Las puertas se abrieron con un sonoro crujido, invitando a todos los aprendices disfrazados a entrar. Dentro, la iluminación era pobre, casi inexistente. Poco a poco, fueron entrando uno a uno, hasta que todos estuvieron dentro. Entonces, los portones se cerraron con brusquedad.
Unas pocas antorchas repartidas en las paredes se encendieron al mismo tiempo, dando una luz leve para iluminar el vestíbulo de la mansión. Por el polvo, la suciedad, y las telas de araña repartidas por diversas esquinas, parecía que nadie había habitado aquel lugar en mucho tiempo. Pero, sin duda, habría dos cosas que llamarían la atención de todos, una en cada pared.
En la de la derecha, había una pintura gigantesca en la que estaba representada una familia que debía de ser de la aristocracia por las ropas que llevaban. Padre, madre, y tres hijos (el menor de ellos un bebé). Sin embargo, había una peculiaridad en el retrato: las caras de los cinco estaban borradas.
En la pared izquierda, estaba lo más espeluznante. Veintitrés pequeños retratos enmarcados, colgando en filas de la madera. ¿Y quiénes salían en ellos? Pues ellos. Los aprendices. Cada uno tenía su propio marco, donde salía una foto suya sonriendo con naturalidad, como si hubieran posado para ella, aunque ellos nunca recordarían haberlo hecho.
Las malas noticias llegarían cuando probasen a abrir la puerta principal, pues fijo que alguno preferiría marcharse tras ver algo tan siniestro. Estaban selladas. Ni empujando con la fuerza de una manada de elefantes podrían abrirla, y... No tenían la opción de probar a utilizar sus Llave Espada. Porque cuando cualquiera de ellos intentara invocarla, no acudiría. No podían invocar la Llave Espada. Ni ninguna otra arma, o usar directamente sus habilidades. Algo de aquella mansión bloqueaba todos sus poderes.
Encerrados como estaban, ¿qué podían hacer?
—
Bah, esto no da miedo. ¡Menuda chorradez! —gritó alguien entre la multitud.
Había sido Derhe Yeno, el aprendiz de relleno que se había unido a la fiesta en el último momento. Iba disfrazado de fantasma, con una simple sábana blanca por encima a la que le había hecho dos agujeros para poder ver. Tan chulo y rechulo como siempre, avanzó hacia delante adentrándose en el vestíbulo más que ningún otro. Y entonces ocurrió.
Una cuchilla descendió a toda velocidad del techo, cayendo sobre Derhe antes de que nadie pudiera reaccionar a tiempo.
¡Menos mal que, al morir, los cuerpos de los portadores desaparecían! Porque de lo contrario aquello se habría convertido en una escena muy desagradable. El cuerpo de Yeno explotó en miles de lucecitas, que flotaron por la habitación hasta desaparecer al poco.
A los cinco segundos, el retrato del susodicho estalló en llamas, calcinándose hasta no dejar rastro pero sin quemar nada más. Sí, Derhe Yeno había muerto. Probablemente nadie le echaría de menos.
¿Qué harían ahora? No había medio de salir de aquella mansión, al menos por el momento. Pero acababan de ver cómo un compañero (de relleno, pero compañero) moría ante sus ojos...
Tarde o temprano, alguno decidiría moverse. Desde el vestíbulo había tres caminos pasillos: ir por un largo pasillo hacia la derecha, ir por el pasillo de la izquierda hasta lo que parecía ser un salón, o subir por las escaleras hacia el primer piso. También había una puerta al fondo del vestíbulo, que parecía llevar al sótano, pero estaba tan bien cerrada como la puerta principal.
La venganza de la mansión había comenzado. ¿Quién sobrevivirá?
****¡Comenzamos! Normas:
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Las del tema de registro> El evento es sobre todo un survival, pero también tiene parte detectivesca. Ganará la torre aquel o aquellos que consigan aguantar con vida hasta que acabe el evento (me guardo cuántas rondas dura para aumentar la tensión). A su vez, existe la opción de resolver el misterio de la mansión y qué o quién está matando gente dentro.
> Como ya se dijo, habrá premio solo por participar. Los supervivientes finales recibirán premios de ganadores, y si el misterio ha sido resuelto habrá premio extra para todos los participantes. Lo que quiere decir es que vendría bien que hubiera colaboración entre todas vuestras mentes, tanto de vivos como muertos.
> En el evento tendréis dos acciones por post, que podéis usar tanto para investigar cosas que os resalte como para moveros. Podéis investigar una mesa y luego pasar de habitación, por ejemplo. O pasar dos veces de zona, aunque solo podéis moveros dos veces si pasáis por una cuyo mapa ya haya sido descubierto.
> En ocasiones os mascaré cosas que podéis investigar pero que ocultarán trampas o directamente la muerte de alguno. Investigar será necesario, pero también tendrá sus riesgos. Incluso ser el primero en pisar una zona puede conllevar riesgos.
> Está la opción de quedarse quieto en un sitio. Será aburrido, pero respetable, ya que al menos no os arriesgáis a caer en una trampa mortal. Pero... Puede que no seáis los únicos que os estéis moviendo por la mansión. Lo dejo ahí.
> Las habilidades están selladas, igual que las armas. No vale llevar armas secundarias encima, y cualquier arma que venga como parte del disfraz tiene que ser de plástico.
> El evento es no-canon, por si hay dudas.
> Puede que me deje algo, si añado cosas avisaré. A su vez, si tenéis dudas, podéis preguntar en el tema de principal del evento (así vuestra duda se comparte entre todos, por si otro la tiene también).
> ¡Juego limpio, y nada de enfados! La cosa va de divertirnos todos y, para qué mentir, hacer que lo paséis un poquitín mal mientras investigáis la mansión.
> Suerte~
Mapas:
Vestíbulo:

Fecha límite: sábado 17 de octubre a las 23:59.
Nota: en esta ronda solo tenéis una acción disponible: cambiar de zona. Las cosas resaltadas en el mapa no tienen nada más de interés del ya mostrado ni pueden manipularse, al menos de momento.
Nota2: No os olvidéis de presentar el disfraz aquellos que no lo hayan hecho en la ronda de presentación.