Permiso de Sombra para controlar levemente las acciones de Ragun y cerrar finalmente el Encuentro. Seas quien seas, GM evaluador, sé gentil pls
Así que Ragun había terminado por comprarse una nave Gumi. Ambos habíamos terminado por caer en las dulces trampas del capitalismo futurista. Jamás iba a terminar por acostumbrarme: mi mundo parecía tener un sistema más simple y entendible que tanta maraña económica sobre bolsa de acciones, inflación, el 1% y no sé qué más tonterías. Aunque en los nuevos mundos el derecho de sangre ya no era un problema... eso sí era un punto para ellos.
Pero desvarío. Al final resultó que, además de que el lobo de Ragun se dejó acariciar, no pasó nada interesante. Al parecer habíamos terminado nuestra visita guiada. Por mí mejor: ya había visto demasiado en un solo día; mi mente no podría procesarlo.
Ah, pero mi tutor tenía una última idea. Y sin duda, de las... de las peores:
—
¿Qué me dices si... —Ragun fingió (o tal vez realmente lo hizo) dudar por unos instantes—
...te doy una clase de conducir?Tragué saliva y, con la cabeza gacha, como aceptando mi propia ejecución, lo seguí hasta el hangar.
***Al final resultó que la nave había sido preparada especialmente para su nuevo dueño. Estacionada exactamente donde a Ragun se le había mencionado anteriormente (con el tanque lleno además), se hallaba la nave hogar que, más que eso, parecía un crucero de batalla armado con cañones y con un chasis bien reforzado, con estilizados detalles en dorado sobre su brillante pintura gris.
Mi tutor se situó a un lado de la nave, y Nyx y yo lo acompañamos. Presionó levemente su nuevo reloj de muñeca, dudando un poco sobre si estaba haciendo lo correcto y... De pronto nos hallábamos dentro; en un parpadeo. De inmediato el dueño del vehículo comenzó a explorarlo y estudiarlo, especialmente la cabina del piloto.
Solté unas risitas. El regreso iba a hacer bastante ameno con quien, me gustaba pensar, sería un buen amigo en el futuro. Sonriente, me resigné a seguirlo y a observar con atención cómo despegaba y piloteaba la nave, preparándome para lo que tarde o temprano estaría destinado para mí.
Sobre las clases de conducir en la nueva nave Gumi de Ragun, y el resultado que éstas tuvieron...
...bueno, esa es una historia para otro momento.