[Tierras del Reino] Donde duermen los gigantes

Trama de Alec, Simbad y Nicoxa + Ban

Aquí es donde verdaderamente vas a trazar el rumbo de tus acciones, donde vas a determinar tu destino, donde va a escribirse tu historia

Moderadores: Suzume Mizuno, Denna, Astro

Ronda #7 - Donde duermen los gigantes

Notapor Astro » Jue May 19, 2016 9:30 pm

¡¡Date prisa!! —chilló Ban, apremiando a la gata.

Funcionó. Más o menos. La loba (tras empujar violentamente a la gata y al ratón) utilizó la nueva magicita para volver a generar el velo mágico alrededor del gigante, que estaba distraído por los ataques de todos. El lince tuvo que salir por patas del lugar, por supuesto, para evitar que le aplastara. Poco después, la magia de la piedra funcionó del todo, y el coloso desapareció. Encerrado en el cristal, supuso Ban.

Al fin eres mío, Titán. ―El aprendiz arqueó una ceja, mirando con desconfianza a la loba. ¿Su voz había cambiado o era impresión suya? Algo no iba bien―. En cuanto a vosotros, ya no os necesito para nada.

Pero nada bien. El primer afectado fue Simbad, que quedó paralizado en pleno vuelo. ¡Magia temporal! Y no se quedó ahí: una especie de brecha espacio-temporal se abrió casi a lado del guepardo, amenazando con tragarle. Mal asunto. Por suerte para todos, la aparición de una garza que atacó a la loba salvó al aprendiz de Bastión Hueco de su paralización.

Spoiler: Mostrar
Imagen


Tú no eres Iwashi. ¿Quién eres realmente?

Ban sí que reconoció esa voz: ¡Nanashi!

Una bruja que ya conseguido lo que venía a buscar. No puedo arriesgarme a que me lo arrebates.

»Volveremos a vernos. Muy pronto.

Ninguno tuvo tiempo para detenerla cuando un portal se abrió a sus pies. Sin embargo, sí que pudieron ver su auténtica forma antes de desaparecer del todo: de una mujer vieja y fea vestida de forma extravagante. Ugh.

Spoiler: Mostrar
Imagen


Sabía que de Wix no puede salir nada bueno.

Imagen


Nanashi invocó un portal de luz con el que volver a Bastión Hueco. Cuando ella regresó con Nicoxa, ya todos humanos y en la sala de los tronos, tocaba la charla de «qué demonios ha pasado».

Contadme todo lo que sepáis. Qué habéis averiguado sobre los sincorazón, de dónde ha aparecido ese gigante y quién era esa mujer que se hacía pasar por Iwashi.

Ban contó a regañadientes su experiencia en las Tierras del Reino. Los temblores, los cachorros de león, la hiena loca, los sincorazón, la aparición del gigante, y lo poco que había dicho esa loba de la que sospechó desde el principio, pero se justificó con que no tuvo tiempo material para interrogarla al estar siendo atacados por el coloso.

Era imposible prever que pudiera ocurrir algo así. Buen trabajo a todos; te has encargado bien de ellos, Simbad. Indagaré yo misma sobre lo ocurrido y os haré saber todo lo que averigüe. Ahora, id a descansar. He de suponer que después de lo de hoy necesitáis algo de calma. Pero mañana me traéis cada uno vuestro informe.

Querido diario: hoy casi muero de nuevo, esta vez aplastado por un gigante. ¡Eh, sería una muerte nueva! —masculló Ban, arrastrando los pies de vuelta a su cuarto.

Imagen


«Oh, venga ya. Ellos no.»

Ronin y Wix. O Iwashi, o como quisiera llamarse ahora. Nanashi les había llamado a los tres de la misión en Tierras del Reino para reunirse con ella en los balcones (primero en la sala del trono, donde Shinju les echó a patadas hasta allí) donde se encontraron a la maestra sentada en una mesa... Con ellos. Ban no pudo evitar que se le escapara una mueca de desagrado al verlos.

El idiota del parche y su ex-maestra que intentó matarle. ¡Genial!

¡Ajá! Así que les estábamos esperando a ellos.

Porque son los primeros interesados en conocer la verdad.

Sentaos. He traído pastitas de té y magdalenas.

Ban tuvo que apretar mucho los dientes y los puños para no responderle una burrada. O para no coger una pastita y tirarla por el balcón. Sí, claro, después de que le envenenase en el pasado iba a volver a comer algo suyo. No estaba tan loco.

¡Y yo el té!

Eso no hacía falta, la reunión va a ser breve. Y ni siquiera sé por qué estás tú aquí.

Me encontré con Iwashi en la cocina, haciendo las pastitas, y le pregunté «¿Adónde vas?» y me dijo «A Bastión Hueco», y le dije «¿A qué?» y ella «A ver a Nanashi». Y quise saber si podía acompañarla, y me dijo que no porque te ibas a enfadar. Así que me puse a hacer el té. Es té rojo, el que te gustaba, ¿no?

Se sentó, pero de mala gana y con los brazos cruzados. Aunque le llenaron el vaso y le ofrecieron comida, no probó ni un bocado. Estuvo tentado de alertar a los demás del historial con la comida de Iwashi, pero aquello habría levantado preguntas incómodas sobre cómo sabía él eso, y fijo que Nanashi se enfadaba. Así que prefirió guardar silencio, mordiéndose casi literalmente la lengua.

¿Vas a explicarnos quién era esa mujer y de qué la conocías?

Claro. Desperté hace… ¿cuánto? ¿Un mes? Algo así. No volví directamente a Tierra de Partida. Quería comprobar por mí misma varias cosas y prefería pasar inadvertida. Estuve varios días en Tierras del Reino. Por entonces ya habían comenzado los temblores. Investigando esa zona, el cementerio de los elefantes, me encontré con ella. Intentó engañarme usando a algunas de las hienas. Parece ser una bruja con el poder de adueñarse de las mentes y de cambiarse a sí misma de apariencia. Estaba examinando la zona, muy interesada en piedras como la que me mencionaste. El caso es que luchamos y se esfumó. Me quedé un tiempo más para esperarla, pero no volvió a aparecer. Y me fui.

Y tu negligencia hizo que mis aprendices tuvieran que enfrentarse con una bruja y un titán. ¿Por qué no lo reportaste?

Esta mujer tenía más razón que una santa.

Nanashi…

Tienes razón. Debí suponer que solo la había ahuyentado durante un tiempo. Y supuse que me rencontraría tarde o temprano con ella, en algún otro mundo, después de que abandonara Tierras del Reino.

¿Qué más sabes?

Poco más. Se llama Ultimecia. Y forma parte de los Villanos Finales, aunque esa conexión la descubrí hace poco.

Un escalofrío recorrió a Ban de arriba a abajo al escuchar las palabras "Villanos Finales". Así que esa mujer trabajaba para el diablo...

¿Cómo?

Eso no puedo decírtelo.

Por eso les reconoció como aprendices. Y usó tu aspecto a su favor.

En realidad ni siquiera podrían haberme reconocido en ella. Ninguno me ha visto bajo mi aspecto animal ―Para sorpresa, se dirigió a los tres aprendices―. ¿Me queda bien, eh?

Cuidado, suena a pregunta trampa.

No —gruñó Ban, intentando no mirar demasiado a Iwashi.

Me parece que eso es todo lo que queríamos saber. A menos de que queráis preguntar algo más

¿Cómo podemos saber que esa Ultimecia no está suplantando a Iwashi ahora mismo? —La señaló, de forma acusadora—. O que no lo hará en el futuro.

No pensó demasiado la pregunta, pero o la decía o reventaba. Aceptó la respuesta, ya fuese positiva o negativa, con un simple gruñido, y esperó a que les dejasen irse para volver a su cuarto a toda prisa. Por supuesto, en ningún momento comió ni bebió nada.

De momento, prefería olvidar al gigante que casi le aplastó.

Spoiler: Mostrar
Un placer haber estado en la trama con todos <33
Imagen
Spoiler: Mostrar
Imagen

Imagen

Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Avatar de Usuario
Astro
57. Ferrocustodio I
57. Ferrocustodio I
 
Mensajes: 1689
Registrado: Jue Sep 06, 2012 12:49 pm
Dinero: 598,528.05
Banco: 15,646.59
Sexo: Masculino
Estantería de objetos
Karma: 7

Re: [Tierras del Reino] Donde duermen los gigantes

Notapor xXOrbOOkXx » Jue May 19, 2016 9:44 pm

Los ataques mágicos fueron mucho más que inútiles, mucho más que humillantes. Gruñí de rabia e impotencia, pero, al menos tenía el consuelo de saber que en cuanto me alcé en el viento y conseguí apuntar hacia su ojo, no lo pudo esquivar. Era un titán enorme, pero también era lento, y aquello me otorgó un poco más de confianza.

Por otro lado, un poco más allá, el Aprendiz del otro bando y su Maestra (supuse) consiguieron llevar aquella piedra mágica a la loba. Sin embargo, nada fue como esperamos.

¡Largo!

Desde las alturas pude ver como la susodicha empujaba a la otra mujer, haciendo que rodaran por una colina. Me quedé atónito, ¿no se suponía que ambos bandos estaban en guerra? A no ser que...

Tuve que cortar mis pensamientos para esquivar con agilidad al gigante de nuevo, vigilando a Ban (que se hallaba sano y salvo) y mirando por si algún lado aparecía Nicoxa, no quería que desapareciera sin más. Vi un poderoso hechizo ígneo ascender desde el pequeño ratón, que dio de lleno en su ojo bueno y lo cegó. A continuación, el velo de magia lo cubrió completamente hasta llevárselo al interior de la piedra.

Descendí sobre el enorme cráter que había dejado y me situé con el lomo erizado hacia la loba. La desconfianza pobló mi corazón, y la tensión de la misión se acumuló hasta límites insospechados.

Al fin eres mío, Titán ―sentenció con una sonrisa de suficiencia. A continuación nos miró a nosotros―. En cuanto a vosotros, ya no os necesito para nada.

¿¡Cómo!? ―exclamé consternado y enfurecido a la vez. Estuve a punto de saltar.

Pero una vez más no pude. Mi cuerpo quedó suspendido, como atado con millones de pequeñas agujas sin movilidad. Mi respiración se hizo pesada, el corazón bombeaba tan fuerte que pensaba que iba a salírseme del pecho. El propio Andrei también me había inmovilizado una vez en Ciudad de Paso, todavía tenía la úlcera que lo demostraba. Rechiné los dientes dispuesto a no caer en el pánico.

Y abrí muchísimo los ojos cuando, como si fuera una boca hacia el averno, otro tipo de hechizo hizo que se distorsionara el mundo y que mi cabeza diera vueltas.

<<Maldita sea. Si lo hubiera sabido antes le habría tirado al titán.>> Pensé sádico. No me podía perdonar haber confiado tan fácilmente en alguien que claramente parecía una de mis Maestras, y aquel era el resultado. Confiar no daba más que problemas.

Un latigazo de luz asoló aquel mundo en el que estaba sumido y todo volvió a la normalidad. Suspiré mortalmente aliviado cuando recuperé la movilidad y raudo me alejé hacia el lado contrario de la masa que quería atraparme. En el frente había una garza de colores plateados, Nanashi me había rescatado.

Spoiler: Mostrar
Imagen


Tú no eres Iwashi. ¿Quién eres realmente? ―preguntó con voz fría, aludiendo a aquella mujer que había visto hacía tanto en el Castillo del Olvido.

Una bruja que ya conseguido lo que venía a buscar. No puedo arriesgarme a que me lo arrebates.

Una bruja. Todas las brujas que había conocido no me habían traído más que problemas. Todas ellas. Me había pasado en Port Royal, y, aunque una no definiera a un grupo entero, desde ese momento supe que no volvería a confiar en una.

»Volveremos a vernos. Muy pronto.

Spoiler: Mostrar
Imagen


Y su verdadera figura desapareció en la nada.

Voy a buscar a Nicoxa. Podréis explicarme todo lo que os ha ocurrido cuando regresemos al Castillo.

Y así lo hicimos. Después de que Nanashi se ocupara de un pájaro, una magicita y abriera unos portales, pudimos regresar. La Maestra se quedó un rato con Mufasa, puede que indagando o puede que echándole la bronca sobre dejar a sus hijos sueltos por allí. No lo supe, no me importó.

Me despedí de los integrantes de Tierra de Partida con un gesto de cabeza. Nos habían ayudado lo suficiente.Y aunque había sido una victoria, una amargura se me había instalado en la boca.

****


Contadme todo lo que sepáis. Qué habéis averiguado sobre los sincorazón, de dónde ha aparecido ese gigante y quién era esa mujer que se hacía pasar por Iwashi.

Maestra ―le diría seriamente, también dirigiéndome al grupo―. Os pido disculpas ante lo ocurrido. No he sido un buen líder puesto que me he dejado engañar muy fácilmente. ―Sonreí un poco―. Lo habéis hecho bien.

A continuación me dispuse a contar en tono monocorde todo lo que había pasado: el encontronazo con los pequeños leones, el encontronazo con la hiena que se transformó en escorpión y por último todo lo que nos había dicho la falsa loba: que se había hecho pasar por Iwashi y a continuación que era una de las tantas brujas, y que por supuesto quería el titán en su poder. O eso me había parecido.

En cuanto a los Sincorazón no pude decir mucho, simplemente lo relacioné con la abundancia de magicitas por la zona y la extraña aparición, pero en cuanto a lo demás ni idea.

De todas formas vigilaría la zona por unas semanas ―diría―. Si hay nuevos temblores puede que otro titán se despierte.

Era imposible prever que pudiera ocurrir algo así. Buen trabajo a todos; te has encargado bien de ellos, Simbad. Indagaré yo misma sobre lo ocurrido y os haré saber todo lo que averigüe. Ahora, id a descansar. He de suponer que después de lo de hoy necesitáis algo de calma. Pero mañana me traéis cada uno vuestro informe.


Al día siguiente…


Caminé por los pasillos mirando la notificación de Nanashi que nos convocaba en la sala del trono ¿acaso quería los informes por adelantado? Pues estaba en un grave problema, el día anterior estaba tan reventado que me había pasado la tarde vegetando. Pero fue Shinju quien nos recibió, cambiando el lugar por los balcones.

Algo molesto por tener que andar más de la cuenta, anduve sin más quejas hasta allí. Qué sorpresa fue la mía cuando alrededor de una mesa con una cesta, se hallaban Iwashi, Ronin y Nanashi. No me acerqué mucho por si a Nanashi se le ocurría matar a Ronin con el cuchillo de la mantequilla, conociendo su temperamento y sus rivalidades.

¡Ajá! Así que les estábamos esperando a ellos

Porque son los primeros interesados en conocer la verdad.

Sentaos. He traído pastitas de té y magdalenas ―nos invitó la Maestra. Algo receloso me senté un tanto alejado. Por la cara que ponía Tristán, deduje que tampoco estaba muy cómodo.

¡Y yo el té!

Lo cierto es que fue una situación surrealista, entre los Maestros las pastas y el té. Como si estuviéramos de excursión tan tranquilos. No me atreví a probar nada, no quería morir envenenado.

Eso no hacía falta, la reunión va a ser breve. ―Increpó a Ronin―. Y ni siquiera sé por qué estás tú aquí.

Oh, no. Ya empezaban. Con algo de disimulo me alejé un poquito más de ellos, manteniendo un gesto neutro. La parte buena era que íbamos a descubrir qué había pasado en Tierras del Reino, y lo cierto era que me moría de curiosidad.


¿Vas a explicarnos quién era esa mujer y de qué la conocías? ―preguntó la Maestra después de una corta conversación que relajó los ánimos. Preferí mantenerme en silencio.

Claro Desperté hace… ¿cuánto? ¿Un mes? Algo así. No volví directamente a Tierra de Partida. Quería comprobar por mí misma varias cosas y prefería pasar inadvertida. Estuve varios días en Tierras del Reino. Por entonces ya habían comenzado los temblores. Investigando esa zona, el cementerio de los elefantes, me encontré con ella. Intentó engañarme usando a algunas de las hienas. Parece ser una bruja con el poder de adueñarse de las mentes y de cambiarse a sí misma de apariencia. Estaba examinando la zona, muy interesada en piedras como la que me mencionaste. El caso es que luchamos y se esfumó. Me quedé un tiempo más para esperarla, pero no volvió a aparecer. Y me fui.

Ah, sí ―intervine si me dejaban―. Una hiena se transformó en Sincorazón y nos atacó, supongo que fue obra de ella.

Y tu negligencia hizo que mis aprendices tuvieran que enfrentarse con una bruja y un titán ―cortó la otra mujer con dureza―. ¿Por qué no lo reportaste?

Nanashi…

Tienes razón. ―Sorbió del té, como si no le estuviera taladrando con la mirada―. Debí suponer que solo la había ahuyentado durante un tiempo. Y supuse que me rencontraría tarde o temprano con ella, en algún otro mundo, después de que abandonara Tierras del Reino.

¿Qué más sabes?

Poco más. Se llama Ultimecia. Y forma parte de los Villanos Finales, aunque esa conexión la descubrí hace poco.

¿Cómo?

Eso no puedo decírtelo.

Arqueé una ceja en el silencio que se instaló. ¿Que no podía decírnoslo? Miré a la Maestra Iwashi de reojo, aquella con la voz dulce y monótona. ¿Exactamente qué nos estaba ocultando?

Por eso les reconoció como Aprendices. Y usó tu aspecto a su favor.

En realidad ni siquiera podrían haberme reconocido en ella. Ninguno me ha visto bajo mi aspecto animal ¿Me queda bien, eh?

Cuidado, suena a pregunta trampa.

A continuación todo fue muy raro, la familiaridad con la que se trataban los Maestros en Tierra de Partida no era algo que había visto en Bastión Hueco, vamos, es que ni de lejos. Intenté imaginarme a Shinju restregándole la magdalena en la cara de Ariasu, pero definitivamente no pude. Crucé los brazos, algo incómodo.

Me parece que eso es todo lo que queríamos saber. A menos de que queráis preguntar algo más.

[b]¿Cómo podemos saber que esa Ultimecia no está suplantando a Iwashi ahora mismo?
—Señaló Tristán con agudeza—. O que no lo hará en el futuro.

Solo una cosa ―miré a Nanashi―. ¿Exactamente, antes de irnos, de qué hablabas con Mufasa?

No iba a perderme la oportunidad de saberlo, por supuesto. En el transcurso de su respuesta miraría también a los otros Maestros, sin creerme del todo que una escena así pudiera llevarse a cabo.

Pero por otra parte, tampoco podía creerme que nos hubiéramos tropezado con un Villano Final, aquellos seres tan poderosos. "Ultimecia", una poderosa bruja cambiapieles. Alguien tremendamente peligroso.

¿Cuántas sorpresas me depararían mis futuras aventuras?

Spoiler: Mostrar
Siento no haber metido a Ban en este post casi, pero le he dado a enviar justo después de Astro y no me daba tiempo a más, lo siento :(

Un placer chicos! A ver si repetimos!
~Un cuarto de hora de risa, equivale a un año más de vida...~


Proyectos:



UseBars:

Spoiler: Mostrar
Imagen

Imagen

Imagen

Imagen


Rol:

Ficha

Wiki

Spoiler: Mostrar
Tercera Saga:

Prólogo de Simbad
"Bastión Hueco" Choque de culturas (Encuentro)
"Bastión Hueco" Novatos bajo la lluvia (Primer encuentro - Saga Novatos)
"Tierras del Reino" El nacimiento de un príncipe (Trama)
"Islas del Destino" ¡Buscad a mi perro! (Misión)
"Castillo de Bestia" Solos entre lobos (Primer encuentro - Saga Délaissé)
"La Cité des Cloches" Los miserables (Encuentro)
"Villa Crepúsculo" Una visita guiada (Encuentro)
"Selva Profunda" Día de monos (Encuentro)
"Port Royal" Los muertos no cuentan cuentos (Trama)
"Tierra de Dragones" Linda Flor (Misión)
"Bastión Hueco" Novatos bajo el amanecer (Segundo encuentro - Saga Novatos)
"Ciudad de Paso" Lo que vale la pena (Encuentro)
"Ciudad de Paso" The Game Never Ends (Trama)
"Torre de los Misterios" Orden en la Biblioteca (Misión)
"Evento Global" El esclavo del olvido
"Evento Global" Ruta de los perdidos

Evento Halloween 2014
"Especial libre" El laberinto de los corazones
"Especial libre" San Valentín III
"Islas del Destino" Yincana veraniega
"Evento libre" La Mansión Encantada II: La Venganza

Cuarta Saga:


"Ciudad Inexistente" Dos velas para el diablo (Encuentro)
"Port Royal" De copas con la muerte (Encuentro)
"Bastión Hueco" De magdalenas y vicios franceses (Encuentro)
"La Cité des Cloches" Insomnia (Primer encuentro - Saga La Musique du Silence)
"La Cité des Cloches" Somnia (Segundo encuentro - Saga La musique du Silence)
-"Port Royal" El barco que desaparece en la niebla (Misión)
"Tierras del Reino" Donde duermen los gigantes (Trama)
"País de los Mosqueteros" Todos Para Uno (Trama)
"Ciudad de Paso" Un nuevo Crepúsculo (Trama)
"Ciudad de Halloween" El ataque de Boogieman (Trama)
"La Cité des Clochés" Fuego Infernal (Trama)
"Espacio Profundo" Planta 313 (Encuentro)
"Mundo Inexistente" Pasajes Oscuros (Trama)
"Tierra de Partida" Penúltima Parada (Encuentro)
"Evento Global" El principio del fin
"Atlántica" Perdona pero quiero casarme contigo (Encuentro)

"Especial libre" El laberinto de los corazones II: Escape
"Especial libre" World War Christmas
"Especial libre" El San Valentín está aquí
"Especial libre" ¡Exámenes finales
"Especial libre" La inocencia perdida
"Especial libre" Misión: Salvar la Navidad

Timeskip (Finales 1013-1017)

"Tierra de Partida" Examen de Maestría (30 Diciembre 1013)
"Jardines de Tierra de Partida" Doomsnight (Libre) (31 Diciembre 2013)
"País de las Maravillas" El último regalo (Minitrama) (Julio 1014)
"Jardines de Tierra de Partida" El Regreso (Libre) (Finales de Marzo de 1017)

Saga final:

"La Cité des Clochés" Santuario (Trama)
"La Cité des Clochés" La última noche en París (Libre)
Avatar de Usuario
xXOrbOOkXx
51. Rueca Fatal
51. Rueca Fatal
Bohemia Lectura
 
Mensajes: 1528
Registrado: Jue Dic 27, 2012 10:39 pm
Dinero: 278,842.76
Banco: 0.00
Ubicación: Detrás de tí. !Bu!
Sexo: Femenino
Clan: Bohemia Lectura
Estantería de objetos
Karma: 8

Re: [Tierras del Reino] Donde duermen los gigantes

Notapor Sito » Vie May 20, 2016 1:10 am

Se encontraban cada vez más alejados del cementerio, y la preocupación de Nicoxa no hacía más que aumentar. Apenas podía aguantar más ahí sabiendo lo que ese gigante podría hacerle a sus compañeros en el caso de que siguieran por allí. Por suerte llegó un momento en el que Mufasa consideró que estaban lo suficientemente a salvo y respondió a las preguntas que formuló anteriormente.

Son monstruos que aparecieron hace un tiempo por este reino. La última vez que nos atacaron fue una de las nuestras quien les dirigió, Zira. ―Hizo una pausa, como si fuera a decir algo importante que finalmente omitió—. No, no es normal. Nada de esto lo es.

Miró al león dubitativa. ¿Qué le estaría ocultando? Después de lo que había hecho por los cachorros consideró que podría confiar en ella, por lo que Nico se molestó un poco. El rey prosiguió, seguramente sin darse cuenta de la dolida cara de la aprendiza, y respondió a su otra pregunta.

Un ser al que solo conocen las leyendas. Nuestros antepasados nos aseguraron que nunca saldría de su prisión. Algo ha debido despertarlo.

¿Algo? ¿Quién podría ser capaz de despertar a una amenaza así, para qué iba a hacerlo? —le resultó muy intrigante. Casi parecía una especie de castigo divino del que dudaba bastante que pudieran librarse. Sin embargo para su sorpresa y la de todos el gigante desapareció en la lejanía por arte de magia: se esfumó.

Miró extrañada a los leones, que tampoco parecían saber qué había ocurrido. Todo se volvía cada vez más extraño, aunque al menos con ese coloso fuera de vista su preocupación disminuyó y pudo acompañarles más tranquila.



Estaba lamiendo su espléndido pelaje tan tranquila cuando un pájaro se acercó a ella y reveló ser su maestra Nanashi. Le resultaba muy gracioso verla así, aunque prefirió no comentar nada sobre su aspecto. Le preguntó por sus compañeros, que esperaba que estuvieran bien, y después de su respuesta mantuvo una charla a solas con Mufasa de la que Nicoxa no pudo enterarse de nada. Menudo fastidio.

Chicos tened más cuidado la próxima vez, ¿vale? —aconsejó a los cachorros Nicoxa antes de partir. Pensó un poco más sus palabras al ver que no había estado muy acertada y rectificó—. Q-quiero decir, que sería mejor que no hubiera próxima vez. Cementerio de elefantes malo —se apresuró a añadir y les guiñó un ojo—. ¡No os pongáis en peligro de esa forma!

Se despidió de los leones y miró a su alrededor para recordar el olor del mundo, el paisaje y sentir sus últimos instantes en la forma de leona. Había vivido una experiencia única que nunca olvidaría. Cada vez estaba más orgullosa de haberse unido a la orden de Bastión Hueco.


De vuelta, se encontraban de nuevo con su forma humana (Nicoxa no tardó en buscar un espejo para ver si le había afectado en algo la transformación). Se sintió aliviada al ver a Tristán y a Simbad sanos y a salvo ya en su apariencia humana. Nanashi se sentó en un trono y empezó a hablar.

Contadme todo lo que sepáis. Qué habéis averiguado sobre los sincorazón, de dónde ha aparecido ese gigante y quién era esa mujer que se hacía pasar por Iwashi.

Maestra ―respondió rápidamente Simbad, dirigiéndose a todo el mundo―. Os pido disculpas ante lo ocurrido. No he sido un buen líder puesto que me he dejado engañar muy fácilmente. Lo habéis hecho bien.

Oh vamos no te machaques tampoco. Gracias a tus avisos no cometí ninguna imprudencia y pude cuidar de unos leones muy monos —comentó para que no se sintiera mal, dándole un golpe amistoso en el hombro.

Después de eso Simbad se encargó de contar con pelos y señales todo lo ocurrido, por lo que así Nicoxa pudo enterarse de lo que pasó cuando se separó de ellos. Ella, por su parte, contó lo que le dijo Mufasa y su último encuentro con Ed.

Era imposible prever que pudiera ocurrir algo así. Buen trabajo a todos; te has encargado bien de ellos, Simbad. Indagaré yo misma sobre lo ocurrido y os haré saber todo lo que averigüe. Ahora, id a descansar. He de suponer que después de lo de hoy necesitáis algo de calma. Pero mañana me traéis cada uno vuestro informe.



Al día siguiente…


Sobraba decir que Nicoxa se olvidó por completo del informe. Fue recibir la notificación de la maestra y recordarlo de golpe. Como estaba tan cansada no hizo nada pero seguro que no le valdría como excusa...

¡Mierda!

Cogió un folio y se apresuró a escribir en él con la letra más grande que podía (para que pareciera que había mucho escrito) lo mismo que le contestó el día anterior. ¡Tampoco podía decir mucho más! Le puso colorines y hasta subrayó algunas frases aleatorias para darle más profesionalidad. Quizás por todo eso tardó tanto en llegar...

Encima Shinju le comentó irritada que el lugar de reunión había cambiado a última hora y tuvo que retrasarse aun más para llegar al balcón. Estaban ya allí sus dos compañeros, y además estaban los maestros Ryota, Iwashi y, por supuesto, Nanashi.

Siento la tardanza... me quedé encerrada en el baño pero luego descubrí que tenía una llave espada para abrir puertas y ya sabéis —rió de forma nerviosa e inmediatamente después puso una cara seria por si le recriminaban algo o la tomaban por loca y se sentó con sus compañeros, a los que saludó con la mano.

¡Ajá! Así que les estábamos esperando a ellos

Porque son los primeros interesados en conocer la verdad.

Sentaos. He traído pastitas de té y magdalenas ―ofreció Iwashi. Aunque sus compañeros se mostraron cautelosos Nicoxa cogió una magdalena encantada. Esperaba poder comerla sin ensuciar todo demasiado, ¿por qué se tienen que deshacer tan fácilmente?

¡Y yo el té!

Observó con diversión como sacaban también unos vasos y todo. Eran una situación tan peculiar que se tapó la boca con la mano para contener una risita.

Eso no hacía falta, la reunión va a ser breve. ―Nanashi le cortó el rollo de forma brusca―. Y ni siquiera sé por qué estás tú aquí.

Simbad se alejó un poco de los maestros, como si ya estuviera acostumbrado a ese comportamiento entre ellos.

Me encontré con Iwashi en la cocina, haciendo las pastitas, y le pregunté «¿Adónde vas?» y me dijo «A Bastión Hueco», y le dije «¿A qué?» y ella «A ver a Nanashi». Y quise saber si podía acompañarla, y me dijo que no porque te ibas a enfadar. Así que me puse a hacer el té. Es té rojo, el que te gustaba, ¿no?

Después de esa respuesta Nicoxa si que no pudo contenerse más y volvió a reírse.

¡Perdón! Es que me ha resultado gracioso... ―tenía la cara roja de vergüenza. Entre eso y la que había montando con las magdalenas la estaba liando un poco así que se dijo a sí misma que después de la reunión se daría una ducha para despejarse.

¿Vas a explicarnos quién era esa mujer y de qué la conocías? ―preguntó la Maestra por fin. Se mostró interesada y tomaría apuntes mentales de todo.

Claro Desperté hace… ¿cuánto? ¿Un mes? Algo así. No volví directamente a Tierra de Partida. Quería comprobar por mí misma varias cosas y prefería pasar inadvertida. Estuve varios días en Tierras del Reino. Por entonces ya habían comenzado los temblores. Investigando esa zona, el cementerio de los elefantes, me encontré con ella. Intentó engañarme usando a algunas de las hienas. Parece ser una bruja con el poder de adueñarse de las mentes y de cambiarse a sí misma de apariencia. Estaba examinando la zona, muy interesada en piedras como la que me mencionaste. El caso es que luchamos y se esfumó. Me quedé un tiempo más para esperarla, pero no volvió a aparecer. Y me fui.

Ah, sí ―intervino Simbad para aclararlo mejor―. Una hiena se transformó en Sincorazón y nos atacó, supongo que fue obra de ella.

Y tu negligencia hizo que mis aprendices tuvieran que enfrentarse con una bruja y un titán ―le reprochó con franqueza―. ¿Por qué no lo reportaste?

Nanashi…

Tienes razón. ―Bebió un poco de té mientras parecía ignorar la taladrante mirada de Nanashi―. Debí suponer que solo la había ahuyentado durante un tiempo. Y supuse que me rencontraría tarde o temprano con ella, en algún otro mundo, después de que abandonara Tierras del Reino.

¿Qué más sabes?

Poco más. Se llama Ultimecia. Y forma parte de los Villanos Finales, aunque esa conexión la descubrí hace poco.

Nicoxa abrió la boca, sorprendida. ¿Estaría diciendo la verdad? Había leído algo sobre ellos pero nunca habría pensado que se encontraría a uno en ese mundo.

¿Cómo?

Eso no puedo decírtelo.

Jo. Le ha dado a todo el mundo por callarse las cosas interesantes ―comentó por lo bajini recordando a Mufasa.

Por eso les reconoció como Aprendices. Y usó tu aspecto a su favor.

En realidad ni siquiera podrían haberme reconocido en ella. Ninguno me ha visto bajo mi aspecto animal ¿Me queda bien, eh?

Cuidado, suena a pregunta trampa. ―pudo decir antes de que Iwashi le restregara una magdalena por la cara de forma amistosa.

La aprendiza suspiró. Menos mal que ella no la había visto, podría haber dado una respuesta incorrecta.

Me parece que eso es todo lo que queríamos saber. A menos de que queráis preguntar algo más. ―Entre las migas de la magdalena de Iwashi y la suya podían hacer una nueva perfectamente―. Y más os vale limpiar y recoger esto.

¿Cómo podemos saber que esa Ultimecia no está suplantando a Iwashi ahora mismo? —Tristán parecía desconfiar de ella. Aunque no sin motivo, después de todo si ya lo hizo una vez...—. O que no lo hará en el futuro.

Solo una cosa ―Simbad también quiso hacer una pregunta―. ¿Exactamente, antes de irnos, de qué hablabas con Mufasa?

¡Es verdad! ―Nicoxa señaló a Simbad repetidas veces al darse cuenta―. Ahora que me acuerdo estoy segura de que Mufasa me ocultó información, ¡espero que la compartiera contigo!

¿Habría sido más sincero con su maestra? Esperaba que hubiera sido así, y escucharía interesada todo lo que pudieran decir en lo que quedaba de reunión.

Spoiler: Mostrar
AH. Fin de la trama, un placer chicos, me ha entretenido mucho :3
ImagenImagenImagen
v. Ficha de Nicoxa .v
Imagen
ImagenImagenImagenImagenImagen
Imagen
Spoiler: Mostrar
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Avatar de Usuario
Sito
Moderador
Moderador
The Unknowns
 
Mensajes: 6998
Registrado: Jue Ene 25, 2007 1:28 pm
Dinero: 32,717.55
Banco: 3,517,943.83
Ubicación: Onett
Sexo: Masculino
Clan: The Unknowns
Estantería de objetos
Karma: 127

Re: Ronda 7

Notapor LightHelco » Sab May 21, 2016 12:07 am

Parece que tuve un pequeño error de cálculo al pensar que la loba se dignaría a colaborar para el trueque de la magicita y no quedarse plantada en su cornisa. Perdimos valiosos minutos llegando a allí ¿y qué conseguimos? Un empujón que nos tiró fuera de la zona y con el que Ilana se llevó bastantes arañazos por protegerme durante la caída.

Estoy seguro de que esa Maestra es Nanashi —gruñí colocándome bien el sombrero antes de realizar la segunda parte del plan: El ataque contra el gigante.

No conseguí escalar mucho, pero mi puntería fue suficiente para acertar de lleno en todo el ojo del titán y ayudar con su captura, ya que parecía que la magicita servía para eso, encerrar en su interior a ese ser. Pero justo cuando la loba lo consiguió, mostró una cara muy diferente a la inicial, más cercana al grito que nos había pegado Ilana y a mí junto al empujón.

Al fin eres mío, Titán ―sonrió mirando la piedra que ahora posaba bajo su pata y después se giró hacia nosotros ―. En cuanto a vosotros, ya no os necesito para nada.

Definitivamente, no era una Maestra. El guepardo fue al primero al que ataco y habría podido llegar a matarlo si un nuevo animal no hubiese aterrizado. Un hechizo luminoso proveniente de una elegante garza, intentó golpear a la loba, pero esta simplemente lo esquivo y se preparó para su huída.

Volveremos a vernos. Muy pronto. —declaró la can a la par que un portal se abría bajo sus pies y ella misma adoptaba una forma más humana y extravagante, parecía un demonio con aquellos enormes cuernos y las extrañas alas a su espalda.

El lugar se quedó en silencio, momento que aproveché para reunirme con Ilana e intentar largarnos de allí cuanto antes. Había reconocido la voz de la garza, era Nanashi y sabiendo que lo último que vio de mí aquella mujer había sido un ‘intento de revolución’ en Bastión Hueco, prefería desaparecer tan rápido como lo había hecho la loba. Me dio bastante rabia que Nanashi se acercara antes que yo a Zazu y la magicita restante, ya que tras ver lo que había hecho la bruja, estaba muy interesado en estudiarla.

Pero no podía ser, lo mejor ahora era abandonar al grupo antes de que pudieran reconocerme.

Alec —me llamó Ilana mientras corríamos por el cementerio —. Si tan interesado estas en esas piedras mágicas, podemos intentar volver a la cueva.

Miré curioso a Ilana, ya que en aquel lugar seguía estando el Sincorazón de las pinzas. Supuse que la gatita no le tendría tanto miedo al monstruo tras haber sobrevivido a un gigante, aun podía sentir, sentado sobre su lomo, que tenía el pelo algo erizado.

Te lo agradecería mucho, Ilana, además, a saber cuándo podemos volver a hablar de esta manera —le respondí sonriente.

La felina también sonrió cerrando sus ojos e intentando recordar donde se encontraba la cueva en donde habíamos encontrado las magicitas. Teníamos todo el tiempo del mundo después de todo, así que podíamos disfrutarlo recorriendo aquellas tierras durante algunas horas.

Spoiler: Mostrar
Y fin. Voy a echar de menos a la Ilana parlante =(

Y bueno, que ha sido corto, pero intenso como se dice. Un placer haber participado en la trama : D
ImagenImagenImagenImagen



Logros:
Spoiler: Mostrar
ImagenImagenImagen


Awards:
Spoiler: Mostrar
ImagenImagen
ImagenImagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Avatar de Usuario
LightHelco
111. Roxas Organización
111. Roxas Organización
The Unknowns
 
Mensajes: 3303
Registrado: Jue Jun 07, 2012 10:42 am
Dinero: 320,406.83
Banco: 15,568.00
Ubicación: Un lugar con lapiz y goma
Sexo: Femenino
Clan: The Unknowns
Estantería de objetos
Karma: 16

Ronda 8: final

Notapor Nell » Sab May 21, 2016 4:44 pm

Simbad, Ban y Nicoxa


Iwashi miró directamente a Ban, mientras se llevaba la taza a los labios para dar otro sorbo. Nadie hizo mención a que Simbad y Ban no participaran en la comida.

Ya lo sabes.

Esa fue toda su respuesta.

Por otro lado, Nanashi se encargó de esclarecer la breve reunión que había tenido con Mufasa.

No es fácil explicar a un nativo por qué ha aparecido y desaparecido un gigante de doce metros, y al final no hizo falta. Por lo que me contó Mufasa, tienen una leyenda de sus antepasados acerca de cómo unos guerreros lo sepultaron bajo ese cementerio para asegurar el reino. Y después desaparecieron. ―Le dio un trago al té para aclararse la garganta―. Quizá fueran antiguos portadores. Lo investigaré. En cualquier caso le dije que el gigante había muerto para calmarle. Si Ultimecia se lo ha llevado, Titán no regresará y así Mufasa podrá estar tranquilo respecto a su gente. Supongo que desde la aparición de los sincorazón es más fácil asimilar que sucedan cosas extrañas.

»Mufasa no te dijo toda la verdad, Nicoxa. La última vez los sincorazón interrumpieron la celebración por el nacimiento de Simbad, y descubrimos que detrás de su aparición estaba una leona llamada Zira, ahora una proscrita. Nunca llegamos a demostrarlo, pero Scar, el hermano de Mufasa, también estaba involucrado. Posiblemente el rey no quiera culpabilizarle de lo que ocurría en el cementerio de elefantes hasta que haya pruebas, aunque en el futuro habría que tener cuidado con él.

Después de eso no hubo mucho más que decir. Nanashi les dio permiso para marcharse (se notaba la incomodidad de Ban, y algo la de Simbad), si así lo deseaban, y se quedó a terminar la merienda con Ronin e Iwashi. De ese modo se aseguró que limpiaran todo lo que había manchado, recogieran y se fueran (aunque ellos prometieron volver con más otro día).


Entre las ruinas


¿Te das cuenta? Ese monstruo enorme nos ha destruido nuestro territorio.

Las dos hienas caminaban por el anterior cementerio de elefantes, ahora destrozado y derruido, buscando un nuevo lugar donde asentarse. Algunos caminos eran inestables al tratarse de un apiñamiento de rocas, por lo que tenían cuidado de dónde pisaban en todo momento.

¿Tú crees? Yo creo que ahora tiene más encanto. ―La hiena señaló entonces a un pequeño agujero entre dos rocas apiladas—. ¡Mira quién está ahí! ¡Si es Ed!

¿Y tú dónde estabas? Estuviste comportándote de una forma extraña y luego te esfumaste. ¿Te ha vuelto a comer la lengua algún león? ―le recriminó.

Ed se limitó a reírse, con la cabeza baja. Salió de la cueva para unirse a ellos y volver a ser un trío. Tenía menos pelos en la cabeza.

Da igual. Lo mejor es que por ahora esquivemos a Scar hasta que se le pase el enfado.

La culpa fue suya, nos prometió que tendría a los sincorazón controlados para que pudiéramos darles caza.

Aun así nos reñirá a nosotros. Vamos.

Las hienas continuaron explorando lo que quedaba de su hogar. Por poco no se cruzaron con un Alec que disfrutaba de un tranquilo día entre los restos de la cama de Titán. No había encontrado ninguna piedra, pues posiblemente habían quedado sepultadas por el derrumbamiento. Eso no le quitó el tiempo de paz con Ilana. Y sus conversaciones en voz alta.


Spoiler: Mostrar
En primer lugar, quiero disculparme porque me parece que planteé mal el encuentro con Ultimecia e interpretasteis que la única vía posible para sobrevivir era darle la piedra. Me pareció genial que vierais a través del engaño (toda la trama apuntaba a que ocurría algo extraño con Ed), así que no terminé de entender por qué no os planteabais alternativas, que en realidad yo solo veía dos, pero podían ser más según qué papel desempeñarais cada uno. Titán estaba ralentizado, se la podíais liar muy parda.

Mi consejo entonces es el siguiente: preguntad. Creo que pocas veces un GM os va a dejar un turno preparado para que sigáis un único camino o hagáis solo lo que él quiere. Si le tenéis a mano y se os ocurre otra cosa, planteádsela; el no ya lo tenéis de antemano (que no quiera decir nada), pero, ¿y si de repente estaba esperando que tomarais otra decisión? En pocas ocasiones os negarán que le planteéis un “¿puedo hacer eso?”, porque la iniciativa de los jugadores es esencial para que una Trama avance. Si no, tiene que tirar de NPCs y eso no es divertido ni para uno, ni para otro.

Creo que tampoco terminé de hacer bien la aparición del titán, porque me he quedado con la sensación de que no os lo tomasteis demasiado en serio. Sabíais que os quedaban dos turnos, Titán quería haceros añicos y aun así no le lanzasteis todo, todo lo que pudisteis ni os dejasteis la piel. De hecho, estuve pensando en penalizaros y haceros despertar a todos al par de días en un lugar diferente, salvados por alguna clase de milagro (?), si no hubiese sido porque el ataque a los ojos os daba más tiempo y estuvo bien coordinado.

En definitiva, por mi parte han sido dos turnos muy ajetreados y algo mal unidos a lo que había sido la trama hasta ahora. Lo siento de veras, yo tengo mi estilo y Tanis el suyo, quizá tendría que haberme adaptado un poco más a cómo lo planteaba ella para que no fuera un cambio demasiado brusco. Pero bueno, hemos acabado, y me parece que no demasiado mal.

Ahora lo mejor. ¡Puntuaciones!

Astro, nada.

[Para no repetirme, diré que en general ya sabéis todos de qué va esto y no tengo nada que destacarle a nadie respecto a escritura, no soy nada exigente con eso. Y en general creo que lo habéis hecho bien, vais a ver que tenéis puntuaciones altas y si hay tochos detrás de ellas, es porque me voy a poner quisquillosa para que veáis un punto de vista externo. Y luego ya hagáis lo que queráis con él, las puntuaciones son las que son xD]

Orbox, 68 PX. Me gusta cómo has enfocado la carga de líder que llevaba Simbad, para quien no era la primera vez que ejercía como tal, pero al final no sé hasta qué punto significa para Simbad la figura de líder, si es una responsabilidad cedida por los Maestros o una responsabilidad hacia sus compañeros. Por ejemplo, tras la huida con Titán menciona por encima a Nicoxa y se preocupa, pero no va más allá. No les da por muertos porque quizá se hallaran cerca de la zona o se alivia pensando que seguramente se hayan salvado si han escapado como ellos. En definitiva, creo que hay poca interacción o interés personal hacia sus compañeros, que perfectamente Simbad puede no tener ni querer una relación cercana con ellos, pero entonces eso también debería remarcarse. ¿Le importan por el trabajo o por algo más?

Helco, 65 PX. Pienso que debes de ser la que menos provecho ha sacado de la trama, porque buena parte de ella la has pasado escondiéndote o huyendo, lo que no da demasiado margen para actuar. Ha sido mala suerte, pero eso no quita que Alec careciera de iniciativa: estaba ahí por estar, no tenía ninguna meta u objetivo, hasta la búsqueda de Simba era una imposición y no algo que preocupara a Alec. Y luego has tenido el mal tino de planear dos cosas que no podían funcionar: llevarle la piedra a la loba (no zorra) en vez de lanzársela cuando un puño de gigante se os acercaba, o intentar escalar a Titán como si un ratón frente a doce metros móviles fuera rival. Tenías una Ilana más cercana y participativa, que al final solo seguía las instrucciones de su dueño porque tenía una personalidad demasiado dependiente. En definitiva, siento que no ha sido tu mejor trama y que puede que esté siendo algo injusto por decirte esto, porque algunas cosas no estaban a tu alcance, pero otras sí.
PD. Siento también no haberte dejado quedarte con ninguna piedra. La culpa es de experiencias pasadas en las que dejarle un objeto clave a un jugador ha ocasionado un montón de problemas en el sentido de que ha rulado por ahí sin ton ni son, de mano en mano, y sin aprovecharse más que a nivel de que el personaje se chulee por tener una cosa bonita.
¡Subes a nivel 20!

Sito, 67 PX. En general creo que has sido el que más ha sabido mantenerse activo, has interactuado mucho con los NPCs y te has desenvuelto bien en varias situaciones. Quizá porque te he tenido en otras tramas también te puedo decir que Nicoxa no ha cambiado mucho desde la última vez. No es algo en sí malo, pero digamos que empieza a ser predecible porque se mantiene en su papel, indaga y pregunta de forma inquisitoria como si ya sospechara algo o quiera chinchar. Podrías empezar a plantearte de una manera distinta el contexto, de modo que Nicoxa lo tenga más en cuenta para actuar de una u otra forma sin que pierda el toque. Por ejemplo, no ha habido absolutamente ninguna diferencia entre cómo trataba a Simba o a Nala. Y ciertamente puede que a Nicoxa no le importe el estatus real, pero existe y lo conoce: úsalo.
PD. También tengo que disculparme porque en el anterior turno te correspondía la escena en la que Mufasa regaña a Simba, pero por una mala planificación mía no la incluí. Y que no era plan con el titán y tal (?)
¡Subes a nivel 13! [Según tu ficha tenías dos niveles sin actualizar, ahora 3. Voy a preguntar si es un error o algo, sino lo es, ya estás corriendo a ponerte al día]

¡Hasta otra!
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Awards 2010-2011, 2012, 2013, 2014 y 2015
Spoiler: Mostrar
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
ImagenImagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen

¡Gracias a todos los que votasteis!
Avatar de Usuario
Nell
161. Kairixula
161. Kairixula
The Unknowns
 
Mensajes: 6373
Registrado: Jue Dic 17, 2009 10:18 pm
Dinero: 19.43
Banco: 48,402.75
Ubicación: Intentando desengancharme de la Lotería ;_;
Sexo: Femenino
Estantería de objetos
Karma: 65

Anterior

Volver a Tramas

¿Quién está conectado?

Usuarios navegando por este Foro: No hay usuarios registrados visitando el Foro y 1 invitado

cron