—
H-Hemos ganado —Suspiré, dejándome caer al suelo de rodillas y con una sonrisa de satisfacción en los labios, mi estrategia había funcionado a la perfección—
. Cojamos a esos dos y salgamos de aquí antes de que tengamos la mala suerte de que aparezca otro de estos...Por mi parte tan solo me importaba hacerme con Lolo y salir de allí corriendo, por lo que me acerqué junto a Malik dispuesto a llevarme al dichoso pájaro, el cual no parecía estar muy herido a simple vista.
La macabra idea de ahogarlo un poco en las “aguas” que había encontrado nada más entras por la Boca de Monstruo se me cruzó por la mente, ya que yo sí que había resultado herido con tal de rescatar a algo al que ni tan solo le tenía cariño; pero entonces recordé que precisamente Shinju sí, y no quería saber que sería capaz de hacer ella si se enteraba de que había tocado a su amado amigo con plumas.
Me miré orgulloso las manos mientras apretaba con fuerza los puños; había logrado volverme mucho más fuerte, y había liderado prácticamente la operación que había dejado fuera de combate al gran Sincorazón, tenía motivos para estar contento conmigo mismo aquel día. Observé entonces como el hermoso corazón liberado empezaba a flotar poco a poco, era algo precioso y digno de admiración, pero entonces estalló y todo se volvió completa oscuridad.
¿Qué acaba de pasar?Traté de mirarme de nuevo las manos, pero me era imposible verlas en aquella densa oscuridad, no había sido un producto de mi imaginación ni nada parecido al fin y al cabo... ¿Cómo era posible que un corazón recién liberado estallase en una oscuridad así? Nunca me había pasado algo similar, y la confusión se apoderó de mí al mismo tiempo que un peculiar frío que vino de repente me hizo temblar ligeramente ante la situación; no me gustaba en absoluto lo que estaba pasando, no podía ser nada bueno...
—
¿¡Malik estás ahí!? —dije gritando con fuerza, pues realmente no era capaz de saber que diablos era aquello.
Por instinto, empuñé la Llave Espada tratando de quedar en una posición de defensa primitiva —en aquellas circunstancias me era difícil saber si la estaba efectuando en condiciones o no— esperando que la maldita oscuridad se disipase de una vez.
Fue entonces cuando como si por arte de magia, centenares de luces empezaron a brillar poco a poco y de dos en dos, como si una muchedumbre de estrellas se tratase. Pero su brillo era más atípico y desagradable, no sabía explicar bien el motivo, pero definitivamente aquel nuevo suceso no me transmitía ninguna clase de situación positiva o de calma, todo lo contrario; en aquel momento me percaté como me había equivocado por completo, no eran estrellas ni nada similar. Eran Sincorazón. Estábamos rodeados por cientos de ellos.
No...no...no... esto no puede suceder ahora... ¡no joder!...Apenas me había percatado de que el pequeño alienígena se había pegado prácticamente a mí, ahora no podía ajustar cuentas con aquel pequeño bastardo por desgracia. Había desechado la mera idea de luchar desde un principio, éramos demasiados y notaba como mis reservas de magia se habían quedado cerca del límite; pero si que podía huir, podía intentar usar mi propio Glider para escabullirme lo más rápido posible... pero naturalmente eran meras ilusiones. ¿Acaso sabía cómo salir de allí? Ni tan solo tenía la menor idea de como había entrado, además de tener que salir con toda aquella oscuridad sería todavía más complicado para mí.
Y por último estaba el hecho de que Malik me había intentado ayudar a su manera en el enfrentamiento contra Shinju, ¿cómo quedaría yo si a las primeras de cambio huía? No era un cobarde, y no podía dejar que a mi bando se le considerase como a tal; además de que seguía sin tener a Lolo, por lo que si escapaba Shinju sería capaz de tirarme dentro de nuevo con una patada.
No podemos perder... No sé como lo lograremos, pero no voy a morir aquí dentro...—
¡Malik donde estás, joder!—dije gritándole, esperando una respuesta, en parte para confirmar que él siguiese allí y pudiésemos salir de aquello entre los dos.
Me equipé con Alice en una mano y la Llave Espada en otra, inhalé y exhalé el aire que entraba en mis pulmones tranquilamente mientras contaba hasta diez; tras aquella cuenta tenía pensado lanzarme al ataque lo más rápido que pudiese y tratando de llevarme por delante a todos aquellos que pudiese.
—
Nunca más.—
¿Shinju? —pregunté en voz alta, sin saber muy bien de dónde procedía aquella voz. ¿Sería una confusión producida por los nervios y miedos que albergaba?
—
No volveré a tenerte miedo. ¡Nunca!—
¡Shinju ayúdanos, estamos aquí! —grité lo más fuerte que pude, no me había confundido. Aquella era su voz, estaba completamente seguro a pesar de lo confuso que pudiese ser todo en aquel momento.
Antes de obtener respuesta alguna, acabé cegado por una extraña luz.
¿Qué demonios pasa ahora?Y la conciencia que poseía, se escapó de mis manos más rápido de lo que tardé en darme cuenta de lo que iba a pasar.
*** Arg...¿dónde?...Acababa de despertar súbitamente y no entendía nada: el corazón había acabado convocando a más de un centenar de Jaulas Parásitas, ¿cómo era aquello posible?; pero lo peculiar había sido la intromisión de Shinju junto con una extraña luz qué me había noqueado al momento. ¿Había sido todo aquello producto de mi cansancio?
Desde luego, el lugar en el que me encontraba confirmaba que ni por asomo había resultado ser alguna clase de “sueño”.
Llevaba puesta la armadura mientras me movía por el espacio en una dirección desconocida dentro del Glider de alguien, en la parte trasera de este para ser más concretos; lo sospechaba desde un principio al haber visto la capsula de viaje con el maldito pajarito dentro —a salvo de cualquier Jaula Parásita—, pero al incorporarme un poco pude observar como Shinju, aquella especie de muñeca de porcelana se encontraba conduciendo sin mostrar ninguna mueca en absoluto, sin haberse percatado de que había recobrado la conciencia por lo visto.
—
Buenos días —comenté, tratando de llamar su atención—
o noches, no sé cuanto tiempo ha pasado desde que hemos partido la verdad. Tengo un par de preguntas sobre lo que ha pasado la verdad, y aunque quizá no quieras responderlas, me gustaría tratar de sacar algo en claro de lo que ha pasado ahí dentro...Dejé un par de segundos para que la dama me increpase lo que me tuviese que increpar e incluso amenazar, y entonces empezaría a preguntar:
>>
¿Por qué ahí dentro he encontrado una versión más pequeña de ti que buscaba también a Lolo? Es más mientras le buscaba he acabado sumido en una especie de hipnosis, ¿qué clase de lugar es Monstruo en realidad? Sea como sea, lo que no he entendido ha sido lo que me ha sucedido cuando por fin había rescatado a Lolo de un Sincorazón, el cual al liberar el corazón ha estallado en oscuridad y ha empezado a multiplicarse. ¿Qué diantres ha sido eso, Shinju? Nunca había visto que algo así sucediese... ¿Esa luz cegadora has sido tú ayudándonos entonces? —Esperé un momento, el suficiente como para poder dejar que Shinju respondiese a mis preguntas si realmente lo hacía—
Y tras esto, tan solo te preguntaré algo más y prometo dejarte tranquila el resto del viaje... ¿a qué le tenías miedo en Monstruo exactamente? O eso es lo que has dicho antes de ayudarnos, o en lo que sea que haya pasado.Tras esto esperaría que realmente Shinju respondiese a lo que le había preguntado, aunque no las tenía todas conmigo; ¿por qué iba a molestarse en sincerarse? Suficiente había hecho con no dejarme tirado en medio del espacio y tener la amabilidad de llevarme en su propio Glider hasta Bastión Hueco.
Si me respondía, le daría las gracias y no hablaría más el resto del trayecto cumpliendo la promesa que le había hecho a la joven, pues no quería tentar a la suerte más de lo que lo estaba haciendo con aquellas osadas preguntas; si por el contrario no me respondía a nada, trataría de insistir un poco ya que me negaba en redondo a haber puesto mi vida en peligro por un loro con el cual ni tan solo existía un mero trato de afectividad mutua.
Fuese como fuese, me encontraba realmente cansado tras todo lo que había sucedido dentro de la gran ballena, tanto como para olvidarme siquiera de que 626 se había quedado allí dentro seguramente, o de que Malik también seguiría por allí para acabar dejando escapar al pequeño alien.
Había sido una aventura constante, y la esperanza de un breve descanso al llegar a mi hogar hacía que todo lo que no tuviese que ver con las respuestas que esperaba recibir de la mordaz Shinju se hubiesen disipado de mi mente, sin lugar a dudas esperaba aquella hora de descanso con unas merecidas ganas, ya habría tiempo de preocuparse de los detalles después.
Y fin de la trama supongo xD Realmente no tengo mucha queja la verdad (por no decir ninguna), quizá si que me ha sabido un poco a corto el hecho de tener que acelerar tanto el final, pero comprendo que lo hicieses por nosotros más que nada nwn Well en cuanto acabe la trama del Rescate, la comentaré junto a esta que no quepa duda. Gran trabajo again Astro ^^