[Tierra de Partida] ¡Protesto!

[Final Fan]

Que Yagami estuviese tumbado a la sombra de un árbol y Kailee de pie a su lado no debería ser un motivo por el que preocuparse. Sin embargo, alguien no muy lejos de ellos, cerca de la pared rocosa de la colina que presidía los jardines, parecía haberse quedado muy quieto de repente... para luego apresurarse a seguir con lo que estaba haciendo. Parecía estar hurgando en el suelo, cavando un hoyo, quizás...

¡Pero eso no era todo! Al otro lado de los jardines, un pompón tembloroso asomaba desde el interior de un arbusto. Debía haber un moguri escondido en aquel lugar, ¿pero qué estaría haciendo? Quizás la detective pensase en algo concreto cuando vio que, a los pies del arbusto, había un papel tirado. La planta se agitó durante un momento y la pequeña mano del moguri recogió el papel, seguramente esperando que nadie lo hubiese visto.

¿Qué haría Kailee, entonces? Si decidía ver qué hacía la persona que hurgaba en el suelo, seguro que el moguri acababa escapando de allí de lo nervioso que estaba. Pero si quería interrogar al moguri... ¡sería el otro quien se podría escapar!

Qué dilema.

[Kailee]

Kailee estaba asustada, ¡Cree que le van a quitar la cola!
— No te asustes tanto, no creo que te corte la cola. —Siguió Yagami, no parecía muy convencido de lo que dijo.— Aparte de eso, te repito que yo no soy el culpable.
— Miau, pero tengo que seguirte igual, y ese Derhe... no le seguiré por su bien.— dijo Kailee en tono amenazante.

Seguían caminando y llegaron a un lugar de muchos árboles, lo que dejaba tranquila a Kailee porque le encanta estar rodeada de ellos.
— Yo me voy a quedar un rato aquí descansando. — dijo Yagami— Lo digo por si sigues insistiendo en no separarte de mí. Siéntate si te apetece, gatita.
— Claro que no me separaré— Hablaba mientras se distraía con su cola.

Kailee, se puso al lado del chico, un poco nerviosa por no estar acostumbrada a las amistades. Cerraba los ojos y maullaba en voz baja, como si hablara sola.

— Oye, ¿cómo llevas esa investigación?— le preguntó el a Kailee.

— Bastante bien, pero no te puedo decir nada porque es secreto ¡Y menos si eres sospechoso miau !— Siguió la chica.

Kailee empezó a usar su olfato, a mirar a todos lados y a olfatear, algo pasaba.

— Miau... noto algo raro...— siguió olfateando.

Kailee se fijó en un papel del suelo, ¿qué sería? ¡Una mano cogió el papel! Kailee estaba mas preocupada que nunca, ¿sería sospechoso? ¿No lo sería? ¿Qué hará Kailee?

— Yagami, espera un momento porfavor ¡NO TE MARCHES!— siguió, y se dirigió al moguri.

Cuando se acercó a el lo hizo sigilosamente, era fácil gracias a sus rasgos felinos.

— Pequeño Moguri, ¿puedo ayudar? — Intentó ganar su confianza.

[VaniRoxy801]

— Bastante bien, pero no te puedo decir nada porque es secreto ¡Y menos si eres sospechoso miau! —le respondió Kailee.

La chica seguía convencida de que Yagami había tenido algo que ver con el robo de carteles. ”Maldito Akio…” Pensó Yagami. Ahora tenía que encontrar alguna manera de intentar convencer a la aprendiza de que él no había hecho nada…

Justo en ese momento, Kailee empezó a… olfatear. Mirando hacia todos los lados y olfateando, como si se hubiese dado cuenta de algo.

— Miau... noto algo raro... — la chica se levantó — Yagami, espera un momento por favor ¡NO TE MARCHES!— le dijo antes de irse.

Yagami levantó un poco la cabeza para ver que estaba haciendo. Kailee se había dirigido hacia unos arbustos donde había un moguri escondido y algo nervioso.

— Pequeño Moguri, ¿puedo ayudar? — le dijo Kailee al moguri.

Yagami se levantó también y empezó a acercarse a los arbustos donde estaban los dos. Quería saber qué pasaba.

[Final Fan]

—¡Kupóoooo!

El uniforme azul claro de gorrita y chaqueta que llevaba puesto el moguri era inconfundible. Se trataba de Mail, el moguri mensajero que aquella misma mañana les había entregado la carta de citación en el Gremio a Kailee y Fuyu. Cuando Kailee se acercó a él y desveló su escondite en el arbusto, introdujo el papel que se le había caído en su bolso de cartas apresuradamente, sin demasiado cuidado.

—¡N-no, kupopopó! ¡No me hace falta ayuda, en serio, kupó! —respondió a la oferta de la chica-gato, con voz chillona—. ¡Mejor me voy yendo, kupó! ¡Tengo reparto que hacer! ¡Kupóooooo!

Mail se alejó revoloteando rápidamente, sin que los aprendices tuviesen la opción de alcanzarlo siquiera. Sin embargo, el precipitado vuelo tuvo una ventaja para la detective, y quizás también para Yagami: una prueba. Al final, el papel había vuelto a caer al suelo debido al poco decoro que había mostrado el moguri al intentar meterlo en su bolsa. Si lo cogía, leería en él lo siguiente:

Nombre: ¡Encuéntralo, por favor!
Solicitante: Mail Alguien que necesita ayuda
Descripción: ¡Un sobre muy importante para mí ha caído en malas manos, kupó! ¡Necesito que alguien lo encuentre rápidamente o me meteré en problemas, kupó. ¡Por favor, ayudadme, kupó!
Mundo: Tierra de Partida.
Requisitos: ¡Cualquiera me vale!
Recompensa: ¡Ya lo hablaremos!

Tenía partes tachadas, como si el solicitante original intentase ocultar algo...

Mail añadido a la lista de sospechosos.
Si los aprendices volvían la vista hacia donde se encontraba la persona hurgando en el suelo cerca de la pared rocosa, se darían cuenta de que ya no había nadie allí, y no había dejado marcas de ningún tipo. Aún así, Kailee ya tenía a tres personas en su lista de sospechosos, el mínimo que le había pedido Gerard. ¿Era hora de volver al Gremio o tenía algo más pensado?

[Kailee]

—¡Kupóoooo!

El moguri que estaba ''ocultando algo'' era sin duda ¡Mail! Sí, Mail, el moguri que le había entregado la carta a Kailee. Ese... ¿Sospechoso? Muy interesante pensaba la chica, ya que mmm era interesante que el mismo moguri que le entregaba la carta... sea un sospechoso.

—¡N-no, kupopopó! ¡No me hace falta ayuda, en serio, kupó! —Respondió con voz chillona.—. ¡Mejor me voy yendo, kupó! ¡Tengo reparto que hacer! ¡Kupóooooo!
—V-vale... supongo.— Dijo la chica, la actitud del moguri la hacía pensar que era sospechoso.

El moguri se marchó, sin que Kailee y su compañero pudieran alcanzarle, pero algo se le cayó al instante, ¿un papel? sí, lo era, un papel en el que decía:

—¡Yagami mira! Se le a caido un papel.— Llamó a su compañero.

Nombre: ¡Encuéntralo, por favor!
Solicitante: Mail Alguien que necesita ayuda
Descripción: ¡Un sobre muy importante para mí ha caído en malas manos, kupó! ¡Necesito que alguien lo encuentre rápidamente o me meteré en problemas, kupó. ¡Por favor, ayudadme, kupó!
Mundo: Tierra de Partida.
Requisitos: ¡Cualquiera me vale!
Recompensa: ¡Ya lo hablaremos!

—Muchas partes estan tachadas, nuestro sospechoso no es muy listo, bueno saberlo.—Siguió hablándole a su compañero.

Mail añadido a la lista de sospechosos.

Kailee no tenía claro si volver al gremio a resolver todo este alboroto o quedarse a hablar con su compañero sobre todo esto un poco, esta confusa... Mas de lo normal.

—Yagami, ¿tu que opinas? ¿Volvemos al gremio para el jucio? o... ¿Investigamos algo más? Tengo tres sospechosos pero ¡Miau! Aqui hay gato encerrado... hum vaya dicho mas raro teneis.—

Kailee dicho esto volvió a sentarse al lado del árbol a juguetear con su cola esperando la respuesta de su compañero.

[VaniRoxy801]

El moguri se puso bastante nervioso con el ofrecimiento de Kailee.

—¡N-no, kupopopó! ¡No me hace falta ayuda, en serio, kupó! ¡Mejor me voy yendo, kupó! ¡Tengo reparto que hacer! ¡Kupóooooo!

—V-vale... supongo.— Le respondió Kailee.

El moguri se marchó rápidamente. Yagami se fijó en que se le había caído algo al moguri…Un papel, al que Kailee le echó mano rápidamente.

—¡Yagami mira! Se le ha caído un papel.— le llamó la chica.

Yagami se acercó lo justo para poder ver lo que ponía en la hoja.

Nombre: ¡Encuéntralo, por favor!
Solicitante: Mail Alguien que necesita ayuda
Descripción: ¡Un sobre muy importante para mí ha caído en malas manos, kupó! ¡Necesito que alguien lo encuentre rápidamente o me meteré en problemas, kupó. ¡Por favor, ayudadme, kupó!
Mundo: Tierra de Partida.
Requisitos: ¡Cualquiera me vale!
Recompensa: ¡Ya lo hablaremos!

—Muchas partes están tachadas, nuestro sospechoso no es muy listo, bueno saberlo.

Yagami también se fijó. Era muy fácil ver lo que había bajo los tachones, por lo cual estaba claro que un moguri llamado Mail quería recuperar cierto sobre confidencial.

—Yagami, ¿tú qué opinas? ¿Volvemos al gremio para el juicio? o... ¿Investigamos algo más? Tengo tres sospechosos pero ¡Miau! Aquí hay gato encerrado... hum vaya dicho más raro tenéis.

Por lo que había dicho, parecía que Kailee había considerado a ese moguri como su tercer sospechoso, siendo el chico de la biblioteca el primero y Yagami el segundo.

— ¿Cuántas veces te habré dicho que yo no he tenido nada que ver? —Kailee parecía ignorarle, porque se fue bajo el árbol a juguetear con su cola inocentemente— La que me espera…

Yagami no sabía que era peor, tener a Kailee de detective o a Akio de juez. De todas maneras, no tenía que preocuparse por nada realmente, puesto que él se había enterado esa misma mañana del robo de carteles y desde luego no había tenido nada que ver. Sí, lo mejor era acabar todo esto cuanto antes y ponerse a descansar. Se acercó hacia el árbol donde estaba Kailee y le dijo:

— Si ya tienes tus tres sospechosos, será mejor que volvamos al Gremio. Quiero acabar con esto ya…

[Final Fan]

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Estaba esperando a que hicieseis algo más, pero VaniRoxy801 me mandó un MP para que postease yo, así que... :/

Kailee y Yagami se quedaron en los jardines después de que la detective hubiese decidido tomar a Mail como sospechoso. Aquel momento de relajación le podría servir para recapitular sus avances en la investigación y el por qué de la elección de cada uno:

-Derhe Yeno actuó de forma extraña desde que supo que Kailee estaba investigando el crimen del Gremio. Parecía bastante nervioso. Acabó accediendo a decir su nombre para demostrar que no tenía nada que ocultar.

-Yagami Kiryu fue inculpado por su Maestro Akio. Dijo que no toleraría que no fuese llevado a juicio, así que es de suponer que sus razones eran de peso.

-Mail, el moguri cartero, estaba escondido en un arbusto. Se alteró en gran medida cuando Kailee y Yagami lo encontraron y, al escapar, se le cayó uno de los carteles del tablón de misiones. Estaba lleno de garabatos.

Kailee podía decidir seguir tumbada en el jardín, investigar un rato más o ir al Gremio para llevar a cabo el juicio. Yagami, por su parte, seguía bastante impaciente.

[Kailee]

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Flan, debido al Evento Global y que no me dejan el pc D: intentare por MUY MUY difícil que sea, postear en la tablet, por eso me gustaría acabar la trama, a pesar de que esto pueda afectar a mi puntuación, siento las molestias, ya lo había hablado con Vani.

Kailee no podía seguir investigando. ¡Era una gandula! Además de que ya tenía tres sospechosos, a pesar de que ella tiene claro que Yagami no es un sospechoso. ¿Y por qué le seguiría? Pues porque nunca tuvo a un amigo... Aunque acosándole no conseguiría mucho. Pero parece que han echo buenas migas.

—Yagami, ¿Vamos al Gremio?—Le preguntó a su compañero.—Miau ¡Estoy impaciente!— Seguía hablando... Aveces hasta ella misma se llama pesada.

—Miau, Yagami, ¿quién crees que ha sido el culpable? ¿Derhe o Mail? Miau, a mi todo el mundo me cae bien... Pero ¡Ese Derhe no me gusta nada! ¡Es un maleducado!—Empezó a mover la cola con energía.

—Bueno ¡Volvamos!— Dicho esto empezó a jugar con una mariposa que pasaba por ahí.—¡Mariposita estate quieta!—

[VaniRoxy801]

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Lo mismo, sorry por el post soso, pero quiero acabar con esto ya XD

—Yagami, ¿Vamos al Gremio? Miau ¡Estoy impaciente!— le dijo Kailee.

— Sí, es lo mejor… —le respondió Yagami algo cansado, deseando que todo el rollo del robo acabase ya.

—Miau, Yagami, ¿quién crees que ha sido el culpable? ¿Derhe o Mail? Miau, a mi todo el mundo me cae bien... Pero ¡Ese Derhe no me gusta nada! ¡Es un maleducado!

— Bueno, la nota de Mail era muy…espera… ¿No me tienes en cuenta? ¿Por fin has dejado de considerarme sospechoso? Bien, así al menos Akio no podrá…

—Bueno ¡Volvamos! ¡Mariposita estate quieta!

Yagami suspiró. No había manera. Esa chica se distraía con cualquier cosa y no parecía estar haciéndole caso. En fin, con un poco de suerte, ahora que Kailee no le consideraba sospechoso podría librarse del asunto del robo. Haciendo un gesto a Kailee para que le siguiese, ambos se dirigieron al Gremio, donde iba a comenzar el juicio en breve.

[Final Fan]

* * *

—Bien, estupendo.

Gerard parecía encantado. La disposición de las butacas del nivel bajo había sido cambiada para que todas mirasen hacia la barandilla. Así, una pequeña multitud de moguris curiosos había llenado la sala para ver cómo era presidida una sesión judicial, cuanto menos, variopinta: detras de tres atriles diferentes (que en realidad eran sólo mesas comunes y corrientes del Gremio) se encontraban todos los involucrados en el pleito: Kailee y Gerard detrás de uno, como fiscales; Derhe, Yagami y Mail tras otro enfrente, como acusados; y Akio presidiendo ambos como juez. Este último chistó ruidosamente.

—¡Silencio en la sala! —exclamó, golpeando el mango de su Llave Espada contra la mesa a modo de martillo improvisado. Parecía agradarle extraordinariamente su posición.

Gerard se inclinó levemente en señal de respeto y luego miró fijamente a los tres sospechosos que Kailee había juntado. Luego la miró a ella con una sonrisa tranquila.

—Buen trabajo, detective. Dime, ¿qué te ha hecho elegir a estos tres sujetos?

Escuchó la respuesta de Kailee con atención y asintió a todo lo que ésta le decía. Tras guiñarle un ojo, el barista volvió a hablar cambiando su semblante a uno más serio casi al momento, con una voz profunda y sonora que imponía lo suyo.

—Derhe Yeno. Yagami Kiryu. Mail el moguri —enumeró, señalando a cada uno con un dedo acusador—. Se os acusa de un execrable crimen de hurto y ocultación de todos los carteles del Tablón de Misiones de nuestro respetable Gremio la pasada noche. ¿Cómo os declaráis? Si tenéis una coartada este es el mejor momento para decirlo.

—¡Esto es una idiotez! —exclamó Derhe Yeno, exasperado, inclinándose sobre el "atril"—. ¡Ayer no pisé este antro en todo el maldito día! ¡Y esas asquerosas misiones me importan un pito! ¡Estaba...!

El chico se frenó y no acabó la frase. Gerard le dedicó una mirada inquisitiva y unas gotas de sudor comenzaron a escurrirse por su frente.

—¡P-por favor, kupó! —exclamó Mail, rompiendo el silencio—. ¡Es mi primera semana de trabajo, kupó! ¡Esto va a manchar mi historial en un tiempo récord, kupó! ¡Ayer por la noche estaba ordenando el correo de esta mañana para entregarlo lo más rápido posible! ¡Yo no he hecho nada, kupopopóooo!

El moguri comenzó a sollozar con la cara hundida en sus pequeñas manos. De los moguris que se encontraban sentados como audiencia del juicio surgió un murmullo de descontento. No creían posible que aquel pobre congénere suyo hubiese cometido el robo. Gerard suspiró y se mesó la barba durante unos instantes, para luego dirigir su mirada hacia Yagami.

[Kailee]

Kailee y su compañero llegaron al gremio. Estaba nerviosa por la simple razón de que nunca había participado en un juicio, ni tampoco había sido fiscal. Apenas sabía qué significaba la palabra fiscal.

Allí se encontraba Gerard, también Akio, Kailee, y los tres acusados. Kailee parecía mirar con un poco de temor a Akio, por la simple razón de que es un Maestro, y porque aún piensa en la amenaza de que iba a cortarle la cola.

—Bien, estupendo.— Dijo Gerard recibiendo la atención de Kailee.

Kailee se fijaba que habían colocado la sala para el juicio, notaba que eran las mesas del gremio, aunque estaba bien improvisado.
Kailee dio un pequeño bote por el susto que le había causado que Akio golpeara su llave espada contra la mesa como martillo.

—¡Silencio en la sala!

Gerard miró a Akio y se inclinó con respeto hacia él. Kailee sin saber que hacer imitó a este, y el le dedicó una sonrisa.

—Buen trabajo, detective. Dime, ¿qué te ha hecho elegir a estos tres sujetos?

—Miau...em Derhe es muy sospechoso, también maleducado, y no me dejaba preguntarle nada. — Habló la joven.—Luego Mail... Parecía muy nervioso, y se le cayó una carta un tanto sospechosa.—Continuó ella.—Miau... Y Yagami... No creo que sea culpable pero... Akio me ha dicho que es un sospechoso, y tengo que ser profesional ¡Miau!— Terminó, intentando defender a su nuevo amigo.

Escuchó y asintió a lo que decía Kailee, y tras guiñarle el ojo continuó hablando.

—Derhe Yeno. Yagami Kiryu. Mail el moguri —enumeró, señalando a cada uno con un dedo acusador—. Se os acusa de un execrable crimen de hurto y ocultación de todos los carteles del Tablón de Misiones de nuestro respetable Gremio la pasada noche. ¿Cómo os declaráis? Si tenéis una coartada este es el mejor momento para decirlo.

—¡Esto es una idiotez! —exclamó Derhe Yeno, exasperado, inclinándose sobre el "atril"—. ¡Ayer no pisé este antro en todo el maldito día! ¡Y esas asquerosas misiones me importan un pito! ¡Estaba...!

Kailee en ese momento, cuando el joven no acabó la frase vio la oportunidad perfecta para preguntarle.

—¡¿Donde estabas eh?!—Siguió Kailee. Parecía que no le tenía mucho aprecio al joven.—¡Miau, a mi no me engañas!— Continuó, ella nunca se enfada, pero el joven Derhe la a cabreado mucho.


—¡P-por favor, kupó! —exclamó Mail, rompiendo el silencio—. ¡Es mi primera semana de trabajo, kupó! ¡Esto va a manchar mi historial en un tiempo récord, kupó! ¡Ayer por la noche estaba ordenando el correo de esta mañana para entregarlo lo más rápido posible! ¡Yo no he hecho nada, kupopopóooo!

Kailee no sabía que pensar de Mail... ¿Era inocente? ¿No lo era? Era confuso... Eso sí, tenía que ser profesional.
¿Qué pasara con su amigo Yagami?

[VaniRoxy801]

El juicio había comenzado. El Gremio había sido “adaptado” para simular la apariencia de un juicio y Yagami le había tocado sentarse junto a los otros acusados, Derhe Yeno y el moguri Mail.

—¡Silencio en la sala! —gritó Akio para poner orden.

El Maestro Akio estaba rebosante de felicidad, se le notaba que le gustaba aquella situación. De mientras, Gerard estaba hablando con Kailee sobre el caso.

—Buen trabajo, detective. Dime, ¿qué te ha hecho elegir a estos tres sujetos?

—Miau...em Derhe es muy sospechoso, también maleducado, y no me dejaba preguntarle nada. — empezó Kailee—Luego Mail... Parecía muy nervioso, y se le cayó una carta un tanto sospechosa. Miau... Y Yagami... No creo que sea culpable pero... Akio me ha dicho que es un sospechoso, y tengo que ser profesional ¡Miau!

—Derhe Yeno. Yagami Kiryu. Mail el moguri. —nombró Gerard — Se os acusa de un execrable crimen de hurto y ocultación de todos los carteles del Tablón de Misiones de nuestro respetable Gremio la pasada noche. ¿Cómo os declaráis? Si tenéis una coartada este es el mejor momento para decirlo.

Derhe y Mail fueron los primeros en quejarse, el primero alterándose bastante y el moguri balbuceando de manera inquieta. Kailee repicó ante la respuesta de Derhe, cosa obvia. Cuando le tocó a Yagami, su respuesta fue áspera y arrogante.

— Yo me he enterado esta mañana. No tengo nada que ver con esto, si estoy aquí es porque el señorito juez se aburría y me acusó. —dijo mientras señalaba a Akio.

[Final Fan]

—¡Silencio! —exclamó Akio, golpeando con fuerza su atril con el martillo tras las alegaciones de Yagami—. ¡Si eres sospechoso es por tus propios crímenes, delator de pacotilla!

El Maestro sonreía de una forma casi maniática. La posición que Gerard le había otorgado le resultaba más cómoda que el mejor sillón de terciopelo, sin lugar a dudas. Se sorprendió un tanto, eso sí, cuando alguien abrió las puertas del Gremio y entró con paso raudo, interrumpiendo el juicio. Se trataba de la misma persona encapuchada a la que Kailee y Yagami habían visto en los jardines, hurgando en la tierra. Cuando se descubrió el rostro, reveló el de una tímida chica de cabellos azabache.

—¡Samara! ¡Justo a tiempo! —exclamó Gerard, recibiéndola con los brazos abiertos.

La chica hizo una pequeña reverencia y se acercó al estrado de Kailee y Gerard con parsimonia.

—Los... papeles —musitó.

Tras un casi inaudible "oh" por parte de Gerard, la chica depositó sobre la mesa de los improvisados fiscales unos cuantos papeles llenos de tierra. Si se molestaban en leer alguno de ellos, se darían cuenta de que eran los mismos que habían desaparecido del tablón de misiones el día anterior. Akio estuvo a punto de atronar de nuevo con su martillo, quizás sólo por que tenía ganas, pero por algún motivo decidió contenerse.

—Interesante —susurró Gerard con una sonrisa de autosuficiencia—. Ya sé quién es el culpable.

—¿¡Sólo mirando los papeles!? —exclamó Derhe Yeno, con los ojos como platos.

—¡Oh, no, kupó! —dijo Mail.

Esta vez el martillo del juez sí sonó, con golpes secos y contundentes.

—Bueno, vamos a ver —replicó Akio, desganado—. Habéis encontrado unos papeles en la colina de los jardines, pero no veo cómo con eso has podido saber quién es el culpable.

Kailee reparó en una nueva sonrisa en Gerard, una diferente. Su plan había resultado.

—Ah... pero ahora mismo es bastante obvio —dijo, mirando a su alrededor para abarcar a todos los espectadores, para luego centrarse en Kailee—. ¿No crees, detective?

[Kailee]

—¡Silencio! —Gritó el maestro, que cada vez que lo hacía Kailee pegaba un pequeño brinco.—. ¡Si eres sospechoso es por tus propios crímenes, delator de pacotilla!

Kailee al oír esa frase no pudo evitar gruñir, sabía que en todo esto había algo raro, algo raro que no conseguía descubrir. A la vez le dedicó un guiño a su compañero Yagami, mientras ella pensaba Tu tranquilo.

Akio no paraba de sonreír de una forma casi siniestra. Kailee tenía bastante miedo por ese maestro, por los rumores y en la forma que se estaba portando. ¿Es mas pequeño que ella? Sí, pero no implica que ella tenga mas poder. Es mas, no lo tenía.

—¡Samara! ¡Justo a tiempo! —Se alegró Gerard, mientras Kailee miraba hacia la misma dirección confundida.

La chica hizo una reverencia, mientras se acercaba a donde estaban Kailee y Gerard. Kailee aún sin entender nada.

—Los... papeles—Pronunció.

La joven depositó unos papeles llenos de tierra en la mesa, esos papeles eran algunos de los robados. Akio iba a golpear la mesa, pero paró por alguna razón y se contuvo ¿Por qué razón?

Kailee sospechaba de todo esto, ella creía que era Derhe... pero ahora no está segura. También pensaba que era Mail pero... tampoco está segura. Y Yagami no es nada culpable según ella... pero... Akio le culpa... ¿Por qué?
Kailee empezaba a comprender. Esta actitud de Akio... no sabía si era normal o no, pero aquí hay gato encerrado, y no es precisamente ella.

—Interesante —susurró Gerard.—. Ya sé quién es el culpable.

—Creo que yo también ¡Miau! Pero es solo una supe... supu... ¡Suposición!—Exclamo Kailee un poco dudosa.

—¿¡Sólo mirando los papeles!? —exclamó Derhe, como asustado.

—¡Oh, no, kupó! —siguió Mail.

Esta vez el martillo del juez sí sonó, con golpes secos y contundentes.

—Bueno, vamos a ver —Replicó el maestro a la respuesta de Gerard y Kailee.—. Habéis encontrado unos papeles en la colina de los jardines, pero no veo cómo con eso has podido saber quién es el culpable.

—Es solo una supuci.... ¡Suposición!— Continuó Kailee, viendo mas claro quien es el culpable por los reproches de Akio.

Gerard volvió a sonreír a Kailee, con una cara de satisfación.

—Ah... pero ahora mismo es bastante obvio —dijo, mientras miraba a los espectadores, y luego hacía Kailee—. ¿No crees, detective?

Kailee por miedo a equivocarse, le susurró al barista.

—Yo creo que es Akio... Con todos mis respetos ¡Miau!— Comentó la chica. Si ella acusara a Akio sin ser el verdadero culpable se moriría de vergüenza.

Después de decir esto la chica le hizo un guiño a Yagami, y señaló a Akio con la mirada.

—Maestro, señoría, ¿por qué Yagami es acusado? ¿Qué ha echo?— Preguntó Kailee dirigiéndose a Akio con respeto.

[VaniRoxy801]

—¡Silencio! —gritó Akio en respuesta a las acusaciones de Yagami—. ¡Si eres sospechoso es por tus propios crímenes, delator de pacotilla!

El Maestro Akio estaba disfrutando de la situación, excepto cuando alguien irrumpió en el Gremio, cosa que hizo que el pequeño Maestro se sorprendiese. Una figura encapuchada entró en la sala.

—¡Samara! ¡Justo a tiempo! —dijo Gerard cuando ésta se quitó la capucha.

—Los... papeles —dijo mientras se acercaba al estrado.

La chica dejó sobre la “mesa” unos papeles llenos de tierra. Echándoles una rápida ojeada, Yagami pudo ver que se trataban de los carteles del Gremio.

—Interesante —susurró Gerard—. Ya sé quién es el culpable.

—Creo que yo también ¡Miau! Pero es solo una supe... supu... ¡Suposición!

—¿¡Sólo mirando los papeles!?

—¡Oh, no, kupó!

¿Habían descubierto al culpable? ¿Sólo habiendo recuperado los carteles? Algo se le escapaba a Yagami… Pero el martillazo que dio Akio le desvió de sus pensamientos.

—Bueno, vamos a ver. —replicó Akio— Habéis encontrado unos papeles en la colina de los jardines, pero no veo cómo con eso has podido saber quién es el culpable.

—Es solo una supuci.... ¡Suposición! —le respondió Kailee.

Qué extraño… Parecía que la actitud de Akio había cambiado de repente… Se le notaba algo más inquieto…

—Ah... pero ahora mismo es bastante obvio. —exclamó Gerard llamando la atención de todos los de la sala— ¿No crees, detective?

El culpable…¿ya estaba claro? Yagami ojeó la sala un momento, observando a los presentes. Mail parecía bastante asustado, no parecía estar mintiendo. Derhe, aunque fuese un cretino, no parecía ser tampoco el ladrón… aunque convenía seguir sospechando de él. Pero… ¿quién más podía ser?

Kailee se acercó a Gerard para susurrarle algo que Yagami no llegó a oír. Ella había sido llamada para buscar al culpable… Gerard era el responsable del Gremio y Samara su ayudante… Entonces… Yagami se giró lentamente hacia su Maestro, para dedicarle una mirada de odio.

Akio... Me haces perder toda la mañana… ¿Por una ridícula travesura tuya? —pensó Yagami.

—Maestro, señoría, ¿por qué Yagami es acusado? ¿Qué ha echo?— preguntó Kailee.

— Yo también tengo una pregunta, Akio. ¿Qué estabas haciendo la noche que robaron los carteles? —preguntó Yagami con una mirada desafiante.

Como Akio fuese el responsable del robo, lo hubiese hecho sólo por cometer una travesura y hubiese culpado a Yagami por pasar el rato… Se iba a enterar.