que creía posible... Me recordaba a lo que sentía cuando veía un corazón saliendo de un cuerpo.

Quiero ir a comprobar una cosa en el ayuntamiento, podéis ir yendo al Distrito 2. Iré directamente hacia allí cuando acabe con un Portal o el Glider —avisé a ambos aprendices—. Tened cuidado.

Con aquello dicho, apuré el paso hacia el ayuntamiento separándome de los dos aprendices.

Mis ojos brillaban deseando descubrir que era lo que me "llamaba", que era aquella atracción. Los sincorazón e incorpóreos pasaban de largo dirigiéndose al centro de la vorágine, ignorándome. Alcancé el ayuntamiento poco después, nada ni nadie se interpuso en mi paso, ni siquiera vi civiles por el camino.

En cuanto mis ojos se posaron sobre el edificio mis pelos se erizaron como algún tipo de aviso. No sabía lo que era, pero era evidente que algo iba mal, ¿algún Villano Final? ¿Las famosas Magicitas? ¿Los fragmentos de las Piedras Elementales? ¿O algo peor? Sin embargo, incluso con dudas tenía aquella insaciable necesidad de saber lo que había en el interior del edificio.

Fuera lo que fuese era... Abrumador.

Materialicé mi llave espada para abrir el edificio, que permanecía cerrado. No hubo trampas, ni me recibieron con ataques, por un instante dejé de percibir aquella energía. ¿Se había ido? ¿O aquella cosa, fuera lo que fuese había dejado de emitir aquella sensación adrede para camuflarse? Conocía el ayuntamiento, sabía que las escaleras que bajaban llevaban a una cueva donde había estado la Piedra Elemental de Tierra, del mismo modo la oficina de Mateus estaba arriba, aunque no recordaba cual era exactamente... Esperaba que hubiese algún cartel con su nombre junto a la puerta.

Sin embargo, lo más inteligente era mirar el ordenador. Posiblemente había algún registro con mapas y similares.


Huelo la oscuridad en ti, criatura.

La energía extraña volvió de golpe. Mis pelo, ya algo erizado se puso prácticamente de punta al escuchar aquella voz, que me resultaba tan familiar... Aunque con un toque más tenebroso, macabro. Intenté girarme cuando algo me sujetó impidiendo que me moviese. Eran manos, pero no las podía ver. Traté de evadir el agarre fusionándome con el suelo con Evasión Sombría, pero fue un intento en vano. No pude hacer nada. El agarre de aquellas manos se hizo más fuerte, tanto que por un instante sentí que mis huesos quebrarían si seguía intentando soltarme. Contuve un gruñido y traté de girar mi cabeza hacia la voz.

Chihiro y... ¿Quién era la otra persona?

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El desconocido, un hombre extraño, parecía enfermo o desquiciado. Era extremadamente pálido y vestía un vestido largo y negro de gala en mal estado. Su palidez contrastaba con el color de su cabello tan liso como largo.

Pero era muy raro, aunque no había conocido a penas a Chihiro había escuchado cosas de los informes de misiones más recientes. Chihiro había colaborado con nosotros en Mundo Inexistente, antes de que éste cayera en la oscuridad. ¿Por qué había decidido volver a...?

Aaron. Aaron la había atrapado, ¿había corrompido con sus poderes a Chihiro? No era algo que me pareciese imposible, Light sospechaba que era lo que mantenía a Dark Light de su lado; La Corrupción.

El desconocido rió clavando sus ojos en mí... Sin embargo, los míos estaban fijos en Chihiro. Pese a que sabía que era Chihiro... ¿Qué era lo que sentía dentro de ella? Era como si la hubiesen vaciado y llenado con algo diferente, algo vomitivo.

Tenía miedo. Miedo porque me sentía desnudo y frágil frente a ellos, porque sabía que era incapaz de defenderme, porque notaba algo abrumador justo frente a mis ojos, algo que no sería capaz de vencer solo. Mi corazón latía a mil por hora, parecía como si quisiese escapar de mi cuerpo... Sin embargo, algo dentro de mí seguía ansiando ese "algo" que había dentro de Chihiro. Era su oscuridad, era algo tan enorme, tan infinito que... Sentía la necesidad de poseerlo casi de una manera enfermiza.

Por un segundo, mientras la miraba sentí perderme a mí mismo. Bajé mis ojos tratando de evitar el contacto visual con ella, asustado como una cebra de un león.

Nada de esto es necesario, Karel —dijo Chihiro—. Ni siquiera en estos primeros momentos, mientras me acostumbro a mi nueva forma, los Caballeros suponen una amenaza.

¿Nueva forma? ¿De qué demonios hablaba?

Señora...

No importa. Suéltale en cuanto nos vayamos. Mi paciencia tiene un límite, y no tengo intención de matarlo... todavía. —Un escalofrío recorrió mi espina dorsal cuando vi, por el rabillo del ojo como la sonrisa de Chihiro se ensanchaba.

Mientras hablaba, una ingente cantidad de oscuridad surgió de su cuerpo rodeándola. Sentí como mi cabeza iba a explotar mientras aquel deseo de poseer aquella oscuridad aumentaba al verla con mis propios ojos. No podía pensar con claridad y me era imposible distinguir quién tenía el control de mi cuerpo, ¿la oscuridad, Chihiro, mi instinto sincorazón o yo?

En realidad, me viene bastante bien. Que sirva para darles el mensaje a los demás.

Karel, como había llamado Chihiro antes hizo un gesto con la mano que a penas pude percibir y empecé a sentir como una fuerza invisible me atraía hacia ellos. Chihiro extendió su mano y rodeó con ella mi cuello. La presión que ejercía era inhumana y aunque no hacía una fuerza tan grande para romper un cuello... Aquella demostración de fuerza era suficiente como para dejar claro que podría matarme en aquel mismo momento, si no lo había hecho aún era porque o me necesitaba o me veía demasiado insignificante.

Con aquel agarre me era imposible respirar, pero era evidente que no estaba intentando matarme... Aunque saber aquello no me pareció verdaderamente relajante teniendo en cuenta que la tenía cara a cara.

Avisa a Ronin y a todos tus Maestros. Avisa a todo el mundo. Chihiro está muerta y yo, Aaron, Xihn, soy más fuerte que nunca.

Proferí un grito cuando sentí como sus uñas se clavaban en la carne de mi garganta y unas lágrimas se resbalaron por mis mejillas, en aquel momento no pensé con claridad el significado de sus palabras.

Si sobrevivís a esta noche —y, oh, no me cabe la menor duda de que así será—, tendréis noticias mías pronto, muy pronto. Esto sólo acaba de empezar.

Chihiro... No, Xihn se tambaleó y estuvo a punto de caer hacia atrás. Karel la sujetó a tiempo evitando que cayese al suelo. Si no hubiese estado sujeto, tal vez habría sido el mejor y único momento de debilidad que hubiese mostrado ante un enemigo y tal vez... Solo tal vez podría haber acabado con ella de una sola vez.

Y estaba seguro de que me arrepentiría toda mi vida por no haber sido capaz de liberarme y haber perdido aquella oportunidad de oro, aunque hubiese significado que Karel hubiese podido matarme segundos después.

Del cuerpo de Chihiro salió un potente torrente de oscuridad cuando la mujer puso un gesto de dolor. Fue muy doloroso, pues no solo sentía que me llenaba de una forma inabarcable... Era tanto poder oscuro que supe de inmediato que algo así era inalcanzable para mí, que mi cuerpo explotaría si llegase a poseer una pequeña fracción de aquella infinidad. También el golpe era brutal, tanto que mis ataduras fueron destruídas. Salí despedido hacia atrás y me golpeé contra algo que no pude ver, cegado por aquella energía.

Aturdido tras recibir aquel impacto, observé desde el suelo a una Chihiro tambalenante y pálida que acababa de zafarse de la ayuda de aquel tal Karel.

Nunca llegáis a tiempo, ¿no es así? —los ojos de Chihiro se clavaron en mí una vez más—Me pregunto qué habría ocurrido si hubierais pensado. Chihiro, por ejemplo. Esa traidora podría continuar viva.

»No sobreviviréis mucho tiempo de seguir así. Vete ahora, criatura, y lleva mi mensaje a todo el mundo.


Quise abrir la boca, dirigir la palabra a Aaron, o Xihn como se había hecho llamar... Quería preguntarle demasiadas cosas, todas resumidas en un simple "por qué", pero mi voz no salió y fue ahogada por el sonido del portal que se tragó a ambos dejándome solo, y solo en ese momento pude relajar mis músculos y respirar tranquilo.

Mareado, traté de levantarme apoyándome en la mesa de recepción. Todas las cosas que habían estado encima de ella habían salido volando contra las paredes por aquel torrente de oscuridad, e incluso algunas puertas se habían desencajado quedando sujetas por alguna bisagra que había resultado más resistente que el resto.

Busqué una silla que estuviese entera y la puse de pie, me dejé caer sobre ella. Necesitaba un respiro, no solo porque me sentía agotado físicamente, sino también mentalmente. Estando en su presencia, tan cerca... Me sentía perdido, era como si mi mente fuese destrozada por él... Como si el instinto más primario y básico que había tenido como sincorazón despertase y desease obedecerle. Era obvio que los sincorazón podían obedecer a algo más poderoso que ellos, ¿pero tanta diferencia había como para que fuese capaz de dinamitar mi propia cordura? ¿Era humanamente posible aquello?

Y en primer lugar... ¿Cómo era posible que Aaron estuviese en el cuerpo de Chihiro? ¿Era algún tipo de magia arcana para transferir el corazón y la mente a otro cuerpo? ¿Y qué era Xihn? ¿Por qué se había autoproclamado así? ¿Tenía importancia? ¿Quería que le diese aquel mensaje a Ronin porque el nombre Xihn debería decirle algo?

Era un milagro que siguiese vivo, había escuchado que los que se habían enfrentado a la Reminiscencia de Aaron en el Castillo del Olvido se habían topado con alguien caprichoso y bipolar, que hubiese mantenido su palabra y no me hubiese matado tras decir que no lo haría... Era un milagro, no tenía otro nombre.

Varias lágrimas surcaron mis mejillas y estallé en llanto mientras temblaba muerto de miedo. No era la primera vez que lloraba, y muchas veces había estado cerca de morir sin que me afectase de aquella forma pero... Aquella vez era diferente. Chihiro, la mujer que el Maestro Kazuki había amado había muerto. No me cabía duda de que Aaron no mentía en aquello, ¿aunque podía seguir llamándole Aaron?

Esperé algunos minutos en silencio a tranquilizarme del todo. Me limpié las lágrimas y me puse en pie cuando dejé de sentirme mareado por el golpe.

No podía quedarme allí más tiempo, la barrera del Distrito 2 había caído. Tenía que reunirme con el resto y avisarles de que Aaron había cambiado de cuerpo... Y que se hacía llamar Xihn. Estaba seguro de que haber usado aquel nombre era de algún modo importante aunque escapase de mi entendimiento.

Me dirigí a la salida del ayuntamiento e invoqué mi Llave Espada. Hice aparecer mi Glider tras lanzar mi arma al cielo. No había tiempo que perder, si iba a pie me llevaría demasiado tiempo. Tenía que llegar cuanto antes... Sin embargo, antes de montar no dudé en beberme dos éter y una ultrapoción. Lo necesitaba para recuperarme de todo lo acontecido, sobre todo después del encontronazo con Xihn... Y algo me decía que nuestra pelea en aquel mundo todavía no había terminado.

Si me encontraba a Ronin, o a cualquier otro Maestro no dudaría en decirle lo ocurrido, y desde luego daría el mensaje que Xihn me había dado. No lo compartiría con aprendices, al menos no sin el permiso de los líderes de la Orden. No sabía hasta que punto era delicada aquella información y no quería decir algo indebido.

Me he encontrado con Aaron —les diría—...Ya no es quien conocíamos. Ha usurpado el cuerpo de Chihiro y ahora habita dentro de él. Se hace llamar... Xihn. Me ha dicho que os informe de eso y... De que pronto tendremos noticias suyas si sobrevivimos. También tiene un nuevo aliado, es un hombre llamado Karel... Parece ser afín a Nada, es peligroso.


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Ragun se bebe

Éter x2 y Ultrapoción x1

Invoca el Glider para ir al Distrito 2 (Permiso pedido a los GM)
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