[Bastión Hueco] Demostración

Trama de Saito y Saeko

La aparición del bando de Bastión Hueco ha colocado a la Orden de los Caballeros de la Llave Espada en una tensión creciente difícil de remediar. ¿Llegarán a enfrentarse ambos bandos en conflicto, o será posible la paz?

Moderadores: Suzume Mizuno, Astro, Sombra

Re: [Bastión Hueco] Demostración

Notapor H.S Sora » Mié Ene 02, 2013 2:29 am

Saeko acababa de hacer un comentario que interpreté como grosero, pero en el momento en que tenía pensado realizar mi cansada replica el Maestro Ryota intervino, por lo cual callé para escuchar que tenía que decir.

Es suficiente, Saito, Saeko —dijo el Maestro haciendo una seña con su mano—No quepa duda de que ambos me habéis sorprendido bastante.

Aquello significaba algo bueno, sin duda. Por lo que sabia no era nada fácil sorprender al Maestro de los Maestros, pero lo había logrado. Me autocorregí al instante, lo habíamos logrado, el Maestro Ryota también había sido impresionado por Saeko. ¿Que había mostrado ella de especial? Bueno, quizá un control mucho más notable que el mio, no cabia duda. Pero por lo demás, consideraba a Saeko alguien demasiado arrogante para mi gusto. Alguien que probablemente me vendería a mí o a cualquier otro aprendiz de Bastión Hueco por sus objetivos, o por simplemente quedar bien ante el Maestro Ryota y los demás.

¿Y tu no venderías a cualquiera de ellos por encontrar a Louise?

Ignoré aquello. Tenían que ser imaginaciones mias, y aunque quizá no lo fuesen... sabía que si volvía a entrar en aquél trapo no me sería tan fácil volver. Pero quizá tenía razón, no tenía casi ningún lazo que me uniese a los demas miembros del lugar. Pensar así hacía que una parte de mí recibiese un helado escalofrio por todo el cuerpo, quizá Saeko no era la única arrogante que había en aquella sala.

Por lo que hemos podido presenciar, nuestras conclusiones son las siguientes —dijo Ariasu, acercándose a Ryota.—: los dos sois afines a la oscuridad. Saeko, tú demuestras bastante control, aunque al ser la primera vez que experimentas el poder de la oscuridad, no consigues enseñar todo tu potencial, ¡pero no te preocupes! ¡Es algo que se va a aprendiendo!

Aquella era la conclusión de la Maestra de Saeko, sin duda. No podía evitar pensar, cuanto sería el potencial que albergaria Saeko... ¿Sería mayor que el que yo mostraba? Y sin dudar a dudas otra gran duda me asaltaba. ¿Aquello que acababa de mostrar era todo el potencial que tenía en aquellos momentos? De ser así, tendría que preguntarme más tarde como empezar a controlarlo.

En cambio, Saito. A pesar de que tú has logrado demostrar todo tu potencial, por poco pierdes tu corazón. Es un concepto diferente de perder el control, en relación a lo sucedido con Saeko. Tu compañera es capaz de controlar el poder poco a poco, mientras que tú lo has sacado de golpe.

Pensé en que aquello que acababa de decir mi Maestro era en parte postitivo y en parte negativo: Tenía un gran poder, pero por el momento no era capaz de controlarlo para nada en absoluto. Es más, perder el control hubiese sido mejor que lo que casi había sucedido hacia unos minutos. El control se puede recuperar, mientras que el corazón una vez que se haya ido, no vuelve.

¡Esto es bastante interesante! ¡El poder de la oscuridad, actuando de manera tan distinta en diferentes corazones! ¿No crees, Ryota?—La Maestra Ariasu parecía observarnos más como a conejillos de indias que como aprendices y eso era algo que crispaba mis nervios, aunque intentaba restarle toda importancia.

Tampoco es tan sorprendente, si nos ponemos a pensar y sacar conclusiones de los libros donde hemos adquirido conocimientos sobre este tipo de sucesos. Sólo que quizás, nunca lo habías presenciado, Ariasu. Lo que me sorprende es que lleguen a usar ese poder recién empezando su camino como portadores —A mi Maestro parecia restarle importancia al asunto. Incluso hizo enfadar a la Maestra Ariasu, a quien pude ver inchar los mofletes por el rabillo de mi ojo. Aquella escena me había hecho esbozar una leve sonrisa, Ariasu no acababa de caerme bien y que Ryota le hiciese aquellos cortes me alegraba en parte—. Ahora que habéis experimentado vuestra magia afín, ¿cómo os sentís? Por lo que veo, Saito, pareces agotado. ¿Y tú, Saeko? ¿Qué es lo que has notado?

Miré a Saeko la cual no articulaba respuesta. ¿Significaba eso que me cedia el turno de palabra? Decidí que quizá explicarme yo primero sería lo mejor, como había dicho el Maestro Ryota estaba más que agotado y no estaba como para esperar a Saeko toda la eternidad.

Bueno Maestro, con el permiso de Saeko empezaré yo primero... —cogí un poco de aire, para no tener que parar demasiado mientras le intentaba explicar que es lo que había notado— Es cierto que he perdido el control, bastante... pero lo que me ha pasado ha sido algo con explicación. Una voz se me apereció, una voz que me provocó y que sabia pistas de...—miré a Saeko que se encontraba a mi lado. No creía que hiciese falta repetir que era lo que buscaba— bueno, sobre lo que usted sabe que ando buscando... Y no pude contener la rábia que sentí en mi interior cuando se fue dando por echo que no lo lograría. —Recordar aquello hizo que cerrase los puños con fuerza, pero no pasó de ahí— Y me gustaría que ambos me ayudasen a controlar ese potencial, quiero poder sacarlo todo... pero sin lugar a dudas, no quiero perder el control como ha pasado hoy. Por lo demás, no tengo demasiado que contar, como ya ha comentado Maestro, me encuentro bastante cansado y algo fatigado por los esfuerzos, pero nada grave. Espero que eso que les he explicado les ayude, si necesitan saber cualquier otra cosa pregúntenmelo después de que Saeko explique lo que tenga que explicar...

Dicho esto desconecté durante algunos segundos mientras Saeko explicaba lo que fuese que tenía que decir. En aquellos momentos otras preguntas rondaban por mi cabeza y dejé la mirada fijada en un punto de oscuridad sin darme cuenta: ¿Quién diablos era aquella voz? ¿Por qué tenía a Louise? ¿Lograría encontrar el lugar en el que estaba?... Necesitaba encontrar respuestas a mis preguntas, y tenía que darme prisa en encontrarlas.
Imagen

Muchas grácias por el avatar Mepi ^^
H.S Sora
22. Espectro
22. Espectro
 
Mensajes: 655
Registrado: Mar Sep 25, 2012 7:43 pm
Dinero: 3,775.22
Banco: 213,774.43
Sexo: Masculino
Karma: 3

Re: [Bastión Hueco] Demostración

Notapor EspeYuna » Sab Ene 05, 2013 1:53 am

Habéis sentido la oscuridad en vuestros corazones. Por lo que veo, Saeko, también eres propensa a sucumbir a ella, según tengo entendido con tus palabras —explicó el Maestro, con un semblante sereno—. A veces es agradable dejarse llevar, pero puede conllevar a tu perdición.

Yo te ayudaré a controlar esa rabia, jovencita —dijo entonces Ariasu, guiñando un ojo e interrumpiendo a Ryota—. ¡Pero para ello habrá que entrenar bastante! Tienes un fuerte rival, por lo que veo. Saito, ¿verdad? ¡Ten cuidado con esos tentáculos, o si no, un día te arrancarán la cabeza!

Ariasu, deja de asustar a mi aprendiz. Sobre lo que me cuentas, Saito, es bastante obvio que la oscuridad de tu corazón ha estado jugando con tus sentimientos. Son el mejor ingrediente del que dispone esa bestia que adormita en tu interior para hacerla despertar y perder el control sobre tus acciones.

>> Una simple provocación. Sólo una, te puede conducir a convertirte en uno de ellos.


El Maestro señaló entonces hacia las vidrieras.

De repente, los cristales de aquellas preciosas ventanas se hicieron mil añicos, cayendo sobre los aprendices. Por suerte, una aparición hizo que no sufriesen daño alguno.

Spoiler: Mostrar


Lo sabía, sabía que vendrían. Ya estaban tardando —decía en voz alta Andrei, habiendo conjurado con su baraja de cartas una barrera para defender a Saito y Saeko.

Un veloz sincorazón hizo intento de atacar de frente a Saito, pero éste chocó contra la barrera que había invocado su compañero, mucho más experimentado que él, sin duda.

Spoiler: Mostrar
Imagen


¿Me llevo a los críos y se lo dejo a ustedes, Maestros?

Andrei, deshaz la barrera.

¿¡Qué!? ¡Ese sincorazón no es un soldado, perdone que me entrometa, pero.. los van a hacer trizas!

Andrei, ya es suficiente. Deshaz la barrera. Es una orden.

El Maestro Ryota dirigió sus ojos hacia los de Andrei. Por un momento, el rostro de éste palideció, increíble. ¿Andrei, asustado?

D-de acuerdo.

El sincorazón se posó por un momento en el suelo, pero luego comenzó a volar de un lado a otro de la sala. Era veloz, mucho, quizás demasiado.

Una gran prueba daba comienzo.

Spoiler: Mostrar
En este combate seré un tanto subjetiva, sin VIT ni números. Podéis vencerlo o no, depende de lo buenas que sean vuestras estrategias a la hora de combatirlo. Y, cómo no, sucederá una cosa u otra si perdéis o vencéis ;D
Fecha límite: Viernes, 11 de Enero
Imagen
¡Soy enfermera~!
Nurses are Angels on Earth
Imagen
Mi blog + DeCulture

Imagen
Imagen
Spoiler: Mostrar
Imagen
KHWorld Awards 2014
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
KHWorld Awards 2013
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
KHWorld Awards 2012
Imagen
ImagenImagen
Imagen

Imagen
Avatar de Usuario
EspeYuna
115. Demyx
115. Demyx
The Unknowns
 
Mensajes: 3437
Registrado: Mar Feb 28, 2012 11:12 pm
Dinero: 53,263.25
Banco: 15,063.87
Ubicación: ¡Entrenándome en Tierra de Partida para combatir a los sincorazón! ¡Ah! ¡Y en FanPlace!
Sexo: Mucho, gracias por preguntar
Clan: Bohemia Lectura
Estantería de objetos
Karma: 54

Re: [Bastión Hueco] Demostración

Notapor Tsuna » Jue Ene 10, 2013 1:51 am

Spoiler: Mostrar


Habéis sentido la oscuridad en vuestros corazones. Por lo que veo, Saeko, también eres propensa a sucumbir a ella, según tengo entendido con tus palabras. A veces es agradable dejarse llevar, pero puede conllevar a tu perdición. —Explicó el maestro después de escuchar nuestras explicaciones, en cierto modo tenía razón, la oscuridad me transformaba completamente y por ello me arriesgaba a transformarme en Sincorazón.

Yo asentí con la cabeza, dando a entender que tendría en cuenta su valioso conocimiento.

Yo te ayudaré a controlar esa rabia, jovencita. ¡Pero para ello habrá que entrenar bastante! —A ese ritmo no me haría mucha falta, me fortalecía rápido.— Tienes un fuerte rival, por lo que veo. Saito, ¿verdad? ¡Ten cuidado con esos tentáculos, o si no, un día te arrancarán la cabeza! —Tanto Saito como yo debíamos poner todo nuestro empeño si queríamos desatar y controlar nuestro potencial, era lógico para mí, yo mostraba el poder poco a poco y Saito de golpe, pero si no poníamos nuestra parte, la balanza nunca se equilibraría.

Ariasu, deja de asustar a mi aprendiz. Sobre lo que me cuentas, Saito, es bastante obvio que la oscuridad de tu corazón ha estado jugando con tus sentimientos. Son el mejor ingrediente del que dispone esa bestia que adormita en tu interior para hacerla despertar y perder el control sobre tus acciones. Una simple provocación. Sólo una, te puede conducir a convertirte en uno de ellos. —De nuevo presté atención a cada palabra del maestro Ryota, no en vano era quién gobernaba allí, parecía tener respuestas para todo... ¿Qué era pues lo que más anhelaba su corazón? Una respuesta inalcanzable por ahora, pero le ayudaría en lo que hiciese falta.

Inmediatamente el maestro señaló a unas vidrieras y estas al momento se hicieron añicos, arrojando sobre nuestros cuerpos incontables y peligrosos cristales. Flexioné mis piernas para retroceder de un salto e intentar eludirlos, fue todo muy rápido, pero unas barreras surgieron a nuestro alrededor protegiéndonos del peligro. Para ser sincera, no lo habría contado de no ser por esa inesperada ayuda.

Spoiler: Mostrar


Lo sabía, sabía que vendrían. Ya estaban tardando.

Quedé impresionada, nos había salvado en cierto modo aquel chico de cabello y vestimenta peculiar, sin embargo un gran Sincorazón con alas y color rojo, el cual fue el responsable de romper la vidriera, se abalanzó contra Saito, en vano pues chocó contra la barrera. El engendro retrocedió aturdido y revoloteó por la Sala del Trono, buscando alguna víctima seguramente, era muy veloz. ¿Qué estrategia debería seguir para abatirlo? Un enemigo así era inalcanzable para mí, y más en ese estado. Yo en todo momento permanecí atenta a la escena, analizando cualquier cosa que pudiese suceder, la barrera no aguantaría eternamente. ¿Harían gala los maestros de su poder para derribar al inesperado enemigo?

¿Me llevo a los críos y se lo dejo a ustedes, Maestros? —¿Críos? Al fin y al cabo, sí tenía derecho para considerarnos como tal pues era más fuerte que Saito y yo, era evidente.

Andrei, deshaz la barrera. —Tres simples palabras que me dieron a entender lo que significaba todo aquello. "Deshaz la barrera". Seguíamos siendo evaluados por los maestros, si no hubiese sido por ese Andrei no lo hubiéramos contado, pues a decir verdad los cristales me hubiesen provocado heridas letales en mi piel, la hubieran atravesado y cortado como si fuese aire, y a Saito también.

Fue inevitable el sentirme avergonzada por haber bajado la guardia ante los maestros, ¿cómo podía remediar mi falta? Era inevitable que de un momento a otro me las vería con la criatura cara a cara, tenía que pensar en una estrategia rápida e improvisada, no tenía apenas tiempo.

¿¡Qué!? ¡Ese sincorazón no es un soldado, perdone que me entrometa, pero.. los van a hacer trizas! —¿Tan débiles nos consideraba? ¿O era aquel Sincorazón un enemigo realmente temible?

Andrei, ya es suficiente. Deshaz la barrera. Es una orden.

El Sincorazón era rápido, con ataques normales no podríamos alcanzarlo y nos derribaría en poco tiempo, sus embestidas eran la clave de sus ataques, o eso parecía por su primer movimiento... Claro, mala suerte la suya haber hecho el primer movimiento.

D-de acuerdo. —Dijo Andrei pálido y aterrorizado por las consecuencias de desobedecer al maestro, retirando la barrera.

Entonces lo comprendí, el maestro Ryota al menos había mostrado parte de su poder, al señalar la vidriera ordenó al Sincorazón que pasase al ataque, no se lucirían ayudándonos contra ellos, se lucieron mostrando que eran capaces de controlar a los Sincorazón, ¿tanto poder tenía el Usuario llamado Ryota? ¿El gran maestro de Bastión Hueco? Su poder debía ser inmenso. Un escalofrío recorrió mi espalda con solo imaginar lo insignificante que era yo comparada con él... ¿Tanto poder a su alcance y no había obtenido la Verdad? Debía ser realmente difícil, y no me quedaría atrás por nada.

¿Qué estrategia seguir contra el rápido y fuerte enemigo? Debía pensar en algo ahora que estaba quieto... Saito estaba libre, quizás si lograba cederle mi katana él pudiese rematar a la bestia, obviamente, yo tendría que recibir un golpe de ella para agarrar su cuerpo y hacer de éste un blanco fácil.

El Sincorazón ha comenzado a volar de nuevo, debo pasar ya al ataque. Espero que salga todo bien. Todo depende de mi fuerza de voluntad, si no muestro el suficiente nivel el maestro Ryota me eliminará. Debo ser fuerte, mi mente debe ser fuerte, pase lo que pas... No, estoy equivocada, mi Corazón debe ser invencible.

Spoiler: Mostrar


Sin más dilación y mentalizada desenvainé la katana con rapidez para lanzar esta a Saito, a sus manos, esperando a que éste la agarrara en el aire.

Confío en que la sepas usar llegado el momento, y procura no romperla o robarla si sabes lo que te conviene. —Me limité a decir con seriedad, pues no tenía tiempo para explicar nada. El monstruo nos rodeaba lentamente.

Debía ser yo la distracción, no teníamos tiempo para discutir quién atacaba y quién no, con ataques simples no lograríamos alcanzarlo jamás, su velocidad era de admirar, pero sus ataques se basaban en embestidas por el primer movimiento que empleó y con zarpazos a juzgar por sus afiladas garras.

¿Cómo llamar la atención de un Sincorazón? Según las lecciones que había aprendido en esa misma sala momentos atrás, la oscuridad devoraba nuestros corazones transformándonos en esas cosas, ¿entonces un Sincorazón era oscuridad? Básicamente, era el corazón de un Usuario perdido en la oscuridad, analizando la naturaleza del propio elemento oscuro, era obvio que el Sincorazón buscaba corazones, era oscuridad, quería corazones a los que engullir. ¿Se alimentaba de emociones? ¿Qué pensaría de mí si me viera acorralada y asustada? ¿Su naturaleza le dictaría que viniese a por mí o sería lo suficientemente inteligente como para razonar que era todo una treta? No se me había ocurrido nada más, tenía que arriesgar y ser fuerte.

Maestra Ariasu, siento comunicarle que estoy ya cansada de esto, lo admito. No creo que pueda seguir, no valgo para esto, lo lamento pero es mi decisión, prefiero rendirme ahora que estoy a tiempo a seguir molestándoos, Saito cuida bien mi arma, y Andrei, no te culpes por mi muerte, pues solo soy una cría como bien dices. Los débiles mueren rápido. —Y mientras tanto me alejaba hacia la pared opuesta a los tronos, intentando llamar la atención del Sincorazón, coger el suficiente aire como para afrontar lo que me esperaba y procurar no pisar los cristales del suelo. Decidí entonces poner a prueba mi teoría.— Una chica como yo, indefensa, sin armas, cansada y agotada... ¿Cómo voy a poder aguantar? Seré una carga con el tiempo, soy inútil, así que es mejor que... —Todo iba según lo planeado, simplemente esperaba a que el Sincorazón fuese lo suficientemente listo como para dejarse engañar por mi perfecta actuación, si es que tenía capacidad para eso. Entonces choqué con la pared y fingí estar acorralada. Era el momento perfecto para atraer al engendro.— Estoy completamente acorralada, ¿entonces el corazón de nada más y nada menos que una portadora de la Llave-Espada va a ser tragado por la oscuridad? Supongo que es lo mejor para una inútil como yo, vamos, ven a por mí, consume y lleva mi jugoso corazón contigo, monstruo. Es ahora o nunca, jamás tendrás una oportunidad como esta. —Extendí mi brazo derecho hacia la criatura, invitándola a atacarme y acabar con mi vida. Deseé también con todas mis fuerzas que el Sincorazón viniese a por mí, dispuesto a arrebatarme la vida con una de sus embestidas. La pared de piedra amortiguaría en cierto modo el golpe.

Si mi estrategia funcionaba y seguía teniendo fuerzas después del golpe que me esperaba, agarraría con todas mis fuerzas las alas de la criatura y de esa manera lograr inmovilizarla, esa era la única manera de golpear a un enemigo tan veloz a mi parecer. Si Saito había sido lo suficientemente inteligente como para entender mi estrategia rápido, se abalanzaría contra el monstruo clavando la katana en su espalda y si lo deseaba, su Llave-Espada, una vez hecho eso, invocaría la mía y sin piedad, remataría a la criatura, quedando las tres espadas en el suelo clavadas y cayendo yo a éste, agotada y casi sin fuerzas, no podía evitar el cansancio y el dolor llegados a ese punto, y por supuesto, esperé a que Saito me devolviese mi arma.

Si el Sincorazón simplemente no era tentado por mis palabras y mi estrategia se veía frustrada, Saito lograría al menos defenderse con mi arma, pero criaturas así buscan de manera desesperada un corazón, son oscuridad, es su naturaleza, no podría evitarlo.

Spoiler: Mostrar
Off-rol: H.S Sora y yo lo hemos hablado de antemano, debido a la falta de tiempo yo al menos lo he elaborado todo con un solo post, y si mi compañero no llega a postear por cualquier cosa, que quede claro que Saito atacará al Sincorazón si éste va a por Saeko.
Avatar de Usuario
Tsuna
57. Ferrocustodio I
57. Ferrocustodio I
The Unknowns
 
Mensajes: 1680
Registrado: Mar Ene 03, 2012 5:12 am
Dinero: 691,216.48
Banco: 0.00
Ubicación: Perdida en el océano.
Sexo: Femenino
Clan: The Unknowns
Estantería de objetos
Karma: 17

Re: [Bastión Hueco] Demostración

Notapor H.S Sora » Vie Ene 11, 2013 1:02 am

Habéis sentido la oscuridad en vuestros corazones. Por lo que veo, Saeko, también eres propensa a sucumbir a ella, según tengo entendido con tus palabras. A veces es agradable dejarse llevar, pero puede conllevar a tu perdición. —Explicó el maestro Ryota tras escuchar nuestras versiones de lo que se sentimos.

Yo te ayudaré a controlar esa rabia, jovencita. ¡Pero para ello habrá que entrenar bastante! —De nuevo, la Maestra Ariasu mostraba un extraño empeño en Saeko.— Tienes un fuerte rival, por lo que veo. Saito, ¿verdad? —Asentí, pero dudaba que tan siquiera me hubuese visto hacerlo.—¡Ten cuidado con esos tentáculos, o si no, un día te arrancarán la cabeza! —Quizá la Maestra fuese exagerada, pero no iba mal encaminada. Por mucho que pudiese utilizar todo mi potencial de golpe, sinó lograba controlarlo podía acabar muy mal. Para empezar tendría que ser capaz de encontrar un termino medio entre mi potencial y el control que podía ejercer sobre él, e ir incrementándolo poco a poco.

Ariasu, deja de asustar a mi aprendiz. Sobre lo que me cuentas, Saito, es bastante obvio que la oscuridad de tu corazón ha estado jugando con tus sentimientos. Son el mejor ingrediente del que dispone esa bestia que adormita en tu interior para hacerla despertar y perder el control sobre tus acciones. Una simple provocación. Sólo una, te puede conducir a convertirte en uno de ellos. —Asentí y atendí a su explicación con la mayor atención que pude. Aún así, aquello no acababa de parecer demasiado lo que Ryota acababa de contarme... ¿Como podría Louise aparecer en medio de aquella oscuridad? Aquél momento en el que ella intervino, hizo que creyese que quizá la versión del Maestro Ryota estaba ligeramente equivocada.

Inmediatamente Ryota señaló a unas vidrieras y estas al momento se hicieron añicos, arrojando una incontable cantidad de cristales. Inmmediatamente intenté huir de aquella situación, intentando proteger zonas vitales que podrían resultar dañas. Pero no hizo falta, una barrera surgió entonces a mi alrededor y al de Saeko. Protegíendonos a ambos del peligro y del daño.

Lo sabía, sabía que vendrían. Ya estaban tardando.

Quedé atónito durante unos instantes. Al salir de aquél estado, pude reconocer que aquella voz era la que no hacia demasiado rato había escuchado inrrumpiendo en la sala del trono. Me quedé un poco más tranquilo, pero sin embargo aquello no había hecho más que empezar. Un gran Sincorazón con alas y color rojo, había sido el responsable de romper la vidriera. Intentó abalanzarse contra mí, pero la barrera hizo de intermediario entre él y yo. El monstruo retrocedió incluso quedó algo aturdido y revoleteó durante un rato por la Sala del Trono. ¿Aquél monstruo había sido invocado por la oscuridad que había emanado? Quizá era algo raro, pero pensar que tenía el potencial de atraer algo como eso hacía que una chispa de emoción y de terror se encendiese en mi interior. Quizá ahora los Maestros nos enseñarían una parte de su increible poder.

¿Me llevo a los críos y se lo dejo a ustedes, Maestros? —¿Críos? Al fin y al cabo, quizá si que lo erá, parecía mucho más adulto y poderoso que Saeko y yo juntos.

Andrei, deshaz la barrera. —Aquellas palabras retumbaron en mis oídos durante un rato. ¿Significaba eso que íbamos a enfrentarnos a ese monstruo? ¿Que la prueba aún no había terminado? Fuese lo que fuese, no me veía con fuerzas de lograrlo. Aquél Sincorazón era mucho más poderoso de lo que había visto hasta ahora, y algo me decía que Saeko pensaba exactamente lo mismo que yo.

¿¡Qué!? ¡Ese sincorazón no es un soldado, perdone que me entrometa, pero.. los van a hacer trizas! —En un principio pensé que quizá aquello significaba que éramos demasiado débiles, pero después de la embestida que había realizado algo me decía que el problema no era que fuésemos débiles. El problema es que aquella ahora era demasiado para nosotros.

Andrei, ya es suficiente. Deshaz la barrera. Es una orden.

El Maestro acababa de decir que aquello era una orden. Aquello suponía que serviría para seguirnos evaluando, teníamos que vencerlo costase lo que costase. Y algo en la mirada de Saeko me hacía pensar que ya estaba teniendo un plan en mente, y realmente lo agradecía. La cabeza me martilleaba y no me encontraba con fuerza para pensar un buen plan, esperaba que no estubiese suponiendo demasiado, a estas alturas cualquier error podía ser fatal.

D-de acuerdo. —Dijo Andrei algo pálido. Y en un instante aquello que nos había estado protegiendo a Saeko y a mí se había esfumado con la misma sutileza que había aparecido.

Entonces lo comprendí, lo que el Maestro Ryota había demostrado en un momento. Solo con un leve movimiento había logrado frenar la embestida de aquella cosa. Desde que lo había visto y había sabido que era el Maestro de los Maestros había especualado acerca del poder que debería tener, pero nada se acercaba a algo así. Y lo "peor" o "mejor" de aquello, era que lo más probable es que no hubiese mostrado nada de poder en aquella acción. Su poder debía ser más que inmenso. Pero estaba decidido a intentar superarlo.

Miré a Saeko, ¿Qué estrategia estaría pensando? Realmente era difícil pensar que hubiese muchas maneras para que nosotros dos pudiesemos derrotar a aquél Sincorazón tan inmenso. Pero estaba decidido a hacer lo que hiciese falta para demostrar que no me quedaría atrás en cuestión de poder.

Entonces, sin previo aviso Saeko desenvainó la katana y la lanzó en el aire, en mi dirección. Aún que en un principio me encontraba más que confundido, su mirada no mostraba ninguna espécie de arrogancia ni nada parecido a lo que había visto antes. Sus ojos mostraban una seriedad parecida a la que había tenido cuando tuvimos el encuentro, y al igual que aquél entonces aquella mirada me transmitía una sensación algo difícil de explicar. Era una mezcla de satisfacción por el hecho de tener a alguien tan digna con la que poder luchar y una especie de aversión por el hecho de que aquella mirada me recordaba a toda la vanidad que podía demostrar.

Sin más dilación y antes de que cayese al suelo agarré la katana con una mano mientras que con la otra aún tenía agarrada mi Llave Espada.

Confío en que la sepas usar llegado el momento, y procura no romperla o robarla si sabes lo que te conviene. —Mientras decía aquellas palabras con la misma seriedad que mostraban sus ojos, me fijé en que la katana permitía movimientos algo más veloces dada su ligereza.

—Entiendo. Intenta no matarte haciendo uso de tu plan, no quiero que ese monstruo me quite el placer de otro encuentro contigo.

Saeko tenía un plan, eso era seguro. Quizá no sabía del todo en que se basaría, pero no teníamos tiempo para ningún tipo de preámbulo. El Sincorazón tenía intención de rodearnos, lentamente. Observé con interés a Saeko: ¿Cómo pretendia llamar la atención de un Sincorazón? Realmente no parecía demasiado astuto, quizá querría aprovecharse de eso.

Después de observar a Saeko, le pasé la mirada al Sincorazón y no pude evitar pensar en lo que había sucedido apenas unos minutos:

Y pensar que he estado a punto de convertirme en algo como eso...

Antes de poder seguir pensando en aquello, Saeko empezó lo que creí que sería su plan.

Maestra Ariasu, siento comunicarle que estoy ya cansada de esto, lo admito. No creo que pueda seguir, no valgo para esto, lo lamento pero es mi decisión, prefiero rendirme ahora que estoy a tiempo a seguir molestándoos, Saito cuida bien mi arma, y Andrei, no te culpes por mi muerte, pues solo soy una cría como bien dices. Los débiles mueren rápido. —Y mientras decía aquello se alejaba hacia la pared opuesta a los tronos, lo interpreté como algo para llamar la atención del Sincorazón.— Una chica como yo, indefensa, sin armas, cansada y agotada... ¿Cómo voy a poder aguantar? Seré una carga con el tiempo, soy inútil, así que es mejor que... —Todo parecía ir según lo que Saeko había planeado, o eso parecía. La chica tenía talento actuando, aunque la más que probable falta de cerebro por parte del Sincorazón también era de ayuda en aquellos momentos. Entonces chocó con la pared y hizo ver que se encontraba acorralada.— Estoy completamente acorralada, ¿entonces el corazón de nada más y nada menos que una portadora de la Llave-Espada va a ser tragado por la oscuridad? Supongo que es lo mejor para una inútil como yo, vamos, ven a por mí, consume y lleva mi jugoso corazón contigo, monstruo. Es ahora o nunca, jamás tendrás una oportunidad como esta. —Extendió su brazo derecho hacia la criatura, invitándola a atacarla, quizá era algo forzado pero por el momento parecía que la cosa funcionaba y tampoco teníamos muchas más opciones.

La bestía entonces seguramente se decantaría por golpear con una embestida a Saeko y con ello golpearía también la pared, provocando así un momento perfecto para golpearlo contundentemente con ambas espadas. Además contaba con una última ayuda de Saeko, ya que lo estaba intentando mantener inmovilizado agarrandolo por las alas. No podía fallar, no ahora.

Gracias Saeko, no desperdiciaré esta oportunidad.

¿Crees tan siquiera tener alguna posibilidad de vencerlo?

¿Vienes otra vez a provocarme? Permíteme informarte de que no funcionará de nuevo. No permitiré que me manejes a tu antojo.

¿Sigues creyendo en lo que ha dicho aquél al que llamas Maestro? Lamento decirte que no soy solo oscuridad. Y también siento decirte que no tienes la voluntad para terminar con eso.

Puedo termianarlo, mejor dicho, voy a terminarlo. Y cuando termine con eso, me encargaré de poder usarte sin que representes peligro alguno.

Ja,Ja,Ja. Permíteme que lo dude. Es más, dudo que tan siquiera puedas controlar una pequeña parte de oscuridad. Y como nó, tampoco tienes la capacidad para encontrar a Louise.

Apreté con fuerza los puños, haciendo que estos se cerrasen con más fuerza aún sobre ambas espadas. Aquella cosa sabía donde atacar, pero no podía perder el control ahora. No podía perderlo todo por un estúpido arrebato.

Me da igual lo que creas. Pienso acabar con ese monstruo porque es lo que me he propuesto ahora. Y de la misma forma que me he propuesto conseguir eso, conseguiré llegart hasta Louise cuando llegue el momento. Ni toda mi profunda oscuridad, podrá cambiar eso.

Casi había vuelto a caer, en el mundo real no había pasado apenas el tiempo y casi había vuelto a caer, y eso hacia que mi rábia conmigo mismo no dejase de aumentar. Entonces noté como liberaba un fino manto de oscuridad y como este recubría las armas, haciendo que estas luciesen de algún modo, más siniestras. Quizá si que sería capaz de controlar una parte de mi oscuridad después de todo.

Dicho esto me apresuré a toda velocidad hacia el Sincorazón y al llegar hasta él empezaría a realizar tajos en forma de X de forma descendente y ascendente en su espalda y en cualquier parte que se encontrase desprotegida en aquél momento, intentando herirlo así mortalmente.

—¡¡Desaparece ya!—gritaría realizando dos últimos tajos de esa forma— ¡No tomarás ninguno de nuestros corazones, no te lo permitiré!

Dicho esto, clavaría con toda mi fuerza la katana de Saeko y la Llave Espada lo más profundo que pudise en su piel, intentando así atravesar su columna vertebral con ambas armas y acabar con él de una vez por todas.

Spoiler: Mostrar
Bueno, quería decir que siento haber tardado un poco en postear, pero realmente no he tenido apenas tiempo. Espero que con el post hayan quedado claras las acciones de Saito al respecto. Bueno y también espero que podamos vencerlo después de todo xD

PD: Espe, respecto a lo que dice Saito, es referente a una técnica que tengo en mente proponer para él en cuanto suba de nivel. Si no ves conveniente que Saito la use en este momento no pasa nada, hará los tajos sin esa "ayuda especial" xD En fin saludos y grácias ^^
Imagen

Muchas grácias por el avatar Mepi ^^
H.S Sora
22. Espectro
22. Espectro
 
Mensajes: 655
Registrado: Mar Sep 25, 2012 7:43 pm
Dinero: 3,775.22
Banco: 213,774.43
Sexo: Masculino
Karma: 3

Re: [Bastión Hueco] Demostración

Notapor EspeYuna » Sab Ene 12, 2013 12:41 am

Spoiler: Mostrar
Las habilidades que no han sido oficialmente aprendidas no pueden llevarse a cabo. Así que no, no vale xD


Spoiler: Mostrar


La estrategia de ambos aprendices funcionó.. a medias.

Por una parte, Saeko logró alcanzar al sincorazón alado justo cuando pasaba delante suya, agarrándose con fuerza a su espalda e intentando inmovilizar sus alas. Por un momento, el enemigo perdió el movimiento del lado derecho, por lo que estuvo a punto de caer al suelo.

Sin embargo, aquel acto fue demasiado temerario. Saito atajó donde pudo, pero debido a lo escurridizo que era la criatura, acabó cortando piel de otro blanco diferente. De su compañera, haciendo un corte con la katana de ésta en su brazo izquierdo, no tan profundo, pero aún así importante.

El sincorazón aprovechó la confusión para librarse de Saeko, alzándose al cielo y girando con su presa hasta tirarla con sus patas traseras en dirección a Saito, quien recibió el cuerpo de su compañera de lleno, haciéndole caer al suelo y, por supuesto, llevándose un buen golpe.

La cosa no empezaba bien, aunque bien es cierto que habían conseguido asestar contra el monstruo, su piel escamada era dura y la fuerza de ambos no es que fuese poderosa.

Psé, lo que decía yo, están muy verdes —bufó Andrei, jugueteando con sus cartas mientras que, sentado en las escalones que daban al trono, se dignaba a contemplar la batalla—. Y qué patética, jé. Aunque bien es cierto lo que ha dicho, los débiles.. no merecen vivir.

La Maestra Ariasu, tras escuchar las palabras de Saeko, dio unos pasos al frente. Si la joven esperaba palabras alentadoras, se equivocaba:

¡Si ves que no sirves para esto, deberías haberlo dicho desde el principio, mo! —dijo Ariasu, hinchando uno de sus mofletes y suspirando, resignada—. ¡Ahora tendré que volver a meterte en el PCM! ¡Joooo, siempre me pasa igual!

Ariasu volvió a recordarle a Saeko su más terrible pesadilla. El PCM. ¿De verdad iba a estar dispuesta a dejarse vencer tan fácilmente, cuando había derrotado a cientos, miles de programas? ¿Acaso la Maestra le estaba provocando? ¿Amenazando?

Por otro lado, Ryota, Maestro de Maestros, no articuló palabra. Sentado de nuevo en su trono, los ojos del mentor iban dirigidos al sincorazón que volvía a la carga, esta vez dispuesto a realizar un placaje directo contra ambos.

Spoiler: Mostrar
Fecha límite: Viernes, 18 de Enero
Imagen
¡Soy enfermera~!
Nurses are Angels on Earth
Imagen
Mi blog + DeCulture

Imagen
Imagen
Spoiler: Mostrar
Imagen
KHWorld Awards 2014
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
KHWorld Awards 2013
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
KHWorld Awards 2012
Imagen
ImagenImagen
Imagen

Imagen
Avatar de Usuario
EspeYuna
115. Demyx
115. Demyx
The Unknowns
 
Mensajes: 3437
Registrado: Mar Feb 28, 2012 11:12 pm
Dinero: 53,263.25
Banco: 15,063.87
Ubicación: ¡Entrenándome en Tierra de Partida para combatir a los sincorazón! ¡Ah! ¡Y en FanPlace!
Sexo: Mucho, gracias por preguntar
Clan: Bohemia Lectura
Estantería de objetos
Karma: 54

Re: [Bastión Hueco] Demostración

Notapor Tsuna » Jue Ene 17, 2013 3:02 am

Spoiler: Mostrar


La improvisada estrategia no fue como esperaba, la criatura tenía demasiada fuerza y el torpe de Saito, como no, me cortó con mi arma en el brazo izquierdo. Me levanté furiosa tras expresar inevitablemente un pequeño grito de dolor, por la ineptitud del aprendiz, no sin antes agarrar mi katana con el brazo derecho, dejando el izquierdo en el aire, inservible.

Grandes cantidades de líquido carmesí brotaron de la herida, recorriendo el suelo a gran velocidad, nada podía hacer ya con ese brazo. Gruñí, frustrada.

Psé, lo que decía yo, están muy verdes. Y qué patética, jé. Aunque bien es cierto lo que ha dicho, los débiles.. no merecen vivir.

¿Pa... patética? Supongo que sí, no tengo mucha experiencia. Pero no moriré, aguantaré incluso sin fuerzas, como hasta ahora he hecho. Es hora de ponerme seria. No formaré parte de los débiles.

¡Si ves que no sirves para esto, deberías haberlo dicho desde el principio, mo! ¡Ahora tendré que volver a meterte en el PCM! ¡Joooo, siempre me pasa igual!

No pude evitar sentir un escalofrío ante las palabras de la maestra... ¿Volver allí? Jamás, en absoluto, no me lo perdonaría habiendo llegado tan lejos, sin embargo ella se había creído mi pésima actuación, vergüenza me daba incluso haber tenido que actuar así, pero no me quedó de otra, fue todo muy inesperado...

Calma. Ante todo era fundamental.

Maestra, es obvio que no pienso eso. No fue más que una treta para atraer al monstruo y... comprobar ciertas cosas. —No pude evitar mirar hacia ella y al maestro Ryota, quién seguía enfrascado observando al Sincorazón, ¿lo estaba controlando? Entonces mi actuación no sirvió para nada, quizás el enemigo hubiese actuado como pensé, al ser oscuridad, pero si lo controlaba el maestro... La cosa cambiaba bastante.

Esbocé una sonrisa de admiración, impresionada por haber fallado en mi estrategia. Me alegraba ver el gran poder de los maestros, eran temibles. Y ni siquiera se movían del trono.

Intenté seguir los ojos del maestro Ryota para intentar averiguar el próximo movimiento del Sincorazón, pero fui incapaz, su rostro estaba borroso, mejor dicho, yo no veía con claridad. Fue entonces cuando escuché el sonido de las alas del Sincorazón moverse a gran velocidad ante mí. Tenía la intención de propinarme, tanto a mí como a Saito pues estábamos juntos, un fuerte placaje.

Calma Saeko, analiza con calma... Tiene la intención de atacarnos de frente, si me lanzo a por él, cambiará de dirección. Es un todo o nada, esperar a que esté lo suficientemente cerca como para abalanzarme contra su cuerpo y clavar mi Llave-Espada de frente, sin darle posibilidad a maniobrar, pues si lo hace perderá. No sé que hará Saito, pero con él no puedo contar, está claro.

El escozor de la herida cada vez dolía más, gracias a unos pocos centímetros no perdí el brazo. El Sincorazón cada vez aumentaba más la velocidad, y yo había perdido un brazo, no tenía opción, la boca. Colocando la katana en mi boca e invocando mi Llave-Espada en la mano libre, esperé con paciencia y extrema atención a que el monstruo se acercase lo suficiente como para que no pudiese evadir mi ataque, y si lo intentaba, lo sufriría de lleno.

¡Ahora!

Me lancé a por él en el momento adecuado completamente furiosa y deseosa de acabar con esa molesta criatura, clavando la Llave-Espada en uno de sus hombros, frenando su cuerpo, y sin darle tiempo a responder giré la cabeza lo suficiente como para propinarle un tajo con la katana en la cabeza u otra parte del cuerpo, seguido de un salto para retroceder y ponerme a salvo.

La suerte estaba decidida, o ganaba o perdía. Al menos lo había dado todo.
Avatar de Usuario
Tsuna
57. Ferrocustodio I
57. Ferrocustodio I
The Unknowns
 
Mensajes: 1680
Registrado: Mar Ene 03, 2012 5:12 am
Dinero: 691,216.48
Banco: 0.00
Ubicación: Perdida en el océano.
Sexo: Femenino
Clan: The Unknowns
Estantería de objetos
Karma: 17

Re: [Bastión Hueco] Demostración

Notapor H.S Sora » Vie Ene 18, 2013 12:57 am

Spoiler: Mostrar


La improvisada estrategia no fue para nada con el efecto que me esperaba. La criatura tenía demasiada fuerza y se zafó facilmente de Saeko por lo que sin querer la katana le hizo un ligero corte en el brazo izquierdo, y después acababó haciendola chocar conta mi, mientras la criatura seguía revoloteando por los aires.

¿Ves? Ya te dije que no eras capaz de vencer a esa criatura... no puedes, asúmelo.

Cállate. No sabes nada de mí... Absolutamente nada.

Sé más de lo que crees, Saito. Y de la misma forma que sé muchas cosas, sé que no serás capaz de ganar a ese Sincorazón.

Mientras tanto pude ver como Saeko me dirigió una mirada que expresaba perfectamente lo furiosa que estaba, además también hizo un sonido que interpreté como un grito de dolor. No sin antes no sin antes agarrar su katana con el brazo derecho, el izquierdo parecía haber quedado inservible.

¿Ves? Todos tus intentos acabarán así, lastimando a aquellos que te importan. ¿Sigues pensando en acabar con esto? ¿Sigues pensando que es una buena idea continuar el combate? Ambos sabemos la respuesta...


No. Solo TU crees saber la respuesta. Yo pienso luchar hasta el final, compensaré todo lo que haga falta.

No es que crea saberlo, es que lo sé. Todos lo de esta sala lo saben. Yo, la Maestra Ariasu, Andrei, Saeko e incluso Ryota... Y en tu interior sabes que tengo razón.

Psé, lo que decía yo, están muy verdes. Y qué patética, jé. Aunque bien es cierto lo que ha dicho, los débiles.. no merecen vivir.—Aquella voz me volvió a sacar de mi desconcierto. ¿Era verdad que no confiaban en que Saeko y yo pudíesemos acabar con aquella criatura?

¡Si ves que no sirves para esto, deberías haberlo dicho desde el principio, mo! —La Maestra claramente se dirigía a Saeko, parecía que la actuación había sido todo un éxito, lástima que no hubiese servido de mucho más que para eso.—¡Ahora tendré que volver a meterte en el PCM! ¡Joooo, siempre me pasa igual!

¿Que sería aquello del PCM? Realmente había muchas cosas del mundo de Saeko que desconocia, pero aquella opinión no alentaba mis ánimos. Ariasu tampoco parecía creer en nuestra victoria ¿Dónde quedó aquello de que eramos alumnos interesantes?

Saeko no tardó en excusarse, su mirada rabiosa solo desapareció unos instantes para hablar con la Maestra Ariasu.

Maestra, es obvio que no pienso eso. No fue más que una treta para atraer al monstruo y... comprobar ciertas cosas.

Mientras ella hablaba con Ariasu pude notar como sus ojos iban más allá de ella, los tenía puestos en el Maestro Ryota. Ciertamente el no había articulado palabra con la escena, tan solo miraba fijamente al Sincorazón, como si su tarea fuese vigilarlo. Quizá si que realmente lo fuese. Quizá tenía que estar preparado para detenerlo en caso de que Saeko y yo estuvíesemos en grave peligro... fuese como fuese, su tranquilidad seguía más que presente.

Aquella actitud tan tranquila era la que me habia hecho confiar en él, su actitud y las oportunidades que me ofrecía... Oportunidades que no podía desaprovechar ahora.

El aleteo de aquellas alas me sacó de mis pensamientos, el Sincorazón venía a por nosotros. Miré a Saeko, ¿Tendría pensado un contrataque o tendría que actuar por mi cuenta esta vez? Mientras podía oír como el aleteo de aquellas alas aumentaba por momentos, también podía ver como la sangre brotaba del brazo de Saeko... Tendría que disculparme pronto, aunque quizá ahora no era el momento más idoneo. Pude apreciar como Saeko colocó su katana en la boca de manera que pudiese manejarla y la Llave Espada en su mano libre.

¿Que estás planeando hacer?...

Antes de que me respondiese, pude ver como se lanzó a por él en un momento dado que estaba muy cerca. ¿Aquél era su plan? Parecía incluso más descabellado que el anterior... Parecía que su intención fuese aprovechar que Sincorazón no tendría oportunidad de girar para atacarle con ambas armas. ¿Y que podía hacer yo de mientras?

Esperar a que otros acaben lastimados por mi culpa...

Exacto.

Pero... te equivocas. No estoy solo. Ayudaré a Saeko a acabar con ese engendro, te demostraré que te equivocas del todo.

Dicho esto, cogí con ambas manos la Llave Espada. Estaba enfadado por todo lo que estaba sucediendo. No había sido capaz de ganar a Saeko, no había sido capaz de controlar mi "potencial", no había sido capaz de acabar a la primera con aquella béstia y para el colmo aquella molesta voz seguía en el aire.

Cogí toda la carrerilla que pude y salté lo más alto que mis fuerzas me permitían para colocarme en una posición idonea para golpear al Sincorazón. Aprovecharía el momento justo en que Saeko se apartase para atacarle con la Llave Espada en la cabeza o zona más cercana a esta, propinandole un buen tajo de arriba a abajo.

Y si después de aquello aún podía mantenerme en pié, intentaría golpear a aquél monstruo un par de veces más, pues habría puesto casi toda mi fuerza en realizar aquél corte de arriba a abajo que esperaba que lo destruyese.

La suerte ya estaba echada, solo esperaba que esta vez pudíese sonreirme más.
Imagen

Muchas grácias por el avatar Mepi ^^
H.S Sora
22. Espectro
22. Espectro
 
Mensajes: 655
Registrado: Mar Sep 25, 2012 7:43 pm
Dinero: 3,775.22
Banco: 213,774.43
Sexo: Masculino
Karma: 3

Re: [Bastión Hueco] Demostración

Notapor EspeYuna » Vie Ene 18, 2013 6:28 pm

Spoiler: Mostrar


Saeko y Saito volvieron a la carga, y esta vez supieron organizarse y no atacar cada uno por su cuenta.

Por un lado, Saeko acertó con su katana contra la cabeza del sincorazón, el cual, dolorido, cayó por unos instantes. Saito le siguió, acertando contra una de las alas, por lo que la criatura intentó echar a volar de nuevo en vano.

Sin embargo, el sincorazón era poderoso. A pesar de las heridas causadas por ambos aprendices, el monstruo alado, furioso, ejerció un fuerte placaje contra Saito. Y alzó sus garras en dirección a Saeko, dispuesto a arrancarle los ojos, si no hubiese sido porque la criatura se detuvo de repente.

Retrocede.

Para sorpresa de Saito y Saeko, el Maestro Ryota alzó un dedo en dirección al sincorazón. Si ambos se paraban a mirarle a los ojos, una extraña y desagradable sensación inundaría sus corazones. Miedo. Pavor. Terror. Esa mirada no era la de un humano normal.

Y parece que el sincorazón también sintió lo mismo, si es que podía llegar a experimentar el miedo. Porque, como se sabía, eran seres nacidos del corazón pero que carecían de él, al igual que de sentimientos, ¿no?

Ariasu se acercó al sincorazón y, agachándose a él, recitó con una sonrisa:

Desaparece.

¿Qué llegó a ocurrir? Un grito de dolor procedente de la bestia fue seguido de la derrota de ésta. Desapareció, tal y como había ordenado la Maestra Ariasu, y un corazón surgió del lugar donde había perecido, alzándose poco a poco hasta atravesar el techo, perdiéndose en la oscuridad.

Psé.. no sé qué hago aquí perdiendo el tiempo —Andrei se marchó, ni siquiera pidió permiso a los Maestros.

¡Bueno, bueno! ¡No está mal para ser la primera vez que os enfrentáis a uno de ese nivel! ¿No te parece, Ryota? —dijo la Maestra, con un tono infantil y danzando por el centro de la sala— ¡Ha sido divertido!

Ryota se acercó entonces a ambos aprendices.

Sí, pero parece que aún tenéis problemas.. —explicó, y sus ojos, que volvían a ser serenos y tranquilos, se dirigieron a su pupilo, Saito— Tienes que aprender a controlarte. Aunque bien es cierto que a ambos os pasa lo mismo, pero de forma un tanto.. diferente.

>> Decidme, pues, aquello que más ansiéis obtener por respuesta, y os la daré.


Spoiler: Mostrar
Fecha Límite: 25 de Enero
Imagen
¡Soy enfermera~!
Nurses are Angels on Earth
Imagen
Mi blog + DeCulture

Imagen
Imagen
Spoiler: Mostrar
Imagen
KHWorld Awards 2014
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
KHWorld Awards 2013
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
KHWorld Awards 2012
Imagen
ImagenImagen
Imagen

Imagen
Avatar de Usuario
EspeYuna
115. Demyx
115. Demyx
The Unknowns
 
Mensajes: 3437
Registrado: Mar Feb 28, 2012 11:12 pm
Dinero: 53,263.25
Banco: 15,063.87
Ubicación: ¡Entrenándome en Tierra de Partida para combatir a los sincorazón! ¡Ah! ¡Y en FanPlace!
Sexo: Mucho, gracias por preguntar
Clan: Bohemia Lectura
Estantería de objetos
Karma: 54

Re: [Bastión Hueco] Demostración

Notapor Tsuna » Dom Ene 20, 2013 8:54 pm

A diferencia de la última vez, hice bien en no contar con el torpe de Saito, me aproximé con rapidez al Sincorazón en el momento exacto para propinarle con todas mis fuerzas un corte que le hizo retroceder dolorido, pude escuchar como éste expresaba extraños alaridos de dolor. Retrocedí de un salto para evitar un posible contraataque por su parte y vi a Saito saltando sobre la criatura malherida, dañando una de sus alas, parecía que al fin y al cabo no era tan torpe. Supo aprovechar bien la oportunidad.

Sonreí para mí misma, solo faltaba un paso más para acabar con la vida de ese monstruo. Habíamos ganado.

¡Saito, ¿a qué esperas!? ¡ Mátalo de una vez!

Antes de poder hacer nada la criatura golpeó a Saito con fuerza, y yo era la siguiente, se dirigió a mí dispuesto a acabar conmigo, el corte del brazo dolía a cada segundo que pasaba, cuanto más me concentraba en él, más se hacía notar. Aún con la katana en la boca y Llave-Espada en mano, retrocedí varios pasos, asegurándome de que tenía espacio suficiente como para moverme sin problemas y preparada para encarar a la persistente criatura...

Retrocede.

... pero esta se detuvo en seco ante las palabras del maestro, pareció sentir pánico o algo así. Perpleja y exhausta des-materialicé la Llave-Espada para agarrar la katana con la mano del brazo sano. Parecía que la prueba estaba por finalizar, aun así me mantuve en guardia por si el monstruo atacaba.

Spoiler: Mostrar


Mis sospechas eran ciertas, el maestro lo controlaba. Tenía la capacidad para controlar a los Sincorazón a voluntad.

Desaparece.

El Sincorazón expresó un grito de dolor, más intenso que el anterior y se evaporó. De la oscura humareda que había dejado brotó una especie de... ¿Corazón? Algo así, me fascinó el verlo, brillaba reluciente mientras se elevaba en el aire hasta perderse en las sombras.

Psé.. no sé qué hago aquí perdiendo el tiempo —Y se marchó tal cual de la Sala. Me importó bien poco lo que hiciera, solo le agradecía el que nos hubiese protegido de los cristales.

¡Bueno, bueno! ¡No está mal para ser la primera vez que os enfrentáis a uno de ese nivel! ¿No te parece, Ryota? ¡Ha sido divertido!

Entonces habíamos enfrentado a un poderoso enemigo, a decir verdad podría habernos vencido. Me sentí culpable, el maestro obligó al Sincorazón retroceder porque no dimos la talla suficiente, aunque la maestra parecía satisfecha con nuestros progresos. El gran maestro se acercó hasta nosotros, con esa mirada suya tan tranquila y serena.

Sí, pero parece que aún tenéis problemas.. —Y esta vez miró a Saito, estaría por dar el veredicto de su aprendiz.— Tienes que aprender a controlarte. Aunque bien es cierto que a ambos os pasa lo mismo, pero de forma un tanto.. diferente.

Miré al suelo y encogida de hombros ante sus palabras, no llevaba mucho allí y tampoco controlaba completamente mis nuevas habilidades, pero no era capaz de evitar la culpa de no ser capaz de derrotar a uno de esos por mí misma. Observé a Saito, me había impresionado con su inesperado movimiento, no era tan torpe como creí. Pese a todo mantuve mi serio y característico semblante.

Impresionante.. ¿Saito verdad? No esperé ese último movimiento tuyo, he de admitir que me equivoqué contigo, pero tampoco te hagas muchas ilusiones. —Dije con admiración e intentando parecer fría, me aterrorizaba la idea de que se percatase de mis verdaderos sentimientos.

Decidme, pues, aquello que más ansiéis obtener por respuesta, y os la daré.

El maestro parecía tener respuestas para todo, ¿tan difícil era alcanzar la Verdad Absoluta? ¿El conocimiento supremo que resolvería cualquier cosa? Debía ser realmente complicado si alguien tan impresionante como el maestro no lo había logrado. Debía fortalecerme para no defraudarlo.

¿Lo que más ansíe obtener por respuesta? No tengo mucho que preguntar.. Mi único objetivo es saber acerca de mi pasado y me hace falta mucho entrenamiento para ello.

Claro, para fortalecerme necesitaba aprender nuevas habilidades, ¿me enseñaría el maestro a controlar a los Sincorazón? Nada perdía por preguntárselo. Si llegaba a controlar yo misma esas criaturas mi nivel sería completamente diferente, y eso equivaldría a estar más cerca de nuestro objetivo. Esperé a que Saito preguntase, al fin y al cabo él era su alumno, merecía al menos tener derecho a una primera pregunta por su inesperado y hábil movimiento, ¿o fue al fin y al cabo pura suerte y lo comenzaba a admirar por nada?

Los Sincorazón... ¿Podría yo controlarlos?

Enfundé la katana una vez me permitiesen preguntar, observé al maestro con una mirada invadida por la determinación de hacerme más poderosa, pero a la vez intimidada pues trataba con alguien inmensamente poderoso. Me sentía como un insecto ante su presencia, incluso Andrei retrocedió casi en shock por no obedecer sus órdenes, sin embargo para ello se molestaba en adiestrarnos y entrenarnos, para que pudiésemos alcanzar su nivel y fuésemos capaces de ayudarlo con su tarea.

Maestro, yo tengo una pregunta.. ¿Cómo es capaz de controlar a los Sincorazón? Es decir, ¿podría aprender yo a controlarlos a mi antojo? ¿Qué hace falta para domar a esas bestias de oscuridad?

Cerré los ojos con calma y serenidad, esperando una respuesta. Tampoco debía bajar la guardia, viendo lo que había pasado con el Sincorazón, puede que todavía nos tuviesen alguna que otra prueba reservada y algo me decía que Andrei no nos salvaría de nuevo. Simplemente me mantuve alerta. El corte del brazo me ayudaba a mantenerme despierta, pues el cansancio y el sudor mermaban mis fuerzas a cada segundo. La sangre ya no emanaba del corte, perdí mucha, ahora era parte del escenario. Me estaba mareando, lo sentía.
Avatar de Usuario
Tsuna
57. Ferrocustodio I
57. Ferrocustodio I
The Unknowns
 
Mensajes: 1680
Registrado: Mar Ene 03, 2012 5:12 am
Dinero: 691,216.48
Banco: 0.00
Ubicación: Perdida en el océano.
Sexo: Femenino
Clan: The Unknowns
Estantería de objetos
Karma: 17

Re: [Bastión Hueco] Demostración

Notapor H.S Sora » Mié Ene 23, 2013 9:38 pm

A diferencia de la última vez, la estrategia funcionó mejor de lo pensado incluso. Gracias al corte de Saeko, el Sincorazón retrocedió y de esta manera pude aprovechar la oportunidad para dañar sus alas, inhabilitando así sus esfuerzos de volar.

Solo faltaba un paso más para acabar con él. Habíamos ganado fuese por donde fuese que se mirase.

Antes de poder hacer nada la criatura me golpeó a Saito con una fuerza abrumadora, y mientras caía, pude ver de reojo como Saeko era su siguiente objetivo. Estaba claro que no iba a dejarse acertar con facilidad, pero dudaba que en su maltrecho estado pudiese aguantar mucho más... me levanté dispuesto a intentar desviar la criatura o a intentarlo, pero no hizo falta.

Spoiler: Mostrar


Retrocede.

La bestia se detuvo en seco ante las palabras de mi maestro, parecía que aquella cosa hubiese sentido todo el poder que el Maestro poseía y eso lo hubiese detenido. ¿Aquellas criaturas podían miedo acaso? Quizá la simple fuerza del Maestro ya las hacía sentir que no era buena idea contradecir sus ordenes. No des-materialicé la Llave-Espada, aunque solo la tenía sujeta con una mano. Quizá la prueba hubiese terminado, pero lo mejor era no bajar la guardia ante ningún concepto.

En un momento la Maestra Ariasu se colocó cerca del Monstruo paralizado y le colocó una mano encima.

Desaparece.

El Sincorazón expresó un grito de dolor, intenso que el anterior y se evaporó. De la oscura neblina que había dejado brotó algo similar a un corazón rosado. Su brillo parecía perderse a medida que se elevaba en el aire y se adentraba en las sombras...

Y parte de la sangré se me heló en un instante. Era consciente del poder que tenía mi Maestro Ryota, es más, le había visto invocar Sincorazones. Era consciente de que su poder era algo casi inalcanzable para mí... pero lo que no había visto era aquella fuerza que debía poseer la Maestra Ariasu. Debajo de aquella mujer tan infantil y de aquella faceta relajada se escondía un poder inmenso, quizá ahora era capaz de comprender un poco el motivo de que Saeko le fuese tan servicial. Y quizá también, el motivo por el cual podía relajarse a menudo, con aquél poder cualquiera lo estaría. Quizá cualquiera menos el Maestro Ryota, él parecía no querer bajar la guardia bajo ningún motivo.

Psé... no sé qué hago aquí perdiendo el tiempo —Y se marchó de la misma manera en que había entrado. Rápido como una bala. Quizá en otra ocasión tendría oportunidad de agradecerle aquella barrera que nos había protegido.

¡Bueno, bueno! ¡No está mal para ser la primera vez que os enfrentáis a uno de ese nivel! ¿No te parece, Ryota? ¡Ha sido divertido!

Como había imaginado, aquél monstruo no había sido algo "común". ¿Si el Maestro no lo hubiese detenido podíamos haber ganado? Sería una pregunta que me rondaba. Era interesante ver como la Maestra Ariasu era tan expresiva y energética y Ryota tan callado y sereno. Realmente me sentía identificado con él, no me gustaba mostrar demasiado de mi mismo y me gustaba observar las situaciones que me rodeaban.

Quizá en un futuro, podría adoptar una mirada tan serena y calmada como la suya... pero antes debía controlar mi oscuridad. Era primordial si algún día quería tener tanto poder como él. Entonces, como si hubiese leído mi pensamiento el Maestro se acercó hasta nosotros.

Sí, pero parece que aún tenéis problemas.. —Y su mirada se posó en mí. Seguramente querría dar su opinión acerca de lo que había acontecido...Me preparé para cualquier cosa.— Tienes que aprender a controlarte. Aunque bien es cierto que a ambos os pasa lo mismo, pero de forma un tanto.. diferente.

Mantuve la mirada firme. Era cierto, necesitaba mejorar aquél aspecto lo antes que pudiese, aún así estaba feliz. No había realizado un mal combate contra un adversario tan temible después de todo.

¿Crees que tan solo es cuestión de voluntad? Pff...

Cállate.

Aquella voz ya empezaba a hacerse molesta. ¿Debería aprender a vivir con ella? Esperaba que al mejorar el control sobre mi oscuridad la cosa fuese a mejor... Entonces recordé algo.

Cuando hubiese terminado todo aquello debería echar un vistazo a las armas que podía comprar. Saeko había sido capaz de infligir un gran daño al Sincorazón gracias a la combinación de su katana más la Llave Espada. Pensé en un arma que pudiese venirme bien... aunque dejé de pensar en ello cuando Saeko habló:

Impresionante.. ¿Saito verdad? No esperé ese último movimiento tuyo, he de admitir que me equivoqué contigo, pero tampoco te hagas muchas ilusiones. —Aquél comentario me había pillado de improvisto. Saeko parecía igual de fría que de costumbre, pero algo me decía que algo se ocultaba en aquello. Esbocé inconscientemente una sonrisa. Quizá ella y yo si que podríamos ser compañeros después de todo.

Entendido, no te preocupes. Aunque... yo tampoco puedo negar que sin tu ayuda la cosa hubiese acabado muy mal.—me alboroté un poco el pelo con la mano— Siento el corte, espero poder compensártelo en un futuro próximo.

Decidme, pues, aquello que más ansiéis obtener por respuesta, y os la daré.

Miré a Saeko por unos instantes, parecía que nuevamente me daba la palabra a mí primero. Decidí pensarlo un momento antes de responder.

¿Que es lo que quiero saber/obtener? Pues... está claro que el paradero de Louise.

Negué lentamente con la cabeza. Aquella respuesta no me la podía conceder el Maestro, al menos de momento. Tenía que pensar en algo que realmente pudiese obtener gracias a él... cerré los ojos mientras lo pensaba bien.

¿Si pudieses pedir un deseo cual sería?... ¿Volver a casa quizá?

Mmm... lo dudo bastante... Creo que sería poder estar contigo por siempre, el lugar me da igual

Aish no seas tonto... Tu y yo siempre estaremos juntos. Además, recuerda: "Por muy lejos que estemos uno del otro..."

Lo sé, lo sé. "Por muy lejos que nos separen, siempre existirá la luz que una nuestros corazones"

Si lo sabes ¿por qué me obligas a recordártelo?

Porque cuando estás "enfadada", te ves más preciosa aún y eso que ya es difícil.

Aish tonto, me sacas los colores. Te amo.

Me pareció vivir en una burbuja durante aquellos felices instantes. Pero, como todas las burbujas, mi recuerdo había explotado en aquella parte. Estaba furioso y en parte sentía un grave vacío que no podía evitar. Intenté controlarme para no derramar ninguna lágrima, no podía parecer débil en aquél momento. No con la Maestra Ariasu, el Maestro Ryota y Saeko allí.

Apreté los puños con fuerza y al abrir los ojos y mirar al Maestro Ryota solo se mostraría una mirada que expresaba algo de frialdad mezclada con fuerza y decisión.

Maestro Ryota, me gustaría disculparme por haber tardado tanto en decidirme, espero que comprenda que necesitaba unos instantes para pensármelo como es debido? —cogería un poco de aire y seguiría con la explicación— Puesto que ya me ha dicho que por el momento es casi imposible que me pueda a ayudar con todo lo de Louise… Me gustaría saber si podría obtener lo siguiente… —Esbozaría una sonrisa y seguidamente se lo diría— ¿Sería capaz enseñarme una habilidad con tanto poder como la habilidad demoledora que la Maestra Ariasu ha utilizado en el Sincorazón de hace unos instantes? —Mi mirada mostraría atrevimiento y convicción— De no poder ser así… ¿Podría otorgarme una habilidad con la que pueda emplear la oscuridad en la Llave Espada? Estoy dispuesto a seguir cualquier entrenamiento que haga falta para lograr alguna de ambas cosas, no creo que haga falta remarcarlo.

Necesitaba ambas cosas, aunque sabía que el Maestro solo me obsequiaría con una. Sin contar la información que encontraría por mi propio píe, necesitaba el poder para destruir enemigos tan tenaces como el anterior y el poder para aprovechar la oscuridad en mi arma. Cualquiera de las cosas me daría una nueva ventaja.

Al acabar le cedería el turno de palabra de Saeko. Estaba algo intrigado sobre lo que ella pediría, ¿Estaba interesada también en el poder como yo? ¿O pediría otra cosa diferente? Fuese lo que fuese sabía que solo había una manera de averiguarlo, me quedé atento mientras Saeko daba su explicación intentando no parecer demasiado fijado en ella.
Imagen

Muchas grácias por el avatar Mepi ^^
H.S Sora
22. Espectro
22. Espectro
 
Mensajes: 655
Registrado: Mar Sep 25, 2012 7:43 pm
Dinero: 3,775.22
Banco: 213,774.43
Sexo: Masculino
Karma: 3

Re: [Bastión Hueco] Demostración

Notapor EspeYuna » Jue Ene 24, 2013 9:36 pm

Entiendo perfectamente que hayas tardado en hacerme una cuestión, Saito —dijo Ryota, quien mostrando la misma serenidad, parecía entender al joven— Si es así, es porque eres inteligente y piensas antes que actuar. Eso te da puntos aun siendo un novato.

Ryota escuchó atentamente la proposición de Saito a querer aprender a hacer lo mismo que Ariasu algún día. La maestra no tardó en unirse a la conversación quien, con una voz tornando a infantil, sacudió con una de sus manos el pelo de Saito, incordiándole:

¡Pero qué mono, queriendo aprender a eliminar a un sincorazón de ese nivel como lo hago yo, jijij! —Ariasu parecía.. no halagada, pero en cierto modo divertida por las palabras del muchacho— ¡Me gustas, chico! ¡Pero déjame decirte una cosa, mejor será que aprendas movimientos por ti mismo! ¡Sería un rollazo si todos nuestros aprendices copiaran las habilidades de sus Maestros, muyy aburrido! ¡Prefiero que descubras.. experimentes! ¿Verdad, Ryota?

Lo que ha dicho la Maestra Ariasu, Saito, es cierto. Existen claros ejemplos en nuestro castillo, ¿acaso los aprendices Shinju y Andrei se parecen respecto a sus movimientos? Para nada. Al igual que Alexis, cuya principal especialidad es el uso de magias asociadas al poder de la gravedad.

>> Y es mejor avanzar poco a poco.. si no queréis caer en un pozo sin fondo.


El Maestro se giró hacia Saeko, quien esperaba también una respuesta a su pregunta.

Joven, deberías pensar antes en tu seguridad ahí fuera entre sincorazón, antes que aprender a controlarlos por tu cuenta —dijo, aun sin intención de herir en el orgullo a la joven aprendiz de Ariasu—. Para llegar a la cima, hay que escalar. Si esos millones de peldaños los intentas subir corriendo, llegará un momento en el que acabes exhausta, y no tendrás fuerzas para seguir. Sin embargo, escalando poco a poco.. se consigue.

>> Sólo tenéis que esforzaros ambos. Por ahora, el control de los sincorazón es algo que está fuera de vuestro alcance.


Fue entonces cuando Ariasu se acercó a su aprendiz, observándola detenidamente.

¡Vaya, me parece que estás sangrando demasiado! —exclamó la Maestra, viendo como la sangre de la joven descendía por su brazo hasta manchar el suelo.

Perdonen la intrusión.

Tras las sombras, la Maestra que había desaparecido momentos antes de la demostración volvía a hacer acto de presencia en la Sala del Trono.

¡Oh, vaya, Nanashi! ¿Arrepentida de perderte toda la diversión? —dijo Ariasu, sonriendo de oreja a oreja.

A pesar de ello, la bella Maestra siguió con el mismo semblante.

¿Nanashi, qué se te ofrece al volver?

...

La Maestra no contestó. Observó a ambos aprendices y se quedó mirando la herida de Saeko.

¡Oh, si es que es un cielo! —exclamó Ariasu, con una gran sonrisa en sus labios. Ryota también pareció comprender lo que rondaba por la cabeza de la Maestra.

¿Querrías encargarte de sus heridas?

La Maestra asintió y, dando media vuelta y siguiendo sus pasos, recitó:

Sois libres o no de que os preste mis cuidados.

¡La instrucción da por finalizada, entonces!

Así es. Podéis marchar.

Ya habían oído ambos. Los dos podían aceptar o no la oferta de la Maestra Nanashi, seguirla y, quizás, conocerla un poco mejor. O puede que no les apeteciera nada.

Spoiler: Mostrar
Fecha límite: 3 de Febrero
He actualizado un día antes y he alargado un poco la fecha, pues el 2 de Febrero tengo que examinarme.
Pueden ocurrir cosas diferentes si aceptáis o no la ayuda de Nanashi y la seguís.. o sois libres también de que cada uno haga lo que quiera xD
Imagen
¡Soy enfermera~!
Nurses are Angels on Earth
Imagen
Mi blog + DeCulture

Imagen
Imagen
Spoiler: Mostrar
Imagen
KHWorld Awards 2014
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
KHWorld Awards 2013
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
KHWorld Awards 2012
Imagen
ImagenImagen
Imagen

Imagen
Avatar de Usuario
EspeYuna
115. Demyx
115. Demyx
The Unknowns
 
Mensajes: 3437
Registrado: Mar Feb 28, 2012 11:12 pm
Dinero: 53,263.25
Banco: 15,063.87
Ubicación: ¡Entrenándome en Tierra de Partida para combatir a los sincorazón! ¡Ah! ¡Y en FanPlace!
Sexo: Mucho, gracias por preguntar
Clan: Bohemia Lectura
Estantería de objetos
Karma: 54

Re: [Bastión Hueco] Demostración

Notapor Tsuna » Sab Ene 26, 2013 9:13 pm

Escuché atentamente todo lo que tuviesen que decir o explicar, no interrumpiría en ningún momento, me mantuve callada, centrada en la sangre que recorría las oscuras y frías baldosas del suelo.

Entiendo perfectamente que hayas tardado en hacerme una cuestión, Saito. Si es así, es porque eres inteligente y piensas antes que actuar. Eso te da puntos aun siendo un novato. —Al final el maestro Ryota pareció reconocer las cualidades de Saito, yo no me equivocaba, supo bien cómo actuar. Una verdadera lástima que él siguiese sus propios objetivos y no mostrase interés por la Verdad que buscaba el maestro.

¡Pero qué mono, queriendo aprender a eliminar a un sincorazón de ese nivel como lo hago yo, jijij! —En cierto modo la maestra tenía razón. Pese a que Saito tuviese talento para el combate, alcanzar el nivel de un maestro era una simple fantasía.— ¡Me gustas, chico! ¡Pero déjame decirte una cosa, mejor será que aprendas movimientos por ti mismo! ¡Sería un rollazo si todos nuestros aprendices copiaran las habilidades de sus Maestros, muyy aburrido! ¡Prefiero que descubras.. experimentes! ¿Verdad, Ryota? —Aunque la maestra estuviera centrada en Saito, tendría en cuenta todas sus palabras. Haría uso de mi propio poder para ayudarla.

Lo que ha dicho la Maestra Ariasu, Saito, es cierto. Existen claros ejemplos en nuestro castillo, ¿acaso los aprendices Shinju y Andrei se parecen respecto a sus movimientos? Para nada. Al igual que Alexis, cuya principal especialidad es el uso de magias asociadas al poder de la gravedad. —Shinju... Sentía curiosidad por saber qué clase de habilidades tendría.— Y es mejor avanzar poco a poco.. si no queréis caer en un pozo sin fondo. —Asentí con cierto mareo en mi interior.

El maestro entonces se giró hacia mí, me preparé para lo que fuese a decir, aunque con lo agotada que estaba, poco importaba, solo tendría en cuenta su conocimiento para meditarlo bien en un futuro. Las pocas fuerzas que mantenían en mi cuerpo no eran suficientes como para razonar con claridad.

Joven, deberías pensar antes en tu seguridad ahí fuera entre sincorazón, antes que aprender a controlarlos por tu cuenta. Para llegar a la cima, hay que escalar. Si esos millones de peldaños los intentas subir corriendo, llegará un momento en el que acabes exhausta, y no tendrás fuerzas para seguir. Sin embargo, escalando poco a poco.. se consigue. Sólo tenéis que esforzaros ambos. Por ahora, el control de los sincorazón es algo que está fuera de vuestro alcance. —Era obvio que con mis fuerzas actuales no podía controlar a ninguno, viera como me viera, me sentía realmente débil.

Comprendo, me esforzaré maestro. —Dije con un tono de voz que delataba mi cansancio.

¡Vaya, me parece que estás sangrando demasiado! —Exclamó la maestra, preocupada por mi estado.

Elevé mi brazo izquierdo, el corte escocía bastante pero ya la sangre casi había dejado de emanar de él, fue tal la presión a la que me sometió el Sincorazón que no tuve tiempo de concentrarme en la herida, en cualquier caso era algo superficial, tal y como el maestro explicó, era necesaria para avanzar y fortalecerme poco a poco.

Maestra, no se alarme, no es nada.

Perdonen la intrusión.

No pude evitar mostrar sorpresa o asombro por la repentina aparición de la maestra... ¿Cómo se llamaba? No recordaba su nombre.

¡Oh, vaya, Nanashi! ¿Arrepentida de perderte toda la diversión?

¿Nanashi, qué se te ofrece al volver?

...

La maestra Nanashi, intenté memorizar su nombre, se quedó mirando fijamente mi herida, ¿tanto les preocupaba? Desde mis ojos no era nada, un poco de descanso y como nueva, a seguir entrenando... Me quité la chaqueta, sujetando esta con el brazo derecho y mostrando con más detalle el corte.

¡Oh, si es que es un cielo!

¿Querrías encargarte de sus heridas?

He dicho que... no es nada. —Caería rendida de un momento a otro, pero no era el corte el principal culpable de mi estado.

Sois libres o no de que os preste mis cuidados.

¡La instrucción da por finalizada, entonces!

Así es. Podéis marchar.

Con vuestro permiso pues, maestra, maestro, me retiraré.

Hice una reverencia como de costumbre, en cierto modo sentía que era lo correcto por alguna razón al tratar con un superior. Asentí y avancé seria tras la maestra Nanashi, si estaba dispuesta a encargarse de mis heridas, no desaprovecharía su ayuda, así podría ponerme cuanto antes a entrenar y fortalecerme. Me tambaleé un poco al dar los primeros pasos y me esforcé para mantener el equilibrio. Nada grave sucedió.

Mientras seguía a la maestra, pensé acerca del corazón que brotó del Sincorazón, según los libros de la Biblioteca, ese corazón era representado normalmente para hacer referencia al amor o al afecto de una persona a otra, observé la sangre de mi brazo, según aquel mismo libro, el corazón del cuerpo que poseíamos los Usuarios era el encargado de bombear la sangre y ayudarnos a vivir, ¿qué diferencia había entre ambos corazones? ¿Acaso un corazón servía para mantener vivo nuestro organismo y el otro para mantener vivos nuestros sentimientos? Poco sabía yo acerca de eso, la Luz y la Oscuridad, eran cosas complejas para mí.

Spoiler: Mostrar


Una vez tuviese tiempo de hablar con la maestra, entablaría conversación con ella, parecía estricta y seria como mi propia maestra o el gran maestro de Bastión Hueco, sin embargo ella tendría que responder a mis dudas como mentora que era.

Maestra... ¿Nanashi? —Pregunté intentando recordar su nombre, el memorizarlos se me daba de pena, acostumbrada estaba a los códigos del PCM.— Dese prisa y cure la herida de mi brazo, necesito volver al entrenamiento cuanto antes. —Debía fortalecerme, sin importar qué. Entonces recordé el libro que leía antes de comenzar la prueba ante los maestros, una duda surgió de manera espontánea en mi mente.— Maestra, ¿qué clase de libros lee usted? Por ahora parece que soy la única que le da utilidad a la Biblioteca del castillo, y me he encontrado a pocos Usuarios por allí..

No tenía mucho más que decir, era mera curiosidad para comprender mejor el mundo que me rodeaba, si no era capaz de eso, jamás le sería de utilidad al maestro.
Avatar de Usuario
Tsuna
57. Ferrocustodio I
57. Ferrocustodio I
The Unknowns
 
Mensajes: 1680
Registrado: Mar Ene 03, 2012 5:12 am
Dinero: 691,216.48
Banco: 0.00
Ubicación: Perdida en el océano.
Sexo: Femenino
Clan: The Unknowns
Estantería de objetos
Karma: 17

Re: [Bastión Hueco] Demostración

Notapor H.S Sora » Mié Ene 30, 2013 8:24 pm

Entiendo perfectamente que hayas tardado en hacerme una cuestión, Saito —dijo Ryota, mirandome con compresión, o eso parecía— Si es así, es porque eres inteligente y piensas antes que actuar. Eso te da puntos aun siendo un novato.

Mientras Ryota escuchaba mi opinión pude notar como la Maestra Ariasu sacudía mi cabello con una de sus manos. Entendí que era una manera para incordiarme

¡Pero qué mono, queriendo aprender a eliminar a un sincorazón de ese nivel como lo hago yo, jijij! —Ariasu parecía más divertida que de costumbre. ¿Tan difícil era realizar aquella habilidad? A simple vista, no parecía muy compleja.— ¡Me gustas, chico! ¡Pero déjame decirte una cosa, mejor será que aprendas movimientos por ti mismo! ¡Sería un rollazo si todos nuestros aprendices copiaran las habilidades de sus Maestros, muyy aburrido! ¡Prefiero que descubras.. experimentes! ¿Verdad, Ryota?

En cierto modo sabía que tenía razón... una habilidad própia tendría mucho más mérito que algo copiado. Por mucho que fuese una habilidad tan especial como aquella, tendría que descubrir y desarollar las mias. Aún así miré al Maestro Ryota, quizá el tuviese algo que decir u objectar

Lo que ha dicho la Maestra Ariasu, Saito, es cierto. Existen claros ejemplos en nuestro castillo, ¿acaso los aprendices Shinju y Andrei se parecen respecto a sus movimientos? Para nada. Al igual que Alexis, cuya principal especialidad es el uso de magias asociadas al poder de la gravedad.

>> Y es mejor avanzar poco a poco.. si no queréis caer en un pozo sin fondo.

Sentí una sensación de frío reccoríendome la espalda...¿Debía interpretar aquellas palabras como un aviso de como podía acabar? Fuese como fuese, sabía que aquella sensación no desaparecería en un buen rato.

Entonces el Maestro se giró hacia Saeko, quien esperaba también una respuesta a su pregunta.

Joven, deberías pensar antes en tu seguridad ahí fuera entre sincorazón, antes que aprender a controlarlos por tu cuenta.Para llegar a la cima, hay que escalar. Si esos millones de peldaños los intentas subir corriendo, llegará un momento en el que acabes exhausta, y no tendrás fuerzas para seguir. Sin embargo, escalando poco a poco.. se consigue.

Comprendo, me esforzaré maestro. —Dijo Saeko con un tono de voz que denotaba su cansancio acumulado.

Sólo tenéis que esforzaros ambos. Por ahora, el control de los sincorazón es algo que está fuera de vuestro alcance.

El Maestro nos había dado una negativa junto a una buena lección. El tiempo y la persistencía nos daría el poder y corajes necesarios para llegar a dominar a los Sincorazón.

Fue entonces cuando Ariasu se acercó a Saeko, observándo su estado con detenimiento:

¡Vaya, me parece que estás sangrando demasiado! —exclamó la Maestra.

Perdonen la intrusión.

La Maestra que había desaparecido antes de la demostración entre Saeko y yo volvía a hacer acto de presencia en la Sala del Trono. ¿Nanashi me había parecido escuchar que era su nombre? Fuese como fuese, no tenía ni idea de que estaba haciendo allí. Si quería ver la demostración, llegaba más que tarde.

¡Oh, vaya, Nanashi! ¿Arrepentida de perderte toda la diversión? —dijo Ariasu, con una sonrisa que a simple vista me pareció algo macabra.

A pesar de ello, la Maestra ignoró el comentario de Ariasu, como si esta última no hubiese hablado.

¿Nanashi, qué se te ofrece al volver?

...

La Maestra no contestó. Nos observó a ambos y se quedó mirando la herida de Saeko.

¡Oh, si es que es un cielo! —exclamó Ariasu, con aquella misma sonrisa curvada en sus labios. Ryota también pareció comprender lo que rondaba por la cabeza de la Maestra.

¿Querrías encargarte de sus heridas?

He dicho que... no es nada. —Saeko parecía muy cansada, aunque no era la única que lo estaba.

Todas las heridas que había recibido me pasaban factura. Aquél Sincorazón había sido tan tenaz... no solo el Sincorazón, el combate con Saeko también lo había resultado.

La Maestra asintió y, mientras daba media vuelta y siguiendo sus pasos, recitó:

Sois libres o no de que os preste mis cuidados.

¡La instrucción da por finalizada, entonces!

Así es. Podéis marchar.

Con vuestro permiso pues, maestra, maestro, me retiraré.

Yo también iré con la Maestra Nanashi, si me disculpan, hasta otro momento. Dispénsenme.

Decidí irme con aquella extraña Maestra y con Saeko donde fuese que tuviese planeado llevársela para curarla. ¿El motivo por el que me resultaba extraña? Sus accciones. Quizá no llevaba mucho tiempo en Bastión Hueco, pero su comportamiento era algo extraño para ser una gran Maestra. Parecía no pertenecer a aquello... de la misma manera que yo había sentido que no pertenecía a Ciudad de Halloween.

Maestra... ¿Nanashi? —Dijo Saeko con un tono bastante indeciso. Realmente los nombres no se le daban demasiado bien.— Dese prisa y cure la herida de mi brazo, necesito volver al entrenamiento cuanto antes. Maestra, ¿qué clase de libros lee usted? Por ahora parece que soy la única que le da utilidad a la Biblioteca del castillo, y me he encontrado a pocos Usuarios por allí...

Esperaría a que la Maestra Nanashi respondiese a Saeko y entonces le diría la pregunta que había querido hacerle desde que había tenido aquella sensación en su mirada triste y en su personalidad.

Que conste que el otro "Usuario" aquí presente también lee libros de la Biblioteca... —tomaría un poco de aire para continuar hablando— Maestra Nanashi, usted no es originaria de Bastión Hueco ¿verdad? ¿Podría decirme de que mundo proviene y el motivo por el que se unió a Bastión Hueco y se hizo Maestra?
Imagen

Muchas grácias por el avatar Mepi ^^
H.S Sora
22. Espectro
22. Espectro
 
Mensajes: 655
Registrado: Mar Sep 25, 2012 7:43 pm
Dinero: 3,775.22
Banco: 213,774.43
Sexo: Masculino
Karma: 3

Re: [Bastión Hueco] Demostración

Notapor EspeYuna » Lun Feb 11, 2013 1:43 am

La Maestra Nanashi se dispuso enseguida a usar cuanto tenía en una sala cercana a la del trono para sanar las heridas de Saeko. La joven notó confort al ser atendida por las manos de la Maestra, como si su sola presencia le calmara los males. ¿Quizás su semblante, aun temible, lograba despertar mayor tranquilidad que si te atendiera Ariasu o cualquier otro aprendiz de Bastión Hueco.

No seas impaciente —musitó la Maestra, abriendo un frasco con un extraño contenido verdoso, algo más viscoso que el líquido de las pociones. Por otra parte, le entregó a Saito una poción con la cual podría recuperar fuerzas—. Las heridas necesitan ser tratadas, un entrenamiento puede esperar.

La Maestra vertió en sus manos el mejunje, el cual, parecido a la gelatina, fue extendido a lo largo de los cortes que había recibido la aprendiz en el brazo.

Esto parará la hemorragia —explicó, a la vez que escuchaba a Saeko preguntar por algo que ella realmente mostraba interés. Los libros. Antes de que pudiera contestar, Saito se le adelantó, dando a entender que él también leía de vez en cuando.

Para sorpresa de ambos, la Maestra esbozó por primera vez en su presencia una encantadora sonrisa. Realmente, Nanashi era una Maestra muy hermosa, parecida a las mencionadas reinas que Saeko había encontrado en aquellos libros que no lograba a entender del todo.

Sin embargo, aquel dulce gesto de simpatía se desvaneció en cuanto Saito mencionó sus últimas cuestiones. La mujer se levantó, ondeando sus ropas y dirigiéndose a una ventana cercana, observando más allá de la ciudad que rodeaba aquel castillo consumido por la oscuridad.

Provengo de unas islas rebosantes de luz. Es un mundo muy diferente a éste —dijo, sin apartar la mirada de la vidriera—. ¿Mis motivos...?

La Maestra no dijo nada más. Tras unos segundos de silencio, puede que bastante incómodos tanto para los pupilos como para la mentora, ésta se adelantó:

Saito, Saeko, podéis iros —dijo, dejándolos marchar seguramente con más de una pregunta a punto de salir de sus bocas. Pero ella no respondería. Se quedaría allí el resto de la mañana, observando el poco cielo que se podía distinguir, acordándose de antiguas batallas que había librado... con compañeros muy diferentes.

* * *


Saeko se dirigiría a entrenar de nuevo, donde se encontraría con Shinju, quien era la única presente en la sala. No le dijo nada al entrar, pero parecía que no era por querer entrar en conflicto. Simplemente, pasaba olímpicamente de ella. Saito podía seguirla y entrenar o dirigirse a su cuarto. Quién sabe, puede que por el camino se le ocurriera algo que hacer o se encontrara con alguna persona.

Spoiler: Mostrar
Fecha límite: como ya he dicho en otra trama, puede que estas dos semanas esté demasiado ausente como para postear. Por si acaso, hacedlo cuanto podáis, pues a lo mejor tengo un rato libre =)
Imagen
¡Soy enfermera~!
Nurses are Angels on Earth
Imagen
Mi blog + DeCulture

Imagen
Imagen
Spoiler: Mostrar
Imagen
KHWorld Awards 2014
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
KHWorld Awards 2013
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
KHWorld Awards 2012
Imagen
ImagenImagen
Imagen

Imagen
Avatar de Usuario
EspeYuna
115. Demyx
115. Demyx
The Unknowns
 
Mensajes: 3437
Registrado: Mar Feb 28, 2012 11:12 pm
Dinero: 53,263.25
Banco: 15,063.87
Ubicación: ¡Entrenándome en Tierra de Partida para combatir a los sincorazón! ¡Ah! ¡Y en FanPlace!
Sexo: Mucho, gracias por preguntar
Clan: Bohemia Lectura
Estantería de objetos
Karma: 54

Re: [Bastión Hueco] Demostración

Notapor Tsuna » Jue Feb 14, 2013 2:09 am

No seas impaciente. Las heridas necesitan ser tratadas, un entrenamiento puede esperar.—Me explicó mientras abría un frasco de cristal, en cuyo interior pude ver una extraña sustancia color verde y algo pegajosa, ¿de verdad eso iba a curar mis heridas? Daba un poco de asco, pero no me podía echar atrás, no por algo tan simple como aquello.

Comencé además a recapacitar sobre sus palabras, tal y como mencionó el maestro Ryota, me estaba apresurando, tenía que tomarme las cosas con más calma…

Sí. —Me limité a decir, observando el semblante de la maestra, curiosa. Estar junto a ella me hacía sentir… ¿tranquila? ¿Calmada? ¿Era alguna clase de hechizo lo que usaba sobre mí? En cualquier caso, me dejé llevar.

La maestra entonces untó la sustancia color verde en mi brazo, sobre el corte. Lo observé con curiosidad y detenimiento, la tranquilidad que me inundaba en ese instante me hizo recapacitar sobre todo lo vivido… A decir verdad, nunca hubiese imaginado todo aquel nuevo universo que poco tiempo atrás me abrió sus puertas, era todo tan increíble y extraño…

Esto parará la hemorragia.

Asentí, seria.

Que conste que el otro "Usuario" aquí presente también lee libros de la Biblioteca... —Explicó de manera tajante para luego cambiar de tema, ganando con ello la atención de la maestra Nanashi. No pude evitar el dirigirle una mirada agresiva a Saito temerosa porque la mujer ignorara mis dudas, sin embargo mi semblante cambió al instante, al ver como la maestra sonreía… ¿Le había hecho gracia algo acaso? Yo todavía esperaba la respuesta a mis preguntas, y poco me importaba que Saito también leyese.— Maestra Nanashi, usted no es originaria de Bastión Hueco ¿verdad? ¿Podría decirme de que mundo proviene y el motivo por el que se unió a Bastión Hueco y se hizo Maestra?

El rostro de la maestra cambió por completo al escuchar la pregunta del joven. Esta se levantó, seria, hasta una de las coloridas y oscuras vidrieras del lugar.

Provengo de unas islas rebosantes de luz. Es un mundo muy diferente a éste. ¿Mis motivos...?

La maestra permaneció en silencio, pensativa. ¿Qué iría a contestar? ¿No estaba ella también para ayudar al maestro Ryota? Me parecía un poco absurda la pregunta de Saito, sinceramente.

Saito, Saeko, podéis iros —Concluyó, sin ninguna razón aparente.

¿Cómo? —Pregunté con cierta indignación, ¿acaso ignoraría mi pregunta? Eso parecía, pues ni se movió del sitio, tampoco mostró interés en mí. Todo por culpa de Saito…

Me levanté bruscamente e introduciendo mis brazos en el abrigo, me miré una última vez la herida, aquella sustancia se había secado y no parecía que yo fuese a sangrar más.

Gracias maestra. —Y me fui de allí sin dirigirle la mirada a nadie más, frustrada, parecía que preguntar no serviría de nada, tenía que limitarme a ayudar al maestro y fortalecerme por mi cuenta. No olvidé tampoco en darle un disimulado empujón a Saito con uno de mis hombros cuando éste estuviese cerca de la salida. Por su culpa la maestra ignoró por completo mi pregunta.

Fortalecerme, entrenar… toda la calma que me invadió momentos atrás iba desapareciendo fugazmente, en su lugar, cierta furia y frustración la sustituían en mi interior. Me dirigí solitaria hasta la sala del trono que quedaba cerca, allí pude ver a Shinju sola también, esta no me dijo nada. ¿Sería buena idea pedirle entrenar o algo? Le debía una revancha, sus habilidades me superaban, quizás no fuese lo mejor… O puede que sí, debía dejarle claro que todavía se la tenía jurada por lo sucedido en el juego del anillo.

Me detuve en seco, seria, quizás mi mirada diese incluso algo de miedo.

Shinju, ¿estás libre? —Ni siquiera esperé a que contestara. Intenté ser lo más concisa y breve posible.— ¿Luchamos?

Esperé una respuesta suya, afirmativa, si decía que sí invocaría mi Llave-Espada y me prepararía para lo que pudiese hacer mi rival. Si Saito simplemente me seguía o me intentaba dar conversación, lo ignoraría.
Avatar de Usuario
Tsuna
57. Ferrocustodio I
57. Ferrocustodio I
The Unknowns
 
Mensajes: 1680
Registrado: Mar Ene 03, 2012 5:12 am
Dinero: 691,216.48
Banco: 0.00
Ubicación: Perdida en el océano.
Sexo: Femenino
Clan: The Unknowns
Estantería de objetos
Karma: 17

AnteriorSiguiente

Volver a Segunda Saga

¿Quién está conectado?

Usuarios navegando por este Foro: No hay usuarios registrados visitando el Foro y 1 invitado

cron