Somos los Creados para llegar a lo Más alto.
En nuestro camino, grandes montañas hemos visto. Unas tan lisas como las arrugas de un bebé, y otras tan escarpadas y altas que cualquiera parecería mejor.
Es increíble ver cómo Uno se dedica a llegar a la cima, solo con verla de lejos, se echaría hacia atrás y cogería otro camino más fácil. ¿Pero por qué no lo hace? Puede hacerlo, le está permitido, muchos como él lo hicieron, ¿por qué Uno no? Se acerca al pie del gigante y mira alto, con una mirada que cualquiera diría que va de broma. Da un pequeño paso, un segundo paso, y salta. Ayudado por las manos se coge de las rocas que encuentra. Tan seguras unas… y traicioneras otras. Varias han caído y muchos los resbalones que le alejan de la cima. Para, coge aire, busca, y encuentra el siguiente apoyo.
Me quedo unos últimos segundos observándolo. Miro a la cima y veo… Uno sigue abajo, arrastrándose por el suelo vertical.
Decido seguir mi camino.
Entre las montañas, el mar.