Capítulo 14: La vida acaba...
Los impulsos del brazo de Acre se volvieron más rápidos. De repente, éste se quitó la camiseta de golpe, rasgándola, y se tapo el pecho, gritando de dolor, y se tiró al suelo, encogiéndose.
-¿Qué coñ...?-se preguntó en alto Xictrov, ya que todos nos preguntábamos eso.
Pero un gran grito de verdadero sufrimiento de Acre cortó su frase. Aunque después volvió el silencio.
Acre se levantó lentamente, las pulsaciones de su brazo bajaron. Al levantarse, Acre descubrió su pecho, mostrando un símbolo que había sido escrito con sangre.
Era un corazón y en su centro una cara, dos ojos con forma de “equis” y una línea con varias curvas haciendo de boca.
-¿Y ese símbolo?-preguntó Bocs.
-Un antiguo símbolo que se tatuaban con sangre para indicar que eran lo suficiente fuertes como para morir sin que a nadie le importase-contestó Xictrov.
-¿Nos podemos dar por muertos?-pregunté.
Pufi me abrazó fuertemente.
-Vosotros... sí. Pero dudo que pueda lidiar contra la Muerte-contestó.
-Eso se verá-se oyó la voz de Acre a lo lejos.
Él llevaba una mirada sádica, al igual que su sonrisa. Era hora de ponerse serios.
-Escuchad...-empecé a planear algo-no hagáis nada imprudente...
-¡Vamos, cara-culo! ¡A ver si tienes huevos!-empezó a gritar Bocs, llamando la atención de Acre.
-¡Idiota!-le gritó Pufi.
Pero él me guiñó el ojo derecho.
-Espera... tiene un plan...-tranquilicé a la chica.
Acre se lanzó a por Bocs. En seguida transformó su brazo en una bazuca. Acre saltó ofensivamente hacia él. En pleno salto, el ciborg disparó. Tras una explosión, Acre cayó al suelo, pero apoyó manos y pies y siguió corriendo a cuatro patas. Bocs transformó su brazo en metralleta. Mi clon se situó rápidamente delante de Bocs y preparó su brazo dispuestos pegarle un potente puñetazo, pero Bocs disparó rápidamente, haciéndole pequeñas heridas que salpicaban algo de sangre. Después, transformó su brazo en bazuca y disparó.
Cuando el humo de la explosión de disipó, Acre seguía en su misma posición sin un rasguño.
-¿¡Se ha curado!?-se preguntó, sorprendido, el ciborg-¡Mierda!
Y Salió disparado unos metros a causa de un puñetazo de mi, ahora poderoso, clon.
Xictrov aplaudió y Acre se giró.
-¿Por qué aplaudes?-preguntó él.
-Por tu grandiosa muerte-dijo, señalando a su espalda.
Cuando se giró, un pincho le atravesó el estómago.
-¿Pufi?-pregunté.
-Buena idea, ¿eh?-contestó ella.
Pero, sin inmutarse, se sacó el pincho de su cuerpo y se volvió hacia nosotros. Seguidamente soltó el pincho, dejándolo caer. Su herida se fue curando poco.
-¡Ese símbolo es un sello que le protege sus órganos vitales!-gritó Xictrov.
-Entonces es inmortal...-dijo Pufi preocupada.
-No lo es... pero al tener sus órganos vitales protegidos, deja muy poco margen de daño, por lo que tiene más oportunidad de salir vivo-corregí a la bruja.
-¿Atacáis?-preguntó Acre, confiado.
-¡Claro que ataco!-se oyó un grito a lo lejos.
Y se veía como Bocs corría hacia Acre con furia. Su brazo era una espada ahora.
-¿No te cansas nunca, saco de circuitos?-dijo Acre, con cierto tono de ironía.
Y cuando el ciborg se acercó, Acre le dio un codazo en la frente que lo lanzó a unos metros más lejos, llevándolo hasta donde estábamos nosotros.
-Pufi, cura a Bocs, yo me ocupo de Acre-le dije a Pufi, separándola de mí.
-¿Estás loco? Morirás-me dijo Xictrov, advirtiéndome.
-Total, luche o no, moriré de todas formas.-le contesté, avanzando hacia Acre, y tras un segundo de pausa me giré-además, así tienes otra alma que darle a Dios.
Me volví a girar y seguí avanzando.
-¡Aries!-empezó a gritar Pufi, con una voz llorosa.
-Es su deber...-dijo Bocs, mal herido.
Me paré a unos 5 pasos de Acre.
-Por fin un rival de mi altura-dijo mi clon, desprendiendo energía de su cuerpo.
Yo no fui menos e hice lo mismo. Nuestros cuerpos desprendían una energía similar.
Saqué mi espada, y, un segundo después, lo hizo él.
-Cuando mueras-dije, mientras daba la vuelta mi espada a mi mano, pasando por la parte de arriba de ésta misma y volviéndola a coger-asistiré a tu funeral.
Y empecé a correr con bastante velocidad hacia Acre, pero éste saltó y se colocó detrás de mí. Pude frenar rápidamente pero al volverme para atacarle, me encontré con un pie en mi cara. Caí al suelo enseguida, aunque también me incorporé de un salto enseguida. Él intentó pegarme otra patada, pero crucé mis brazos, protegiéndome. Después, antes de que pudiera quitar el pie de ahí, con mi mano izquierda le agarré del tobillo y con mi codo derecho le di en la rodilla, partiéndole la pierna izquierda.
Soltó un grito de dolor, pero, cuando le solté la pierna, se cayó.
Volví a ponerme en posición de pelea.
Él fue a atacarme acercándose a toda velocidad, pero, tiré de mi dedo índice derecho, y un hilo de vital oscuro se ató a su tobillo y estaba bajo tierra, por lo que, al tirar, volvió a su sitio original y cayó al suelo.
-¡Mátalo! ¡Vamos, mátalo!-comenzó a gritar Bocs, impaciente.
Prepare mi mano dispuesto a lanzar la espada.
-Chicos... cuando muero, será demasiado tarde, así que... lo digo ahora-me giré hacia aquellos tres-¡A todo el mundo! Y, sobretodo, a mis amigos, os quiero, pero debo morir. Debí decírtelo antes Pufi, pero... no tenía el valor. Lo siento...
Y, ya decidido, me volví a girar hacia Acre, con mi espada apuntando a su cabeza.
-¿Pero no tenía protegidos sus órganos vitales?-preguntó Pufi.
-Al estar tumbado, la sangre fluye de diferente forma, por lo que el hechizo se anula.
Adios...
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Y aquí, el último capítulo:
Capítulo 15: Ya había llegado mi hora.
Y la espada se clavó en su cráneo.
Se hizo un gran silencio mientras esperaba mi muerte.
Solté el hilo que aguantaba con fuerza para que Acre no se pudiese mover.
Pararon los minutos, lentamente, y mi hora no llegaba.
-¡No ha muerto!-grité, convencido y desesperado.
Acre se quitó mi espada de su cabeza y me la lanzo hacia mí, pudiendo cogerla. Se curó en menos de un segundo su herida y se levantó de un salto.
Se veía perfectamente como Acre llevaba clavado una daga en su brazo izquierdo.
-Pobre alma sacrificada...-dijo mi clon, con tono de nostalgia y pena...
-¿Has tapado el filo con un alma y lo has sacrificado para salvar tu vida?-le pregunté.
-¡Tonto! No se me ocurriría sacrificar un alma así como así. Por eso elegí el alma de Akane-me contestó.
-¡No!-gritó Pufi, conmocionada.
-Menudo cabrón...-maldecí.
Cada vez empuñaba mi espada más fuerte. Cada vez mi cuerpo rebosaba más energía.
-Y la próxima, será Sombra...-siguió cabreándome.
-¡Silencio!-grité, sin poder aguantar más.
Y después salté hacia Acre con mi espada en alto. Él se echó un paso hacia atrás y esquivó mi ataque por un milímetro, chocando mi espada contra el suelo, pero rápidamente volví a atacarle tres o cuatro veces, aunque no pude darle, se convirtió en alguien realmente rápido. En el último ataqué, se protegió con su espada, y empujó la mía, se agachó mientras daba una vuelta e intentó segarme las piernas, aunque lo esquivé dando un salto por encima de la espada. Al caer, aproveché un descuido suyo para darle en su mano derecha, haciéndole soltar la espada de su mano, le pegué una patada, mandándola lejos, me pude dándole la espalda y empecé a pegarle codazos en su cara sin parar.
Llegó un momento en el que ni sabía ni si era mi codo el que sangraba o era la cara de Acre.
-¿Por qué no haces nada para contrarrestarme?-le pregunté, sin dejar de darle-¡contesta!-pero Acre no contestaba-¡CONTESTA!
Y siguió sin contestar durante unos segundos más, hasta que paró mi codo con su mano izquierda.
-Idiota. Mientras tú pensabas en dejarme la cara a lo Silvester Stalone, yo me he sincronizado con tu mente, y ahora sé perfectamente lo que vas a hacer y cómo lo vas a hacer-siguió Acre-Planeabas darme este el último codazo y después hacerme una llave para dejarme inmóvil el brazo izquierdo en el suelo y matarme.
-¿¡Cómo!?-me pregunté.
Sabía mi plan a la perfección.
-Siento desilusionarte, pero ese plan ya no te va a servir-me dijo, mientras ponía su pie a modo de zancadilla.
Me fijé en él, y cuando mi clon intentó tirarme con la zancadilla, pude saltarlo a tiempo, aunque, de repente, cuando aún estaba en el aire, me dieron una patada y caí al suelo.
Me puse de rodillas y giré mi cara.
Acre se acercaba a mí lentamente con una sonrisa macabra y sujetando mi espada.
-No tienes escapatoria...-me decía Acre mientras se acercaba a mí.
A unos centímetros de mí, se paró y levantó mi espada dispuesto a atacarme.
-Mi fin...-me susurré a mí mismo, convencido.
-¡Aries!-oí un grito de chica.
-¡Pufi!-le respondí.
-¡No te rindas!-volvió a gritarme.
-Que no me rinda...-me dije a mí mismo otra vez.
-¡Muere!-me gritó Acre, bajando la espada dispuesto a cortarme la cabeza.
-¡Que no me rinda!-grité, recobrando mis ilusiones y, un segundo antes de morir, me encogí haciendo que la espada chocara contra el suelo.
Después solté una bola oscura que se dirigió al horizonte, despistando a Acre y me situé encima de mi espada, clavándola en el suelo.
-¿Qué? ¡Esto no lo había visto en tu mente!-me grito Acre.
-Por una vez en tu vida, actúa, no pienses-le respondí.
Sin dejarle un segundo de respiro, le pegué un puñetazo en la barbilla, echándolo hacia atrás, y salté sobre su cabeza y le pegué con mi talón, empujándole su barbilla contra el suelo.
-¡Mierda!-gritó de dolor mi clon.
Al caer, caí sobre la espalda de Acre, llené mi mano de oscuridad y la puse sobre su cabeza. Coloqué mis dos pies sobre sus brazos, inmovilizándome.
-¡Todo ha acabado para ti!-le grité y solté mi bola oscura, explotando en su cabeza.
A causa de la fuerza de la explosión y mi falta de energías, salí volando por los aires.
Cuando me levanté, allí estaba su cuerpo decapitado. Era como verme a mí mismo sin cabeza.
Ya había llegado mi hora.
Pufi se acercó a mí corriendo y me abrazó llorando, aunque intentaba disimular. Moví suavemente su cara con mis manos para verla.
-No quiero que mi última imagen sea la tuya llorando-le dije.
-¡Pero no quiero que te vayas!-me gritó.
-Todo en la vida se va a acabar. Cuando crezcas, lo aprenderás, y, cuando lo aprendas, me recordarás para siempre-le respondí.
Y le planté un beso.
-Ejem...-oí mientras me besaba.
Así que me paré y miré. Eran Bocs y Xictrov.
Choqué mi puño con Bocs.
-Adiós, tío. Y sigue peleando así en los combates-le dije, intentando guardarme la emoción.
-¡Te echaré de menos!-me gritó Bocs emocionado mientras me abrazaba.
-Te veré en el cielo-me dijo Xictrov, mientras se unía al abrazo.
-Chicos...-nos llamó Pufi.
Nos separamos y miramos.
¡Sombra se estaba levantando!
Y lo primero que vio fue a mí cayéndome al suelo.
-¡Aries!-gritó.
Y se acabó.
Os escribo desde el cielo para que comprendáis que, da igual lo normal que sea tu vida, siempre ocurrirá algo que te la cambiará toda.
Adiós.
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Todo llega a su fin... y mi historia no iba a ser menos.
Me ha encantado escribir para vosotros... pero esto debe terminar.
Los últimos comentarios al lector:
Sombra: Estuve fuera de campamentos ¬¬ Tienes mi tuenti, tú lo deberías saber más que nadie ¬¬
Bocs: :DD Me alegro de que te gustara.
Manu5000:No es doble post, que si es doble post, incumplo las normas D:
Pufi: Ya te lo dije: campamentos. Da vagueza leerlo de nuevo, pero los fallos son pocos... tampoco es para tanto. ¡Aries no es un traidor! ¡Pufi es una histérica! D: (?) Si te encuentras un tornillo, será mío, que lo perdí hace poco (?)
Bocs(2): ¿Qué no te lo creías? ¡ZASCA! Lee y llora (?)
AVISO: Por favor, no cerréis el tema de momento, cada viernes postearé si hace falta para resolver algunos cabos que pueda haber dejado suelto y mis lectores me pregunten algo.
-->Una firma de mi dios, by 
--->Vany Vanitas~~ (?)
---->xXRIKUXx
-->Me da igual que me regales firmas, no cenas~~
-->Mi Mentos me mima~~(?)
--->Cajita Heavy :D
saludos
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