En el año 2004 una nueva franquicia hizo irrupción en el panorama videojueguil. Nos referimos a Monster Hunter, nacida de las prolíficas mentes que trabajan al amparo de Capcom. Su propuesta nos ponía en el papel de un cazador de monstruos al más puro estilo de la fantasía medieval. Así, armados con espadas y acompañados de varios amigos, los usuarios de PS2 disfrutaron de uno de los éxitos más sonados vividos en la legendaria consola de Sony.
Ahora, seis años después y con varias entregas de por medio, la saga da el salto a la consola de sobremesa de Nintendo con la firme intención de conseguir una meta hasta ahora inalcanzable para las iteraciones anteriores de esta saga: conquistar el mercado occidental. Y es que, a pesar de haber colocado en el mercado la friolera de 10 millones de unidades, no se puede decir que por estas tierras goce gran popularidad o del calor del público en general. Por eso, con esta tercera entrega ha sido la gran N la que ha cogido las riendas de la distribución, tratando de hacer que Monster Hunter se convierta en una franquicia de referencia en rodo el mundo.
El secreto del éxito de esta franquicia reside en su atractiva mecánica, a medio camino entre la acción y el rol más clásico. Su propuesta se divide claramente entre la experiencia para una único jugador y la parte social, donde varios jugadores deben cooperar para superar las diversas misiones que se les vayan proponiendo. En anteriores entregas se ha dado preeminencia a la sección multijugador, pero para esta versión de Monster Hunter se ha intentado cuidar hasta el extremo cada arista de su jugabilidad.
Así, todos aquellos que no disponen de conexión a internet podrán jugar en solitario la historia que Capcom ha creado, la de un cazador de monstruos en un mundo hostil y repletos de peligrosas criaturas. Ryuzo Tsujimoto, productor de la saga, nos lo confirma “hemos creado Monster Hunter Tri pensando en todo tipo de jugadores. Por eso hemos incluido por primera vez en la saga un práctico tutorial para que todos aquellos novatos en el mundo de Monster Hunter puedan aprender la mecánica de juego y movimientos rapidamente. Quizá esta sea la mayor novedad de esta entrega.”
El primer paso tendremos que dar será crear un personaje con total libertad en cuanto a apariencia, pero con unas habilidades comunes en todos los inicios de partida. Y es que la evolución de nuestro avatar viene dada por el perfeccionamiento de nuestras habilidades combate en lugar de por la potenciación de nuestro alter ego. Ryuzo nos lo explica, “la clave de la jugabilidad de esta saga viene por el perfeccionamiento de nuestras propias habilidades al enfrentarnos a cada uno de los monstruos más que por una mejora continua en las capacidades de nuestro personaje.”
