FELICIDADES! :D
He escrito un lindo cuento para ti:
La SitocientaÉrase una vez una linda muchacha llamada Sitocienta, que vivía en una bonita casa del reino de Dildonia. Su madre había muerto en un atentado de las Fríjidas, monstruoso cuerpo terrorista que intentaba perturbar la paz y la felicidad del colorido reino. Entonces, su padre decidió volverse a casar. Lo hizo con una mujer llamada Mentosía, quien se trajo consigo a sus hijas, Sodalesca y Laitesa. Estas explotaban a la pobreSitocienta, obligándola a palpar y palpar sin cesar y a hacer demás tareas.
Su padre murió, y Sitocienta quedó sóla con su madrastra y sus hermanastras. Pero un día, las invitaron a ir a un baile, donde la dama más bella sería la esposa para el príncipe, su alteza real Jolou Rico. Sitocienta estaba entusiasmada con el baile, incluso se diseñó un bello vestido, de la talla de las mejores diseñadoras del país, las señoritas Nicoxa y Colibritany:
Tal era la belleza de Sitocienta, que sus hermanastras Sodalesca y Laitesa se pusieron furiosas, rompiendo su bello vestido. Las tres malvadas fueron al baile, dejando a la pobre, pobreSitocienta llorando desconsoladamente.
Entonces, una arrexa luz apareció a su lado. Era Sheldonia, la más poderosa de las hadas. Sheldonia palpó a Sitocienta y entonces, mágicamente, su vestido se recompuso, más lindo todavía, si es que era posible.
— Y recuerda —le dijo la brillante hada —, mi magia de palpamiento sólo durará hasta las doce campanadas.
Sheldonia la llevó hasta el baile, que era en una conocida discoteca del lugar. Allí estaba el flamante Jolou, con su linda capa de arcoiris y su largo y acicalado cabello. En cuanto vio entrar a Sitocienta, no pudo apartar la vista de su hermosa figura, por lo que le pidió un baile.
Sitocienta y Jolou bailaron una popular danza de discoteca. Nadie se movía como Sitocienta, los años de trabajo sin cesar le habían hecho flexible y fuerte. Tras una gran fiesta donde Sitocienta se divirtió como nunca ¡oh no! Tocaron las doce campanadas. Si no salía de allí, su vestido desaparecería y se quedaría desnuda a la vista de todos.
Sitocienta corrió y corrió de vuelta a su gran mansión. Por el camino ¡horror! perdió su sujetador por el camino. Minutos después llegaron Mentosía, Laitesa y Sodalesca; furiosas con una misteriosa joven que había acaparado al príncipe toda la noche.
Jolou Rico, que se había enamorado perdidamente de aquella misteriosa y hermosa joven, la buscó por todo el reino, con sólo el sostén de la damisela como pista. Éste tenía una talla única y perfecta, que sólo ella podría vestir.
Así, fue de casa en casa probando la prenda a todas las muchachas, hasta que llegó a la de Sitocienta. Ni Laitesa ni Sodalesca cupieron en el sujetador, pero entonces Sitocienta apareció y ¡le venía a medida!
Jolou Rico, feliz por haber encontrado a su princesa, le pidió matrimonio allí mismo. Sitocienta, feliz, aceptó.
Entonces, las tres horrendas y malvadas mujeres que habían sido engañadas por su "criada" sacaron de debajo de su falda un dildo-metralleta. Confesaron que formaban parte del grupo de las Fríjidas, y que les matarían con sus despiadadas armas a menos que el príncipe se casara con una de ellas. Pero entonces apareció Sheldonia, y junto a Sitocienta, realizaron el Palpamiento Supremo. Mentosía, Laitesa y Sodalesca se desmayaron ante tal ofensiva, y fueron enviadas a la cárcel, donde permanecerían hasta el resto de sus vidas de fríjidas.
Sitocienta y Jolou Rico, tras el susto inicial; se dieron un lindo y apasionado beso y marcharon al palacio del príncipe, donde vivieron perdices y comieron felices. ¿O era al revés?
FINEn fin, tras esta ida de olla, decirte que me alegro por ti, que te deseo un feliz día y una rica tarta =) .