Lyn, al igual que los otros Maestros, no le dijo si lo había hecho bien o mal —y eso le intranquilizaba—, sino que se limitó a entregarle uno de los colgantes: el de color verde. Light lo cogió, lo ojeó y lo guardó con todos los demás.
—
Ahora vuelve a la Sala del Trono a presentar los objetos que tienes. Como tal, has terminado la segunda prueba. Solo tienes que dar un pequeño discurso y empezará la tercera. —Le dio una palmada en el hombro.
Asintió, se despidió y echó a andar hacia el lugar que le había indicado la chica bestia.
Mientras se dirigía a la Sala del Trono le dio vueltas al asunto del discurso que había mencionado Lyn. ¿Qué le harían decir exactamente?
«
Qué ganas de que acaben los interrogatorios y los discursos. ¿Lo habré hecho bien?», pensó, algo intranquilo, pues no habían sido preguntas sencillas (las de Yami y Lyn). Lo mismo había soltado una barbaridad sin darse cuenta.
Habían sido complicadas, sí, aunque Light lo entendía. Alguien como un Maestro debía tomar decisiones importantes y complejas; y sus superiores querían conocer su criterio. Esperaba haberles convencido, él había intentado responder de la manera más correcta y sincera, en base a sus experiencias como aprendiz.
«
Pronto lo sabremos. Por cierto, podías haberme pedido ayuda para el cuestionario, te conozco mejor de lo que te conoces tú», dijo el eidolon perruno a través de la telepatía.
«
Ya sabes la razón, tengo que hacer el Examen solo».
Aquel día le había pedido a su mascota que no interviniera en el Examen, ya fuera teórico o práctico. De lo contrario hubiera partido con ventaja y sería como hacer trampas, aunque nadie se diera cuenta de que le ayudaba. Era consciente de que aquella prueba solo le pertenecía a él y tenía que superarla él solo.
¿Aprobaría, suspendería? Estaba deseando averiguarlo, quería acabar ya.
***Llegó al fin a la Sala del Trono, donde le esperaban los tres Maestros que se habían encargado de vigilarle durante el cuestionario. Akio parecía estar criticando a algo o alguien, y Yami empujaba los pupitres para despejar la zona mientras tarareaba una canción.
En cuanto a Ronin, a Light le pareció que éste le lanzó un guiño tras incorporarse. ¿Eso era una buena señal, lo estaba haciendo bien? Ojalá.
El chico se colocó con rapidez —sus nervios eran algo palpables— en frente de los tres tronos y procedió a escuchar lo que tuvieran que decirle. Ronin, algo serio, comenzó a hablar:
—
Durante la segunda prueba has recopilado una serie de objetos que tienen diversos significados para nosotros y para ti. Ahora vas a hacer una última cosa. —Ronin levantó un dedo—.
Elige el objeto que te ha parecido más significativo para tu prueba. Puede ser que te hayas identificado más, que te haya hecho ver algo que no habías pensado antes o la que más te ha costado. Nos dirás el motivo de tu elección. Luego, pasaremos a la última prueba.—
De acuerdo —dijo de inmediato, y sacó de sus bolsillos todos los objetos que había acumulado—.
Así que tengo que elegir uno… —musitó mientras examinaba todos los objetos.
Tenía cuatro opciones: el escudo de Iwashi, el rey de Yami, los castillos de Akio y el colgante de Lyn. Requirió de unos pocos segundos para pensárselo, porque no estaba seguro de cual elegir.
Un objeto representaba su victoria en la batalla contra Derhe Yeno. Fue el primero que descartó porque no había mucho que decir, la verdad. ¿Que aquel aprendiz le había embadurnado de pintura a pesar de haberle ganado? ¿Que había pensado una buena estrategia para derrotarle? Presumir tampoco era algo propio de él y, sinceramente, no le apetecía.
Quedaban tres objetos: la pieza, el pendiente y el escudo. El primero representaba la durísima decisión de darle prioridad a sus deberes de Caballero y abandonar a un compañero. El segundo, en cambio, lo había recibido porque había optado por ser fiel a sus principios y dejar con vida a alguien que, inocente o no, podía considerarse un peligro potencial.
Y, por último y no menos importante, estaba el colgante con forma de escudo. Él había impuesto lo que representaba, a diferencia de los otros. Lo eligió antes porque simbolizaba su decisión: la de querer convertirse en un Maestro capaz de proteger a los demás. Y, de no tener ese deseo, seguramente no estaría realizando el Examen ahora mismo.
Se guardó todos los objetos en el bolsillo menos el escudo, el objeto que a simple vista le parecía más importante. Extendió el brazo y se lo enseñó al trío de Maestros.
Se puso erguido y habló alto y claro:
—
Cuando me uní a la Orden yo estaba obsesionado con seguir el ejemplo de mis padres y encontrarlos. No era del todo consciente de las cosas que ocurrían fuera de Villa Crepúsculo, siempre fui privilegiado por vivir en una ciudad donde no había Sincorazón —dijo con una punzada de dolor, ya que su mundo ya no existía—.
Pero ahora las cosas son diferentes. Durante mi aprendizaje he sido testigo de mucho sufrimiento en los mundos, he visto cosas horribles. —Como Villanos Finales con fines malvados, o Sincorazón peligrosos como el Missgunst o el Coloso que atacó su castillo—.
Y… mi mundo ya no existe. Mis padres ya no tienen nada que ver con esto. —Negó con la cabeza y habló con determinación—:
Lo tengo más claro que nunca. Quiero luchar para evitar que sucesos tan horribles se repitan, quiero ser un Maestro que pueda proteger a los demás, quiero ser útil para Tierra de Partida. El escudo representa mi deseo de proteger a los mundos y a mis compañeros de la oscuridad que nos amenaza constantemente. »Sé que no todos los habitantes del universo pueden ser salvados. Sé que habrá baches, que seguiré cometiendo errores, ya que no soy perfecto. Y que tendré que tomar decisiones muy complicadas —recordó las pruebas de Yami y Lyn—
que quizás impliquen sacrificios. Será difícil, lo sé, pero quiero dar lo mejor de mí y no olvidar nunca mi cometido, incluso si suspendo. —Observó el escudo e hizo una breve pausa—.
Luchar contra la oscuridad y proteger los mundos, ser su escudo.Ahí acababa su último discurso. Se había quedado muy a gusto, ya que lo había soltado
todo. No tenía nada más que añadir. Esas eran sus intenciones, tal cual, y no habían cambiado desde el inicio del Examen.
Ronin, complacido o no, asintió.
—
La segunda prueba ha terminado. Damos paso a la tercera. Se trata de una demostración de fuerza, de capacidad de combate, Light. —«
Eso suena interesante»—.
A menudo los Maestros hemos de luchar en toda clase de situaciones imprevistas y es nuestra capacidad para adecuarnos a las circunstancias la que marca la diferencia entre una vida y una muerte, entre una victoria y una derrota. Esto es solo una prueba y además tendrás la posibilidad de escoger a tu rival, pero servirá para mostrarnos lo que eres capaz de hacer.
»Elige al rival que prefieras de entre los Maestros y otro candidato. Si no está en esta sala, lo llamaremos. A menos que me elijas a mí, yo seré el árbitro del combate.Entonces, ¿podía batirse en duelo con el propio Ronin incluso? No le desagradaba la posibilidad, sería como un entrenamiento. Se enfrentaría a su Maestro, el fuerte guerrero que admiraba… aunque llevaba todas las de perder. ¿Sería capaz de demostrar su fuerza y hacerle sentir orgulloso en ese caso?
—
Entendido. —Pensativo, se llevó la mano a la barbilla. Su decisión podía tener consecuencias buenas o malas, debía meditarlo bien.
Antes de que se decidiera su mentor se aproximó a él, amistoso. Le rodeó con un brazo y le propinó unas palmadas bastante contundentes, propias de él, que le dejaron agotado. Se notaba que Ronin era fuerte, sí…
—
Y aquí estás, no ha sido tan duro, ¿eh? —expresó, sonriente.
—
Bueno… —Se rascó la sien y sonrió también—.
Creo que ha ido bien.—
Estate tranquilo, ya queda muy poco e ignora a Akio. Derhe ha suspendido, otra vez. No supo qué tenía que hacer con la prueba de Yami y fue a preguntarle a Mog. Este chico…—
No tiene remedio. —Completó la frase y puso los ojos en blanco. Al menos ya no quedaría por debajo de él.
Tenía que decidirse ya, no quería hacer esperar a los Maestros.
Ya había combatido contra el otro candidato, Derhe, y no le apetecía volver a enfrentarse a él (ni verle en pintura, nunca mejor dicho); aunque fuera la opción aparentemente más segura.
Los demás Maestros supondrían un desafío, ya que todos ellos eran más hábiles que él, un simple aprendiz.
Iwashi era una interesante opción, ya que conocería su forma de luchar si contaba con las mismas habilidades que Wix. Por supuesto, el recuerdo de la Guardiana ya no le afectaría demasiado, de hecho se había enfrentado varias veces a ella en el Coso virtual.
Pero nada le aseguraba que tuviera las mismas habilidades que ella (quizás era muchísimo más fuerte), por lo que no era una opción del todo segura. Podía ser la mejor elección o la peor.
Y después estaba Ronin, el líder de los Maestros, su mentor. A él sí que le conocía bien, y eso era un punto a su favor. Se trataba de otro experto espadachín, uno bastante fuerte y resistente. La pega era esa, que seguramente era demasiado poderoso para atacarle de frente y tendría que actuar con cautela.
Pero, ¿acaso no debía estar preparado para lo peor una vez fuera Maestro? No tenía sentido elegir a alguien débil.
—
Maestro, me gustaría elegirle para mi enfrentamiento —anunció, bastante formal, tras tomar la decisión—.
Sé que ya hemos combatido en los entrenamientos, pero esta es una ocasión especial y tú eres mi Maestro. Quiero demostrarte lo que puedo hacer. —Invocó su Llave Espada, Alma Inquebrantable, la cual agarró con ambas manos.
Sonrió, desafiante, preparado para empezar el combate (en el fondo lo estaba deseando).
«
¿Crees que la he cagado?», le preguntó a su eidolon mientras se posicionaba, siguiendo las indicaciones de Yami.
«
Es posible», ante todo sinceridad.
Aun así, aunque hubiera elegido al rival menos idóneo para aprobar, no se achantaría. Había entrenado muchísimo, estaba cerca de alcanzar la Maestría y no iba a dejar escaparla. Ágatha, sus compañeros, Ronin… no quería fallarles por nada del mundo.
Una vez bien posicionados, a diez pasos de distancia el uno del otro, su mentor habló:
—
Lo importante no es ganar, sino mostrar verdades. Cuando dos iguales se enfrentan, emerge su verdadera naturaleza.«
Así que lo importante no es ganar…».
No requirió de tiempo para meditar sobre eso —porque la prueba empezaba ya—, pero tenía clara una cosa. Aunque perdiera iba a dar lo mejor de sí mismo. Como si aquello fuera un clásico combate de Struggle: no pensaría en la derrota o en la victoria, sino en los movimientos de su oponente. E intentaría permanecer sereno, aunque resultara difícil y el corazón le latiera a mil. Eso era todo lo que importaba, debía concentrarse durante la pelea.
El combate al fin dio comienzo y Light se mantuvo a la defensiva. Esperaría a que Ronin atacara primero. Dependiendo de sus acciones actuaría de manera distinta:
Si Ronin se aproximaba a él, permanecería quieto e invocaría con disimulo un
Círculo de minas que le rodearía. Estaba seguro de que su mentor se desharía con facilidad de cualquier otro hechizo o escudo que invocara, aquella magia invisible era uno de sus pocos recursos. Era su mejor defensa. Después, una vez estallaran las minas bajo sus pies, arremetería con su poderosa
Embestida en aquel crítico momento, golpeando con la llave.
Si veía que no podía parar su primer ataque con las minas (por ejemplo, si preparaba un hechizo a distancia, o si se aproximaba tan rápido que no era capaz de invocar los explosivos a tiempo), no las colocaría. En su lugar, emplearía un movimiento evasivo de Xefil,
Elusión Mágica (activaría el nexo-D), para esquivar y aparecer muy cerca de su Maestro. A ser posible detrás de él. Seguidamente, sin esperar un segundo más, agitaría su arma y dispararía una poderosa
Brecha Lunar a quemarropa.
Si Ronin se negaba a atacar por cualquier motivo, haría el primer movimiento, confiando en su velocidad. Correría hacia él, emplearía igualmente la
Elusión Mágica para aparecer tras su espalda (a ser posible) y dispararía la
Brecha Lunar a quemarropa.
«
¡Toma esta!», atacaría con todas sus fuerzas, con determinación. En el fondo disfrutaría de aquel combate, por muy complicado que fuera y a pesar de los nervios.
En cualquiera de los tres casos anteriores (y excluyentes), tras usar las habilidades citadas, se limitaría a bloquear estoicamente con su Llave Espada y a contraatacar con una lluvia de
Latigazos que quizá podría sorprenderle y hacerle retroceder. Si Ronin le desarmaba materializaría de seguida su arma legendaria.
Su estrategia no era demasiado honorable, lo admitía, y él prefería “jugar” a la ofensiva. ¿Pero acaso valía la pena atacar a un rival tan poderoso como Ronin con todo y sin precauciones? Tenía que sorprenderle con sus trucos, defenderse y evitar salir dañado lo menos posible. Y ahorrar magia. Después de todo
no sabía cuánto iba a durar aquel enfrentamiento…Él mismo se lo había buscado al elegir a un rival fuerte y debía afrontar las consecuencias. Si quería que Ronin estuviera orgulloso de él tenía que hacerse valer.
Resumen de las acciones xD pueden pasar 3 cosas en cuanto empiece el combate:
1) Que Ronin se aproxime a Light y a éste le dé tiempo a colocar un Círculo de minas. Espera a que su mentor lo pise y arremete rápidamente con una Embestida.
▪ Círculo de minas (HM) [Nivel 14] [Requiere Afinidad a Tierra; Poder mágico: 10] Puede colocar disimuladamente un círculo de diez minas mágicas bajo el suelo; solo el usuario conoce la localización exacta de cada mina oculta. Las minas permanecen hasta que alguien pisa sobre una de éstas, provocando su detonación. Las demás también lo harán según su cercanía con la primera que empieza la cadena.
▪ Embestida (HC) [Nivel 18] [Requiere Fuerza: 18; Velocidad: 13; Resistencia: 15]. Arremete rápidamente contra el rival, golpeando de frente fuertemente. Puede causar aturdimiento.
2) Que Ronin ataque, pero Light no se vea capaz de protegerse de ese ataque con las minas. Intentará esquivar con la Elusión mágica (activa el nexo), teletransportándose para aparecer detrás de Ronin, y justo después emplea una Brecha lunar.
▪ Activa Nexo (-5PH). Solo va a usar Elusión mágica, así que no tiene sentido elegir las otras dos xD (pero de escogerlas obligatoriamente en cualquier caso serían Giro magnético y Tenue mismamente).
▪ Elusión Mágica (HM) [Nivel 8] [Requiere Afinidad a Espacio; Poder Mágico 12, Reflejos 15]. El usuario se teletransporta en un parpadeo a un sitio completamente distinto en un radio de cinco metros. Útil para esquivar ataques o confundir al enemigo.
▪ Brecha Lunar (HC) [Nivel 16] [Requiere Afinidad a Luna; Fuerza: 28, Combate con armas blancas: 22; Habilidad ▪ Onda Lunar] [Personalizada] El movimiento personal de Light mejorado. El personaje realiza un potente tajo que toma la forma de una grande y fiera media luna cortante que avanza en línea recta. Habilidad de gran poder cortante que atraviesa los objetos con menor resistencia que se interpongan.
3) Que Ronin no ataque y que deje que Light haga el primer movimiento. Entonces prácticamente (casi) hará lo mismo que en 2): activa nexo, corre hacia Ronin, conjura Elusión mágica para transportarse a su espalda y descarga Brecha lunar.
▪ Activa Nexo (-5PH).
▪ Elusión Mágica (HM) [Nivel 8] [Requiere Afinidad a Espacio; Poder Mágico 12, Reflejos 15]. El usuario se teletransporta en un parpadeo a un sitio completamente distinto en un radio de cinco metros. Útil para esquivar ataques o confundir al enemigo.
▪ Brecha Lunar (HC) [Nivel 16] [Requiere Afinidad a Luna; Fuerza: 28, Combate con armas blancas: 22; Habilidad ▪ Onda Lunar] [Personalizada] El movimiento personal de Light mejorado. El personaje realiza un potente tajo que toma la forma de una grande y fiera media luna cortante que avanza en línea recta. Habilidad de gran poder cortante que atraviesa los objetos con menor resistencia que se interpongan.
Tras 1), 2) o 3), se limitará a intentar bloquear con su arma y contraatacará, golpeando varias veces tras transformar su llave con la siguiente habilidad:
▪ Latigazo (HC) [Nivel 5] [Requiere Combate con Armas Blancas: 15] El usuario transforma momentáneamente su Llave Espada en un látigo, aumentando drásticamente su alcance y pudiendo golpear a varios enemigos a la vez de un ataque. La potencia de Latigazo es similar a la de un ataque normal. Dura un ataque o varios consecutivos.
Coste total de PH con 1): 14+ 18 + 5 = 37
Coste total de PH con 2): 5 + 8 + 16 + 5 = 34
Coste total de PH con 3): 5 + 8 + 16 + 5 = 34
Perdona por haber complicado tanto la estrategia, pero no sé cómo Ronin (dios, es Ronin T_T) va a actuar y tiene que ser así xD tengo que hacer tres supuestos.
En fin… Decir ante todo que el Examen ha sido de mis temas favoritos y que lo he disfrutado (y sufrido, para qué negarlo) bastante. No sé qué va a pasar, no estoy seguro de nada xD pero tanto si apruebo como suspendo… ¡Lo suspenderé indefinidamente, ganaré PX una y otra vez y llegaré al 100 juas! ¡Gracias por llevarlo, Suzu!