Alec también pareció convencido tras escuchar mis palabras y las de Light. Los cuatro —incluyendo a Tandy—, seguimos a Zait y a su inseparable amigo peludo para enfrentarnos a nuestro primer combate.
*****Fue impresionante salir a escena y ser vitoreados por el público, mientras que demostraban sus señales de desagrado hacia nuestro contrincante, abucheándolo. Un ser mitológico, al parecer: tampoco me sorprendí demasiado de su aspecto azul, pero sí de su insoportable olor. Una peste que inundó el ring, y yo no pude evitar taparme la boca con mi mano libre, mientras que con la otra agarraba con firmeza mi arco, preparada para el combate.
—
¡Ja, ja, ja! ¿Os pensáis que podéis ganar a Neso, panda de gallinas?—
¡Por supuesto, kupó! ¡Cerebro de mosquito con patas de burro, kupó! —exclamó Tandy, preparado también. Sonreí ante sus inocentes insultos, intentando hacerse el duro—.
¡No vas a poder con Nadhia y su fiel guardián, tan, tan, taaan!—
¡En la última copa fui derrotado por un bebé azul y una alfombra molesta, pero esta vez no pasará! ¡Vengo a aplastaros con mis cascos!—
¿Eh? —de repente, las palabras de nuestro rival atravesaron mi mente, descubriendo con el término "azul" a los que vencieron a Neso, el guardián del río. Así que Ragun y Fyk consiguieron vencer a aquel apestoso caballo...
—
¡Nadhia, cuidado kupó! —gritó mi compañero, por lo que alcé la mirada sorprendida. Neso embistió tanto a Tak como a mi "guardián". No pude reaccionar a tiempo. De repente, el enemigo me agarró con su enorme mano y me alzó en el aire, observándome con unos ojos que no mostraban muy buenas intenciones—.
¡Serás bestia, kupó, ay!—
¡T-Tandy, argh! —gruñí, intentando liberarme. El guardián del río echó su aliento en mi cara, por lo que me entraron unas horribles naúseas. ¿Desde cuándo no se lavaba? Era asqueroso.
—
¡Oh, jo, jo, jo! ¡Qué preciosidad! ¿Quién iba a decir que una chica tan mona se pasaría por aquí? ¿Quieres tener hijitos en el río, guapa?¡Aquellas palabras! No, no, no... ¡¡esas palabras!!
—
¡¡Tandy, maldita sea!! —grité, buscando con la mirada a Tandy para confirmar mis sospechas. ¿Había usado sin mi permiso uno de sus más molestos conjuros? ¡No tenía gracia alguna!
Sin embargo, Tandy voló unos metros por encima de Neso y revoloteó a su alrededor, intentando buscar un plan para liberarme.
—
¡Yo no he sido, kupó! —dijo, bastante molesto porque hubiese desconfiado de él—
¿Crees que sería capaz de hacerte esto, kupó?Sin embargo, la ayuda no tardó en aparecer. Zait, con un rostro serio y seguro de sí mismo —el cual me seguía pareciendo algo extraño—, cargó una flecha con su ballesta, llamando la atención del gigante y apuntando con firmeza hacia él. Tak también se levantó, dispuesto a hincarle el diente a nuestro enemigo con sus colmillos de can.
Desde la lejanía, pude ver como Alec se concentraba en realizar un conjuro. Por arte de magia, unas zarzas comenzaron a aparecer a las cuatro patas del centauro, con el fin de inmovilizarlo.
Y Tandy y yo no nos podíamos quedar atrás.
—
Lo siento, pero.. —alcé mi mano libre para alcanzar del carcaj que cargaba a mi espalda una flecha, tensando mi arco y dirigiéndola con rapidez al enemigo—.
No soy tu tipo.Solté la flecha y la cuerda, esperando que mi puntería fuese del todo satisfactoria y el ataque llegase a herir su ojo derecho.
Si conseguía ser soltado de su repugnante y sudorosa mano, intentaría caer con seguridad y alejarme del sitio, preparando otra flecha para lanzarla de nuevo, esta vez a una de sus piernas traseras. Silbé, en señal de avisar a mi compañero moguri, quien no tardó en darse cuenta de lo que le pedía con la mirada.
—
¡A sus órdenes! —exclamó, alzándose más en el cielo y preparando un conjuro que daría de lleno en la cabeza del centauro, si éste no se lograba mover con las zarzas de Alec—
¡Perla!El moguri lanzó un hechizo de luz ¿Lograría impactar sobre nuestro blanco, al igual que mis flechas?
Siento mucho el retraso x_D