Malik, que se encontraba más o menos alejado de la vista de todos por haberse refugiado contra el edificio, entre varios escombros, aguantó en silencio unos momentos mientras su futuro se decidía.
«
Por una vez, Malik, has acertado en todo,» contestó Aaron con voz neutra. «
Has sido un verdadero estúpido. Pero no te preocupes. Nunca más tendrás que preocuparte por eso.»
Sonaba frío, tajante, pero cuando Malik continuó hablando, sintió que le escuchaba. Quizás sí que tenía una última oportunidad.
«
Derrotaremos a Xihn, y le haremos pagar todo lo que nos ha hecho a todos. Lo destruiremos, nos vengaremos. No voy a pelear más contra ti, quiero trabajar contigo. Me necesitas para sobrevivir, y yo te necesito para sobrevivir. Podemos con ello. Después... Cuando todo acabe.. cuando acabe... Lo prometo.»
«
¿Cuando acabe?»
Malik notó una vez más cómo Aaron hurgaba en su mente. Notó su desesperación, su afán por encontrar algún rastro de mentira, de que no podía estar sugiriendo
eso de verdad.
Pero los dos sabían que iba en serio.
Un remolino de sentimientos confusos envolvió a Aaron y, por ende, a Malik. Sorpresa, duda, y esperanza reprimida.
No tuvo tiempo de decir nada más. Fátima, aprovechando que podía volar, localizó a su marid y la confusión de Aaron se convirtió en recelo. Al notar el enfado de Malik, se apresuró a confesarle:
«
Ni te molestes. No me gustan nada estas... cosas.»
Si se refería a los besos o a las mujeres en general, no era fácil de decir. De todos modos, se mostró colaborativo, y le retransmitió a Fátima todo lo que su marido quería decirle, imitando su tono de voz para que no sospechara.
Como era de esperar, no quiso acercarse a las Princesas, pero poco importaba. Tenían asuntos más importantes de los que ocuparse.
* Regocijado, Gabriel respondió a Alanna:
«
No se me da bien. Es tu talento natural. Simplemente lo he forzado a salir. Vas a ser muy impresionante dentro de unos años, Alanna, ¿te das cuenta?»
A su vez, Chihiro escuchó a Celeste sin interrumpirla. Cuando respondió, parecía muy cansada:
«
No me importa, muchacha, que sepan si he ayudado o no. Solo me importaba lo que pensaba una persona, y ya no está. Pero… gracias por tu preocupación. Sintió que Chihiro aprobaba que se tomara el elixir que le ofrecía Saeko y también una vaga irritación ante el enfrentamiento que se dio entre esta y Alanna. Estaba claro que pensaba que eran unas niñatas y que no era el momento ni el lugar. Sin embargo, no dijo nada.
Más tarde, cuando Celeste la consultó, la mujer dijo:
«
Muchos de vosotros sois torpes, novatos y, para colmo, no tenéis conciencia de grupo. No tengo ni idea de si tenemos una oportunidad, a menos que podáis colaborar. Siempre he preferido ir por mi cuenta, pero después de Xihn deseé como nunca haber tenido ayuda. Esa es mi respuesta. Eso y que si estáis dispuestos a morir por ello, entonces sí podríais tener una oportunidad. Por su lado, la reina Friederike no pareció muy contenta con la respuesta de Saeko —que pudo sentir su rechazo— y guardó silencio durante el discurso de Alanna, sin ofrecer su opinión. Luego se acercaron a Nithael, que le había prometido en su momento a Saito que se ocuparía de él. Este no tuvo más que rozar la nariz de Harun y el dragón se sacudió un instante. Luego sus ojos se iluminaron, por fin libre del Caos, y se retiró para consolar a Alanna con algunos lametones. El ángel agradeció a Saeko su intervención, aunque no pudo evitar mirarla con el ceño fruncido. Friederike tomó entonces el control de la lengua de Saeko, visto que nadie le había explicado al ángel lo que estaba sucediendo, y le resumió la situación.
—
Majestad… Es un honor contar con vuestra fuerza en esta batalla.—Realizó una reverencia, extendiendo las alas a los lados—.
Lamento no poder dedicaros la atención que os merecéis, pero debo seguir ocupándome del resto. Friederike puso una sonrisa en los labios de Saeko y luego la liberó para que la muchacha se dirigiera hacia Yasmín. La princesa trabajaba, frenética, codo con codo con Nanashi. Esta, a su vez, había tomado la poción que les ofreció Hiro y había espantado al muchacho para que no les molestara. Necesitaban espacio y no alguien hablara con una persona inconsciente.
—
¿Necesitáis ayuda? Deberíamos eliminar primero el Caos, o volverá a enloquecer. «
¡Silencio, muchacha! ¿Acaso sabes algo del Caos? Déjalas trabajar, bien saben hacer su trabajo sin necesidad de que nadie las interrumpa. —
¿Sabes? Pudimos salvar Agrabah, esta situación no será diferente. La princesa, que desprendía una luz cegadora por las manos mientras recorría el cuerpo de la Maestra y se esforzaba por devolverle una apariencia humana, se secó el sudor de la frente y miró a Saeko. Arqueó una ceja.
—
Saeko, querida, no creo que sea ni remotamente la misma…! —
¡No te desconcentres!—espetó Nanashi, con los dientes tan apretados que prácticamente no se la entendió. Lanzó una mirada fulminante a Saeko y luego volvió a trabajar. Yasmín también le dio la espalda a la muchacha y se concentraron en salvar la vida de Lyn.
Por su lado, Alanna se había apartado al lado de Harun y Bella había logrado purificar su Llave Espada con la ayuda de Felipe. Luego las Princesas acudieron a la llamada de Fátima. Pero Alanna no se quedó sola:
«
Alanna… Creo que no ha sido el lugar ni el momento para echar en cara cosas personales, pero comprendo por qué lo has hecho. No eres idiota, solo joven.Es más fácil pelearse por asuntos personales que soportar la tensión que supone Xihn. No te martirices, Alanna. No tiene sentido que sufras así. No aquí, no ahora, al menos. Ariel se volvió hacia Fátima cuando se acercó. Como tendía a pasar, se la quedó mirando boquiabierta y tardó un segundo en reaccionar.
—
Con tu poder, creo que podría sacar partido a este tipo de cuerpo —concluyó Fátima después de explicarle lo ocurrido—
. ¿Aceptaríais ser mi catalizador, Alteza? La Princesa sonrió y le cogió las manos con dulzura.
—
Viniste a Atlántica cuando nuestro mundo necesitaba ayuda contra Xihn. Y eres la Maestra de Bella, una de mis amigas más preciadas. Por supuesto que acepto. Será todo un honor. Nada más decir estas palabras, un anillo blanco apareció por arte de magia en el dedo de Ariel. Cerró el puño, satisfecha, y Fátima sintió a la vez un subidón de energía exageradamente grande. De ahora en adelante, sus hechizos no sólo serían más poderosos, sino también más grandes y llamativos. Incluso su propia esencia pareció fortalecerse. Brillaba más, y hasta parecía menos transparente y etérea.
El daño mágico de Fátima se multiplica por tres. A su vez, el rango de sus habilidades se duplica, y la duración de los hechizos se extiende un turno más.
Ronin, Ryota y el círculo de Princesas —con excepción de Yasmín, que seguía trabajando en salvar a Lyn— escucharon atentamente a Fátima. Se veía que muchas querían hacer preguntas, pero se mordían la lengua.
Entonces Felipe dio un paso al frente, aferrando su Espada, y dijo:
—
Puedo sentir el Caos manando de la torre. Xihn todavía sigue vivo, así es. Estoy seguro de que si logro abrirme paso hasta él y le clavo mi arma en el pecho, podremos librarle de parte de la corrupción. Ariel acarició el Tridente, se apartó el pelirrojo cabello del rostro y dijo:
—
Creo que yo podría abrir un camino a través del Caos con mi Tridente. El resto—miró a sus compañeras—
podríais reunir a dos o tres Caballeros y abrirles un camino también. Por desgracia, no creo que todas puedan permitirse rechazar Oscuridad y Caos a la vez. Me temo que vamos a necesitar la ayuda de los niños. —
Puedo enviar a las esencias de Fátima a apoyar a los grupos, si es necesario. Ronin y Ryota miraron a Bella, sorprendidos al ver los anillos, pero al asumir que sería demasiado largo de explicar, no hicieron preguntas. Ryota masculló:
—
Sin embargo, hay otro problema con el que debemos contar. Aaron… —
¡Llaves listas, Caballeros! Se hizo el silencio y todos se volvieron hacia las ruinas.
Los escombros temblaban con tanta fuerza que era imposible no escucharlos. Comenzaron a derretirse por un lado, a congelarse por otro. Hubo fragmentos que se redujeron a polvo, mientras que otros estallaron como si fueran bombas y Ryota tuvo que proteger a los que estaban más cerca arrojando una hoz de viento para desviar la metralla.
Fue entonces cuando todos los infectados por el Caos experimentaron una desagradable sensación. Percibieron un latido que los estremeció por dentro. El Caos borboteó en su interior y dio un violento coletazo.
Primero apareció el guantelete plateado, recorrido por innumerables fisuras entre las que se filtraban delicados hilos de Caos. Después, bañado casi en lava candente, Xihn emergió con lentitud del lugar donde habían pretendido enterrarlo vivo.
La mayor parte de su armadura estaba a punto de caerse a pedazos.
Dentro de Malik, Aaron se revolvió, inquieto.
«
Está al límite de sus fuerzas. Gabriel también debe de notarlo. Ahora mismo, arrebatarle todos los corazones que le quedan es más fácil que nunca. Si te pones de acuerdo con la niña pelirroja... Podríamos acabar con él antes de que la armadura se rompiese y liberase todo el Caos. Algo que os interesa.»
A esa distancia no pudieron escuchar nada, pero Xihn logró desplomarse a un lado y luego lo vieron encogerse casi en postura fetal, como si estuviera sufriendo un gran dolor.
El aire se enrareció. La oscuridad parecía incrementarse por momentos y el halo de sangre que rodeaba el eclipse era cada vez más y más fino.
Fátima percibió a un Andrei disgustado alejándose de Xihn y regresando junto a Bella y ella. Entonces, con un chasquido de dedos, se hizo visible para todos.
—
O aprovecháis ahora, o la armadura se romperá. Como era de esperar, su aparición no fue bien recibida.
—
¿TÚ? —gritó Cenicienta, invocando la Llave Espada de un destello y apuntándole con ella—
. ¡Qué hace él aquí! —
¡Esperad! Colaborará con nosotros —interrumpió Bella. Saltaba a la vista que no le hacía la menor gracia interponerse entre Cenicienta y Andrei, pero no se apartó—
. Si Xihn libera el Caos, él será el primero en morir. Necesita que ganemos tanto como nosotros. —
No es lo peor que tenemos aquí —admitió Ronin entonces. Miró a Fátima, como preguntándose hasta qué punto estaría de acuerdo, pero no dijo nada.
Cenicienta, sin parecer convencida lo más mínimo, bajó el arma muy despacio. Bella le dio un apretón suave en la mano.
—
No hay tiempo que perder. Si Xihn libera todo el Caos, los que estamos afectados perderemos el control sobre nosotros mismos. Moriremos. Por otra parte, perderemos los poderes que nos concede, que no son poca cosa, y la batalla se hará demasiado larga. Ryota asintió y se llevó una mano al mentón.
—
Entonces, sólo tenemos dos opciones. O utilizamos los poderes del Caos para matar a Xihn cuanto antes, aun a riesgo de morir; o nos libramos de ellos y entablamos batalla de forma más segura... hasta que la armadura de Xihn se rompa y libere todo su poder. —
Por favor—dijo entonces una voz. Zel se incorporó, con sus hermanos intentando echarle una mano a cada lado. Les acarició la cabeza a ambos antes de mirar al frente. El largo cabello se apartó de su rostro, dejando al descubierto una expresión decidida y manchurrones de lágrimas—.
Tenemos que acabar con esto. Ariel dedicó una larga mirada a los niños.
—
Juntos podremos lograrlo. Nos encargaremos de frenar el avance del Caos y la Oscuridad todo lo que podamos. Sigue siendo un gran riesgo, y no podemos asegurar que salgáis todos con vida, pero vale la pena intentarlo. Es hora de poner fin a esto. —
Yo os cubriré desde el cielo —añadió Nithael—
. Es probable que Xihn todavía centre sus ataques en mí, pero, al aire libre, le costará más alcanzarme. Podré atacar y proteger a la vez mientras os encargáis de él. Eve se mordió el labio inferior y apartó la vista, sin querer mirar a Xihn, mientra que Ruz no dejaba de vigilar con creciente angustia a Lyn. Nanashi y Yasmín continuaban trabajando sobre ella como si Xihn no hubiera aparecido.
Allí tenían su posible futuro si el Caos se apoderaba de ellos.
Friederike, dentro de Saeko, murmuró:
«
No nos corresponde esta decisión. Solo podremos apoyar desde lejos. Deberías elegir a quién protegerás.»
Chihiro, a su vez, siseaba:
«
Todos nos jugamos la existencia. Si se echan atrás, ¿qué sentido habrá tenido llegar tan lejos? Podemos ir al frente, muchacha, pero creo que seríamos más útiles en la retaguardia. No sé cómo afectará el Caos a mis poderes de Tiempo. Por otro lado, Gabriel decía con emoción mal reprimida:
«
Debemos arriesgarnos, Alanna. ¡Hay que acercarse y arrebatarle todos los Corazones que podamos, es nuestra única oportunidad! Una Princesa puede protegernos y, si vamos con el Príncipe, puede que en pocos golpes acabemos con esto… Aaron, por su parte, ya había hablado y dado su opinión. Con todo, sería inteligente por parte de Malik no acercarse hasta que comenzara la batalla. Xefil ya lo había visto de refilón y nadie sabía qué sucedería si Ronin, Ryota, Felipe y Ragun lo avistaban también.
* Xihn logró ponerse a cuatro patas y, entonces, con lentitud, se fue poniendo de pie. Aaron, a través de los ojos dorados de Malik, contempló a los Caballeros en silencio.
¿Cuál sería su decisión?
*redoble de tambores*
Nos acercamos a la batalla final, que empezará en esta ronda, así que ya podéis ir decidiendo ataques. Con todo, vamos a aclarar algunas cosas.
-Si Aaron y Gabriel atacan ahora y arrancan Corazones a Xihn, el Caos permanecerá, pero vuestro enemigo se volverá mucho menos poderoso en la segunda fase. ¿El problema? Los Corazones romperán la armadura en esta misma ronda al ser extraídos. Si recordáis lo que les sucedió a Karel y a Andrei, que no podían controlar su Caos, sabéis lo que os espera.
-Para asegurarse de que el Caos sea efectivo se necesitan al menos a cuatro personajes contagiados y no valen NPCs. Podéis contagiar a otros, por supuesto —tocar a Lyn, Saito, Dos, Fátima o Andrei debería bastar—, pero recordad que los que están poseídos no deben acercarse al Caos o perderán a Gabriel, Aaron, Friederike o Chihiro.
-Los que acepten usar el Caos a pesar de todo, tendrán una capacidad de ataque brutal durante dos rondas (esta y la siguiente). A la tercera, sin embargo, usaremos random.org y vuestros personajes podrían llegar a morir. Podéis libraros del Caos en la siguiente ronda, decidir que queréis una muerte gloriosa o arriesgaros con la suerte. Al tener el Caos es muy posible que podáis derrotar en pocas rondas a Xihn, eso sí.
-Si optáis por el camino seguro, la batalla se alargará, ¡pero no habrá peligro para vuestros personajes!
-En cualquier caso, necesitáis que os abran el camino. Las Princesas que abrirán paso son: Ariel (aliada con Fátima por fuerza), Bella (quien vaya con ella contará con el apoyo de las esencias), Cenicienta y Blancanieves.
-Zel apoyará a la Princesa por donde vaya Alanna.
-Ruz a la Princesa donde vaya Hiro.
-Eve a la Princesa por donde vayan Xefil o Ragun, dependiendo de cómo organicemos a los NPC.
-Los Maestros apoyarán dependiendo de cómo vean al resto del grupo.
-Felipe cargará por la zona de Blancanieves.
Y eso es todo. ¡Suerte y a ver qué sucede!
P.D.: sí, morir es morir. No quedarse inconsciente. ¡Vamos a darle drama a todo esto!
quote]
Ragun:
VIT: 200/200
PH: 92/92[/quote]
Xefil:
VIT: 40/40
PH: 56/56
Saeko:
VIT: 80/84
PH: 58/58 (70 poder curativo)
Alanna:
VIT: 55/60
PH: 14/38
Celeste:
VIT: 26/26
PH: 50/58
Te quedas sin éteres
Kairi:
VIT: 35/40
PH: 25/52
Hiro:
VIT: 10/28
PH: 22/54
Malik:
VIT: ????/138
PH: ????/58
Fátima:
VIT: 32/32
PH: ????/????
Saito:
VIT: 110/120
PH: 33/60
Dos:
VIT: 36/40
PH: 25/38
Dos: 15%
Saito: 15%
Fátima: 15%
* * * Fecha límite: viernes 27 de julio
Faltas:
Helco: II
Zero: I (justificada)
Tanis: I (justificada)
Denna: I
Zero: I
Cris: I