por Aru » Lun Ago 11, 2014 9:36 pm
Bavol comenzó a contarme la historia de un traidor de Tierra de Partida y de al parecer un amigo suyo que murió por culpa de tal guerra. La verdad es que era difícil de asumir, ya que no había escuchado nunca una historia tan horrible (que fuese verdad)...
—No había nunca imaginado que Tierra de Partida tuviera un pasado tan oscuro… —dije agachando mi cabeza y acurrucandome.
—Y sobre cómo me convertí en Portador… —dijo Bavol dando a comenzar su historia—. Yo vengo de un mundo llamado La Cité des Cloches. Allí a mi gente nos perseguían todos los días y teníamos que vivir en unas sucias catacumbas, no era un buen lugar para vivir para la gente como yo. Sin embargo, un día, mientras me perseguían unos matones, el gran Maestro Ronin apareció y me rescató de esos niños. Más tarde, aparecieron los sincorazón y me volvió a salvar. Después de eso, mientras me acompañaba a casa, me propuso venir aquí y, bueno, más o menos esa es la historia.
Vaya… La Cité des Cloches era el mundo de donde provenía Bavol, sabía que había más mundos pero siempre llamaba la atención conocer otros mundos que no fuesen el mío, Ciudad de Paso. No era uno de los peores mundos, sin embargo, siempre había querido averiguar más acerca de otros lares.
—¿Y tú cómo te hiciste Aprendiza? Todavía no hemos tenido reunión de Maestros y Kazuki no nos ha contado cómo te reclutó. —dijo Bavol formulando una pregunta.
Cierto, él me había contado su historia, yo también debía contarle acerca de la mía.
—Como ya te he mencionado, vengo de un mundo llamado Ciudad de Paso, es un mundo donde siempre se ven extranjeros y gente muy diferente a nosotros, sus ciudadanos. Yo y mis padres éramos simples mercaderes. Esa misma tarde mi padre me mandó a recoger la mercancía que había pedido, y escuché a algunos habitantes borrachos de un bar criticar a los portadores de la llave espada. Decían que era culpa de ellos que la Ciudad se hubiese llenado de sincorazón… Pero yo nunca hice caso a semejantes tonterías, así que continué.
Cuando ya tenía todo de la tienda… Una manada de sincorazones nos atacaron, solo recuerdo gritos y gente llorando junto a los cadáveres de lo que parecían ser sus familiares… Entonces el alcalde apareció y le echó cara a un hombre demoníaco que pedía que le trajeran a un hombre llamado ‘’Cloud Strife’’ o algo parecido. Cuando se fue, corrí hacia el alcalde a ver si estaba bien, pero me rechazó e ignoró de mala manera…Después de eso, un tal León pidió a los habitantes que evacuaran la zona, pero de pronto apareció un gigantesco sincorazón. Él me pidió que me fuera con los demás pero me quedé a ayudarle, y cuando casi muero aplastada por idiota, Kazuki me salvó.
Sin continuar la historia, me levanté y estiré los brazos… y dije:
—Lo demás, como se dice, es innecesario. —dije sonriendo a Bavol.
Me acerqué, me senté cerca de él y agaché la cabeza. Recordar cómo dejé a mis padres atrás me ponía triste, pero aun así no podía ya arrepentirme pues era algo que en un futuro me beneficiaría.
—Bavol, nunca olvides hacer lo que quieras por miedo o por falta de confianza, es mejor hacer algo y arrepentirse que no tener la oportunidad de arrepentirse —le dije finalizando la frase con otra sonrisa.
Yo, una novata, le estaba dando un consejo a alguien con más experiencia que yo. Sabía que lo que Bavol haría a continuación sería echarme una charla sobre que eso debería decírmelo él a mí o algo parecido, así que simplemente apoyé mi cabeza en su hombro esperando una colleja.